Parte 102: Buenas chicas

Carol: Wow… No es como si nunca hubiera escuchado sobre eso, pero es la primera vez que conozco a una persona con ese tipo de situación.

Las chicas y yo seguíamos en mi habitación pasando ese tiempo agradable entre nosotras, en primer lugar, yo y Carol nos estábamos conociendo un poco mejor ya que era la primera vez que interactuábamos entre nosotras, así que no fue nada extraña que llegara el momento donde le tenía que explicar sobre mi situación con respecto al sexo opuesto.

Carol: Pero es genial que no te afecte demasiado en tu día a día, claro que no puedo ponerme en tu lugar, posiblemente pases por cosas molestas o situaciones difíciles, pero… Será mejor que me callé, ¿no es así?

Incluso yo podía notar que Carol se estaba poniendo un poco nerviosa mientras las palabras no dejaban su boca, y el asentimiento de las chicas como respuesta a su pregunta fue suficiente para que ella entendiera que debía detenerse en ese momento.

Lisa: Jeje, descuida, Carol. Está bien si no lo pones mucha atención, siempre que conozco a alguien me aseguro de contarle esto para que no haya ningún malentendido o algo así.

Carol se disculpó una vez más después de eso mientras terminaba de arreglar mi cabello para después acercarme un pequeño espejo que tenía en mi habitación. Su mirada parecía expectante a lo que le iba decir, y su sonrisa fue completamente honesta después de que le dije que había quedado increíble.

Carol: Jeje, eso quiere decir que ahora voy en la delantera en comparación de las chicas, ¿no es así?

Y ese comentario hizo que se ganara unos golpes en la cabeza por parte de Clara y Sophia, esa escena había sido suficiente para hacerme reír al igual que las chicas, pero en ese momento, se escuchó un sonido en toda la habitación haciendo que nuestras risas se detuvieran abruptamente.

¡Grrroghhh!

Y, siendo mi estomago el responsable de todo eso, a la vez que la vista de las chicas se concentraba en mí, no pude evitar sonrojarme por la vergüenza que estaba sintiendo.

Sophia: No quiero ser la encargada de explicar lo obvio, pero parece que tu estomago está pidiendo comida urgentemente, Lisa.

Emma: Sí, eso se escuchó como el alma destruida de un turista perdido en el desierto del Sahara después de haberse dado cuenta de que se había desviado de la ruta segura y haber pasado días deambulando en la cruel naturaleza sintiendo como su fe estaba siendo puesta a prueba mientras que la única hidratación que podía tener era la sangre de los pequeños animales en ese árido terreno además de algunos de sus propios fluidos corpo…

Carol: ¡Otra vez estás siendo demasiada drástica con tus metáforas!

Clara: Sí… Pero, en serio. Debes tener mucha hambre, Lisa.

Lisa: Bueno… Aun no eh comido y seguramente mi cuerpo necesita energías después de estar combatiendo los virus.

Emma: Pero traje muchas cosas para comer.

Podía ver a Emma alzando todos los dulces que traía con ella a la vez que sentía que me miraba fijamente.

Sophia: Emma, estoy segura de que la mayoría de todo eso con esfuerzo entra en la categoría de comida, ya que tú eres experta en estos temas, ¿de casualidad sabes de un lugar donde podamos conseguir comida aquí cerca?, yo también estoy empezando a sentir algo de hambre.

Clara: Eso sería genial, mi apetito pareció despertar después de haber escuchado el de Lisa.

Emma: Bueno… Sí, se de algunos lugares bastante buenos, solo denme el dinero y conseguiré todo a un buen precio, estoy segura de que mi nombre es famoso por estos lugares.

Yo quería decir que realmente no era necesario, pero después de que las chicas formaron su plan, no había manera de detenerlas, además de que realmente tenía hambre y no tenía la energía para cocinar algo en ese momento. Aunque comencé a sospechar un poco después de escuchar lo que dijo Emma.

Emma: Bien, lo tengo todo. Vamos, Carol.

Carol: ¿Yo?

Emma: Carol, somos amigas desde que usamos pañales, nunca he dudado de tu inteligencia, pero si escuchas que te llamó por tu nombre mientras te digo "vamos", creo que es bastante claro que te estoy hablando a ti.

Carol: De acuerdo, entiendo. No tienes que ser tan sarcástica. Es solo que pensé que te encargarías de todo.

Emma: Es bastante claro que necesitaré ayuda con las bolsas.

Carol: ¿Y por qué yo tengo que ir específicamente?

