Cuando Jack entró en la mansión, siguiendo a su padre, comenzó a notar cuán grandioso se veía todo. El lugar estaba cubierto de mármol, con grandes pinturas en la pared. Le recordó cómo solía ser la academia antes de que fuera tomada por las Alas Rojas.
—¿Este lugar siempre fue así? —preguntó Jack—. No estaba muy seguro pero, si su memoria era correcta, la mansión no era tan grande por fuera y tampoco recordaba que todo el pueblo fuera tan próspero. Y ahora incluso el interior del lugar parecía haber cambiado también.
—Nuestra familia se ha vuelto muy exitosa desde la última vez que estuviste aquí —explicó Russell—. Nuestros esfuerzos dieron resultados y todo el lugar simplemente floreció en los últimos diez años aproximadamente.
Finalmente, llegaron a la gran sala donde había sofás enormes que parecían caber 50 personas en ellos y una mesa en el medio. Sentada en el sofá estaba una persona que Jack no había visto en mucho tiempo.
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