El Día del Destino (Parte 1)

Jirni señaló a todos los miembros del círculo íntimo de la Corona que, al igual que Morn, habían firmado el Decreto Real pero que ahora se quejaban de las consecuencias de su propia decisión. Siguiendo esa lógica, deberían recibir la misma sentencia que los Reales, creando un vacío de poder que paralizaría la Corte durante meses, si no años.

—Además, solo gracias a mis padres logramos recuperar el cadáver del dios de la sanación antes de que fuera brutalizado. —dijo Peonia—. Ellos trajeron de vuelta el equipo de Manohar antes de que cayera en manos enemigas y encontraron entre ellos el hechizo de diagnóstico que él había ideado.

—Sin su rápido pensamiento, en lugar de huir como un cobarde, el Rey Muerto habría seguido fanfarroneando como un conquistador frente a todo el Reino y no tendríamos protección contra los Caminantes de piel de Thrud.