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Capítulo 142 Guardian semidemoníaco [ 3 ]

—Punto de vista de Asher Frostblade.

El jefe de la Mazmorra.

No es un monstruo ni nada por el estilo.

En el pasado, durante la era de la oscuridad, muy pocos magos "demasiado pocos" apenas podían crear guardianes.

Pero... ¿qué son los guardianes?

Seres creados a partir del puro y refinado poder del maná, con inteligencia, capacidades, y una fuerza mínima comparable a la de un mago de octavo círculo.

Sin embargo, su poder disminuye cada cien años.

Pero.

Existen guardianes que no fueron creados por Encrid, sino por otros magos.

Estos guardianes eran menos poderosos. Fueron creados a partir de partes de cuerpos de otras razas de monstruos, como los demonios, la segunda raza más fuerte después de los dragones.

Los guardianes creados con partes de demonios fueron descartados o eliminados.

Porque eran inservibles.

Porque su poder era impredecible y no se podían controlar.

Fueron desechados por no seguir las órdenes de sus creadores.

En resumen, los guardianes fueron creados para proteger cosas o lugares importantes de las antiguas familias.

En la era actual, es posible crear guardianes.

Sin embargo, nadie tiene el conocimiento.

Porque Encrid borró toda la información sobre la creación de los guardianes y la existencia de estos.

Encrid también borró la existencia de las antiguas familias.

Si en la era actual se crearan guardianes, se utilizarían para fines egoístas.

Por eso, Encrid eliminó todo lo relacionado con ellos.

Por supuesto, no tuvo tiempo suficiente para eliminar a todos los guardianes que seguían vivos.

Porque tomaría demasiado tiempo localizarlos, y la guerra se acercaba cada vez más.

Por ello, Encrid no pudo eliminar a los guardianes vivos.

El guardián de la Mazmorra es uno con partes demoníacas.

En resumen, es un guardián semi-demoníaco.

"El guardián de esta Mazmorra es de grado semi 7. No será difícil matarlo, pero tu maná está muy agotado."

"Lo entiendo, el maná es el problema."

"Es imposible recuperar todo tu maná en poco tiempo, porque ahora eres de tercer círculo, y recuperarlo es más lento."

Asher asintió para sí mismo.

Recuperación de maná.

La manera de recuperar el maná es simple.

Siéntate y medita hasta que el maná entre al cuerpo y lentamente llene el circuito mágico.

Es fácil.

Sin embargo, el proceso de recuperar todo el maná perdido es lento.

Si lo usas hasta agotarlo por completo, será aún más lento.

Encrid miró a Asher, pensativo.

A este ritmo será difícil despejar la Mazmorra.

A menos que él ayude, pero esa no es su decisión, ni una opción.

Porque si ayuda, no ganarán la experiencia que deben adquirir en esta Mazmorra.

Se avecina una guerra.

Una guerra contra los invasores de la grieta dimensional.

Por ello, este es el momento de que todos ganen experiencia en combate lo más rápido posible.

"Lo sientes, ¿verdad?"

"Sí."

Asher sintió el maná fluir.

El maná circulaba de forma más coherente.

Siendo ahora de tercer círculo, las cosas eran algo diferentes.

Los sentidos comenzaban a agudizarse desde este punto, el maná era más grande y denso.

Por eso, también la sensación del maná era diferente, más intensa.

"Tu primera etapa de la afinidad a la oscuridad es el dominio absoluto del maná. Eso, en sí, es increíble, porque nadie puede controlar el maná de manera absoluta."

Encrid hablaba en tono explicativo. Era el momento de darle algunas lecciones a Asher.

Encrid presenció el momento en que Asher desbloqueó la primera etapa de la afinidad a la oscuridad.

Notó que el dominio del maná de Asher era absoluto.

Un dominio absoluto del maná significa que sus habilidades pueden superar sus límites.

Por ejemplo, si el hechizo de bola de fuego tiene un límite en su destrucción y tamaño, si ese tamaño es como el de una pelota de fútbol, el dominio absoluto del maná hará que esa bola de fuego aumente en poder destructivo y tamaño.

En resumen, es similar a la segunda etapa de Encrid, que elimina el límite de toda habilidad.

El control absoluto del maná también implica muchas otras cosas que nadie más puede lograr. Es una lista larga de explicaciones.

"La segunda etapa de la afinidad se desbloquea con tus experiencias, tu vida, tu fuerza, tu inteligencia. De hecho, no hay una forma de saber con exactitud cuál de las cientos de maneras desbloquea la segunda etapa de la afinidad."

En resumen.

Asher no sabe cómo ni cuándo desbloqueará la segunda etapa de la Afinidad de la oscuridad.

Entonces, habló:

"Como dices, las afinidades tienen tres etapas, ¿verdad?"

"Sí."

"Nadie sabe cuándo ni cómo se desbloquean las etapas de las afinidades, ¿cierto?"

"Correcto, a menos que puedas ver tu futuro y descubras cómo desbloqueas las etapas."

