"El Concierto del Caos"

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Más de diez piedras de poder me obligan a trabajar. Uff. Y yo que quería descansar, jajaja.

Aquí les dejo el nuevo capítulo. Espero lo disfruten y, si es así, ya saben: piedritas...

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Bueno, entonces debería ponerme un poco serio. Aunque dije que podía contra los diez mejores, se nota la diferencia con los anteriores.

"¿Estás listo, muchacho?" preguntó Moody a Stephen.

"Estoy bien, ojo loco, a tu señal."

"¡Comiencen!"

Con el grito de Moody, los diez aurores empezaron a tomar posiciones tácticas lentamente, mientras mantenían su guardia muy alta. Rodearon a Stephen mostrando su profesionalismo.

"(Entonces, ¿debería usar todo de golpe o descontrolarlos un poco?)" se dijo internamente Stephen mientras los veía posicionarse.

"¡Jefe, demuéstrales quién manda!"

"¡Vamos, jefe, derrótalos fácilmente!"

"Suerte, Stephen."

Escuchando los gritos de apoyo de sus amigos, con una sonrisa, Stephen eligió darles un buen espectáculo.

"(Entonces, preparemos el escenario)" dijo mientras sacaba su varita y, con la otra mano, creaba un violín de luz.

Todos lo miraron sorprendidos, sin saber qué planeaba con un instrumento. Mientras Fleur se tomaba la cabeza con cansancio, dándose cuenta de que no se lo tomaría en serio para nada.

Justo cuando los aurores estaban por comenzar el ataque, enfadados por intentar jugar con ellos, Stephen movió su mano y el campo de batalla empezó a moverse. Moviendo a los aurores que estaban a su espalda hacia el frente, y el centro donde estaba parado se levantaba como un escenario circular. Dejando a todos los aurores sorprendidos.

"Esa magia es la que usó para asustar al tío Vernon," dijo Harry suavemente, recordando cuando Stephen conoció a su tío para asustarlo.

"¿Qué? ¿Ese idiota usó magia en el mundo Muggle?" preguntó Fleur, un poco enojada por tal osadía.

"Wow, parece como si fuera su territorio."

"Genial, jefe."

Los gemelos seguían tan despreocupados como siempre, sin darse cuenta de la cara de Moody. Por el control que mostraba sobre el territorio Stephen. Ya que estaban en el Ministerio, un lugar lleno de barreras contra muchos hechizos que se erigen hace cientos de años. Y Stephen estaba al frente de él, mostrando algún tipo de transmutación en todo un campo dentro del Ministerio como le placía.

"Parece que este niño tiene bastantes secretos. Espero que no sea para mal," dijo suavemente Moody, sin que nadie se diera cuenta del cambio en su mirada, más seria, mirando al joven.

Algunos de los aurores también se dieron cuenta de lo que significaba esto, incluyendo a los diez frente a Stephen, que ahora estaban mucho más en guardia ante cualquier movimiento que hiciera Stephen.

"Espero disfruten mi concierto," dijo Stephen con una sonrisa, sin importarle la mirada de desconfianza de todos.

"Ting-sss♫ ♩ ♪ ♩" usando el violín de luz creado con magia y su varita como si fuera un arco, empezó a sonar una melodía muy bien compuesta. Rápida y mientras tocaba la canción, todos veían cómo volaban notas musicales alrededor de Stephen.

[Imaginen que sonaba Danse Macabre Op. 40]

Dejando a los aurores sin saber qué hacer hasta que una de esas notas salió volando disparada hacia uno de ellos, que esquivó rápidamente, lanzándose hacia un lado y viendo la marca de corte que dejó detrás de él.

Entonces todos se dieron cuenta de que la batalla había comenzado con el recital, así que todos empezaron a atacar a Stephen para que detuviera las múltiples notas que seguían formándose y cubriendo el techo.

♫ ♩ ♪ ♩

"Hay que admitir que el jefe es demasiado genial," dijo Fred con admiración.

"Ugh, esas notas se ven bastante filosas."

"Esa canción es un poco rara para este momento," dijo Harry, mirando a Stephen, quien seguía tocando y a la vez esquivando, moviéndose a los lados.

Incluso cuando muchos ataques se dirigían a la vez, las notas musicales formaban un escudo que lo protegía.

"Ese idiota nunca se toma nada en serio. Aah, sí que la magia es muy bonita," dijo Fleur, un poco embelesada por la magia mostrada por Stephen y algo sorprendida por qué nunca supo que Stephen sabía tocar el violín de esa manera.

