webnovel

Entrega

El siguiente capitulo contiene escenas que pueden ser explicitas para algunos lectores.

Su rostro bajó y comenzó a regar besos por mi cuello, hasta que regresó a devorar mis labios. Una sensación de cosquilleo se extendió por mi cuerpo, retrocedí un poco hasta chocar con la barra. Louis me cargo y sentó sobre ella poniéndose entre mis piernas, su mano descendió un poco y se coló debajo de mi blusa. Un hormigueo acompañó el recorrido de su mano que acariciaba mi espalda.

- Sujétate. - Su voz sonaba bastante seductora, me sujete de su cuello y él me cargó sin dificultad alguna hasta una habitación en donde se detuvo frente a la puerta mirándome, pidiendo mi opinión por última vez.

- Vamos. - Besé su nariz y sonreí.

- Bien. - Murmuró con voz ligeramente temblorosa por lo que escondí el rostro en su cuello, tratando de no reírme.

Abrió la puerta de la habitación y caminó lentamente hasta la cama en donde me dejo cuidadosamente, pasó su lengua por sus labios mientras se acercaba a mi con gran lentitud. Sentí el peso de él, el colchón se hundió hasta que quedó sobre mi sin recostar su cuerpo por completo. Con una de sus manos apartó un mechón de mi cabello, me miró con detenimiento. Esto se sentía como una tortura, tomé entre mis manos su rostro y lo besé, tomando la iniciativa al ver que él aún no asimilaba la situación. Mi lengua entró con torpeza pero con el pasó del tiempo ambos nos acoplamos, disfrutando con ansias el momento.

Su mano volvió a infiltrarse en mi ropa deslizándose con sigilo por mi abdomen, causando que un cosquilleo se extendiera por mi cuerpo. Sus besos bajaron hasta mi cuello, deslicé mi mano por su nuca y atrape un mechón entre mis dedos provocando que de su boca saliera un pequeño quejido en forma de protesta.

- Date prisa. - Refunfuñe, empujándolo contra el colchón y colocándome sobre él.

Quité con premura mi sudadera y mi blusa que cayeron en alguna parte de la habitación, sus ojos temblaron un poco al mirarme solo en sujetador. Sonreí triunfante al estar satisfecha con su reacción, deslicé mi mano por su pecho y deshice el nudo de su corbata, trague un poco de saliva al desabotonar su camisa y abrirla parcialmente. Las puntas de mis dedos se deslizaron por su pecho, baje hasta la hebilla de su cinturón, con calma lo quite y lo arrojé al piso. Bajé el rostro y comencé a dejar un rastro de besos por su cuerpo sintiendo como sus músculos se tensaban al sentirme.

Sus manos agarraron con fuerza mis caderas, atrayéndome contra su cuerpo. Tomé un poco de aire y lo envolví con mi brazo en su cuello mientras que con mi otra mano me libraba de su camisa. Mordí mis labios al ver su torso desnudo, sentí que la garganta se me secaba y que mi respiración se agitaba.

Louis sonrió feliz, esa sonrisa era algo que nunca había visto, lo hacía ver extremadamente seductor y atractivo.

- No sé donde aprendiste esto, pero ya he tenido suficiente. - Hablo con voz grave, sujetó mi cintura y me atrajo contra él.

Cuando me percaté otra vez estaba sobre mi, besándome con fiereza y acariciando mi cuerpo. Lo único que nos separaba era nuestra ropa interior, separó mis piernas y empujo su parte inferior contra la mía. Un gemido escapó de mi boca y poco tiempo después ambos estábamos sobre las sábanas sin nada que nos estorbara.

- Déjame escucharte. - Susurró en mi oído para después explorar con su boca mi cuerpo.

Traté de mantener la cordura pero fue imposible cuando su cabeza se adentró por mis piernas, traté de alejarlo pero una extraña sensación comenzó a emerger desde mi abdomen hasta extenderse por todo mi ser.

