Era inicio del ultimo trimestre cuando rigel habia vuelto a la escuela.
Su rutina se habia mantenido sin cambios y la relación con los profesores habia mejorado bastante, aunque si se miraba por la ventana hacia el estadio se podía ver a varios trabajadores encantando tablas de madera para se fueran acoplando y formaran gradas sobre altas torres.
Rigel ahora se encontraba en la oficina del director.
-Hola director dumbledore- saludo rigel cuando ingreso a la oficina y lo vio sentado en su gran escritorio. Rigel vestía su uniforme de la casa y una capa simple sobre los hombros.
-Hola, joven Lestrange, como te han ido estas vacaciones- pregunto con una sonrisa.
-Bien, eh estado estudiando bastante- respondió mostrando un diario negro sin nombre en la portada.
-Ya veo, ese diario te a ayudado en tu disciplina con tu bastón?- pregunto curioso de su respuesta.
-Amm, si, profesor dumbledore. aunque se siente incompleto el diario- dijo finalmente, habia notado como habia demasiado espacios en blanco en el diario, pero habia pistas que hablaban sobre una magia extraña.
-Entiendo, debes entender que el tema de la magia puede llegar a ser muy complicado, y mas aun para un joven con talento, te puede llevar por caminos que no esperábamos- aconsejo con una luz en sus ojos.
-Gracias por el consejo, profesor dumbledore- agradeció cortésmente.
Dumbledore se levanto y se dirigió a los retratos de los antiguos directores.
-Son los antiguos directores, me ayudan cuando tengo dudas y me aconsejan respecto a temas de la escuela- presento.
-Hola- saludo.
Los retratos le dieron una mirada rápida y volvieron a cerrar los ojos. todos menos uno que tenia una sonrisa en su anciano rostro.
-Hola, muchacho, Lestrange, cierto?- pregunto.
-Si, Director...Black- respondió leyendo la insignia en la parte baja del cuadro.
-Muy talentoso por lo que he oído, creaste varios hechizos no es así?, déjame verlas- dijo expectante.
-Disculpe, señor?- pregunto dudoso por lo directa que fue la orden.
-Tus sombras, muchacho, déjame verlas he oído que no es nada que se haya visto antes- repitió ansioso, esta vez los demás cuadros entreabrieron los ojos con interés.
Rigel dirigió a dumbledore solicitando permiso a lo que el asintió con la cabeza. de su hombro surgió alba y sobre sus hombros se poso vorago, quien celoso guardo la capa.
-Que increíble- dijo sorprendido el antiguo director black observaba fascinado.
-Como lo hiciste?, están vivos?, estaban ocultos en tus sombras?, cuantos puedes ocultar?, puedes crear mas?- empezó a bombardearlo con varias preguntas.
Dumbledore también aprovecho el momento para observar con detalle al cuervo que estaba sobre el hombro de Lestrange. despedía pequeñas sombras como volutas de humo que se dispersaban en el aire.
-Si, están vivos- respondió escasamente. todos notaron como se negó a revelar como lo logro.
-No es el único hechizo que creaste, no es así Lestrange?- pregunto dumbledore.
-Si, así es, profesor dumbledore- respondió.
-Te gustaría mostrarme?- dijo con una calmada sonrisa.
-Claro, profesor- respondió tranquilamente. ya habia esperado esta conversación.
-Sígueme, Lestrange- hablo y ambos salieron de la oficina.
-Hahahaha!, sigue así muchacho, estoy expectante de un descendiente de la casa black- se escucho decir al retrato del director Black.
Ambos se dirigieron a la enfermería.
Al llegar se encontraron con Madame Pomfrey y un hombre adulto de piel morena y túnicas de color azul y morado.
-Hola Poppy, hola Shacklebolt, lamento la espera- saludo el director.
-Hola profesor dumbledore- respondió la enfermera.
-Buenos días profesor dumbledore- devolvió el saludo.
-Lestrange, déjame presentarte a Kingsley Shacklebolt un auror del ministerio, esta aquí como testigo- presento mientras el pequeño grupo ingresaba a la enfermería, en una de las camas estaba el profesor Kettleburn, quien tenia una enorme herido en su pierna, era un corte largo y profundo que iba desde su cintura hasta la mitad de su muslo.
-Hola Kettleburn, como te encuentras- saludo el director.
-El dolor ha disminuido pero no entiendo porque no quieres que poppy me cure- dijo con el entrecejo fruncido.
-Descuida, te curaremos enseguida. Lestrange, si no te importa- tranquilizo el profesor antes de dar paso a rigel.
Rigel se acerco a Kettleburn y saco una semilla del interior de vorago y la hizo flotar sobre le confuso profesor.
~Transfiere la herida, transfiere la herida, ya lo practicaste, puedes hacerlo~ se concentro,
-'Hoc vulnus transeo, faciendo sanum eum'- dijo y entonces la herida en la pierna del profesor empezó a cerrarse y en cambio en la semilla se fue formando una enorme grieta que abarcaba la mitad del cuerpo de la semilla mientras se volvía cada vez mas seca como si perdiera toda el agua que tenia en el interior. se volvió una semilla seca y moribunda que se dividió en dos partes cuando el agua de la semilla se seco.