♫ ♩ ♪ ♩

"¡Jajaja, vamos muchachos, ataquen con más fuerza, si no será aburrido!" dijo Stephen mientras sonreía con una expresión de diversión un poco oscura, mientras tocaba una canción que asentaba su locura por la diversión.

♫ ♩ ♪ ♩

"El jefe parece el villano, ¿verdad?"

"Peleando contra los aurores con una sonrisa mientras todo a su alrededor es destruido por su magia, sí lo creo," dijeron los gemelos, incluso parecían querer divertirse como Stephen, aunque Fleur los detuvo.

Aunque Stephen parecía disfrutarlo, poco a poco algunos hechizos lo rozaron, rompiendo parte de su ropa y dejando marcas en su piel.

"Bueno, después de todo estoy jugando contra diez aurores de élite. Es obvio que no sería fácil," dijo suavemente Stephen mientras esquivaba más de diez hechizos simultáneos.

"¡Apunten a sus flancos! ¡Busquen puntos débiles!" gritó el auror que actuaba como el capitán. Se llamaba John; muchos dicen que cuando Moody al fin se retire y Kingsley Shacklebolt tome su puesto, John iba a quedarse en el lugar de Kingsley, así que era uno de los aurores más respetados, no menos que los dos antes nombrados.

"Ugh, parece que va a ser difícil el concierto. Bueno, no importa, otro día lo intentaré con algunos tontos más débiles. Parece que es mejor ponerse serio," dijo Stephen mientras paraba abruptamente su concierto y miraba a su alrededor, moviendo la mano y cambiando nuevamente el escenario.

Esto hizo que los aurores pararan su avalancha de ataques, pero no bajaran la guardia.

Stephen nuevamente envió a los aurores al frente, ya que algunos se habían escabullido a su espalda. Desapareció el violín y fue reemplazado por dos espadas.

"¡Cuidado, parece que el mocoso por fin se pondrá serio!" dijo John, dándose cuenta de que Stephen enviaba un aura más aplastante y, en vez de su sonrisa burlona, ahora los miraba más tácticamente, pareciendo buscar puntos débiles.

"Ahora, como maestro de los muchachos, debería mostrar un poco más el arte de la espada, ¿verdad?" dijo Stephen mientras se ponía en posición de carrera y empezaba a correr hacia los aurores.

Que al ver esto, empezaron otra vez su ataque sincronizado, mostrando un alto nivel de compañerismo.

"Siempre quise hacer esto," dijo Stephen con una sonrisa mientras seguía corriendo y, con sus dos espadas de luz, empezaba a cortar todos los ataques mágicos que iban hacia él y esquivando los que no podía cortar, mostrando un alto nivel de destreza, incluso mayor que Fred, que solo podía cortar un par.

"¡Qué demonios!" gritó John mientras veía que Stephen se acercaba rápidamente frente a los aurores sin recibir ni siquiera un golpe, y noqueando fácilmente a dos de sus compañeros.

"¡Cambio, estrategia de defensa!" gritó rápidamente John y, con su comando, cambiaron posiciones mientras invocaban escudos frente a ellos y los de atrás empezaban a lanzar hechizos de repulsión hacia Stephen. Ya se vieron fuego, incluso algunos tiraron bombas de gas que tenían en su cinturón.

Esto obligó a Stephen a retirarse un poco más lejos, dándole espacio para respirar a los aurores.

"Uff, esto no es tan fácil como parece. Después de todo, se enfrentan a magos peligrosos todo el tiempo," dijo Stephen mientras observaba el cambio de posiciones y cómo no dejaban un hueco por donde entrar, mientras se preparaban para lanzar otro ataque a distancia.

"Si no me puedo acercar, entonces vamos a hacerlo desde lejos… ¡Oigan, tengan cuidado!" gritó Stephen mientras hacía desaparecer sus espadas y sacaba nuevamente su varita.

"Nunca vi al jefe Stephen usar su varita. ¿Qué significa eso?" preguntó Harry a sus compañeros.

"No, la acaba de usar mientras tocaba el violín."

"Sí, pero eso cuenta como usarla, ya que la usó como arco."

"Técnicamente la usó. Aunque ¿por qué no creó una y ya?" Los gemelos empezaron a hablar de cualquier tema mientras Harry buscaba respuesta en Fleur, ya que los gemelos no iban a servir.

