Lo que en verdad importa

NOTA 1: Todos los derechos de la serie Neón Génesis Evangelion pertenecen a Gainax/Khara, o a aquellos quienes les sucedan legalmente en el futuro. Esta historia fue escrita sin fines de lucro, solo como medio de esparcimiento. No me demanden.

NOTA 2: El presente fic es un "What if…?" basado en una parte del capítulo 1 del fanfic "La Desconocida" de mi amigo Fantastic_Man, el cual dio su plena autorización para utilizar dicho fragmento de su historia y llevar adelante esta idea.

NOTA 3: No es necesario leer el capítulo 1 del fanfic "La Desconocida" para comprender esta historia, ya que se desarrolla en un rumbo totalmente distinto y desconectado de la historia que le da origen.

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— ¡¿¿ES QUE TODOS USTEDES SE HAN VUELTO LOCOS??! — estalló con un potente grito la pelirroja, segundos después de que Misato le informara los detalles de la importante operación que la tendría como principal protagonista.

— Aquí nadie se ha vuelto loco, Asuka — sentención Misato, mirando con desaprobación a la pelirroja por su actitud desafiante e irrespetuosa — Por primera vez hemos descubierto un Ángel en etapa embrionaria. Si logramos extraerlo de la zona donde se encuentra resguardado y luego contenerlo adecuadamente, entonces estaríamos en condiciones de estudiar a esa criatura y aprender de ella.

— Lo que dice Misato es algo de la mayor relevancia — señaló Ritsuko tomando la palabra, mientras señalaba la fotografía del Ángel que estaba en el monitor que abarcaba gran parte del piso de la oscura habitación — Hasta la fecha nunca hemos tenido la oportunidad de estudiar a una de estas criaturas en un ambiente controlado. Esto no solo nos permitiría comprender de mejor forma su organismo, sus funciones vitales, neuronales y demás. El estudio de la criatura nos permitiría descubrir cuáles son sus debilidades. Con dicho conocimiento tendríamos una gran ventaja a nuestro favor, por lo que las batallas por venir podrían ser más fáciles de enfrentar; y por qué no decirlo, hasta cierto punto, más seguras para ustedes. 

Asuka no pudo dejar de dar un leve respingo ante las palabras de la científica, mientras le daba un vistazo al Ángel en forma de embrión, que mostraba el gran monitor ubicado en el piso de la habitación. Pero por mucha razón que tuvieran los dichos de la científica, eso no quitaba el hecho que la estaban mandando en una maldita misión Kamikaze.

— Aun así, no importan las palabras lindas con que lo adornen; ni loca voy a saltar a la boca de un volcán para sumergirme en un baño de roca fundida. No tengo complejo de pollo al horno para salir asada de esa caldera — estalló una vez más la pelirroja.

—¡¡ASUKA!! — gritó Misato, llamando la atención de la huraña pelirroja, la cual respondió simplemente cruzándose de brazos, para luego girar la cabeza a un lado en forma altanera.

Ritsuko dio un cansado suspiro de resignación por la actitud de la chica mientras negaba con la cabeza. Junto a ella, Maya esbozó una pequeña sonrisa nerviosa, mientras apretaba contra su pecho el Tablet con los datos de la operación, deseando estar en cualquier otro lugar en ese momento.

Por su parte, frente a las tres mujeres y junto a la huraña pelirroja, Shinji y Rei contemplaban en silencio todo el intercambio; Rei simplemente escuchando y Shinji haciendo todo lo posible por pasar desapercibido, sabiendo que en cualquier momento la artillería de la pelirroja podía apuntar hacia él. 

Finalmente una cabreada Misato, que contaba mentalmente hasta diez, en un esfuerzo casi sobrehumano por contener las ganas de enviar a la pelirroja de regreso a Alemania de una patada en el trasero, le dedicó una seria mirada a la Segunda Elegida antes de tomar la palabra otra vez.

— Asuka, te voy a dejar una cosa en claro. En esta reunión solo te estamos informando los detalles de la operación. No te estamos pidiendo autorización para llevarla a cabo. Yo soy la Directora de Operaciones de NERV, soy la que da las órdenes aquí y te estoy ordenando que realices esta operación, te guste o no.

Asuka dio un nuevo respingo ante las duras palabras de la mujer mayor y la miró con ojos estrechos al ser consciente de la veracidad de los dichos de Misato. Ella era la Directora de Operaciones de NERV, era ella la que tomaba las decisiones y dictaba las órdenes; y Misato ya había tomado una decisión sobre esto, pero no por eso iba dejar de defender su caso.

— ¿Y por qué debo ser yo la que envíen a morir en las entrañas de un volcán? — sentenció mirando con fuerza a Misato, para luego señalar con un dedo acusador al Tercer Elegido — ¿Por qué no envías a "Shinji el Invencible"? Él está para las hazañas heroicas aquí — añadió con veneno.

El consiguiente intercambio que sucedió entre Asuka y Misato pasó totalmente desapercibido para Shinji, quien no pudo dejar de estrechar los ojos ante las palabras de la pelirroja. Por alguna razón, pese a haberse resignado a que nunca podría esperar algún tipo de buen trato o gratitud por parte de ella, se sintió herido… ¿Herido? ¿De verdad? Shinji estrechó aún más los ojos ante esa revelación, pero era verdad. Las palabras de Asuka lo habían herido. ¿Por qué demonios tendría que sentirse herido por ella? Él siempre había tratado de estar en buenos términos con Asuka, pero ella, lejos de mantener una relación cordial, parece que había hecho la razón de su vida el burlarse de él y tratarlo como basura. Y aun así se sintió herido por sus palabras. Eso lo cabreó… mucho.

Shinji le dedicó una mirada odiosa a la pelirroja que seguía discutiendo con Misato, en contra de esta totalmente descabellada operación que se habían sacado del culo. Bien, podía entender el reclamo de Asuka. Sumergirse en las entrañas de un volcán para bucear en una caldera de magma incandescente colgada de un simple cable, en busca del Ángel de turno para capturarlo… bien, decir que toda la idea era una soberana locura era quedarse corto. Se necesitaban mayores garantías para siquiera considerar viable la operación. Pero que Asuka rechace la idea y de paso, sugiriendo abiertamente que fuera él, quien fuera destinado a realizar ese plan suicida; es lo cabreó mucho más. 