Emma: Porque fuiste la primera en la que pensé, ya no te quejes y vamos.

Pude ver que, sin protestar más, Carol siguió a Emma hasta que todas nos dimos cuenta de que ya no se encontraban en casa haciendo que mi vista girara hacía Clara y Sophia buscando la explicación que creía que me iban a decir.

Sophia: Bueno… Es bastante obvio que en algún momento íbamos a hacer que Carol se alejara un poco.

Clara: Sí… Antes que nada, quería disculparme por lo repentino que fue todo, Lisa.

Lisa: No, no hay nada de qué preocuparse, en realidad Carol es bastante agradable.

Sophia: Esa es una buena noticia, entonces creo que oficialmente todas nos hemos convertido en amigas, ¿no es así?

Una pequeña risa se generó entre nosotras pensando en eso.

Sophia: Oh, así que estás son las fotos de cuando eras pequeña, puedo verlas, Lisa.

Lisa: Adelante, aunque creo que no hay muchas cosas interesantes en ellas.

Sophia simplemente dijo que sería capaz de encontrar algo relevante mientras que una mirada divertida se generaba en su rostro al momento de que hojeaba el álbum que ahora tenía en sus manos.

Parecía que ella estaría algo ocupada, por lo que comencé a hablar con clara sobre la situación en la que nos encontrábamos.

Lisa: Entonces… ¿Carol no sabe nada?

Clara: Aahhh… Sí, a diferencia de Emma y Sophia, Carol no está enterada sobre lo que pasa entre yo y Dylan, por eso mismo todo acabó en esta situación, incluso tuve que inventar otra mentira que aún no sé cómo solucionar, pero no te preocupes por eso.

Lisa: Seguramente todo saldrá bien.

Clara: Gracias por eso, Lisa. Ah, por cierto, creo que no sabes cuales fueron los resultados de las pruebas de Dylan.

Lisa: Es cierto, también quería preguntarte sobre eso, pero por el sentimiento de calma que transmites, me hace pensar que todo salió bien, ¿no?

Clara: Jeje, tienes razón, afortunadamente Dylan aprobó todo, también me dijo que habría venido a visitarte y preguntar cómo estabas, pero la intervención de Carol hizo que le fuera imposible.

Lisa: Me alegró mucho por él, pude ver todo el esfuerzo que puso en ello. También entiendo sus razones sobre Carol, así que no hay mucho que decir.

Clara y yo estuvimos hablando un poco más, también pude darme cuenta de que, siempre que mencionábamos a Dylan, Sophia ponía un poco más de atención haciendo que entendiera que aún no había superado esa molestia hacía Dylan.

Parecía que seguiríamos de esa manera hasta que Emma y Carol volvieran con la comida, pero antes de eso, nuestra atención en realidad fue atrapada por el grito que salió de Sophia en ese momento.

Sophia: ¡No puede ser!

Lisa: ¿Sucede algo, Sophia?

Clara: ¿Por qué te sobresaltas de esa manera?

Sophia: No es nada malo, es solo que en verdad descubrí algo interesante. Observen.

Sophia abrió el álbum de fotos que seguía viendo para después alzarlo hacía nosotras mostrándonos la página donde había varias fotos mías de cuando iba a la escuela primaria.

Clara: ¿Es en serio?

Ahora podía ver a Clara mirando fijamente las fotos, yo seguía sin entender la razón de sus sorpresas, pero escuchando lo que dijo Sophia un segundo después, fue suficiente para que yo también me sintiera algo sorprendida.

Sophia: Es cierto que tal vez no sea demasiada coincidencia, pero el mundo en verdad es un pañuelo. ¿Quién diría que íbamos en la misma escuela primaria?

Ahora todas estábamos viendo las imágenes de mi graduación donde se podía ver claramente el nombre de mi escuela haciendo que las chicas se convencieran todavía más. Tal parecía que Clara y Sophia había asistido a mí misma escuela, aunque obviamente habíamos estado en grupos diferentes, por lo que me sería casi imposible reconocerlas.

Todas seguíamos sorprendidas por eso y no pudimos evitar hablar un poco sobre nuestros días durante la escuela, pero también me sorprendí cuando Clara dijo que Dylan también había ido a la misma escuela que nosotras.

Todo ese tema sería perfecto para hablar durante mucho tiempo, pero tuvimos que interrumpirlo ya que escuchamos pasos acercándose a la puerta para al siguiente instante ver las figuras de Emma y Carol con comida suficiente para alimentar a dos familias.

