Saliendo de una tienda mientras tomaba un tragó de la bebida que había comprado, lo primero que Akira se encontró en la calle de Zerzura fue una gigantesca multitud.
Las calles de Zerzura estaban abarrotadas y no solo era porque el número de ciudadanos había aumentado de forma astronómica en poco tiempo, sino que se debía a que hoy era un día importante.
27 de julio… El aniversario de fundación de Zerzura.
Una ciudad que hace más de un año según los lugareños era un pueblo olvidado del mundo se convirtió en una gigantesca ciudad, que solo estaba creciendo, superando cualquier perspectiva.
Akira no solo se sentía emocionada por la ciudad y la atmosfera festiva, sino que por el concierto que se realizaría de Serafín en este lugar.
Algunos comentarios en internet decían que era una pérdida que Serafín diera un concierto en Zerzura cuando era probable que hubiera más fans en otra parte, pero Akira pensaba que era agradable.
Caminando a donde estaba sus acompañantes, pudo ver a Alice con una expresión seria y a Aurora recibiendo las miradas de los que pasaban cerca.
"¿Por qué esa expresión, Alice? ¡Hoy es un día festivo debería estar animada!" Dijo Akira y viendo que esa jovencita le redirigía la mirada, sonrió de forma burlona y bromeó. "¡El primer paso para vencer la timidez es enfrentarlo!"
¿Era de esa forma? En realidad, no tenía ni la menor idea, solo buscaba molestarla y por la risa que dio Aurora cuando vio a que las cejas de su hermana temblaban, Akira supo que lo había conseguido.
"No necesitamos presionarla. La timidez se quita poco a poco y lo que necesita es un empuje." Explicó Aurora y sacando pecho con orgullo, declaró. "¡Solo una gran bolsa de papitas puede llevarla a hacer cosas que no le gustan!"
El tono, la voz y la expresión orgullosa como si anunciara importante secreto, llevo a que Alice diera una expresión rara, pero Akira se movió.
Sacando una bolsa de papitas que había comprado, ya que parecían ser nuevas, se la pasó a Alice, de la misma forma que un caballero le pasaba un objeto importante a su reina.
De reojo pudo observar como Alice las miraba a ambas y luego a la gente que estaba observando algunos riéndose y otros con sonrisas, entonces Alice suspiró.
"Cuando ustedes dos están juntas se potencian." Dijo Alice con un suspiro, pero igualmente tomó la bolsa de papitas.
"Solo las buenas cualidades." Precisó Aurora y abrazándola, ambas miraron a Alice con una sonrisa.
¡Solo potenciaban las buenas cualidades de la otra! Akira estaba de acuerdo con tales comentarios, pero Alice dio una sonrisa algo desdeñosa.
"Lo dice la persona que llevo por mal camino a un gran estudiante y la estudiante que se dejó engatusar por la libertad que la otra ofrecía, hasta el punto de que la terminaron regañando." Dijo Alice, sin contener su sonrisa al ver que ambas se miraran.
Fue un golpe directo y fue normal cuando la estuvieron molestando antes, pero Akira miró a su amiga que se notaba algo incómoda y…
"Ahora que lo dices. Siento que me sedujo." Murmuró Akira, poniéndose mano en el mentón y sonriendo de forma descarada, dudó. "¿No te molestaría si me la robo? Me gustaría presentarla a mis padres y llevarla conmigo."
Como si se tratara de una novia, con la cual iría a vivir, tales palabras sin duda avergonzaron a Aurora que se puso un poco roja por la connotación, pero su broma fue hacia Alice.
Vio que en esos ojos negros los celos de una hermana posesiva estaba oculto y a esa glotona no le gustó lo que acababa de escuchar.
"Tienes valor. Deberíamos intentar ponerlo prueba." Respondió Alice con una sonrisa orgullosa y con una mirada profunda.
A pesar de que su tono se escuchaba normal y ciertamente bromista, Akira tembló de forma inconsciente, sintiendo cierto escalofrío.
Cuando el pensamiento de enfrentarla vino a su mente, lo primero que hizo fue…
"¡Cariño! ¡Ella me está amenazando!" Gritó Akira ocultándose a la espalda de Aurora, dando una mirada por arriba del hombro a Alice.
¿No se esperaba que usara a su amiga como escudo? Akira se rio al ver la mirada extraña que daba a Alice.
