Capitulo 148: Tayuya y Kin (+18) 3/4

Fue de noche cuando Kurama y Tsunade volvieron a la Mansión Uzumaki, y para sorpresa de nadie, la rubia parecía no querer separarse del pelirrojo.

"Supongo que está pasando por la Fase de Luna de Miel" - dijo Kushina mientras fruncía el ceño - "Pero hay algo que ella tiene que comprender... ¡y eso es que nadie puede superar a Uzumaki Kushina cuando se trata de ponerse melosa con Kuro-chan!"

"Supongo que tendremos que pedir algo para cenar..." - murmuró Mikoto mientras negaba con la cabeza.

"Y desayunar, almorzar, cenar de nuevo..." - agregó Anko mientras se encogía de hombros - "Probablemente por una semana"

Kin por su parte, estaba mirando con celos como los Tres descendientes Uzumaki se retiraban del Living.

"¡Pss!" - Kin se sorprendió al ver como Tayuya parecía estar llamándola - "¿Qué sucede, Tayuya?"

"Tengo un plan que podría solucionar nuestras molestias" - dijo la chica de cabello rosado mientras miraba a la chica de cabello negro - "Con esto nos sacaremos los constantes recordatorios de Guren"

". . ." - Kin solo le dio una mirada a su amiga como si de una idiota se tratase - "Ok... habla"

"No me des esa mirada" - bufó Tayuya con desdén mientras sacaba un frasco - "El plan es simple... solo tenemos que usar esto"

"¿Cloroformo?" - preguntó Kin con neutralidad.

"Si no está roto, no lo arregles" - respondió Tayuya mientras se encogía de hombros - "Sin contar que esta es una última versión. Estoy sorprendida de ver como avanza la tecnología en secuestros... aunque no debería de ser mucha sorpresa viendo el como sus productos se van tan rápido de las tiendas"

"Eso es porque Aneki compra al por mayor" - respondió Kin con apatía.

"Detalles..." - sonrió Tayuya - "¿Y bien?"

"Siento que nos meteremos en problemas con esto..." - suspiro la ex-Otonin - "Pero estoy dentro... incluso es posible que Aneki quiera unírsenos"

"Ya se lo pregunté pero me dijo que era mejor que lo hiciéramos solas" - bufó la chica de cabello rosado - "En fin, iniciaremos la operación cuando el termine con esas dos"

"Supongo que empezaremos en una semana" - suspiró Kin mientras asentía - "Al menos Kimimaro está estable y no necesita de la ayuda de Tsunade-sama"

* * * * *

Una semana después, Kurama estaba caminando por las calles de Konoha para tomar un respiro. Él no lo negaría, había disfrutado teniendo sexo por una semana pero al mismo tiempo estaba agotado, no física, sino mentalmente.

"¡Hola, pedazo de mierda!" - exclamó Tayuya con una gran sonrisa.

"¿Tayuya?" - preguntó Kurama mientras fruncía el ceño, solo para empezar a sentir como todo parecía estar poniéndose borroso - "Por un demonio..."

"Esta cosa es más efectiva de lo que Aneki dijo..." - dijo Kin mientras veía como Kurama estaba inconsciente.

"Más cargar, menos palabras" - bufó Tayuya mientras tomaba al pelirrojo de los brazos - "Mejor nos apuramos antes de que despierte"

"Esto está mal..." - suspiró Kin mientras lo tomaba de las piernas.

"Somos, o mejor dicho éramos de Oto... ¿qué esperabas?" - bufó la chica de cabello rosado - "¿Qué lo conversáramos educadamente junto a una tasa de té?"

"Hmm... tienes un punto" - asintió Kin mientras las dos chicas cargaban a Kurama hacia su objetivo.

* * * * *

"Hmm~" - los ojos de Kurama empezaron a temblar mientras los abría lentamente, solo para ver como Tayuya estaba moviéndose encima suyo completamente desnuda - ". . ."

"¿Oh?¡Mira quien despertó, Kin!" - dijo la chica de cabello rosa mientras seguía moviendo sus caderas.

La ceja de Kurama empezó a temblar cuando comprendió que era lo que estaba pasando. Él podía sentir como su ira estaba creciendo constantemente.

"Tayuya... creo que sobrepasaste cierto límite" - dijo Kin mientras negaba con la cabeza. Él había visto muy pocas veces en las que Kurama había perdido la paciencia y para desgracia de su amiga, esta era una de ellas.

"¿Se podría saber que mierda estas haciendo, Tayuya?" - preguntó Kurama con frialdad.

"¿No vez lo que estoy haciendo, dildo con patas?" - preguntó Tayuya con orgullo, solo para sentir como el aura de Kurama se volvía fría nuevamente.

Kin retrocedió unos pasos pero se congeló cuando sintió la mirada fría del pelirrojo - "Oh-ho"

"Tranquila, Kin... las cadenas que lo tienen atrapado son ultra resistentes, Aneki nos garantizó que no las podría romper..." - dijo Tayuya pero su expresión cambió escuchó el sonido de las cadenas rompiéndose - ". . ."

"¿Unas últimas palabras?" - preguntó Kurama mientras sus ojos empezaban a brillar con maldad y una sonrisa sádica aparecía en su rostro - "Si no tienes nada que decir, entonces supongo que voy a cumplir tu sueño... aunque no será como el cuento de hadas que pensabas... no... esto no va a ser bonito..."

