estaba tranquilamente festejando mi cumpleaños con mi mejor amigo, una cosa llevo a la otra y terminamos borrachos, no se puede decir que tuve una vida de mierda pero al crecer y madurar me di cuenta que ciertas diferencias con mi madre y hermana me hicieron salir de casa, mis hermanos viven bien al igual que mi viejo, pero lo último que esperaba era renacer como un bebé, mis fobias qué aun no pude superarlas se activan cuando les da la gana, mi país cambió enormemente y el resto de latinoamerica, grandes artistas de mi patria no están o ni siquiera sacaron temas que antes tenían, pero ahora dios me dio un don con mi voz y tal vez de síndrome de savant cuando se trata de música no podré olvidarla, mi temperamento y forma de contestar me causaron gigantescos problemas y espero que en esta vida siga igual, algunas cosas en mi familia cambiaron, otras no tanto, pero eso se quedó atrás cuando mi vida comenzó cuando empecé a tocar la guitarra, soy tadeo ledesma, esta es mi historia de como me convertí en un puto rockstar. no hace falta decir que bandas increíbles como starset, skillet, three days grace, Linkin Park, fall out boy, thousand foot krutch, Marilyn manson, todos esos rockeros no existían y voy hacerles honor a su nombre por cambiarme la vida cuando era solo un niño, y el primero en revivir será hollywood undead. y como rockstar lo primero que haré es decir que todos son unos negros de mierda.
Al estar en sala de cinco, sería su último año en este jardín ya que el próximo año entrarían a primer grado.
-Entonces ¿a que primaria vas Tadeo?- preguntó Aveluz.
-no se todavía, mi mama me dio dos opciones, melodía del sur qué está cerca del mar o pinceladas patagónicas qué está más al centro.- dijo mirándola.
-¿Por qué no vamos a melodías del sur? Yo voy directo ahí ya que esta cerca del trabajo de mi papá.- dijo ella.
-bueno ahí le digo a mi vieja cuando llegue.- declaró Tadeo.
-¿y que vas hacer cuando seas grande?- dijo expectante Aveluz.
-¿te miento o te digo la verdad?- dijo Tadeo.
-a ver, mentí.-
-pegarme un tiro enfrente de todos.-
-…-
-…-
-¿y la verdad?-
-músico.-
-¡¿Qué?! ¿lo decís en serio?- dijo ella con voz alta.
-sip. Ya grabe mi primer álbum ya.- habló mientras escribía las respuestas.
-¡¿en serio?! Me podes pasar un casset ¿si?- dijo ella con emoción.
-bueno y un cd también.- dijo con calma.
-¿y ahora que más vas a hacer?- preguntó ella.
-este fin de semana tenemos un show en predio ferial de folclore, nos apuntamos y ahí haremos publicidad al álbum.- dijo dejando la lapicera a un lado.
-no puedo encontrar la respuesta del punto siete.- dijo ella y Tadeo le busco la página y le mostró la respuesta.
-gracias.- dijo mientas sonreía a su amigo.
Tadeo se podría decir que fue adoptado por una extrovertida.
-si querés venir tenes que pagar la entrada, cuesta quince pesos y si querés algo de comer o beber creo que el mínimo era de un peso.- dijo Tadeo.
-bueno ahí le aviso a papá.- dijo ella.
-además va a durar tres días el evento, es decir, viernes a domingo, desde el mediodía hasta la medianoche cada día.-
-bueno.-
Pronto terminaron las clases, eran las cinco de la tarde y los padres ya estaban afuera.
Uno por uno o por dos, fueron llevados por sus padres.
Tadeo acostumbrado se sentó en un banco de madera de aspecto intrincado en la calle.
Mientras estaba cruzado de brazos notó que Aveluz estaba a su lado y esperaba como él.
Y a lo lejos notó a su padre caminando con su uniforme de combate.
Fue hasta él mientras saludaba a su primera amiga.
La niña hizo lo mismo y segundos después su padre lo agarro de la mano y se fueron.
Tadeo y Marcelo caminaron por una cuadra y tomaron el atajo de la plaza España.
Unos minutos después vieron el cuartel de ingeniería mecanizada, pasaron por la guardia.
Unos pasos más y entro al lugar del trabajo de su padre, era un almacén de ropa de combate y demás.
Tadeo fue al sillón de siempre, puso su mochila como almohada y tomo una siesta.
Tenía que esperar hasta que sean las seis ya que esa hora terminaba el horario laborar de su papá.
Poco después sintió que alguien le tocaba la cabeza y era su papá, ya era hora de irse.
Se levantó y estiro su cuerpo, agarro su mochila se fueron a casa.
Los dos hombres que parecían una copia al carbón, uno puso los cubiertos y vasos.
El otro calentó la comida y aderezos.