Era el sentido más básico de supervivencia y para Akira no era nada raro ocultarse frente al mejor escudo en contra esa peligrosa glotona.
Que solo se riera de forma malvada mientras estaba oculta, solo causó que las cejas de Alice temblaran, dejando ver que no era tan indiferente como se mostraba.
"Tiras una piedra y ocultas la mano." Murmuró Aurora riendo suavemente al verla y viendo que ella mostraba una expresión orgullosa, preguntó. "¿De verdad está bien que hayas venido?"
Causaba problemas y luego se ocultaba, pero para Akira todo era parte de su estrategia para evitar a la peligrosa glotona, que ahora se reía de forma descarada.
No obstante, al escuchar la pregunta de Aurora y ver la expresión que estaba poniendo, Akira solo sonrió.
"¿Preocupada? ¿Aceptas que me has corrompido?" Cuestionó Akira con su cabeza en alto, actuando de cierta forma como una víctima que buscaba resarcimiento.
Alice apuntó a la idea de que fue Aurora quien la llevo por mal camino y ella se dejó 'seducir' por el sentido de 'libertad' que ofrecía, cayendo engañada.
Lo mencionó ya que ella fue castigada durante un par de semanas por sus padres, quienes se enteraron a causa de que su academia llamó a sus padres para felicitarlos por como ella estaba completando su historial con misiones en sitios peligrosos.
Un par de misiones oficiales por Zerzura, algunas limpiezas de mazmorras, misiones más específicas de la ciudad y luego lo que causó que sus padres se alarmaran, misiones en las tierras sin ley, contratos con el Imperio Falion y misiones en partes de Turquía o Siria.
Acompañó a Aurora a bastantes misiones cuando estuvieron en las tierras sin ley y fue imposible que sus padres no se alarmaran cuando la guerra europea-demoniaca les preocupo tanto.
"Un poco preocupado. No me gustaría que te metieras en problema por mi culpa." Murmuró Aurora, tomando su broma con seriedad.
Asumía la idea de que cierta forma si no fuera por ella, Akira no podría realizar misiones y no deseaba que tal hecho, le causara problemas.
Sin embargo, Akira estaba de acuerdo con la división de 'culpa' de Alice, ya que fue ella quien había aceptado realizar tales misiones.
"No te preocupes. Alice tiene razón, me gusta la libertad que tengo aquí. Mis padres son siempre estrictos, no son malo, son solo personas muy protectoras, que desean lo mejor para mí a su propia manera. Ellos quieren que me mantenga estudiando, alejada del peligro y luego que trabaje en algo simple, sin tanto riesgo." Dijo Akira y mirando la ciudad que estaba de fiesta, redirigió su mirada a Aurora y declaró. "Pero no quiero eso."
Sus padres buscaban protegerla a su propia manera, queriendo que no tomara riesgos y más cuando era tan joven, temiendo perderla.
Akira cuando fue castigada y discutió con ellos, pero no pudo negar cuando le preguntaron si en esas misiones podía morir, porque tal posibilidad estaba presente y era innegable.
Sin embargo, tampoco podía detenerse, no en este punto y en este momento cuando ya había decidido que hacer.
"Voy a crear mi gremio. Ya tengo un par de personas interesadas en unirse y quieren ayudarme." Anunció Akira con una gran seriedad.
Una era su amiga de hace tiempo, que era una excelente arquera y el otro era el joven que conoció en su viaje de avión, con el cual incluso ahora estaba hablando de forma recurrente.
Sin embargo, no pudo decir tales hechos ni que tampoco había tenido un par de citas y fue por eso que se tragó tales actos vergonzosos, sabiendo que Aurora y especialmente Alice se podría aprovechar de eso.
"Bien." Respondió Aurora dando un largo suspiro y sonriéndole, comentó. "Cuando desees empezar a trabajar con ellos, puedes invitarlo a Zerzura. Me encargaré que tengan misiones con las cuales entrenar y llenar su historial de grupo."
No estaba mintiendo sobre su grupo y Aurora lo supo, ofreciéndole una oferta que hizo que Akira se riera y la abrazara.
¡Sin duda era la mejor amiga!
Mientras la abrazaba Akira, pudo notar que Alice revisaba algunos mensajes mientras su expresión cambiaba a cada segundo y fruncía el ceño.