Shinji Ikari era un chico tranquilo, silencioso e introvertido. Tenía problemas para relacionarse con la gente, siendo bastante tímido y solía rehuir cualquier tipo de conflicto, pero incluso para él, las cosas tienen un límite. Asuka finalmente había pasado el límite. Sentirse herido por sus palabas fue la gota que rebalsó el vaso. La acumulación de incordios, insultos, burlas, desprecios y golpes a lo largo de todo este tiempo de trabajo y convivencia juntos, no podían ser ignorados por más tiempo. Es así como por primera vez, el Tercer Elegido contestó de una forma abiertamente hostil.

— Siempre te vanaglorias de ser la mejor Piloto, Asuka. Bien, ya viene siendo hora que lo demuestres — sentenció.

Sea lo que fuere que Misato y Asuka se estuvieran lanzando una a otra en ese momento, fue inmediatamente olvidado ante las duras palabras de Shinji. De hecho, dichas palabras sorprendieron a todos los presentes; incluso la siempre impertérrita Rei Ayanami dio un par de pestañadas en sorpresa. Por supuesto, quien más resultó sorprendida por esas palabras fue la Segunda Elegida; quien jamás se esperó tamaño desplante por parte de su normalmente apocado compañero de vivienda y colega Piloto. Obviamente esto era algo que ella no podía dejar pasar y respondió en consecuencia.

— Vaya, vaya. Hasta que finalmente llegó el día en que la testosterona empezó a hacerte efecto y te crecieron un par de pelotas — señalo sarcásticamente la pelirroja, dándole una fea sonrisa torcida.

— ¡Asuka! — señaló con dureza Misato, intentando imponer el orden. Pero la morena no contaba con que el Tercer Elegido no estaba por dejar las cosas simplemente ahí. Sin proponérselo, Asuka había abierto una "Caja de Pandora", logrando lo que nadie hubiera creído posible, había cabreado lo suficiente a Shinji como para hacerlo dejar atrás su lado introvertida, sacando a la luz un lado totalmente desconocido para todos, una parte de él que no se iba a quedar callada y aceptar mansamente los insultos de la pelirroja; ni por asomo.

— Acaba de hablar la niña engreída que desde que desde que llegó a Tokio-3, no ha podido vencer a un mísero Ángel por si misma — comentó Shinji, devolviendo el fuego, sintiendo que su enojo con la pelirroja escalaba un poco más.

— ¿¿Pretendes desafiarme a que vaya a saltar dentro de la caldera de un volcán?? — estalló Asuka, dando un fuerte pisotón con las manos en las caderas, mirando desafiante a Shinji. 

— ¿No querías una batalla para ti sola donde pudieras demostrarnos a todos lo grandiosa que eres? Bien, aquí está tu oportunidad. ¿Qué esperas para tomarla? — la desafió.

— Una operación de captura difícilmente puede ser considerada una batalla — estalló de regreso una cada vez más enojada pelirroja.

— ¿Acaso tienes miedo? — preguntó Shinji.

— ¿Miedo yo? ¡Jamás! — gritó Asuka de vuelta.

— ¿Entonces? — preguntó de manera desafiante el Piloto del EVA-01; un desafío que la pelirroja no pudo responder.

Se produjo un tenso silencio luego de las palabras de Tercer Elegido. Ambos chicos se miraban uno al otro y para sorpresa de todos, un visiblemente cabreado Shinji le sostuvo la mirada a la pelirroja. Las mujeres presentes miraban el intercambio apenas creyendo lo que veían sus ojos. Ese chico que estaba ahí de pie mirando desafiante a una enojada Asuka, parecía alguien totalmente distinto al tranquilo e introvertido Shinji Ikari que conocían. 

— ¿Ese es realmente Shinji? — susurró Maya, dándole una mirada curiosa a las dos mujeres de pie junto a ella.

— Tal parece que estamos viendo un lado de Shinji que no conocíamos y que Asuka logró sacar a la luz de alguna forma — respondió igualmente en un susurro la rubia científica, mirando apreciativamente al Tercer Elegido, mientras ponía especial atención en su mirada, gestos y su forma de hablar, incluso su forma de pararse. Estrechó un poco los ojos y entonces lo comprendió. Ella ya había visto una actitud similar en otra persona y supo que si Shinji mantenía solo una fracción de la actitud de esa persona, dejaría de ser el alfeñique llorón al que Asuka solía pasar por encima, para ser alguien que pudiera hacerle frente, tal como ahora — Definitivamente es hijo de su padre — comentó.

Misato, que miraba a Shinji como si le hubiera crecido una segunda cabeza, por esta actitud totalmente contraria a lo que era habitualmente, no pasó por alto el comentario de Ritsuko y, en efecto, no le resultó muy difícil emparejar la actual actitud de su protegido con la de cierto hombre de lentes, barba e impolutos guantes de color blanco. No le gustó para nada esa comparación.

— ¡Suficiente! — exclamó finalmente casi en un grito una molesta Misato, atrayendo la atención de los dos chicos — Resulta evidente que Asuka no se encuentra en condiciones de llevar a cabo esta operación, por lo que permanecerá en espera aquí en las instalaciones de NERV.

Tras aquellas palabras Asuka pareció relajarse, esbozando una diminuta sonrisa, a la vez que le daba una fugaz mirada de suficiencia a Shinji. Por su parte, el joven Ikari le dio una mirada dura a Misato, sabiendo ya para donde iba todo esto. Sería conminado a llevar a cabo la operación que Asuka acaba de esquivar olímpicamente, poniendo su vida en juego una vez más, tal como lo venía haciendo desde el mismo día que había puesto un pie en Tokio-3. 

 — Rei — llamó Misato, sorprendiendo a Shinji y sacándolo de sus reflexiones.

 —Sí — respondió la chica peliazul, con su tradicional tono de voz monocorde.

— Realizarás la operación de captura del objetivo — sentenció Misato.