-Fascinante!- dijo con una sonrisa dumbledore. Madame Pomfrey el examino la pierna al profesor quien también se sentó en la cama y miro su pierna ilesa, la flexiono varias veces probando su movilidad y se levanto de la cama con el rostro lleno de alegría y asombro.
-Que increíble, mi pierna esta curada, como lo hiciste muchacho?- pregunto el profesor tomando de los hombros de rigel, pero su capa se alzo haciendo que lo liberara.
-Descuida profesor, no es un hechizo de sanación en si, solo pase la herida a la semilla- explico un poco incomodo.
-su pierna esta curada, profesor dumbledore- dictamino la enfermera.
-Bien, bien, gracias Lestrange por tan increíble hechizo. como veras Shacklebolt, fuiste testigo de un nuevo hechizo de sanación y uno muy versátil, ya que mi guardabosques me conto que la primera ve que uso el hechizo fue para curar la pata de un animal herido por un potente veneno- alabo el profesor antes de girarse y explicar al auror.
- Notificare de inmediato al ministerio, tiene un nombre el hechizo?- pregunto Shacklebolt a Rigel.
-Antes de que responda, Shacklebolt, Lestrange aun no ha decidido si hará publico su hechizo- interrumpió Dumbledore
Todos lo miraron expectantes.
-Creo que un hechizo de esta naturaleza debería ser compartido con todos, profesor- expuso su pensamiento ya que creía que no haría daño si un hechizo para curar se expandiera por el mundo mágico, aunque para el resto de los hechizos tendría que mantenerlo bajo un estricto control.
-Que altruista eres joven- celebro Shacklebolt. Madame Pomfrey estuvo de acuerdo.
-No he pensado en un nombre señor- dijo rigel, notando como se centro en crear el hechizo antes de volver a practicar las rayos de la fuerza.
-Tranquilo, Lestrange, lo que hiciste es un gran avance para el mundo mágico y a tan joven edad, estoy seguro que te espera un futuro brillante- elogio nuevamente el auror.
-Me gustaría nominarlo para una orden de Merlín, Shacklebolt, es lo menos que se merece- añadió dumbledore.
-Por supuesto, en cuanto llegue al ministerio hare el informe- se marcho emocionado como si quisiera hacer publico el nuevo encantamiento.
Luego de una par de palabras se despidieron de los demás y rigel junto a dumbledore caminaron por los pasillos.
-Porque llamo al ministerio señor?- pregunto directamente rigel. no sabia que dumbledore habia contactado con un auror para hacer publico el hechizo de trasferencia de heridas y menos que pediría una orden de merlín para el, eso le causo un pequeña molestia al respecto.
-Eres talentoso lestrange, mucho mas de lo que imaginas y no quiero que ese talento quede oculto en la soledad en la que te encuentras actualmente, agradezco que convivas con los retratos, ellos mismos suelen hablar muy bien de ti con los demás retratos del castillo, incluso con los directores de vez en cuando le hablan de ti, un muchacho interesado en las historias e interesado en aprender. pero también se que no has pisado tu dormitorio en el trimestre pasado, que no hablas con ninguno de tus compañeros de ninguna casa, ni formaste ninguna amistad. Haha, eres mas difícil de encontrar que la dama de Ravenclaw, quiero que demuestres a todos de lo que eres capaz de lograr por ti mismo- explico su razonamiento.
-Entiendo profesor- dijo rigel y pensó en su actuar en lo que va del año, se habia aislado en la escuela solo se dejaba ver cuando iba a clases luego escuchaba las historias de los retratos para luego ingresar a su refugio a practicar sus hechizos y solo salía para volver a repetir el proceso.
~Sigo siendo un desadaptado, hahahaha~ se burlo de si mismo recordando su vida pasada.
-Lamento si te causo molestias, joven Lestrange- se disculpo el director sinceramente. pero en su mente solo habia una cosa. Rigel Lestrange tenia un enorme talento para la magia y quería evitar que siguiera los pasos de sus padres, por eso se empeño en vigilarlo, quería guiarlo y alejarlo de las artes oscuras.
-No me molesta la atención, profesor dumbledore, pero estoy acostumbrado a estar por mi cuenta- dijo rigel un poco insatisfecho.
-Tranquilo, muchacho yo me hare cargo de todo, solo vendrán aquí para pedirte que te tomes un par de fotos, y en cuanto a tu logro creo que podemos liberarte de un par de responsabilidades y tal vez una recompensa- dijo con una sonrisa.
-Quiero poder usar a vorago y alba nuevamente- dijo rápidamente.
