¿Qué paso?

Fueron necesarios tres meses para sacar los recursos con los que disponía la débil célula de Hydra en Europa, solo conservaron lo necesario.

Las pinturas y obras de Arte fueron vendidas en el mercado negro, intercambiándolas por oro o diamantes.

Para cuando llegaron a EE.UU decidieron establecerse en un estado que no llamará mucho la atención, eligiendo Missouri específicamente la ciudad de San Luis, era bastante discreta para sus planes.

Durante este periodo Helios no hizo nada interesante más que aprender a llorar, para cuando necesitara algo.

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Para finales de 1945 la reserva científica estratégica ya había encontrado e incautado todas las bases de Hydra.

Junto a ellos, también se tenían cientos de documentos que tenían que procesarse y traducirse.

Prácticamente, les llevaría años saber con exactitud acerca de todas las acciones que llevo Hydra bajo el mando de cráneo rojo.

Entre los archivos recuperados, un folio llamado proyecto Helios estaba bastante abajo en la montaña de documentos a ser procesados.

Por cosa del destino o no, el nombre del proyecto tenía el mismo que el de Helios, así que su nombre no cambio en este universo, ya que los soldados de Hydra lo nombraron como el nombre del proyecto.

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Durante los siguientes años Helios creció bajo el estricto entrenamiento de Otto.

A partir de los cuatro años de edad empezó a recibir educación en los conocimientos básicos, al mostrar una capacidad de aprendizaje superior se aumentaron más cursos a su horario.

Para cuando cumplió 8 años Helios empezó su entrenamiento de combate.

Helios nunca tuvo la necesidad de luchar con alguien en su anterior vida, lo máxima que aprendió de combate fueron un par de clases de karate.

Pero ahora Otto lo sometió a un nivel de ejercicio que no era saludable para un niño normal.

Obviamente, él no era normal, pero igual le costó correr cierrta cantidad de kilómetros, hacer saltadillas, flexiones y otros movimientos que nunca antes escucho.

Otto:" Me agradecerás en un futuro por entrenarte de forma tan diligente"

Es la frase que siempre decía Otto ante las quejas de Helios.

Helios: Créeme que te lo agradeceré ahora sí me das un descanso.

Es lo que pensaba Helios en respuesta, aún guardaba la esperanza de que le dieran un respiro.

Pero conforme pasaron los años los entrenamientos se hacían cada vez más exigentes.

Ahora se encontraba delante de un campo de tiro, ubicado en el bosque que tenía la mansión que Otto compro en San Luis

Edu: "Esto es bastante sencillo, solo tienes que intentar darle a todos los blancos exactamente en el centro"

Helios: Claramente, bastante sencillo opinó helios, con cierta ironía.

Helios: "fácil, pero ¿con cuál de todas estas armas tengo que disparar?"

Delante de él había un taburete con un catálogo variado de armas que iban desde pistolas a armas automáticas.

Edu solo sonrió

Edu: "Vamos pensé que era obvio, tienes que dar en el blanco con todas las armas de allí"

Helios solo atino a suspirar.

Helios: Bueno, ya lo había visto venir con todos los manuales de armas que me hicieron leer.

Helios agarro la primera arma un revolver, personalmente esta arma no le gustaba, ya que recargarlo era gastar mucho tiempo.

De todas formas no significaba que no tenía una idea clara de como funcionaba, apunto la mira en el blanco más cercano y después de hacer unos cálculos en segundos disparo.

La primera bala no entró directamente en el centro del blanco, así que corrigió y volvió a disparar, y sin volver a fallar, todos los disparos dieron perfectamente en el blanco.

Helios: No creo que pueda agradecerle a todas las horas que pase jugando shooters, esta facilidad para hacer cálculos es bastante anormal.

Edu se encontraba a unos metros de él y le dedico un aplauso por su ejecución.

Edu: "Bien perfecto, sabía que gastar tanto tiempo en entrenarte no era tiempo perdido, bueno tal vez un poco si, pero no importa sigamos tienes más armas que disparar"

Helios continuo con esta tarea durante los siguientes días, después le hicieron aprender los sonidos de cada arma.

Pero lo pesado llego cuando cumplió los quince años Edu quien estuvo a cargo de su entrenamiento durante toda su vida, empezó con las lecciones de combate real.

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El lugar donde normalmente entrenaban Edu y Helios era una plataforma circular, también ubicada en la parte trasera de la casa.

Helios estaba en una posición defensiva mientras que Edu intentaba desestabilizarlo constantemente con patadas y golpes.

El dolor se hacía sentir en el cuerpo de Helios, pero solo podía responder con una mirada de odio.

Evitar los golpes no era nada sencillo, sobre todo porque Edu había dejado de contener su fuerza desde que estas sesiones empezaron, la velocidad de regeneración que tenía Helios lo hacía recuperarse rápido.

Otra andanada de golpes fueron soltados por Edu y Helios, cambio su posición para realizar un intercambio de golpes, golpeando las costillas de Edu con una patada, pero al mismo tiempo recibiendo una en la pierna.

Sin un soporte después de dar el golpe callo al piso automáticamente, y Edu se colocó encima para retenerlo y golpearlo.

Varios puños fueron directamente a su rostro impactando contra los brazos de Helios, estaba sometido y tenía que liberarse rápidamente.

Pero la destreza de su opresor era superior y no dejo que ninguno de sus movimientos prosperaran.

En esos intentos de sacarlo de encima de él dejo sin defender su rostro recibiendo varios golpes como factura.

Solo pudo volver a su posición defensiva, sintió correr la sangre sobre su rostro, debía de tener la ceja abierta.

Unos fuertes sentimientos de venganza surgieron en su interior y deseo con todas sus fuerzas estar detrás de Edu para asestarle un golpe en la cabeza.

Sus sentimientos eran tan intensos que se veían reflejados en su rostro, sin embargo, Edu no disminuyo la presión sobre su defensa.

Entonces sucedió, Helios desapareció de debajo de Edu y apareció detrás de él.

Helios: "Que carajos sucedió" fue lo primero que salió de su boca, estaba totalmente sorprendido por lo ocurrido.

Y Edu no estaba mejor.

Edu: "Como hiciste eso" Edu sabía el tratamiento al que había sido sometido el cuerpo de Helios, no conocía del todo las propiedades específicas del Teseracto, pero sospechaba de que tendría que ver con esto.

Helios: "No sé, solo pensé en colocarme detrás de ti para escapar de la presión y contraatacar " la expresión confundida en el rostro de Helios la seguridad de que decía la verdad

Edu: "Anda a lavarte, nos encontraremos en la oficina de Otto", Edu en verdad esperaba que Otto tuviera respuestas más sólidas.