— Entendido — fue la escueta y mecánica respuesta de la Primera Elegida, la cual no se vio para nada afectada ante la idea de que la estaban mandando a sumergirse al interior de un volcán activo.

Shinji, quien hasta ese momento había estado cabreado y enojado como nunca antes en su vida, por culpa de la estúpida pelirroja que estaba de pie a un lado de él, se sorprendió por las palabras de Misato, ya que estaba seguro que él sería el nominado para tomar el lugar de Asuka. No se esperaba que Rei fuera la elegida; ni mucho menos que aceptaría tan mansamente ser partícipe de esta locura. Le dedicó una seria mirada a la chica peliazul, imaginándola sumergirse en esa caldera de magma, arriesgando su vida gratuitamente. El recuerdo de un evento pasado llegó a su mente en ese momento y no pudo dejar de sentir algo de molestia con Rei por ponerse una vez más en una situación similar. Eso hizo que su enojo con Asuka aumentara aún más.

— ¿Le cargarás a Rei esta operación, solo por una rabieta de Asuka? — preguntó de pronto un aún más enojado Tercer Elegido, mirando seriamente a la Directora de Operaciones, llamando de paso la atención de todos los presentes. 

— ¿Qué? — preguntó una asombrada Misato, ante semejante declaración de este desconocido Shinji que tenía frente a ella.

— Lo que dije. Ya habías designado a Asuka para esta operación. No es justo que le cargues el muerto a Rei, solo porque la señoría simpatía hizo una rabieta. Si haces esto, solo estarías cediendo ante los caprichos de Asuka y le darías pie para volver a hacer lo mismo en otra ocasión — sentenció, haciendo que la pelirroja dejara de lado la sonrisa de satisfacción que tenía en el rostro, para mirar a Shinji con una mescla de enojo y sorpresa por sus palabras.

Se produjo un nuevo silencio en la habitación por esas duras palabra del Tercer Elegido, mientras Misato le dedicó una dura mirada a este nuevo Shinji.

Ritsuko que estaba de pie junto Misato, contempló ese intercambio con interés, sobre todo porque las palabras de Shinji encerraban algo de verdad. Asuka estaba esquivando el bulto con una gran rabieta y nada podía asegurar que no intentara lo mismo en el futuro. Por otro lado, Misato también tenía razón. Enviar a un Piloto a realizar a la fuerza una operación en la que se negaba terminante a participar, era una receta para un desastre. Asuka haría el trabajo con reticencia, lo más rápido posible y con una alta posibilidad de hacerlo con errores, poniendo en riesgo no solo su vida, también un EVA. Perder una de esas costosas unidades era algo que no se podían permitir. "¿Que harás Misato?", se preguntó la rubia.

— Shinji. Cuida tus palabras — dijo la mujer, dándole una seria mirada a su protegido, luego volvió a mirar fijamente a la chica peliazul — Rei. Tomarás el lugar de Asuka — sentenció nuevamente.

— Entendido — respondió nuevamente Rei con voz monocorde, pero sin poder evitar darle una mirada a Shinji.

Shinji sintió como su enfado con Asuka subía una vez más, por producir toda esta situación con una de sus estúpidas rabietas, tuviera razón o no con el reclamo. Tampoco podía dejar de sentir molestia con Rei, por aceptar con tanta naturalidad saltar una vez más de cabeza al peligro, sin demostrar la menor preocupación por su propia integridad. Le dedicó una mirada estrecha a la chica antes de volver a mirar a Misato. 

— Envíame a mí. Yo iré en lugar de Rei — declaró, dando un paso adelante.

Misato estrechó los ojos. Ahora estaba totalmente segura de que había algo mal con Shinji. El chico no solo se había mostrado completamente hostil con Asuka, incluso la había encarado, discutiendo con ella sin echarse atrás en ningún momento. Un día antes ese hecho le hubiera resultado imposible, pero aquí estaba ahora, no solo discutiendo con la pelirroja, sino también cuestionando sus órdenes y de paso, ofreciéndose voluntariamente para ir a la línea de fuego en lugar de Rei. ¿Qué pasaba con él? Al ver la increíble decisión en su mirada, no pudo dejar de recordar el comentario de Ritsuko, sobre de quién es hijo el joven frente a ella. Ciertamente algo de ese hombre podía ver en él ahora mismo, por mucho que no le gustara la idea.

De pie junto a Shinji, la chica peliazul lo miraba con algo de sorpresa. Era evidente que estaba enojado con Asuka y eso lo estaba haciendo actuar de una forma que no era normal en él, pero luego le dedicó una mirada molesta a ella. Eso la descolocó, ya que segundos después se ofreció para ir en su lugar, cuando ella ya había sido designada para esa labor: ¿por qué hacer eso? ¿Por qué ofrecerse para arriesgar su vida, si parecía estar molesto con ella? 

— ¿Por qué tu repentino interés en esta operación? ¿Por qué ofrecerte en lugar de Rei? — lo cuestionó Misato luego de unos segundos, con el fin de indagar en las razones de este comportamiento tan poco característico del chico frente a ella, que atrajo también la atención de la Primera Elegida.

— Te lo vuelvo a repetir. No es justo que le cargues esto a Rei — respondió con firmeza mirando a la Directora de Operaciones — Además, alguien tiene que hacerlo y, de paso, enseñarse a ciertas personas como se hacen las cosas — añadió.

— ¿Quién demonios te crees para hablar así, Kinder? — gruñó una molesta Asuka, sabiendo que ese último comentario fue dirigido a ella, pero Shinji no le prestó atención, ya que todos sus sentidos estaban dirigidos a la mujer frente a él. 

Al igual que su protegido, Misato optó por ignorar el regaño de la pelirroja, para concentrarse en la respuesta que habían dado a sus preguntas. Si bien las palabras de Shinji fueron dichas con cierto tono de determinación, no detectó osadía ni heroicidad en ellas. La última parte fue dicha con el único fin de molesta a Asuka, eso estaba claro, pero lo anterior; la firme negativa a que asignara a Rei a esta operación, junto con sus palabras siguientes "Además, alguien tiene que hacerlo", dejaba en claro que ese alguien era él, no Rei.

