Una vez que Kain dejo todo preparado en el cuadro pintado, volvió a la ciudad de Orario. En las calles el ambiente se sentía diferente, más tenso y apesadumbrado. Habían pasado varios meses desde que las dos grandes familias habían sido removidas de la ciudad, pero la gente seguía guardando luto a los grandes héroes.
Por su parte, Kain salió de su casa y se dirigió a donde antes estaba la familia Zeus. Le contaron que todo había sido reducido a escombros, pero una cosa es que te digan y otra muy diferente verlo con tus propios ojos. Por otro lado, el sector en donde él vivía no había pasado mayor incidente, todo estaba tal cual lo recordaba. Pero a medida que se adentraba a la avenida principal, se podían ver rastros de lucha; casas con techos desmoronados, calles agrietadas y faroles cortados a la mitad. Incluso el mismo negocio en donde le compro el collar a Flora, había desaparecido. Ahora era un lugar abandonado, con vidrios en el suelo y las vigas del techo sobre los muebles. Parece que habían lanzado a un tipo bastante grande contra el edificio.
Kain cruzo la avenida con dirección a la zona Oeste de Orario, región de Dedalus. En ese lugar si se sentía la carga del combate, si las casas anteriores mostraban signos de lucha, las de este sector estaban derruidas; los muros hechos pedazos, las casas destrozadas y mucha gente herida.
Kain soltó un suspiro y comenzó a lanzar milagros de sanación a medida que iba avanzando. Pocos se percataron de su presencia, porque más preocupados estaban de la luz dorada que los envolvía y los sanaba. Por otro lado, a medida que avanzaba, Kain pudo notar que la gran mansión de la familia Zeus ya no era visible en la distancia. Ahora tenía una visión directa de la muralla Oeste de Orario. Todo parecía tan irreal, en el lugar que antes había una mansión que rivalizaba con la de la familia Hera, ahora no había nada.
Después de media hora, ya no se vio gente en las calles y los escombros de edificios llenaron el paisaje. En donde debería haber una gran portón negro, ahora solo habían dos columnas que señalaban la entrada. Después de los pilares se extendía un camino de tierra y a sus costados habían árboles y edificios destrozados. Escombros, toda la familia Zeus se había transformado en escombros. Ni hablar de los preciosos jardines, ni de las bodegas, ni de las casas de los sirvientes, todo quedó reducido a nada. Por otro lado, el camino antes adoquinado ahora se había vuelto uno de tierra, en donde quedaban cráteres por la colisión de dos poderosas fuerzas.
Kain avanzo por el camino y fue mirando el estado de los edificios derruidos. Después de diez minutos encontró una capilla que ocupaba Zeus para conversar con sus amigos en el cielo. Fue el único edificio en perfectas condiciones, incluso tenía bancas y un altar que lo más probable es que ya no sea utilizado nunca más. Kain cerró las puertas de la iglesia y espero que a lo mejor, algún día, cobije a alguien que lo necesite.
Después siguió caminando hasta llegar al centro de la anterior ciudadela; la mansión de la familia había sido demolida, ahora lo único que quedaba era una montaña de escombros.
Kain vio un pilar derribado y se sentó sobre él. Saco una botella de vino y en la soledad de ese día despejado, pero frio, rememoro a Rómulo y Maxim. Todos su esfuerzos fueron en vano, su familia, por lo que tanto lucharon, fue desecha en solo unos días. Si tan solo Zeus no hubiera sido tan idiota, al menos algo habría quedado de su legado.
-A sido un tiempo, maestro- dijo una voz joven y seria
Kain estaba empinándose la botella en ese momento y miró hacia la izquierda. Era el más joven de sus discípulos, el joven melancólico que cuando lo apartaban de su diosa, parecía caer en la tristeza. Kain apartó la botella, tragó el vino y sonrió.
-¿Cómo estas muchacho?- preguntó Kain. Al mismo tiempo, pensó en que no recuerda haberle dado de comer nada en especial cuando era niño para que creciera tanto. En estos momentos, su discípulo solo tenía quince años, pero casi era de su mismo porte. Por otro lado, tenía un cuerpo muscular y unas orejas similares a las de un oso.
-Bien- dijo Ottar dando una pequeña reverencia -yo- iba a continuar, pero Kain lo interrumpió levantando su mano izquierda para que se detuviera.