"!" - las dos chicas temblaron mientras la risa lunática de Kurama resonó en la habitación.

* * * * *

"¡Piedad!" - gritó Tayuya mientras las lágrimas corrían por sus mejillas, aunque lejos de mostrar una expresión de dolor, ella tenía una de éxtasis en su rostro. En estos momentos ella estaba amarrada de los brazos y piernas formando una cruz.

"¡AH!" - por su parte, Kin estaba siendo penetrada de la manera más salvaje y dolorosa posible. Sus lágrimas corrían mientras una mezcla de dolor y placer la invadía con cada estocada que el pelirrojo le daba.

"¿No querías esto?" - preguntó Kurama con maldad mientras su pene llegaba cada vez más profundo.

"¡No tan duro~!" - gritó Kin mientras se mordía el labio porque esta no era la experiencia que buscaba. Kurama la había penetrado sin siquiera lubricarla antes, así que el dolor constante era algo obvio.

Kurama no le hizo caso, él solo escuchó como los gemidos de dolor, cambiaban a unos de placer mientras la expresión de Kin parecía derretirse.

Él no había tenido este tipo de sexo desde... no, él no quería recordar ese momento.

"¡Ah!" - los gemidos de Kin estaban resonando en el lugar mientras Tayuya parecía estar moviendo su cadera como si estuviera rogando porque la tomara - "¡Por favor!"

Kurama decidió ignorar a la chica pero luego de unos segundos pensó en otra cosa. Si ella deseaba atención, entonces le daría atención. Con un movimiento rápido, él invocó a un Clon y le pasó unos cuantos objetos que tenía dentro de su sello.

"¿Eh?" - Tayuya abrió los ojos en miedo al ver como el clon de Kurama se acercaba con dos grandes y gruesos pepinos - "¡Espera!"

"Lo siento, Tayuya... hiciste enojar al Jefe demasiado" - dijo el clon mientras sacudía la cabeza porque era primera vez que su original hacía algo relacionado al sexo con ellos de por medio.

"¡No quería este tipo de atención!" - exclamó Tayuya con terror porque sintió como el clon introducía uno de los enormes pepinos en su culo - "¡AH!¡NO AHÍ!"

"Lo siento..." - murmuró el Clon nuevamente mientras amordazaba a la chica.

"¡HMPH!¡HMPH!" - Tayuya solo pudo llorar al sentir como algo tan grande se metía en su culo. Ella podía sentir como su culo parecía estar partiéndose por la mitad - "¡HMPH!"

"¡Perdónanos, Kurama-saaaaaaaaan!" - gimió Kin mientras caía al suelo inconsciente.

". . ." - Kurama rápidamente la tomó y la acomodó en una de las camas mientras caminaba hacia donde estaba la llorosa chica de cabello rosado - "¿Sabes? Normalmente no me enfurezco por ser noqueado por el cloroformo y llevado a una habitación, incluso lo encuentro hilarante porque no tiene ni un puto sentido que suceda... pero esta vez tú hiciste algo que cruzó cierta línea..."

". . ." - Tayuya lo miró a los ojos con miedo mientras sentía como su cuerpo se calentaba porque el pelirrojo estaba moviendo su mano constantemente.

"¿Sabes, Tayuya? Hay algo que realmente odio en este mundo... y son los violadores..." - dijo Kurama mientras tomaba a la chica de las mejillas - "Odia la existencia de unos bastardos que se fuerzan sobre los débiles, como esos hijos de puta disfrutan escuchando los gritos de sus víctimas... pero el motivo más grande es porque Nai-chan casi pasa por algo similar... es por eso que decidí que les pagaría a esos bastardos con la misma moneda..."

"¡HMPH!" - Tayuya gritó en dolor y éxtasis cuando sintió como el pelirrojo la penetraba sin piedad mientras sentía como el pepino entraba y salía de su culo.

El clon había desaparecido y ahora solo quedaban los dos y una inconsciente Kin.

"Tengo un grupo de hombres que tienen un gusto... peculiar por romper a bastardos como esos" - continuó el pelirrojo mientras miraba con frialdad a la chica de cabello rosado - "Las mujeres... digamos que hay otro grupo especializado que se encarga de 'entrenar' a esas perras violadoras... ellas son un grupo de víctimas de violación que están más que contentas en 'ayudar a la sociedad'"

"Pero tú... tú eres diferente Tayuya" - dijo Kurama con una gran y 'feliz' sonrisa - "Tú eres una invitada del clan Uzumaki y como tal, nosotros tenemos que hacernos responsables de tus acciones... es por eso que voy a enseñarte a no hacer este tipo de cosas nunca más..."

"¡Hmph!¡HMPH~!" - Tayuya solo podía llorar mientras una expresión de éxtasis aparecía en su rostro.

* * * * *

"Creo que me pasé..." - dijo Kurama mientras comprendía que había dejado que su su furia tomara lo mejor de él.

"¡¿Qué fue lo que le pasó?!" - exclamó Anko con sorpresa al ver como Tayuya estaba en cuatro patas con la lengua a fuera y repitiendo 'Prometo no hacerlo más, Goshujinsama~'

"¿Hiciste eso, de nuevo?" - preguntó Kushina mientras miraba a su esposo, quien solo asintió en respuesta - "Ok... yo lo arreglo..."

Dicho eso, Kushina tomo a Tayuya y la llevó a su habitación para poder iniciar el tratamiento.