Ciertamente debía analizar con calma lo que estaba ocurriendo aquí. Shinji nunca se había caracterizado por ser decidido o gallardo, más bien todo lo contrario, pero al parecer, tal como planteó Ritsuko, Asuka se las arregló para desbloquear una parte del carácter de Shinji que había estado latente, esperando el momento adecuado para salir a la luz. Desafortunadamente ocurrió en el peor momento posible. Suspiró pesadamente.

— Negativo — dijo finalmente la mujer luego de unos segundos — Ya has sido asignado como refuerzo en esta operación y permanecerás como tal. Es una orden — sentenció, haciendo que Shinji hiciera una mueca ante esa declaración y Asuka esbozada una leve sonrisa de triunfo.

— Ejem, Capitán Katsuragi — dijo Maya, llamando la atención de todos presentes — Le recuerdo que el equipamiento especial que se utilizará en esta ocasión, no es compatible con un prototipo como la Unidad-00.

— Está bien Maya. Rei usará el EVA-02 — declaró Misato.

— ¿¿QUE?? — estalló una sorprendida Asuka, apenas creyendo lo que estaba escuchando — ¿Pretender pasarle mi precioso EVA-02 a la muñeca? ¡¡SOBRE MI CADAVER!!

Asuka estaba echando espuma por la boca, mientras miraba a Misato con toda la furia que una pelirroja de 14 años podía ofrecer. La chica apenas podía creer lo que estaba pasando. Primero, el alfeñique llorón pusilánime que responde al nombre de Shinji Ikari, tuvo el descaro de cuestionarla, enfrentarla y responderle, solo para que ahora esta mujer tuviera la osadía de disponer de su preciosa unidad como si se tratara de un simple objeto de alquiler, dejándolo a disposición de esa estúpida muñeca. Ella jamás permitiría que esa estúpida hiciera uso y de paso, contaminara su amado Evangelion con su asquerosa esencia… jamás.

— Asuka — dijo Misato con voz afilada y una vena palpitante en la frente — Cierra la boca, o te juro que…

— ¡Está bien! — estalló la pelirroja nuevamente, cortando a Misato a media frase — ¿Quieren que vaya a su maldita operación suicida? ¿Quieren que me sumerja en la caldera de un volcán? OK. ¡Lo haré! Ese Ángel no me vencerá y no le daré la satisfacción a esa muñeca, a ninguno de ustedes y mucho menos a un niñato engreído que intenta dárselas de hombre. ¿¿Me entendieron??

Luego de esa furiosa rabieta, una enojada Asuka salió corriendo de la habitación, dejando dentro al resto de ocupantes completamente en silencio, viendo cómo la chica se perdía corriendo por el corredor, antes de que la puerta se cerrara automáticamente. Misato dio un fuerte bufido, bajando la cabeza para sostenerla con una mano, completamente frustrada por como resultaron las cosas, ya con un fuerte dolor de cabeza y deseando no necesitar de niños inmaduros para pilotear los EVA.

— Bien, eso no salió como lo teníamos previsto — comentó una fastidiada Ritsuko, mientras Maya apretaba con más fuerza contra su pecho el Tablet con los datos de la operación, manteniendo la sonrisa nerviosa en los labios.

— Necesito una aspirina. El dolor de cabeza me está matando — dijo una igualmente fastidiada Misato.

— Como fuere, Maya y yo debemos retirarnos ahora — declaró la rubia científica — Tenemos que ir a supervisar los preparativos de todo el equipamiento requerido para esta operación. Además, quiero estar presente cuando metan al EVA-02 en el traje de presión. No hay margen de error ahí, así que quiero cuidar personalmente cada detalle. 

— Misato — dijo Shinji, llamando la atención de la susodicha y de paso, la atención de las demás féminas presentes.

— Detente Shinji — dijo Misato levantando una mano en advertencia, mirando duramente al Tercer Elegido — Ya tuve suficiente con las rabietas de Asuka, como para demás aguantar tus reclamos que rozan la insubordinación. Ahora, cierra la boca y enfría tu cabeza. Más tarde cuando tenga algo de tiempo, tendremos unas palabras tú y yo. 

Shinji apretó los dientes y bajó la cabeza, mirando fijamente la imagen en el gran monitor del piso, resignado y molesto. De pie junto a él, Rei le dedicó una mirada, hasta que la voz de la Directora de Operaciones hizo que todas las miradas fueran a ella, excepto la de Shinji. 

— Ritsuko, necesito que determines el lugar exacto donde instalaremos todo nuestro equipo y los EVA, para enviar un grupo de ingenieros con maquinaria a preparar el terreno y luego instalar el equipamiento — dijo Misato mirando a la rubia, entrando en modo "Directora de Operaciones", para luego dar media vuelta y comenzar a salir de la habitación a paso acelerado — Haré unas llamadas para conseguir algunos C-17. Espero la información para cuando tenga esos aviones de transporte de caminó a NERV. 

— No hay presión — comentó Ritsuko con una sonrisa torcida, para luego dar un fuerte suspiro y mirar a su asistente con la resignación de alguien que sabe que dormirá poco o nada en los próximos días — Vamos Maya, hay mucho por hacer. Tú también Rei, debemos comenzar ahora mismo las pruebas de sincronización con el EVA-02.

— Entendido — dijo Rei con su habitual tono de voz monocorde.

La chica peliazul le dedicó una última mirada por un par de segundos al Tercer Elegido, el cual seguía de pie con la vista baja y en ceño arrugado. Por un momento pareció que Rei quería decir algo al chico junto a ella, pero finalmente volvió a su semblante frio y serio de siempre, para luego comenzar a caminar hacia la salida de la habitación, hasta que detuvo su andar, sorprendida ante el potente grito de Misato.

— ¿¿QUE ASUKA HIZO QUÉ?? —grito Misato a todo pulmón desde el corredor, mirando incrédula el teléfono móvil en su mano derecha. La mujer dio un bufido y se fue caminando dando fuertes pisotones, mientras gruñía órdenes por el móvil.

Ritsuko y Maya contemplaron como una furiosa Misato se alejaba por el corredor, echando maldiciones hacia cierta pelirroja malas pulgas. Ritsuko y Maya intercambiaron miradas, sabiendo que el futuro de Asuka no sería muy auspicioso. Rei se les unió unos segundos después, saliendo finalmente las tres de la habitación, cerrándose automáticamente la puerta tras ellas.