-No tienes nada que decir, siempre creciste con la mentalidad de seguir a Freya no importa lo que pase; no te puedo decir que está mal o está bien. Tu elegiste este destino, niño, debes abrazarlo con las cosas buenas y malas-
Ottar asintió y se quedó en silencio mientras veía a Kain sentado bebiendo.
-Me convertí en nivel 6- anuncio Ottar
Kain apartó la botella y lo miró con incredulidad. Después soltó una poderosa carcajada mientras se golpeaba el muslo con la palma. Al poco rato se detuvo, mostro una amplia sonrisa y palmoteo el pilar en el que estaba sentado e invitó a Ottar a sentarse.
Por su parte, Ottar, casi tan alto como Kain, mostró una pequeña sonrisa y se sentó a su lado.
Kain saco otra botella de vino y se la ofreció.
-Lady Freya- dijo Ottar, pero Kain levantó el índice y le indico que se callara.
-Déjala ser- dijo Kain -esto no es un vino cualquiera, ya lo veras, no te emborrachara, pero de igual manera te hará sentir complacido. En caso de que se enoje, dile a tu diosa que le daré un descuento cuando nos vaya a comprar armas-
-Usted no ha cambiado nada- agrego Ottar aceptando la botella con una sonrisa
Por otro lado, la sonrisa de Kain se volvió un poco más pequeña, pero trato de aguantarse la tristeza.
-Aparte de volverte nivel 6 ¿hiciste algo más?-
-Bueno, el próximo año me piensan ascender a capitán-
-Era natural- dijo Kain feliz -después de todo, ya puedes luchar contra tu nodriza ¿cierto?-
-Así es-
-Estoy orgulloso de ti, muchacho, haz llegado a un buen nivel en poco tiempo. Eres incluso más talentoso que tus hermanos. Solo sigue entrenando y recuerda tener un ojo puesto en los dioses-
-Lady Freya…-
-Hera tampoco quería que muriera Jason ni Odiseo, pero ya ves como termino todo-
Un largo silencio se instaló entre los dos, el cual solo fue interrumpido por el sonido del viento.
-Lo tendré presente- respondió Ottar con pesar
Kain se puso de pie y le acarició la cabeza como cuando era niño -estaré un par de años dando vueltas, si necesitas algo, avísame-. Entonces se dio la vuelta sin esperar respuesta y comenzó a caminar de vuelta, con dirección a su casa.
Ottar se puso de pie y le dijo entre lágrimas -gracias por todo, fue, fue excelente haber aprendido de usted-
Kain solo pudo sonreír y siguió caminando, sabia porque había venido este muchacho, pero al final, igual que cuando era niño, era malo con las palabras. Lo más probable es que se venía a disculpar por atacar a las dos familias, pero independientemente de que Hera sea mujer de Kain, este era un juego entre dioses. Ottar solo podía acatar los deseos de su amada diosa y esta a su vez, seguir los designios del gran espía.
-o-
Cuando Kain salió del anterior distrito de la familia Zeus, se encontró a Riveria apoyada en uno de los pilares que marcaba la entrada. De primeras estaba leyendo, con las luz del día iluminando su cabello esmeralda y su rostro usual que reflejaba aburrimiento. No obstante, una vez que escucho las pisadas de Kain, cerro el libro y lo metió en una bolsa que llevaba en la cintura. Después se volteó para mirar a Kain y este se acercó mostrando una pequeña sonrisa. Cuando llego frente a ella la abrazo y le plato un beso en los labios. No había problema, ya que no había nadie que los pudiera mirar en este lugar derruido. Los únicos testigos a su alrededor serían el cielo y las ruinas de la familia Zeus.
