Capítulo 95

GABRIELA

- ¿Entonces que es lo que pasa?

-Lo que pasa es que no me lo esperaba. Aún no era el momento de tener hijos.

- ¿Crees que no le gustará la idea?

-No seas idiota Roberta, ¿es que en todo este tiempo no te has dado como Alex quiere a tú prima? El quiere ser padre, sobre todo teniendo en cuenta que es de ellos dos.

-Eso es cierto. Carlota tiene razón, estoy segura que le emocionará.

- ¿Entonces por qué reaccionaste así?

-Haber, que tú estés convencida de que no estás embarazada y de repente empecéis a gritar que sois tías… Así tan de repente… Es que ahora mismo mi mundo cambió completamente, todo porque se os antojó de que me hiciera la prueba.

-Al menos te has dado cuenta de que estás embarazada, deberías darnos las gracias.

-No os las voy a dar, fuisteis demasiado pesadas, además me mentiste Roberta, me dijiste que compraste unas pastillas.

-Vale, puede ser que te mintiese, pero es que, si no te hubieses ido, y aquí no tenías opción a irte.

-Puede ser, pero es que también se os ocurre molestar cuando Marcos me iba a decir algo.

- ¿Qué es lo que te iba a decir?

- ¿Qué parte no entiendes de que me interrumpisteis?

-Vale, vale, pero ahora debes irte para contárselo a Alex.

-Es cierto, más os vale que no digáis nada porque os mato a las dos.

-No diremos nada, que poca confianza tienes en nosotras.

-Obviamente que ahora mismo no confío en vosotras, teniendo en cuanta que gritasteis por toda la casa que ibais a ser tías, me extrañaría que no se enterara todo el barrio.

-Fue la emoción del momento, debes entendernos.

-Si, además teniendo en cuenta que parece que nos dio más ilusión a nosotras que a ti que vas a ser la que tenga al niño o niña. ¿Qué será?

-No lo sé, pero tu mejor que nadie deberías saber que es pronto para saberlo.

-Es verdad, es verdad. Estando de cuatro semanas no se sabe nada.

- ¿Cuatro semanas?

-Si, ¿es que no lo viste cuando miraste la prueba?

-Yo solo vi que dio positivo, no vi nada más.

-Pues chica, estás de cuatro semanas. ¡¡¡¡Felicidades!!!!

En ese momento llega Marcos con el vaso de agua, me lo pasa y se me sienta a mi lado, apartando a Carlota de mi lado.

- ¿Te encuentras mejor?

-Debería ofenderme que me apartes.

- ¿Por qué? Espera, ¿Estáis juntos de nuevo?

- ¿De qué hablas Gabriela?

- ¿Estáis juntos y no me dijisteis nada? Os debería odiar. Es la segunda vez que lo hacéis.

-Primera de todo es lo que te iba a decir de no ser que esta empezase a chillar que seríamos tíos.

-Oye, que es una cosa que nos emociona a todos. Además, es una gran noticia.

-Lo sé, pero se lo iba a decir en ese momento.

-Entonces es de eso de lo que querías hablarme ¿eh?

-Exacto, pero bueno, vámonos a tu casa, esta noticia debe de saberla todo el mundo.

-Eso ya lo veremos, primero de todo contárselo a Alex, que es el más interesado en este tema.

-No me puedo imaginar cómo reaccionará, la verdad. ¿Podemos estar cuando se lo digas?

-No, obviamente que no. Es algo que tengo que decir yo y estando vosotros por allí no es seguro que se lo vaya a decir yo.

-Vale, vale, pero luego me cuentas todo.

-Eh, que yo también quiero saberlo todo.

-Me lo esperaba de Carlota, pero no de ti Roberta.

-Bueno, soy cotilla de naturaleza, aunque no lo parezca, y lo quiero saber porque no me puedo imaginar la cara de ese chico.

- ¿Por qué estáis todos tan contentos?

En ese momento aparece Ana con una cara de entender nada, pero le digo que no pasa nada y sorprendentemente se lo cree. Estamos un par de minutos más en la casa de Marcos cuando decidimos irnos a mi casa, donde estaría Alex, o al menos eso espero y poder contarle la noticia.

En cuanto llegamos a casa veo a un Alex sonriente que viene junto a mí y nos damos un beso.