-Hehe, creí que pedirías que te liberaran de tu cargo de asistente del guardián de las llaves- dijo con una sonrisa
-No, me gusta ese trabajo, hagrid me invita te y me ayuda a disfrutar las vistas del cielo estrellado en las noches cuando vuelvo al castillo- y también se negó a dejar ir la oportunidad de ingresar al bosque prohibido pero eso solo lo pensó.
-Concedido y 500 puntos deberán ser suficientes como recompensa por el hechizo que lograste crear Lestrange, felicidades, aunque se te darán cuando se haga publico el hechizo que creaste- dijo lo ultimo como un detalle para que sus compañeros lo vieran con otros ojos y empezaran a dejar de culparlo por el descenso de los puntos de su casa.
Los días posteriores tuvo que admitir eran extraños, estaba esperando que al doblar cualquier esquina se encontrara con algún miembro del ministerio pero a la vez no quería participar en aquel circo que era la política.
Los estudiantes no sabían nada pero los profesores empezaron a tratarlo de manera diferente, le preguntaban mas cosas y de otros temas al de la clase, como si quisieran desarrollar mas su conocimiento. además de que si habia alguna tema que no dominaba le entregaban una nota para la biblioteca en donde le daban permiso para sacar en libro respecto al tema.
Las charlas con hagrid se hicieron mas largas y el trabajo se hizo menos, incluso el profesor Snape dejo de usarlo como conejillos de indias para las pociones.
Fue a la semana siguiente que durante la clase de pociones lo llamaron.
Rigel se encontraba haciendo una poción para los forúnculos de muy buena calidad cuando madame pomfrey irrumpió en la clase.
-Disculpe, profesor Snape, pero necesito a Lestrange un momento- dijo con el rostro alegre, habia corrido hasta las mazmorras en el sótano en cuando llego el personal del ministerio.
Snape simplemente asintió con la cabeza, ya esperaba la presencia del ministerio.
Rigel y la enfermera si dirigieron directamente hacia la oficina del director.
-Entra, el director te esta esperando- dijo madame pomfrey cuando la estatua de la gárgola le permitió el paso.
Al ingresar al interior de la oficina vio a dumbledore junto a 5 personas, supuso que eran del ministerio. reconoció a Shacklebolt, habia otro que llevaba una cámara y estaba junto a una mujer de espeso maquillaje, también estaba un hombre bajo y regordete con un traje elegante y por ultimo habia un mago de edad avanzada y con un traje formal.
Todos conversaban entre ellos cuando vieron las puertas abrirse y se giraron para ver a rigel.
-Hola Lestrange, déjame presentarte al ministro de magia, Cornelius Fudge y Helecar Cromwell el director del hospital de San Mungo, recuerdas al auror Shacklebolt y ellos son...- su presentación se vio interrumpida cuando la señorita se adelante.
-Tu debes ser Rigel Lestrange, no es así?- pregunto y antes de que tuviera la oportunidad de responder un destello lo cegó, el camarógrafo la habia fotografiado.
-Si, soy yo- dijo frotándose los ojos.
-Tan joven y creando un hechizo tan ingenioso, dime jovencito, quien te ayudo? que tipo de magia usaste?, es cierto que quemaste el campo de quidditch en un ataque de ira?- sus preguntas se desviaron rápidamente.
-Si, lo hice yo solo, y si queme el campo de quidditch pero no fue intencional unos alumnos me atacaron primero- intento responder pero nuevamente fue interrumpido por otro flash.
-Ya veo y que me dices de tu magia, eh oído que tienes un criatura oscura sobre tus hombros y un enorme monstruo que hace que las águilas parezcan simples palomas, extrañas a tus padres jovencito?, por eso creas tanto caos?, quieres ser digno del apellido Lestrange?-
-Suficiente, yo no soy como mis padres y no tengo planes de seguir sus pasos y adorar ciegamente a un idiota que no pudo matar a un simple bebe- grito rigel exasperado.
-Lestrange- llamo dumbledore haciendo que se detuviera. noto como se molestaba cada vez que le hablaban de sus padres.
-Rita, querida, discúlpate con el muchacho, te excediste al mencionar a esos dementes de los Lestrange- hablo sin cuidado el ministro Fudge. se cubrió la boca con ambas manos apenas dijo esas palabras y se formo un incomodo silencio en la oficina.
Se hizo el silencio
Clap Clap
-Puedes mostrarnos el hechizos jovencito?- rompió el incomodo silencio el director del hospital Helecar Cromwell. tenia un maletín en su mano, lo abrió y de ahí saco una pequeña ave.
Haciendo un movimiento de varita la avecita se durmió rápidamente y de otro movimiento de varita vio como su pata se rompía limpiamente.
Rigel saco al ave de la jaula y la puso sobre el escritorio, todos los demás lo rodearon y observaron atentos.
Saco un semilla y la hizo flotar sobre el ave y repitió el hechizo, la pata del ave se enderezo y en su lugar la semilla se rompió y volvió a secarse.
-Fascinante- dijo Cromwell.
Todos tenían el rostro sorprendidos, incluso el camarógrafo, Rita le dio un codazo para que reaccionara y tomara la foto.