Una vez que se separaron, Kain la abrazo y le pregunto al oído -¿Por qué viniste?-
-Loki dijo que quería verte- dijo Riveria
-Pensé que querías ver mi hermoso rostro-
Riveria sonrió, se apartó de él y le tiro las mejillas -quieres dejar de ser un cerdo narcisista-
-Ok, ok- respondió Kain y retrocedió un paso, se acarició las mejillas y le pregunto -¿Qué tienes con los cerdos? Su carne es rica-
-No estoy bromeando, deja de ser tan narcisista-
Kain levantó la ceja y le pregunto -¿Qué pasa? No recuerdo haber hecho algo malo-
-No conoces la vergüenza- respondió Riveria y se dio la vuelta para caminar
Kain apuro su paso y se puso frente a ella -espera, espera ¿Por qué tan de mal humor? En serio, no recuerdo haber hecho algo que te molestara-
Riveria apretó sus puños con las ganas de golpearlo y lo miró a los ojos con reproche -para un hombre que desaparece por meses- dijo -eres bastante desconsiderado-
-Vamos- respondió Kain, acercándose paso a paso y acariciándole los hombros. Se acerco con la intensión de besarla pero Riveria volteo su rostro. Entonces Kain continuo -sabes que tenía mucho que hacer, no podía llegar y dejar a Flora y Aquiles a su suerte. También está mi hijo, él es pequeño. Vamos, se buena y déjame disculparme-
Riveria derramo un par de lágrimas y asintió -ya veremos- dijo con voz compungida.
A su vez, Kain entendió que era un buen momento y busco sus labios para besarla. Esta vez, no lo evitaron.
Después de eso, caminaron como siempre lo hacían, uno al lado del otro, pero sin tomarse de las manos. Salieron del distrito de la familia Zeus, cruzaron las calles de Dedalus y rápidamente llegaron a la avenida principal. Eran las cuatro de la tarde en ese momento y había un tráfico moderado.
-¿Qué quiere tu diosa?- pregunto Kain
-No te digo- respondió Riveria -de lo contario no vas a querer ir-
-Sabes que iría- respondió Kain soltando un suspiro -siempre que me lo pidas, iría-
-Te has vuelto bueno con los halagos-
Kain sonrió y le dijo -solo cuando me importa-
No obstante, parece que a Riveria no le hizo gracia su comentario, ya que le pego un codazo en las costillas. Después de eso, caminaron en silencio hasta la anterior mansión de la familia Hera. Todo seguía igual, pero todo el personal de seguridad había sido cambiado. No obstante, gracias Riveria pudieron atravesar el portón principal. Siguieron por el camino que atravesaba el bosque hasta llegar a la gran plaza que antecedía a la mansión. Al igual que antes, la plaza era un lugar concurrido, por donde transitaban los aventureros de la familia y el personal de aseo.
La gente se detuvo a ver a la persona que acompañaba a Riveria. Una vez que lo identificaron, se sorprendieron, ya que nadie se esperaba a un extraño, menos al anterior señor de la mansión. No es que Kain se lo creyera, pero Hera siempre fue muy quisquillosa con los títulos. Para efectos prácticos, Kain estaba solo por debajo de ella y los capitanes en la familia Hera. Volviendo a los aventureros de la familia Loki, varios le dieron miradas duras, pero como andaba con Riveria, no insistieron en sospechar.
-A tus aventureros les hace falta temer un poco más, a lo mejor de esa manera no serían tan descarados- dijo Kain
-No empieces- respondió Riveria -son pequeños nivel dos y nivel tres, ni siquiera deberías molestarte-
-Bien- dijo Kain soltando un suspiro -lo que tu digas, vicecapitán-
Riveria frunció el ceño, pero no lo puso en su lugar porque había gente alrededor, después le enseñaría una lección. Así que entraron a la mansión y subieron las escaleras hasta el último piso. Muchos muebles, floreros y cuadros se mantuvieron, pero por alguna razón, Kain sentía que era otro lugar, no tenía ese aire familiar.
Cuando llegaron a la que anteriormente era la habitación de Hera, Riveria golpeo la puerta un par de veces y desde el otro lado, una voz juguetona le contesto que entrara.
Primero entro Riveria y detrás de ella Kain. Avanzaron por la habitación hasta un juego de sillones individuales y se quedaron parados esperando que la caótica diosa los saludara. La pelirroja de esbelta contextura, les daba una mirada burlesca, sentada en un sillón, con la pierna izquierda sobre la derecha. A sus lados estaban un enano y pallum rubio, no muy diferentes en estatura.
Riveria dejo a Kain y se fue a colocar al lado del pallum y lo miró desde el frente. Kain no se preocupó y solo miró a Loki, la cual bebía vino de una copa.