Veinte minutos después los dos estaban comiendo y tomando gaseosa.
Mientras que charlaban al mismo tiempo.
-¿ese era tu amiga?- dijo el padre.
-si, hablamos y ahora somos amigos.- respondió el niño.
-¿y ahora que vas a hacer?- dijo el padre.
-voy al fin de semana a tocar en el predio ferial, y en la primera semana de abril comenzare con el otro álbum.- dijo concisamente.
-bien, vamos ir todos a verte.- dijo el padre.
-El chino, tu tío, los mellis, tu hermana, y cualquiera que quiere venir.- agregó el hombre gigante.
-bueno ¿van a tomar?- preguntó el niño mientras se hacía un sanguche de pollo y papa.
-solo los hombres, las mujeres van a conducir.- respondió el hombre.
Al terminar, el padre e hijo limpiaron la mesa y los platos y demás.
Cada uno se tomó un baño y fueron al comedor a ver los resúmenes de los partidos.
Y los dos se amargaron ya que pasaron el superclásico, el padre de river y el hijo de boca.
En la familia era así, Leila, Eduardo y Tadeo eran de boca, y diego, Marcelo y Florencia de river.
Y aun seguía hablando.
-¿y que temas vas a tocar ahora en el siguiente álbum ese?- preguntó el padre quien acariciaba la cabeza de su hijo que estaba en su regazo.
-otros veinte temas, voy a tocar folclore hasta que me haga un nombre, después cambiaré de género.- dijo el niño.
-¿Qué genero?- dijo el hombre.
-una mezcla de rock y rap…- pero el hombre noto algo raro.
-¿Qué sucede?- dijo él.
-pero lo haré cantando en inglés.- agregó el niño.
-¿y estas preocupado por eso?- dijo el.
-y si, no se como lo recibirán.- dijo con el ceño fruncido.
-¿como serán las letras?- habló el hombre.
-explícitas, muy directo y con verdades.- respondió el niño.
-Si no le gustan que busquen a otro artista y listo.- dijo el padre.
-si ya fue.- comentó el niño suspirando.
Este se levantó y se fue a su habitación a tocar la guitarra hasta que sea la hora de dormir.
Pero en menos de media hora Tadeo se aburrió y no sabía que hacer, toco el bombo y perdió la atención al instante.
El piano fue lo mismo, el violín, el acordeón, su bajo recién comprado y aun así se aburrió.
Suspiro frustrado y se acostó y titán se acostó encima suyo, y el niño le acaricio la cabeza.
'si sigo a este paso ya pediré libro de ejércitos y esas boludeces ¿tendré que socializar para no aburrirme?'
Pensó mientras miraba el techo y notó un ruido en la calle.
Se levantó y fue a ver que es, y notó que eran una docena de niños jugando la pelota.
Como no tenía nada que hacer le dijo a su mamá que iba a afuera a jugar.
Fue hasta el grupo de niños y pregunto si podía jugar con ellos y estos solo le pasaron la pelota.
Se formó un equipo de siete y siete en cada parte.
La pelota iba de pie en pie, cabeza a cabeza y de auto a patio de una casa.
Los cuerpos de los niños poco a poco se volvían sudoroso y malolientes.
Excepto Tadeo ya que solo hacia el mínimo movimiento posible y de vez en cuando lanzaba un pelotazo en el arco improvisado.
Algunos niños se iban a sus casa y volvían con un sanguche en la mano mientras jugaban.
Otros iban a tomar agua y seguían jugando.
Tadeo al ver esto solo sonrió y siguió jugando como si fuera un niño como antes.
Y el partido termino recién a la medianoche ya que los padres comenzaron a llamar a sus hijos.
Al jugar por varias horas, Tadeo estaba sin aliento y con un humor alegre.
Fue al baño y se pego una ducha y poco después se fue a dormir.
Mientras tanto en la habitación de sus padres, cuando estaban a punto de dormir abrazados como siempre, Leila hablo.
-Tadeo cambio un montón en poco tiempo ¿no negro?- dijo ella mirándolo.
-si pero viene con algunos defectos.- comentó el padre con los ojos cerrados.
-¿Cómo cuales?- dijo ella.
-sus contestaciones, forma de hablar, su cara de orto y muchas cosas más.-dijo divertido.
-eso ya viene de familia ya, ¿y cuando se lo vamos a presentar a nuestros papás?- preguntó ella.
-en fin de año, dos semanas en san juan y dos semanas en santa fe, y después diez de vacaciones acá.
Diez días nos vamos de camping en sarmiento a disfrutar de la naturaleza.- dijo dándole el beso de buenas noches y se durmió.
La madre solo sonrió mientras dormía.
Tadeo por su parte al fin se había dormido en menos de un minuto y cuando se despertó ya era otro día.