Dentro de la habitación, Shinji seguía de pie con la cabeza gacha y el ceño arrugado. El chico estaba ausente de todo, del grito de Misato en el corredor, o el resto de las mujeres que acababan de salir, dejándolo solo en esa oscura habitación. Contempló fijamente la imagen del Ángel en estado embrionario en el monitor del piso, que seguía siendo la única fuente de luz. Apretó los puños y los dientes, dando un paso adelante para dar un fuerte pisotón a la imagen del Ángel.

— Maldición — dijo entre dientes en frustración.

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Misato ingresó con paso decidido a la gigantesca bodega que era un hervidero de actividad, donde se podía ver ir y venir a un gran número de técnicos, cada uno cumpliendo con sus labores lo más apresuradamente que la prudencia se los permitía. Se detuvo un momento paseando la vista por el lugar y no le resultó difícil encontrar a quien estaba buscando. Ritsuko Akagi estaba de pie sobre una plataforma, que tenía un gran monitor en el centro, desplegado como si fuera una gran mesa de reuniones. La rubia estaba junto a dos técnicos revisando la información mostrada en el monitor, haciendo indicaciones sobe el monitor y luego señalando a unos técnicos que estaban verificando los datos en la consola de una gran máquina, que tenía sobre ella una pieza de acero, la cual estaba siendo cortada por un cabezal conectado a un brazo móvil, que lanzaba un potente chorro de agua a presión.

— ¡¡Capitán Katsuragi!! — gritó un hombre, llamando la atención de la mujer.

Misato volteó para ver a un técnico haciéndole señas con un casco blanco en una mano. Ella asintió e hizo un gesto para que lo lanzara. El hombre lanzó el casco como si se tratara de un basquetbolista profesional y Misato lo atrapó diestramente con una mano. Asintió al hombre, se colocó el casco sobre la cabeza y comenzó a caminar hacia la rubia que seguía discutiendo con los dos hombres.

— ¿Problemas en el paraíso? — preguntó Misato cuando llegó a los pies de la plataforma, dándole una mirada curiosa a la rubia científica.

Ritsuko dio un cansado suspiro y le hizo un gesto a los hombres para que se retiraran. Estos bajaron de la plataforma dándole un saludo a la morena al pasar, llevando una mano a la visera del casco. Misato asintió a los hombres y luego subió a la plataforma, donde Ristuko, seguía viendo el despliegue en el gran monitor, que mostraba unos esquemas que Misato a duras penas podía comprender.

— ¿Y esto es…? — preguntó Misato, cruzándose de brazos junto a la rubia, mirando el monitor.

— Los planos de la "Jaula Electromagnética" — respondió Ritsuko — Para haber sido diseñados contrarreloj en cosa de horas, cumplen la función. Esa máquina de corte de abrasión por chorro de agua a presión, de ahí atrás, está cortando las partes ahora. Luego, pasan a esa otra máquina tipo grúa al otro lado, "La Fresadora", que le dará la forma final a las piezas — añadió.

 — ¿Algún problema con todo eso? — preguntó Misato, levantando una ceja.

— Solo que necesitamos esta cosa para ayer y fabricarla está tomando más tiempo de lo que esperaba. Aun así, no podemos acelerar el paso. Manipular el metal compuesto usado para el Equipamiento Tipo D, no es nada fácil. Al fabricarlo para ser resistente a la presión, el calor y la radiación, también lo vuelve difícil de manipular — explicó Ritsuko, para luego apretar un botón a un costado del monitor, cambiando a otro plano — Por otro lado, la adaptación del sistema de sujeción electromagnético marcha sin inconvenientes. Como este es un sistema que teníamos operativo, el modificarlo para encajarlo donde lo necesitamos no ha sido demasiado complejo. Una vez tengamos las piezas listas, instalarlo no tomará demasiado tiempo.

— Ya veo — comentó Misato asintiendo con la cabeza, antes de comenzar a hablar — El equipo de ingenieros ya está desplegado en el monte Asama. Están preparando el terreno en este momento y pronto comenzaran a instalar el equipamiento. Con respecto al Láser de tamaño industrial que necesitamos para fijar el blanco, acabamos de confiscarle uno a las JSSDF. Shigeru Aoba fue a una de las bases de esos cabezas cuadradas por esa pieza de equipamiento, con una orden ejecutiva de NERV visada por la ONU. Reclamaron un poco, pero no tuvieron otra opción más que acatar. Aoba debería estar con el Láser aquí en no más de 30 minutos. 

— Perfecto. Haré que Maya se encargue de calibrarlo correctamente, una vez termine con las pruebas de sincronización de Rei — señalo Ritsuko.

— ¿Cómo van las pruebas? ¿Hay algún problema con la sincronización de Rei con el EVA-02? — preguntó Misato interesada.

— Hasta ahora todo va bien — dijo Ritsuko, apretando unos botones para mostrar unos gráficos en el monitor — Mira esto. Maya me lo envió hace unos minutos. La prueba de activación del EVA-02 se realizó sin contratiempos y la sincronización de Rei con la unidad se mantiene estable. No debería presentar mayores problemas para realizar esta operación.

— Al fin una buena noticia — dijo Misato, dando un suspiro.

— Ya que estamos en eso… ¿qué vas a hacer con Asuka? — la cuestionó Ristuko.

Misato estrechó los ojos ante la mención de la pelirroja. El recordar la rabieta que hizo en la sala de situación y luego literalmente haberse amotinando dentro del EVA-02, era una falta bastante grave. La verdad seguía muy molestar con ella. Suspiró cansadamente.

— Por ahora Asuka seguirá en una celda en el área de detención — respondió Misato luego de un momento — Su actitud impertinente, descarada y sobre todo, su intento de motín, no pueden ser toleradas.

— ¿La enviarás de regreso a Alemania? — preguntó la rubia, levantando una ceja.