-¡Yo!- dijo Loki de una manera amigable
-Yo- respondió Kain sin mucho ánimo -¿Qué quieres?-
-¿Qué pasa?- pregunto Loki -ahora soy una de las diosas principales de la ciudad ¿no quieres alagarme?-
Kain sonrió, se dio la vuelta y empezó a caminar a la salida. Riveria camino rápido y lo detuvo, lo miró a los ojos para que se quedara. Kain soltó un suspiro y se volteo para volver a donde estaba la molesta diosa. Riveria a su vez, lo empujo por detrás, forzándolo a caminar.
Una vez que Kain volvió a donde estaba Loki, le preguntó -¿Qué quieres?-
-Ara…- dijo Loki, iba a seguir bromeando a Kain, pero cuando este levanto su dedo y la apunto con oscuridad, se tapó la boca con ambas manos.
-¡Kain!- grito Riveria en un tono fuerte -ya para-
-Ella me está provocando- respondió Kain ofuscado, deshizo la magia y miró una vez más a Loki -¿Qué quieres? Si no eres sería, me iré-
Loki asintió vigorosamente sin sacarse las manos de la boca. Después se quito las manos de la boca y soltó un suspiro -hombre, casi me das un susto de muerte- dijo
-Eso te pasa por probar tu suerte-
-Bueno, lo tendré en mente. Ahora, yendo a los negocios, quiero que entrenes a mis muchachos-
Kain quedo confundido, miró hacia todos lados, pero no encontró a nadie adecuado.
-Él y él- dijo Loki señalando con el dedo al enano y al pallum.
Kain alzo la ceja y le dijo -no tienen talento, no me hagas perder mi tiempo-
-Espera, Kain- dijo Riveria a su lado -al menos, dale una oportunidad-
-No es eso- dijo Kain -están muy viejos para creer que mejoraran. Dime ¿Qué edad tienen y en qué nivel están?-
-Treinta y cuarenta años- respondió Riveria -ambos nivel cinco-
Kain se pasó las manos por la cara y negó con la cabeza -están muy viejos- dijo -además de que ya tienen sus propios sistemas de combate y traen un montón de mañas consigo. No les puedo enseñar. Sería como destruir esta mansión y removerla de sus cimientos, para después volverla a construir ¿Cuántos años crees que tomaría?-
-Señor- dijo el pallum con una voz decidida -¿Lo dice por mi apariencia?-
Kain negó y le dijo -para que lo entiendas, Jason llego a nivel cinco teniendo menos de veinte años-
Todos soltaron un suspiro y negaron con la cabeza. Si los comparabas, era claro saber quién tenía talento y quien no. Sin embargo, ahí no termino todo.
-No solo es por el talento, también porque igual que un tic nervioso, corregir un sistema de combate es toda una proeza. Tienes que quitar los miedos y reprogramar la mente con un largo entrenamiento. Y cuando me refiero a largo, hablo de veinte o treinta años. Si piensas en Jason y los demás, yo les enseñe desde niños. Prácticamente aprendieron a luchar conmigo, así que no, no les puedo enseñar. Ahora, si estas confundido, piensa en lo siguiente ¿estás dispuesto a dejar todo lo que has logrado y comenzar desde cero?-
El pallum y el enano negaron casi al mismo tiempo, incluso Riveria negó con seriedad.
-Bueno, no hay nada que hacerle- dijo Loki y asintió como si hubiera encontrado un punto del que agarrarse. A lo mejor no tendría ningún talento que valiera la pena entrenar en estos momentos, pero el futuro está lleno de posibilidades.
-Cuando te veo sonriendo así, me dan ganas de golpearte- respondió Kain. Por alguna razón, se sintió molesto.
Loki se rio y le dijo de manera amistosa -es tu imaginación Kain. Por otro lado ¿no quieres hacer tu camino a mi cama? ahora soy una diosa importante ¿sabes?. Deberías alagarme-
Kain negó mientras sentía que alguien lo aguijoneaba por detrás. Supuso que lo más probable es que Riveria le estuviera dando una mirada acusatoria.
-¿Eso es todo?- pregunto Kain
-Sí, te puedes retirar- respondió Loki
Kain asintió mientras sentía que la vena del cuello le palpitaba. Entonces se dio media vuelta y camino a la puerta. Riveria a su vez, hizo una reverencia y lo siguió sin esperar la autorización de Loki.