- ¿Quieres ir a dar un paseo o estás demasiado cansada?

-Vamos a dar un pase.

- ¿Segura?

-Segura, no estoy cansada si es lo que te preocupa.

-Entonces me imagino que te gustó la melodía que compuso Ana.

- ¿Lo sabías y no me dices nada?

-Me hizo prometer que no te lo iba a decir. Me llamó un día para pedirme ayuda, asique fui.

- ¿Estabas metido en medio de eso también?

-Pues sí, le hacía ilusión que fuese una sorpresa, no iba a ser yo el que le estropeara la sorpresa.

-Vale, te perdonaré por esta vez, porque le hacía ilusión a la niña.

-Bueno, algo es algo, no me puedo quejar.

Empezamos a caminar en dirección contraria a donde estaban el resto, dirigiéndonos al bosque que había cerca de mi casa. Llevábamos un par de minutos en silencio, pero un silencio cómodo y cogidos de la mano.

-Oye preciosa, ¿a que se debe que estés tan contenta ahora?

-Se puede decir que lo estuve durante todo el día.

-No, porque cuando llegué yo estabas enfadada.

-Eso no cuenta, pero te tengo que contar algo.

-Bueno, bueno, mira con quienes me encuentro.

Y esto no me podía estar pasando a mí. ¿Qué coño hacía ella aquí? Lo único de lo que estoy segura es de que Alex se puso delante de mí.

- ¿Qué haces aquí Paula?

-Nada mi vida, venía a por ti.

-No me llames así, ¿es que no ves que no te quiero? Sólo la quiero a ella.

- ¿Estás seguro de la decisión que estás tomando?

-Pues claro que sí, fui un estúpido por andar contigo cuando no te quería como la quiero a ella.

-Eso se soluciona pronto.

En ese momento saca una pistola de no sé dónde, lo que hace que me altere, espero que no tuviese balas, porque sería un problema bastante grande, no quería que le pasase nada a Alex.

-Se nota cuanto quieres a Alex. No sales de detrás de él, da la impresión que no te importa que lo matase ahora mismo.

-No digas estupideces y deja eso que vas a hacer daño a alguien y dudo que sea lo que quieres hacer.

-Claro está que no lo quiero, solo a ti porque me estás quitando al amor de mi vida.

-Yo no tengo la culpa de que no te quiera.

-Claro que sí, porque desde que te cruzaste con él se quedó haciendo el gilipollas contigo.

-Yo no hago el gilipollas, amo a esta chica, tanto que me pienso casar con ella. ¿Es que no te quedó claro el día que se lo pedí?

-Eso puede ser una estrategia para tenerme a tus pies, cosa que sabes que me tienes.

-Tu estás enferma. ¿Por qué no nos dejas en paz eh Paula? Quiero vivir mi vida en paz y tu no me dejas.

-Y no lo dejaré, eso lo puedes tener más que claro estúpida.

En ese momento me pongo delante de Alex para ir a partirle la cara a esa gilipollas que no nos deja en paz cuando él me agarra y todo pasa muy rápido.

Alex me agarró por la cintura y me acaba poniendo detrás de él mientras y mientras Alex estaba haciendo ese movimiento, Paula dispara la pistola y se marcha corriendo. Por unos segundos tengo la esperanza de que ha fallado el tiro, pero en ese momento se cae al suelo y veo que tiene un disparo en el pecho, lo que hace que me vuelva histérica.

-No, no, mi vida. No te me mueras.

-Estaré contigo siempre hermosa.

-Ni se te ocurra hablarme así ¿Me entendiste? No pienso dejar que te mueras aquí. Tú te tienes que morir de viejo. Tienes que ver crecer a nuestro hijo Alex.

Estaba llorando, pero en este momento me daba igual, lo único que quería era que se pusiera bien, por lo que llamé a Roberta que, para mi suerte en este momento, sus estudios de Medicina servir, pero por instinto puse mis manos sobre la herida para que dejara de sangrar.

-Roberta, menos mal que contestas pronto. Tienes que ayudarme.

- ¿Qué pasa Gabriela? ¿Por qué estás llorando?

-Necesito que vengas al bosque que hay debajo de mi casa… necesito… necesito que vengas ya.

-Vale, pero no sé dónde estás exactamente.