En cierto sentido, era así.

No se puede saber cómo ni cuándo se desbloquea.

Pronto, Asher abrió los ojos y respiró hondo, dejando salir todo el aire de sus pulmones.

Había terminado de meditar.

"Te esperaré cuando termines."

Asher miró el cielo crepuscular que cubría la Mazmorra y luego observó a los demás, que seguían sentados, meditando.

Era necesario recuperar todo el maná posible.

"He recuperado la mitad de mi maná", se dijo a sí mismo.

"Tengo confianza en que podré matar al guardián."

No era una simple confianza.

Si antes, en el segundo círculo, estaba a la par con un grado semi 7, ahora era más fuerte que eso.

Sin embargo, al no tener todo su maná, en este momento era igual o ligeramente inferior a un grado semi 7. De ahí surgía su confianza.

Miró a su alrededor y estiró su cuerpo, moviéndose para relajar los músculos.

Meditar implicaba estar inmóvil.

Eso hacía que los músculos se tensaran, por lo que debía estirarse y calentar un poco el cuerpo.

Cuando terminó, Asher revisó a los demás, observándolos detenidamente y evaluando sus nuevas capacidades ahora que habían alcanzado el tercer círculo.

"Mis ojos son más claros y puedo ver más detalles."

"Mis sentidos también son mejores que antes. Mi cuerpo es más flexible, más fuerte y más rápido."

Luego, empezó a mover su maná por diferentes partes de su cuerpo.

"El maná también se mueve más rápido dentro de mí."

Aunque Asher tuviera un control absoluto sobre el maná, eso no significaba que pudiera moverlo con rapidez dentro de su cuerpo.

Afuera, sí podía manejarlo increíblemente rápido, pero internamente no.

El circuito mágico lo limitaba.

Si no avanzaba en los círculos, el circuito no se expandiría ni sería más resistente o eficiente.

Por eso, el usuario debía fortalecerse, y solo entonces el circuito mágico se volvía más eficaz.

"Mi control del maná ya no es un problema", pensó Asher.

Era verdad que su dominio sobre el maná era absurdo, un control inalcanzable.

Pero le faltaban otros aspectos.

"Haa…"

Asher suspiró, terminó de calentar sus músculos y miró a los demás.

Pronto, Gloriana, que estaba cerca, se acercó a él.

"¿Ya estás recuperado?"

"No del todo. Tengo la mitad de mi fuerza en este momento."

Tener la mitad del maná significaba tener la mitad de su poder total.

El maná era la fuente del poder de todos.

Si no tienes suficiente maná, serás como una persona común.

Por eso, Asher, al tener solo la mitad de su maná, contaba con la mitad de su poder.

"En un momento seguiré."

"Ya veo…"

Gloriana parecía desanimada por sus últimas palabras.

Asher, que lo notó, sintió curiosidad.

Desde hace un tiempo, Gloriana había comenzado a comportarse de manera diferente con él.

Sus actitudes hacia él eran distintas, casi… emocionales de alguna manera.

Aunque Asher no sabía mucho sobre emociones, percibió ligeramente el cambio en el comportamiento de Gloriana.

Quizás había algo.

No estaba seguro.

El cambio en las personas es relativamente normal en diversas ocasiones, por eso Asher no estaba del todo seguro.

Era difícil ver más allá de las emociones.

"Iré a buscar a Emilia."

Gloriana dio media vuelta y comenzó a caminar hacia Emilia, pero...

"Eh…"

Asher la sujetó del brazo, deteniéndola.

Sentía curiosidad.

Curiosidad por saber qué pasaba con el cambio en su actitud hacia él.

Notó que Gloriana hablaba de forma más natural con los demás.

Sin embargo, con él, su voz solía temblar o evitaba mirarlo a los ojos.

Había algo, algo que estaba cambiando en Gloriana hacia él, y quería saber si algo de él la incomodaba.

"Esto es raro, pero… ¿hay algo que te moleste de mí? Hablas diferente conmigo que con los demás, ¿no es así?"

Gloriana, sorprendida por el repentino comportamiento de Asher, no supo qué decir.

Su rostro se sonrojó, y trató de evitar mirarlo, pero...

"¿No me dirás nada?"

No era impaciencia.

Simplemente, ella estaba actuando de forma diferente.

Asher suspiró.

Si no quería decir nada, no había problema.

"Lo siento por la pregunta."

"Eh… Está... bien."

Fue rápido, pero Gloriana sonrió mientras sentía el contacto de Asher sujetando su brazo.

De algún modo, ese contacto la tranquilizó.

"Realmente me gusta", pensó para sus adentros, reconociendo sus verdaderos sentimientos.

Pronto, Asher regresó al suelo después de descansar unos minutos, cruzó las piernas y se sentó en posición de meditación. Cerró los ojos y entonces… el maná empezó a fluir rápidamente hacia su cuerpo.

Pero.

Gloriana lo miraba de vez en cuando, sin que nadie lo notara, con una amplia sonrisa y el rostro ligeramente enrojecido...