Por su parte, Loki soltó un gran suspiro y se desparramo sobre el sillón -maldición, eso fue lo más aterrador que he sentido en toda mi vida- dijo
-Lady Loki- dijo el pallum
-¿Qué es Finn? No ves que me estoy relajando, casi me da un ataque-
-¿Fue tan peligrosa esa magia que mostro? No hicimos nada como usted nos pidió, pero sentí la urgencia de ir y atacarlo con todas mis fuerzas-
-Fue peligroso, muy peligroso, incluso para mí-
-Loki- dijo el enano
-¿Qué es ahora, Gareth?-
-¿Vale la pena preguntarle a ese elfo? a mí no me da una impresión tan fuerte-
Loki solo pudo sonreír ante tales preguntas "la ignorancia era una especie de felicidad" se dijo.
-o-
Cuando Kain y Riveria salieron de la mansión, destacaban por varios aspectos, pero el más fundamental es que iban tomados de la mano. Hasta el mismo Kain lo encontró extraño, por lo usual, Riveria no era demasiado afectiva en público. Sin embargo, nunca dijo nada ya que le gustaba esta sensación. Las manos de Riveria, independientemente que le guste vestir ropa de hombre, eran unas manos suaves y delicadas, inesperadamente femeninas. Comparada con las manos de Kain, eran bastante pequeñas y blandas, el mismo Kain se sorprendió. Sin embargo, por su cara de tonto destaco demasiado al punto de que todos lo quedaban mirando. Así que a mitad de camino, Riveria soltó su mano y camino a metro de él. Kain soltó una risita en ese momento y se acarició la cabeza avergonzado.
Después extendió de nuevo su mano para que ella la tomara y Riveria asintió mientras soltaba un suspiro. Nunca pensó que este hombre fuera tan tonto solo porque se toman de la mano. No era una mala sensación, pensó, pero no le gustaba destacar, mucho menos de mala manera.
Una vez que salieron de la mansión, se dirigieron al mercado de Orario y pasearon comprando varias cosas para comer. Después siguieron avanzando por la avenida principal, y doblaron en una esquina, para ir en dirección a la casa. Kain iba feliz, de la mano de Riveria y silbando una cancioncita. El día seguía despejado, un poco frio, pero proclamando que pronto sería primavera.
-¿Por qué nos tomamos de la mano?- pregunto Kain de buen humor
Riveria se sonrojo y le dijo en voz baja -no es nada en especial, somos una pareja hace años, así que no le veo problema-
-Oh, es cierto, llevamos muchos años conociéndonos, pero ahora, de repente la mujer reservada es muy cariñosa. Quizá qué tipo de trampa de miel es esta-
Kain se detuvo y le dio una sonrisa burlesca. Riveria reacciono sonrojándose aún más, pero cuando vio a Kain con las intenciones de robarle un beso, se molestó y pego un puñetazo en el estómago.
-Puedo ser una mujer flexible- dijo Rivera -pero no te pases, ya sabes que opino de hacer estas cosas en publico-
Kain soltó una risita y se sobo el estómago, después siguió caminando de lo más feliz, hasta que de repente, le soltaron una bomba.
-Le pedí a Loki un permiso de dos años de la familia- dijo Riveria
Kain se detuvo en ese mismo momento y levanto la ceja en un gesto de confusión -¿Por qué habrías de hacer eso?- pregunto
-Bueno- dijo Riveria avergonzada, su voz se hizo más pequeña a medida que pronuncio cada palabra -tú sabes, yo, bueno, y tú, tu entiendes-, levanto su rostro y lo miró a los ojos como cuando se separaron aquella vez, antes de volver a Orario. Había el mismo anhelo en su mirada.
Kain puso una suave sonrisa e independientemente de lo que dijo Riveria, le robo un beso y entendió el significado detrás de sus palabras. Después se abrazaron y se quedaron parados en mitad de la vereda mientras un montón de gente los miraba.
-A pesar de que siempre te digo que no hagas esto- se quejó Riveria -siempre lo haces ¿te gusta que la gente nos mire?-
Kain solo soltó una risita y la llevo de la mano. Fueron todo el camino así hasta que llegaron a la casa. Kain abrió la reja y dejo entrar primero a Riveria y después pasó él, para luego cerrar la reja. Después subieron los escalones hasta llegar frente a la puerta de madera, Kain busco las llaves y una vez que la introdujo en la cerradura, le dijo -Elrond es un buen nombre-
Riveria asintió y sonrió complacida.