Días de lluvia

1º. NOCHE DE LLUVIA.

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Era una tarde lluviosa, como todas de los últimos días, a parte hacía mucho frio. Nadie salía a la calle, era una locura hacerlo, pero por la calle corrían dos jóvenes. Después de varios días encerrados en casa, sin poder salir de casa a causa de esas persistentes lluvias, se habían quedado sin comida, y ahora habían salido a llenar la despensa y la nevera, iban cargados de bolsas llenas de comida. Habían visitado varías tiendas y supermercados, debían comprar, verduras y carne, algo de leche y algún zumo.

Iban andando por la calle cuando le cayeron encima las primeras gotas de esa lluvia, miraron al cielo y maldijeron su suerte, cuando salieron de casa no llovía y no se llevaron paraguas, y volvían a casa empapados, como si se hubieran metido a la ducha vestidos.

Akane abrió la puerta y los dos entraron a la casa, se quitaron los zapatos y se miraron y estuvieron a punto de reírse el uno del otro.

-Báñate tú primera- dijo Ranma- o cogerás un refriado, yo ya me bañaré después. Cuando acabemos los dos de bañarnos haremos la cena.

La chica miró a su acompañante y sonrió.

-De acuerdo Ranma- contestó Akane. - Pero no permanezcas con la ropa mojada o quien se refriarás serás tú,

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La chica fue al baño y se desnudó, dejó la ropa para lavarla, y empezó a llenar la bañera de agua caliente, mientras esta se llenaba se enjabonó, y se metió en el agua y permaneció en ella un rato, cuando se sintió limpia salió del agua, se secó y se puso ropa limpia, subió al piso de arriba y picó en la puerta de Ranma y dijo.

-Ranma ya me he duchado, ya puedes bajar.

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Ranma después de separarse de su amiga subió a su habitación se quitó la ropa y se secó, tenía su toalla playera, cogió ropa limpia y se la puso, aún tenía algo de frio y cogió una manta se la echó por encima, se sentó en el suelo, había cogido un libro y se puso a mirarlo, era un libro de matemáticas, últimamente gracias a Akane, había mejorado mucho en todas las materias, pero había algo que se le escapaba, tenía que pedirle ayuda a la joven con quien vivía, debía aprobar esa materia con buena nota. Quería ir con la chica a la Uni, no quería que ella estuviese sola, les habían ofrecido a los dos una beca, pero tenía que sacar buena nota de medía, y para lograrlo sólo le faltaba puntuar bien en mates.

Había empezado a estudiar, cuando creía que lo entendía, ese concepto que no lograba comprender volvía a escaparse, ya se estaba volviendo loco, cuando Akane picó y le avisó que podía bajar al baño.

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Ranma bajó al baño y se volvió a desnudar, dejó la ropa separada de la que había dejado Akane, no quería lavar esa ropa, pero había bajado sus ropas mojadas y las junto con la de Akane. Se metió en el agua caliente y suspiró aliviado. Akane después de bañarse había vaciado la bañera y vuelto a llenar.

Estuvo en el agua durante un buen rato, cuando notaba que el agua se enfriaba, salió de la bañera, se secó y se vistió.

Fue a por su amiga al comedor, la chica estaba estudiando historia, que últimamente era la asignatura que mejor dominaba Ranma. A la chica le bailaban en la cabeza ciertas fechas de acontecimientos históricos, le pedir iría ayuda a Ranma.

-Vamos a hacer la cena- dijo el chico y ella le siguió dejando el libro en la mesa.

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Minutos después Ranma estaba cocinando ayudado por la joven, mientras cocinando hablaban de temas múdanos,

-Akane, necesito tú ayuda para el examen de mates, se me escapa un concepto de lo último que dimos, y sé que tú eres la mejor en matemáticas. -pidió el joven,

Ella lo miro y sonrió.

-Si tú me ayudas en historia, esa asignatura la dominas tú- contestó ella.

-De acuerdo-respondió él- también debemos mejorar en gimnasia, debemos subir la nota, aunque ya tenemos la mejor nota, quiero que la subamos aún más.

Ella lo miró y asintió, aunque mejorar en gimnasia ya era prácticamente imposible, tenían la mejor nota de la escuela.

Siguieron hablando mientras seguían haciendo la cena, cuando quedaba poco para terminarla, la chica puso los palillos y los vols. en la mesa, y Ranma sacó la comida al comedor, se sentaron uno enfrente del otro y cenaron, en silencio cuando acabaron, Akane recogió la mesa y lavó los utensilios y fue al salón donde estaba su amigo.

Allí vieron durante un rato la televisión, pusieron un concurso muy frisquis, que no siguieron, los dos tenían sueño y dormitaban, cuando se dieron cuenta ese concurso ya había acabado y daban una película, bueno esa película ya iba por la mitad del metraje, los dos chicos se decidieron irse a dormir.

Ranma se cambió de ropa en su habitación, se puso el pijama y se acostó en el futón, hacía mucho frio, se levantó, abrió el armario y cogió dos mantas más y la puso en el futón, se volvió a acostar.

Permaneció un rato mirando el techo, y pensando en que al día siguiente debían estudiar todo el día, debían ayudarse entre ellos para aprobar sin problemas esos dos exámenes que les quedaban, en esos dos exámenes iba sus futuros.

Oyó ruido y a su habitación entro Akane, con su pijama amarillo,

- ¡Que frio hace hoy! - dijo la chica.

- ¡A qué esperas, ven! -dijo Ranma, apartándose un poco, y dejándole sitio a su amiga. Ella se acostó con él y se pegó al chico, él la abrazó y al poco se quedaron durmiendo, tranquilos, durmieron juntos como hacían desde muchos días atrás.

Mientras sobre el barrio, las nubes descargaban su contenido, y todo indicaba que ese tiempo tormentoso duraría muchos días.