Era raro que Alice mostrara tantos cambios de expresión.
"¿Sucede algo?" Preguntó Akira de forma honesta, por esa jovencita.
Resultaba difícil acercarse a alguien como Alice que le gustaba mantener cierta distancia, pero era imposible no notar sus cambios de expresiones cuando era tan evidente.
Aurora le dio una mirada a su hermana, también notando algo de seriedad.
"James me está pidiendo que asista al aniversario de hoy. No creo que pueda rechazarlo." Dijo Alice y con una mirada grave, declaró. "Tengo que asistir para buscar algunos platos de comida y es probable que quiera que algunos de los accionistas me vean… Es molesto."
Akira redirigió su mirada a Aurora y luego a Alice.
Sabía que ambas estaban conectadas a la ciudad y a la iglesia, siendo la hija de la Luz de Plata y el Gigante de Acero, que permanecían escondidas, pero incluso ahora se dio cuenta de que todo era más profundo.
Aunque al final…
"Ve y cuando obtengas todo, nosotros te llamamos o pasamos a rescatarte." Dijo Akira de forma honesta y al recibir la mirada de ambas, dudó. "¿Qué? Es una buena idea para escapar."
Aunque tales acciones se realizaban en una cita en caso de que la persona con la cual salía no fuera agradable, tal táctica también podía servir para diferentes situaciones.
Aurora y Alice se miraron entre ellas y…
"Esa es una buena idea…" Murmuró Aurora de forma honesta.
No sabía cuál era la situación de forma correcta, pero estuvo claro que Alice estaba entre ir para buscar sus platos y el deseo no ir a tales eventos.
Akira asintió de forma honesta y dirigió su mirada a Alice, para que respondiera.
Hoy estaba el concierto de Serafín y Akira quería pasarla bien las tres juntas y fue por eso que le dio una mirada de cachorrito que buscaba que aceptara, logrando que Aurora también hiciera lo mismo.
"Está bien por mí." Respondió Alice con un suspiro.
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"Ya vengo." Avisó Aurora a Akira que estaba en el auto y bajando con calma, se dirigió al edificio de la Empresa Apicius en donde se realizaba el aniversario.
Había venido en auto, que había aprendido a conducir gracias a que su padre le estuvo enseñando en su tiempo de vacaciones y ahora vino a buscar a su hermana siguiendo el plan.
Alice le había avisado que estaba por salir y a diferencia de Akira que mencionó que su hermana necesitaba ser rescatada, Aurora pensó diferente.
Era probable que su hermana se estuviera retrasando de lo planeado debido a que estaba 'robando' la mayoría de la comida posible antes de irse, tal suposición no parecía muy descabellada.
Caminando por el área, mientras era dejada pasar por los guardias que la reconocieron, cuando ella subió al ascensor se miró en el espejo, viendo que estaba bien arreglada.
Tal vez no lo suficiente para una fiesta de gala, pero era lo suficiente como para estar presentable.
James la había invitado antes, pero esta vez Aurora al mencionar que tenía planes con su amiga, ese hombre simplemente lo dejo estar y ella pudo salvarse.
Por supuesto, su hermana fue tentada con delicias para que participara y fue por eso que terminó asistiendo.
Viendo que el ascensor se abría, Aurora alejó su incomodidad de entrar a la sala y se adentró hacia el interior.
Como siempre, estas fiestas eran lugares en donde estaban las personas ricas, reconocidas o prestigiosas y gran parte de los altos mandos de Zerzura estaban presentes.
Algunos como Makeba, Zhan Tian o Abdellah la saludaron mientras que Aurora trataba de buscar a su hermana.
Como no deseaba dejarse llevar por la presión de ir a saludar formalmente se contuvo cuando el General McLean le dio un saludo desde lejos.
Frunciendo el ceño al no ver a su hermana, Aurora se congeló al ver a Urfin dirigiéndole la mirada.
Por cómo iba vestido de traje militar y solemne, estuvo claro que vino como un socio terranovense del Imperio Falion, pero ese enano dio un murmullo.
—Tu hermana se acaba de ir…
Aurora no era capaz de leer labios y era probable que su sistema tampoco, pero igualmente le dio ese aviso y ella se congeló por un momento.
