webnovel

Mi esposo accidental es mi compañero de venganza

Anastasia Harrison, una joven maltratada por su cruel familia, pensaba que su vida había terminado cuando la obligaron a casarse con Richard, la oveja negra y despreciable de la adinerada familia Wallace. Mientras tanto, su preferida hermana menor, Michelle, estaba destinada a casarse con Xavier, el hermano mayor, que era un CEO. Sin embargo, un error en el ayuntamiento terminó intercambiando sus nombres en sus respectivos certificados de matrimonio. —¿Qué es esto? ¿Cómo estás casada con Xavier Wallace? —¡No recibirás comida ni agua hasta que firmes los papeles de divorcio! Para echar leña al fuego, los ancianos señor y señora Harrison fallecieron, dejando todos sus bienes a Anastasia y no al resto de la familia. Esto llevó a los Harrison a su punto de quiebre. Para negociar una vida tranquila, Anastasia estaba dispuesta a dejar su herencia y abandonar la familia, pero los Harrison tenían otros planes en mente. Querían deshacerse de ella. Permanentemente. Sin embargo, fue por un golpe de suerte que Anastasia fue encontrada por su nuevo esposo, Xavier, antes de que su familia tuviera éxito. Decidida a vengarse, hizo un trato con Xavier. —¡Continúa siendo mi esposa y te ayudaré a vengarte!

Sour_corn · Urbano
Classificações insuficientes
363 Chs

Una Visita Al Orfanato

—¿Todavía no has tenido noticias de ellos? —preguntó Amelia a su esposo, sentado en el sofá con su teléfono en la mano, esperando ansiosamente un mensaje de cierta persona.

Había estado mirándolo fijamente durante un tiempo, levantándolo en cuanto sentía una vibración.

—Si lo hubieran hecho, ¿crees que estaría sentado aquí ansioso con mi teléfono? —preguntó él, mientras sus ojos seguían pegados a la pantalla del teléfono.

Amelia simplemente se encogió de hombros antes de tomar asiento frente a él.

Ya habían pasado dos semanas desde que Robert había visitado a Jeffery Clark en su oficina. Pensó que inmediatamente cederían a sus condiciones, pero desafortunadamente para él, no se había hecho nada.

Estaba contemplando pagarles otra visita, pero dudaba que pudiera salir sin que alguna parte de su cuerpo acabara rota.

Ezequiel ya le había roto la nariz la última vez; podrían ser sus costillas las siguientes.

Capítulo Bloqueado

Apoie seus autores e tradutores favoritos em webnovel.com