Carol: Aahhh… Creía que no lograríamos llegar.

Sophia: ¿Acaso asaltaron un restaurante?

Emma: Nada de eso, les dije que era famosa por estos lados, pude conseguir algunos regalos y descuentos que no iba a rechazar, no necesitan darme las gracias.

Clara: Bueno, gracias de todas formas, no hay que pensar demasiado las cosas, después de todo es comida y me estoy muriendo de hambre, ¿tú que dices, Lisa?

Escuché la pregunta de Clara, pero no pude responderle ya que mi boca estaba ocupada disfrutando de la gran cantidad de sabores únicos de la comida que Emma me acababa de dar.

Esa imagen de mí hizo que las chicas solo sonrieran un poco antes de comenzar a imitarme hasta el punto en el que la habitación se llenó de sonidos de personas masticando y disfrutando de su comida.

…

…

Carol: Eeehhh… Así que iban en la misma escuela, pero nunca se habían conocido, esa en verdad es una enorme coincidencia.

Sophia: Lo sé, ¿quieres ver las fotos de Lisa?, en una de ellas está vestida de gatito en una obra escolar.

Clara: ¿En serio?, yo quiero ver eso.

Lisa: ¡Pensé que había escondido esa foto!

Emma: Lo único que recuerdo de la escuela primaria son cosas vergonzosas que hizo Carol y la comida de la cafetería.

Carol: No te atrevas a decir algo de eso…

No había sentido el paso del tiempo ese día, realmente estaba disfrutando de ese momento, hacía mucho tiempo que no podía experimentar la sensación de estar rodeado de personas que podía considerar amigos, y aunque no estaba del todo distraída, sabía que no había problemas por disfrutar de eso un poco más, pero todo fue interrumpido por lo que pasó a continuación.

Todas fuimos capaces de escuchar los pasos que se acercaban por las escaleras, tal vez habría sido suficiente para ponernos nerviosas, pero la figura y la expresión de la persona que había entrado hizo que, además de que las chicas se miraran algo confundidas, supieran de quién se trataba una vez que respondí a las palabras de ella.

???: Ah… Lo siento, no sabía que habían venido amigas a visitarte, cariño.

Lisa: Sí, olvidé llamarte para decirte, lo siento. Volviste temprano hoy.

???: Jeje, estaba preocupada dejándote sola, así que me apresuré a terminar con todo, pero me puedo sentir tranquila ahora… Esto, mucho gusto, mi nombre es Mia, soy la madre de Lisa, muchas gracias por hacerle compañía.

Las chicas entendieron todo e igualmente se presentaron y saludaron a mamá.

Mia: Realmente es un placer conocerlas, no quiero interrumpirlas ni molestarlas, solo quería saber cómo seguía Lisa.

Lisa: No te preocupes, mamá. Mi temperatura ya bajó lo suficiente y he estado tomando la medicina.

Mamá me hizo varias preguntas más, en verdad parecía que a las chicas no les importaba que mamá nos acompañara un poco, pero ella dijo que no quería molestar, que aprovecharía que ellas estaban conmigo para arreglar algunas cosas y pensar en qué hacer para la cena, por lo que nadie dijo nada más haciendo que el anterior ambiente volviera a la habitación.

Al final, una hora más había pasado después de eso, se podía ver que la oscuridad estaba comenzando a aparecer en el exterior, Clara había llamado a su padre para decirle que si podía venir a recogerlas para que no hubiera ningún peligro en el regreso de todas.

Y ahora mismo estaba afuera mientras me despedía de todas y le daba un simple saludo al padre de Clara. Mi vista siguió el auto que se alejaba hasta que no pude verlo más, indicando que debía volver a entrar a casa.

Al cruzar la puerta, a mi nariz llegó el característico olor de la cocina de mamá haciendo que mi apetito volviera a aparecer ya que algunas horas había pasado desde que todas habíamos comido. Estaba por ir a la cocina, pero tanto la figura como la voz de mamá salieron por la puerta al mismo tiempo que se acercaba.

Mia: La cena estará lista pronto, hice algo que te dará la suficiente fuerza para que mañana ni siquiera sientas que estuviste enferma, jeje.

Sentía su mano acariciando ligeramente mi cabeza haciendo que varios pensamientos aparecieran en mi mente.

Mia: Oh, es cierto, ellas son buenas chicas.

Lisa:…

Mia: Son buenas chicas… ¿No es así?

Lisa: Sí… Son buenas chicas.

Continuará…