— Por mucho que me agrade la idea, no puedo darme el lujo de prescindir de un buen piloto en este momento, o al menos hasta que Marduk tenga el nombre de Cuarto Elegido. Por el momento Asuka se queda, pero bajo fuertes sanciones y restricciones. Le pedí a Kaji que fuera a conversa con ella, para que le vaya explicando cómo será su vida a partir de ahora. A menos que el Comandante Ikari decida mandarla de regreso a Alemania de todas formas — sentenció Misato con el ceño arrugado.

— ¿Qué hay de Shinji? ¿Hablarás con él? — preguntó nuevamente la rubia.

Misato estrechó los ojos ante la mención del Tercer Elegido. La actitud de Shinji era algo que aún la tenía muy sorprendida. Nunca se esperó algo como eso viniendo de él, pero de alguna forma Asuka se las arregló para cabrearlo lo suficiente como para hacerlo explotar. Lo que la tenía un tanto preocupada era el saber si esta actitud pasaría, o sería una parte permanente de un nuevo Shinji creado por Asuka. Misato no pudo dejar de maldecir internamente. Esa pelirroja había causado más problemas de lo que valía. Suspiró pesadamente.

— Hablaré con él apenas Maya lo libre de la prueba de sincronización — respondió la morena con algo de resignación.

— Shinji está ahí solo como sujeto de control para la prueba de activación de Rei con el EVA-02. Por los datos que Maya me envió, diría que Shinji ya no es necesario en este momento. Si vas por él ahora, Maya lo pondrá a tu disposición — comentó Ritsuko, viendo como los técnicos pasaban una de las piezas de la máquina de corte a "La Fresadora", para luego voltear a ver a Misato — En todo caso, me sorprende la preocupación de Shinji por Rei. No sabía que era tan cercano a ella — comentó con curiosidad y de paso haciendo una nota mental para poner mayor atención a esos dos.

— Sí, bien, creo que para todos fue evidente que se preocupa por Rei. Yo diría que bastante más de lo que él mismo se da cuenta. Aun así, en esta vuelta creo que su principal combustible es su enfado con Asuka. Ya lo aclararé con él cuando le llame la atención — dijo Misato, dando un suspiro de resignación.

— Bien, dejando de lado todo lo negativo de esta situación, no puedo negar que fue interesante ver a Shinji confrontando a Asuka y defendiendo su punto tan fervientemente — comentó Ritsuko con una sonrisa divertida, antes de añadir — Si Shinji realmente puede manejar e integrar esta actitud más decidida a su forma de ser y no la limita solo a un día de furia, entonces podríamos ver algunos cambios para mejor de ahora en adelante.

— Sí… puede ser — comentó Misato.

— ¿Hay algo que no sepa? —preguntó Ritsuko, levantando una ceja.

— Bien… ahora lo que lo pienso. Ha habido algunos pequeños cambios en Shinji el último tiempo. Los había dejado pasar, pero en vista de todo esto…

— ¿Cambios cómo…?

— Se ha vuelto un poco más sociable con sus amigos. Comparte más con ellos y es más frecuente que salgan juntos cuando tiene algo de tiempo libre. Por otro lado, un par de veces lo vi algo molesto luego de que Asuka se metiera con él, en vez de apocarse como era la costumbre.

— Interesante — comentó Ritsuko — Puede que en verdad estemos viendo el nacimiento de un nuevo Shinji. Puede ser producto de la pubertad y toda esa testosterona que fluye por su sistema. Puede que sus experiencias en NERV y como Piloto EVA finalmente hayan comenzado a cambiar su carácter; o puede ser simplemente que es hijo de su padre. Algo de ese hombre debe tener en sus genes.

— Para eso Ritsuko. No compares a Shinji con el Comandante. No se parecen en nada — dijo Misato algo molesta.

— Oh, ¿de verdad? — preguntó Ritsuko, divertida — Te recuerdo que el Comandante Ikari es un hombre muy decidido. Misma determinación que vimos en Shinji cuando subió al EVA-01 por primera vez, o cuando te desafío y fue a terminar con ese Ángel pese a que le ordenaste retirarse. Misma decisión que tuvo al ayudarte a detener al descontrolado Yet-Alone… ¿Continuo? 

Misato hizo un gesto agrio con la cara, mientras Ritsuko aumentó su sonrisa al saber que había probado su punto.

— Como fuere, si el cambio es para mejor, me alegro por él — dijo la rubia dando unos pasos para comenzar a bajar de la plataforma — Solo asegúrate de guiarlo y corregirlo correctamente. Con una Asuka por aquí tenemos suficiente.

Misato le dio una mirada odiosa a la rubia científica, que estaba caminando hacia "La Fresadora", que estaba moldeando una gran pieza, mientras que la máquina de corte por chorro de agua, comenzaba a cortar otra gruesa placa de metal. Estuvo tentada en ir a darle una respuesta ingeniosa a la rubia, cuando cayó en cuenta de que esta tenía razón. Ella era la tutora oficial de Shinji, por lo que era su deber educarlo correctamente.

— Rayos — masculló Misato, para luego emprender rumbo fuera de la gran bodega.

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Rei abrió los ojos y sintió como su enlace con el gigante rojo se desvanecía hasta desaparecer. Inmediatamente las imágenes a su alrededor que mostraban el interior de la jaula de contención del EVA-02, se desvanecían en un arcoíris de colores y destellos de luces, que giraban como en un carrusel hasta desaparecer, para luego mostrar el interior frió y metálico del Entry-Plug. Se recargó en el asiento sin poder evitar dar un pequeño suspiro, produciendo algunas burbujas en el LCL. Estaba cansada. ¿Cuántas horas llevaba sentada ahí dentro?

"Hemos terminado Rei. Te espero aquí en la sala de control para darte más instrucciones" se escuchó la voz de Maya por el sistema de comunicaciones del Entry-Plug.

— Entendido — fue la escueta respuesta de Rei, mientras el cilindro era vaciado del LCL.

Apenas la chica peliazul bajó del Entry-Plug, un ejército de técnicos se abalanzó sobre el EVA-02 para hacer los últimos chequeos previos a meterlo en el Equipamiento Tipo D. Rei caminó entre el grupo de hombres que parecían no notar su presencia y se internó por un corredor, que la llevó a una sala llena de consolas y grandes monitores. Maya, que estaba sentada frente a uno de los monitores, giró la silla para mirarla y se puso de pie caminando hacia ella.