No quiso pensarlo, pero… ¿Su hermana estaba molestando a Urfin otra vez?
¡¿Quién en su sano juicio le pedía platos de comida al Jefe de Seguridad Nacional de un país?! Incluso si ella era muy respetuosa tomando a Urfin como alguien prestigioso y de alto rango, era innegable que ese enano era importante.
¡Su hermana molestaba a ese individuo pidiéndole comida y haciendo que se la trajera!
Enojada por su descarada hermana que era capaz de no tener límites con la comida, Aurora se dio vuelta algo molesta y chocó a una figura.
"Lo siento." Dijo Aurora tomando la copa antes de que cayera al suelo y suspirando aliviada de que estuviera vacía, levantó su mirada y se congeló en su totalidad.
"No te preocupes fue mi culpa. No debí interponerme tan de repente." Dijo una joven de cabello rubio y sonriendo mientras sus ojos verdes brillaban, se presentó. "Amber Bradley."
La presentación y como daba la mano dejaba ver algo nerviosismo, pero Aurora estaba completamente congelada y devolvió la mano en saludo.
"Soy… Soy… Aurora… Campbell…"
Tarde se dio cuenta de que su mente no solo estaba haciendo cortocircuito, sino que sus nervios habían superado sus límites y ahora estaba tartamudeando demasiado.
—Respira hondo. Ella no puede saber quién eres y en cuanto a su capacidad, solo puede sentir emociones y sentir las intenciones, pero no leer la mente. Solo relájate y respira hondo.
Su sistema que estaba conectado con ella sabiendo que sus pensamientos superficiales estaban totalmente desordenados, la guio trayendo orden, logrando que Aurora se diera cuenta de que estuvo mirándola por demasiado tiempo.
Tal vez sus emociones tan desordenadas, mezclando timidez y nerviosismo causó que Amber se riera.
"Creo que te conozco." Dijo Amber luego de pensarlo un momento y cuando Aurora sintió que estaba en su límite, ella dio una sonrisa y dudó. "¿Eres la Protectora de Zerzura?"
"Si… ¿Cómo lo sabes?" Preguntó Aurora, ocultando su alivio y a la vez dejando ver su curiosidad tratando de ocultar sus emociones más profundas.
Mientras no se dejará llevar por su pasado y no mostrará más de lo que debía, era probable que Amber solo pudiera saber que trataba de ocultar algo, pero no que era.
Así que cambiar de tema fue su mejor opción.
"Ayer tomé un taxi para explorar la ciudad y la taxista me habló de ti. Cabello y ojos negro, bastante joven y admirable, la razón por la cual estaba viva." Narró Amber y con una sonrisa, murmuró. "Luego en el restaurante del hotel en el que me quede también fue lo mismo. Eres toda una heroína."
La expresión algo sonriente que Aurora daba tembló de forma muy evidente al escuchar 'heroína' y no fue porque pensó en su pasado, simplemente porque sintió que el elogio era demasiado.
No sentía lo que hacía podía entrar en la categoría de 'heroísmo' y más cuando había razones para querer ayudar, o al menos lo que ella consideraba razones egoístas.
Dudando sobre cómo responder, Aurora al ver que James con una mujer vestida de traje se acercaba para hablarle a Amber, ella cuando esa joven se giró, se alejó lo más rápido posible, escapando del lugar.
Cuando llegó al ascensor, en vez de tomarlo ni siquiera pudo esperar y sacando un artefacto de movimiento, llegó a la calle y al ver que Akira y Alice la esperaba, solo se quedó parpadeando, hasta que dio un largo suspiro.
"Creo que lo hice bien." Murmuró Aurora de forma honesta y viendo que Akira la miraba de forma confusa sin entenderla, solo fue a abrazarla y declaró. "Necesito recuperar fuerza y descansar."
Literalmente su mente había estado a mil, tratando de mantener su expresión, sus emociones e intenciones ocultas lo más posible para que Amber no se diera cuenta de lo que pensaba.
Que estuviera hablando directamente con ella, solo causó que se sintiera aún más agitada y si no fuera por su sistema, era probable que hubiera cometido varios errores que posiblemente la delatarían.
Al menos eso era lo que la asustaba y aunque sentía que esconderse estaba mal, no se creía capaz de enfrentar su pasado en este momento.
Y tal vez no lo fuera por algunos años.