- Louis - Hablé con dificultad, tratando de recuperarme pero él no me dio oportunidad cuando introdujo un par de dedos sin dejar de estimularme con su lengua.

Mi espalda se arqueó y mis manos se aferraron a las sábanas mientras decía su nombre en repetidas ocasiones. Pude respirar con normalidad cuando se puso sobre mi lamiéndose la comisura de su boca.

- Louis. - Coloqué mis brazos alrededor de su cuello y lo miré suplicante.

- Relájate cariño. - Besó mis labios brevemente y tras un breve suspiro sentí que algo duro se frotaba en mi cuerpo.

Trague un poco de saliva al sentir como se abría paso en mi interior, un pinchazo se extendió ocasionando que un gemido de dolor saliera al igual que un par de lagrimas.

- Lo lamento cariño, solo respira. Lo siento. - Se lamentó Louis besando repetidamente mis lagrimas, no se movió y continuo calmándome hasta que me sentí mejor.

- Estoy bien. - Dije con un ligero rastro de llanto.

- Lo lamento cariño, en verdad lo siento pero no puedo detenerme. - Murmuró apretando con fuerza la mandíbula y comenzando a moverse con lentitud.

Mi respiración comenzó a faltar conforme el tiempo pasaba, poco a poco la sensación de dolor se fue desvaneciendo y fue remplazado por esa sensación electrizante y emocionante.

- Sasha. - Musitó en mi oído haciendo que mi corazón se acelerará y algo indescriptible surgiera en mi pecho al ver la manera en que me miraba.

- Te amo Louis, te amo. - Sonreí besándolo con ternura hasta que me sentí satisfecha. Al abrir los ojos me encontré con un maravillosos hombre que derramaba lagrimas que caían en mi rostro.

- Te amo Sasha. - Sollozó, sonreí y limpié sus ojos con mis pulgares.

Lo besé continuamente, tirando de él para entregarnos en su totalidad. Aquella confesión solo generó que algo despertara en él. No hallaba una manera se saciar su sed, por lo que tuve que hacerme responsable de mi novio hasta que ambos nos dormimos satisfechos.

La luz del sol me despertó, me sentía agotada y mi garganta estaba seca. Traté de despabilarme pero aún no comprendía lo que había pasado. Moví con cuidado el brazo que me rodeaba la cintura.

- Ungh - Me quejé al sentarme sobre la cama, pasé mi mano por mi cabello que estaba suelto y caía por mis hombros.

- Mmm - Louis se removió en la cama, atrayendo mi atención, pude ver su torso descubierto junto con varias marcas de chupones y rasguños en su cuerpo.

Lo sucedido pasó en mi mente causando que mis mejillas se calentarán, miré la habitación y pude ver el desastre de ropa que yacía en el suelo.

- Buenos días. - Louis bostezó, sentándose a mi lado y atrayéndome hacía él, reposando su rostro en mi hombro.

- Buenos días. - Contesté avergonzada por mi comportamiento instigador de ayer.

- ¿Dormiste bien? - Preguntó acariciando mi abdomen y besando mi espalda.

- Si, voy por agua. - Traté de huir pero al quitar su mano por accidente mi mano se posó sobre algo. Miré lo que mi mano sostenía y abría la boca tratando de explicar la situación pero nada salía de ella.

- Solo quería darte los buenos días, pero ahora asume la responsabilidad. - Se colocó sobre mi besándome.

- Es muy grande, eso no - Expresé mi asombro sin dejar de ver esa cosa.

- No hubo problemas con eso cariño. - Sonrió abrazándome.

- Quiero agua. - Me excusé tratando de huir, pero el solo soltó una hermosa carcajada que me desarmó.

- Te traeré agua más tarde. Es culpa tuya el hacerme tan ambicioso. - Mojé mis labios con mi lengua y observé que su mirada se oscurecía, acercándose peligrosamente a mi.

Next chapter