— Hemos finalizado Rei — dijo la mujer con una sonrisa, acercándose a la chica — La prueba de activación del EVA-02 se realizó sin contratiempos. Tu índice de sincronización se mantuvo estable y sin variaciones, por lo que estás libre por ahora, pero no puedes dejar la instalación. Hay una habitación preparada para ti en el área residencial. Te sugiero que vayas a descansar o trates de dormir un poco. Pasaran horas antes de partir, así que aprovecha de… ¿Rei? — preguntó la mujer, al ver que la chica pareció no prestar atención a lo que había dicho. 

Maya estrechó la mirada y volteó a ver qué es lo que llamaba tanto la atención de la chica peliazul, la cual estaba pendiente de un gran monitor ahora apagado, por el que se podía ver normalmente el Entry-Plug del EVA-01, donde Shinji había estado realizando una prueba de sincronización como sujeto de control para la prueba de Rei en el EVA-02. Al estar todo en orden, la Capitán Katsuragi se había llevado a Shinji hace poco más de dos horas para tener una seria conversación con él.

Rei continuó mirando fijamente el monitor ahora apagado, sin poder evitar recordar todo lo que había pasado ese día; como Shinji se había enfrentado a Asuka y como luego había intercedido en su favor, solicitando ir en su lugar en esta operación. Entonces recordó hace unas horas cuando se encontraron en este mismo lugar antes de iniciar la prueba de sincronización. Habían intercambiado miradas por un momento y pudo ver molestia en los ojos de Shinji. ¿Estaba molesto con ella? ¿Había hecho algo para molestarlo? Ese pensamiento por alguna razón logró inquietarla, pero debió dejar esa interrogante de lado, en beneficio de la prueba de sincronización que estaba por comenzar. Ahora que la prueba había terminado y tenía tiempo para pensar en ello, pudo darse cuenta de que definitivamente algo se sintió mal en ella y el factor detonante era Shinji.

— Shinji terminó su prueba hace algo más de dos horas. La Capitán Katsuragi se lo llevó para conversar un momento con él. Seguramente por lo que pasó en la sala de situación donde discutió con Asuka — comentó Maya, sacando a la chica de sus reflexiones — Donde también se ofreció a ir en tu lugar — añadió con toda la intención.

Maya observó a la chica con detenimiento, esperando la posibilidad de alguna reacción a su comentario y como esperaba, logró captar una pequeñísima contracción en los ojos de la Primera Elegida. Fue algo casi imperceptible, pero estaba ahí. Entonces se percató de que la chica volvía a quedar perdida en sus reflexiones una vez más, como si estuviera analizando ese último comentario.

Interiormente, Maya sintió como su corazón se alegraba por esta pequeñísima muestra de vida por parte de la Primera Elegida. Desde que la conoció, no dejó de sentir algo de pena por su solitaria y monótona vida, la cual transcurría en un completo sinsentido, como si no tuviera una razón para vivir, pero entonces algo pasó que llegó a cambiar todo eso: Shinji Ikari.

Maya lo sabía; había un corazón detrás de esa aparente frialdad, apatía y sin sentido por la vida. Los demás no lo habían notado, ya que era algo muy pequeño, casi imperceptible, tanto que ni la doctora Ritsuko lo había captado, pero ella era muy observadora y había captado las casi imperceptibles señales. De alguna forma, Shinji le había dado algo de vida a la casi autista Rei Ayanami. Desde que llegó, pudo ver que él la hacía reaccionar de las formas correctas, hasta que llegó la batalla con el Quinto Ángel. No sabía a ciencia cierta qué fue lo que ocurrió antes o después de esa batalla, pero luego de ese día, Rei definitivamente había cambiado un poco y comenzó a notar más a Shinji; y luego, pasó lo de hoy. Evidentemente la reacción de Shinji descolocó a la chica, aunque hubiera sido todo gatillado por una rabieta de Asuka.

— ¿Pasa algo, Rei? — preguntó finalmente Maya, para tratar de acercarse un poco a la chica y ver si podía entender lo que pasaba por su cabeza.

— No. Me retiro — respondió Rei escuetamente, para luego dar media vuelta y dirigirse a la salida.

Maya hizo un gesto con la boca. Eso no era lo que esperaba, pero bien visto, era algo predecible tratándose de Rei. Eso no quería decir que iba a dejar las cosas así. 

— Un momento Rei — dijo Maya, haciendo que la chica detuviera su andar.

Rei se detuvo a metros de la puerta y se volteó esperando lo que la mujer tuviera que decir. Maya se armó de valor y caminó hasta estar frente a la chica. Ella no era buena para estas cosas, pero de alguna forma sentía que debía hacer esto. Miró a la chica y habló.

— Mira Rei. Sé que eres muy reservada y no sueles hablar con nadie sobre lo que te pasa, pero es evidente que algo te incomoda desde el intercambio entre Shinji y Asuka. También me percaté que mirabas fijamente a Shinji antes de la prueba; ahora lo buscabas en ese monitor de ahí atrás y te quedaste atrapada en tus pensamientos al no verlo — dijo Maya con cautela y suavidad, para no espantar a la chica — Lo que quiero decir, es que si necesitas hablar con alguien, estoy aquí para escuchar y te prometo que todo lo que hablemos quedará entre nosotras.

Rei miró con sorpresa a Maya por esas palabras. No esperaba algo así de ella. La verdad no esperaba algo así de nadie. Tal como la mujer decía, ella no hablaba con nadie y no comentaba sus cosas, porque no había nada que comentar, pero la situación había cambiado. Es cierto que había algo dando vueltas en su mente. La actitud de Shinji, defendiéndola en un inicio y luego dándole esa mirada molesta antes de iniciar la prueba, solo había agregado más confusión a todo. ¿Sería prudente hablar? ¿Podía confiar en esta mujer? Dudó por unos segundos, no estando segura de hacer audible sus dudas, pero finalmente consideró que escuchar una opinión no podría hacer daño. Además, ella estaba dispuesta a escuchar y prometió discreción. 