-JODER, QUÉ TE ACOMPAÑE MARCOS, PERO VENTE YA...

-Voy ahora mismo, ahora habla con Carlota y explica que es lo que pasa.

-Gabriela ¿Sigues ahí? Explícame que es lo que pasa para que podamos entender. ¿Dónde está Alex?

-Está conmigo, pero… pero necesito que me ayude Roberta, no se puede morir.

-Espera, espera, espera. ¿De qué estás hablando? ¿Qué ha pasado Gabriela?

-Paula…

- ¿Qué pasa con ella?

-Disparó… disparó a Alex en el pecho… y está sangrando mucho Carlota… No lo puedo perder… No ahora…

- ¿Qué hizo qué? Escucha, ellos van ahora mismo para ahí y yo no tardaré mucho en aparecer por ahí. Primero de todo relájate Gabriela, saldrá de todo esto, te lo prometo. Ahora hazme el favor de no colgar y sigue mi respiración ¿de acuerdo?

-No voy a seguir tu puñetera respiración Carlota… ALEX SE PUEDE MORIR JODER.

-Eso no pasará, ya verás. Estaré ahí en un par de minutos, pero debes relajarte, por vuestro bien.

Colgué porque la verdad no quería seguir escuchando que me dijese que me debía relajar, porque en este momento era algo que no podía hacer, Alex se podría morir y sería mi culpa.

-Gabriela… no… no llores… hermosa.

- ¿Cómo no quieres que llore? Esa… te ha disparado.

-Yo… estaré… bien, pero escucha… si algo… me pasa…

-No te va a pasar nada… Alex, no… no nos puedes dejar solos… Tienes que ver crecer a nuestro hijo…

-Estoy seguro… de que… lo harás… genial hermosa.

-No… Alex te necesito…

Pude ver como se le cerraban los ojos, y eso no podía pasar, por lo que me senté y puse su cabeza sobre mis piernas.

-Vamos mi vida… no cierres los ojos.

- Shit ... Wat is er gebeurd Gabriela? (Mierda... ¿Qué ha pasado Gabriela?)

- ¡¡¡¡Roberta!!!! Roberta, sálvalo por favor… No puede morir.

-Mierda, necesito gasas para parar la hemorragia.

-Aquí tienes, y explícame que es lo que pasó porque no te entendí nada por teléfono.

-Fue ella Carlota… Fue Paula… Se puso delante para que no me diera… esto es mi culpa.

-No lo es.

-Gabriela, Ik wil dat je het neerlegt, zodat ik de wond niet goed kan bedekken. Je kunt maar beter ook naar huis gaan. (necesito que lo dejes en el suelo, así no puedo taponarle bien la herida. Es mejor que te vayas a casa también.)

- Echt niet, ik ga geen afstand van hem doen. (Ni de coña, no pienso separarme de él)

-Marcos, llama a la ambulancia y al resto. Diles que traigan todas las gasas que se encuentren por casa.

Marcos se apartó de junto a nosotros para hablar por teléfono mientras yo dejaba la cabeza de Alex en el suelo para que pudiese tapar bien la herida, pero no me separé de él y le cogí la mano.

Cuando llegaron los demás con lo que le había pedido Roberta, se paran detrás nuestro, y solo tengo cerca a Carlota y a Kevin cuando llega.

- Heb je de ambulance gebeld? (¿Habéis llamado a la ambulancia?)

- Ja, het duurt niet lang om aan te komen. (Sí, no va a tardar mucho en llegar.)

- Kev, breng Gabriela naar huis, ze mag dit niet zien. (Kev, llévate a Gabriela a casa, no debe de ver esto.)

- WAT!!!! NOCH, KEV. (¡¡¡¡QUE!!!! NI SE TE OCURRA KEV.)

- Neem aan, het is al erg genoeg voor mij om het zo te zien. (Llévala, ya está lo suficientemente mal como para que lo vea así.)

En ese momento me cogió en brazos y Carlota se encargó de soltar mi mano de la de Alex, cosa que me enfadó mucho, por lo que empecé a patalear por todos y le daba a Kev claramente, él era el que me estaba separando de Alex.

Cuando llegamos a casa, me llevaron a mi habitación y empecé a tirar con todo lo que encontraba a mi paso y de un momento a otro todo se vuelve negro como lo era ahora mismo mi vida.