"Bueno, Harry, algunos hechizos se pueden mezclar con magia de Eldritch volviéndolo más flexible, sobre todo en peleas de larga distancia. Observa bien," dijo Fleur mientras miraba hacia la posición de Stephen.

Stephen, parado en el centro, rápidamente invocó las mismas espadas que Fleur, pero más pequeñas. Estas levitaban a su alrededor, aunque se distinguían de las de Fleur,además de ser más pequeñas, brillaban de un color más rojizo. Con el movimiento de su varita, todas se dirigieron hacia el escuadrón de aurores.

"¡Protejan el frente y detengan las espadas!" gritó rápidamente John mientras veía llegar el ataque. El cual esquivaron o fueron interceptados rápidamente, aunque estas no desaparecieron como las de Fleur, sino que quedaron incrustadas por todo el campo.

"¡Gladius!" gritó Stephen mientras apuntaba a las espadas tiradas en el suelo y estas, como si fueran cadenas conectadas, estallaron congelando rápidamente todo a su alrededor.

"¡¿Qué?! ¿Cómo es posible?" gritó John luego de esquivar por los pelos las explosiones de hielo, aunque algunos de sus compañeros no reaccionaron a la misma velocidad, dejándolos heridos.

"¿Cómo hizo eso?" preguntó rápidamente Harry a Fleur.

"Te dije, algunos hechizos se pueden mezclar y, como técnicamente la magia de Eldritch siempre está conectada al conjurador, sirven como medios para causar otros hechizos ya que combinan bastante bien al ser del mismo mago," respondió Fleur con una sonrisa.

Moody, que escuchó eso ya que estaba cerca, se puso aún más serio, dándose cuenta de lo que implicaba. Ya que si los magos oscuros aprendían tales tipos de manera de usar la magia, podrían ocasionar más destrucción.

"Este niño creó una magia bastante complicada de combatir. Espero que se prepare para sudar sangre entrenando a los que deben contrarrestarla," dijo suavemente sin que nadie lo escuchara.

Mientras tanto, en el centro del campo, Stephen dio tiempo de respirar a los aurores mientras sacaba del camino a los que ya no podían pelear para que no resultaran heridos con un movimiento de sus manos.

"Ese chico parece controlar todo a unos 20 metros de su alrededor. Eso muestra que aún no está usando toda su fuerza. Si no, con ese tipo de magia ya podría haber derrotado a todos," dijo Moody con una expresión de preocupación.

"Uff, estoy usando demasiada magia. Si sigo así, no voy a aguantar hasta el final. Voy a tener que terminar rápido," dijo Stephen, dándose cuenta de que su nivel de magia estaba bajo. Ya que ahora no tenía la súper batería de los dioses de Vishanti y el consumo de maná venía de su cuerpo aún incompletamente maduro. Y es que se sabe que los magos obtienen más maná a medida que crecen. Aunque Stephen tenía tal vez el mismo nivel que muchos aurores siendo tan joven, todavía le faltaba, sobre todo si lo compara con Dumbledore, que aunque está viejo y tal vez ha perdido mucha destreza, su poder mágico es tan alto que no importa. O tal vez su abuelo, que ya ni siquiera puede moverse, pero con un hechizo no tendría contrincante. Sin embargo, su movilidad es el problema, ya que es como un cañón de tanque sin defensa alguna.

"Bien, voy a usar lo último que queda para hacerlo espectacular," dijo mientras su ropa se transformaba en su capa de levitación, la cual estuvo oculta todo este tiempo.

Todos los aurores observaron cómo su ropa cambiaba y empezaba a volar.

"¡Maldición, puede volar!"

"¿Qué tipo de magia es esa?"

"Tontos, no se distraigan. Es obvio que es esa capa, ya que empezó a volar cuando cambió de ropa," dijo rápidamente John, tranquilizando a sus compañeros.

"Wow, eres bueno, rápido y eficiente, un perfecto detective. Espero que estén preparados," dijo Stephen mientras, con sus manos, empezaba a crear sellos mágicos y luego se dividía en otros cinco Stephens.

"Ugh, esto consume mucho," dijo suavemente mientras sentía la drenada mágica.

A lo cual los otros Stephens rodearon a los aurores que intentaron defenderse. Pero era difícil solo contra uno, y peor ahora con cinco que además podían volar. Por lo cual fueron atrapados rápidamente con cadenas y aros que sellaron sus poderes, cayendo al piso.

"Parece que gané," dijo Stephen con una sonrisa mirando a los vencidos aurores tirados con cara negra y desilusión.

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