— Shinji parecía estar enojado conmigo — dijo Rei luego de largos segundos.

Maya ciertamente se sorprendió por eso. La verdad no esperaba que Rei respondiera. Estaba segura de que ella daría media vuelta y se iría sin decir nada, pero acá estaba ella, hablando. Ciertamente no iba a dejar pasar la oportunidad de conocer un poco más a la chica.

— ¿Realmente lo crees? — preguntó Maya para ahondar más en el tema y mantener hablando a la normalmente silenciosa chica peliazul. 

— Me dio una mirada molesta al confirmar la orden de la Capitán Katsuragi de reemplazar a Asuka. También me dio una mirada molesta antes de iniciar la prueba de sincronización — respondió Rei, estrechando un poco los ojos ante esos recuerdos.

Maya miró con sorpresa a Rei. Nunca había escuchado a la chica decir tantas palabras juntas, pero eso solo quería decir que esto era importante para ella. Debía responderle y aconsejarla. 

— No me percaté si él te dio algún tipo de mirada antes de iniciar la prueba de sincronización, pero ahora que lo mencionas, si recuerdo que te miró con algo de molestia cuando aceptaste la misión. Pero aun así, él intercedió por ti ante la Capitán Katsuragi y se ofreció a tomar tu lugar — comentó Maya.

La mujer arrugó en ceño al tratar de analizar la actitud de Shinji. Estaba molesto con Asuka, eso era evidente, pero, ¿por qué molestarse con Rei, si la estaba defendiendo y se ofreció a tomar su lugar? Maya arrugó en ceño ante esa contradicción y luego miró a la chica, que la observaba fijamente esperando que continuara.

— ¿Sabes? Tienes razón. Es evidente que Shinji está molesto con Asuka, pero no debería tener ninguna razón para molestarse contigo; sobre todo si se ofreció a ir en tu lugar — razonó la mujer, mirando fijamente a Rei, antes de continuar — Creo que Shinji se preocupa genuinamente por ti, pero su actitud es un tanto extraña. Debe haber algo ahí que no estamos viendo. Mi sugerencia es que le preguntes directamente. Solo así sabrás qué es lo que lo hace estar molesto contigo.

La Primera Elegida guardó silencio por un momento, analizando las palabras de la joven mujer, antes de simplemente asentir con la cabeza. Luego de eso, Rei dio media vuelta y se encaminó a la salida para luego perderse por el corredor. Maya dio un suspiro de resignación. No podía pedir más de la chica, bastante había logrado haciendo que se abriera con ella y dijera más de un par de monosílabos. Era un gran inicio, aunque no pudo dejar de sentirse un poco decepcionada, ya que hubiera esperado un poco más de interacción. Pero nuevamente, era un gran inicio.

Maya dio un cansado suspiro, fue hasta la consola para apagar todo el sistema y luego encaminarse a una de las bodegas. Había un Láser de tamaño industrial esperando a que ella fuera a calibrarlo.

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El interior del Geo-Frente era tan inmenso, que era imposible no sorprenderse con lo espacioso que era todo ese lugar. Tan grande que era capaz no solo de albergar la gran pirámide que era el cuartel general de NERV, también había un bosque y un enorme lago. El techo estaba a cientos de metros de altura, lo suficientemente alto como para que un avión pudiera volar en círculos por el lugar sin ningún problema. Incluso se podía ver los edificios de la ciudad colgando del techo, desde donde había una vista impresionante de la inmensa caverna.

Shinji suspiró y cruzó las manos detrás de la cabeza, recostado de espaldas en la hierba junto al lago. Por un momento consideró quitarse los zapatos e ir a meter los pies en el agua, pero desechó la idea. No estaba ahí para pasar el rato dándose un gusto, había venido a este lugar para pensar con más calma sobre su situación. Este lugar era ideal. El canto de las aves y el sonido de la suave brisa artificial pasando por las hojas de los árboles, era muy relajante. Por qué la gente que trabaja en NERV no venía a este lugar a relajarse y pasar el rato, estaba más allá de su comprensión. Tal vez estaban demasiado concentrados en su trabajo, como el bastardo de su padre, la doctora Ritsuko o Misato. Hizo una mueca al recordar a su tutora.

Cuando Maya había anunciado que su prueba de sincronización había terminado y salió del EVA-01 para ir a la sala de control, se encontró de frente con una seria Misato en medio del corredor. La mujer le ordenó seguirla hasta un cuarto de descanso, con una mesa, sillas, un mueble con una cafetera, tazas y demás, algunos sillones y un gran televisor adosado a la pared. Con una sola mirada de Misato, los desafortunados operarios que estaban tomando un descanso en ese momento, debieron salir del lugar dejándolos solos. 

No fue una sorpresa saber que Misato estaba muy molesta con él por su actitud desafiante, que según ella, rozó en la insubordinación. Le señaló que no aceptaría nada de eso en el futuro y le puso como ejemplo a Asuka; la cual, para su completa sorpresa, luego de salir corriendo de la habitación donde estaban, se había atrincherado en el EVA-02, declarando que nadie salvo ella podía pilotear al gigante rojo, activándolo sin autorización para probar su punto. Misato le dejó muy en claro lo que ocurrió con la pelirroja luego de ese incidente.

"Se aumentó la presión del LCL hasta hacerla perder el conocimiento para bajarla del EVA. Ahora Asuka está en una celda bajo cargos de uso ilegal de una Unidad Evangelion e insubordinación. Cuando termine esta operación veremos su caso. Si no es devuelta a Alemania de inmediato, quedará en libertad condicional junto con una fuerte sanción. Tú estuviste cerca de la insubordinación con tus comentarios de hoy. Puedes esperar un trato similar si cruzas la línea como lo hizo Asuka"

Luego de esas duras palabras de Misato, a Shinji no le quedó más que reconocer su falta y pedir disculpas por su comportamiento. Luego, con algo de resignación, procedió a explicar a Misato que la actitud de Asuka, desde hace un tiempo lo estaba sacando de quicio. Había soportado sus insultos y malos tratos por demasiado tiempo, hasta que finalmente ese día llegó al límite y explotó. Toda la diatriba siguiente había sido su enojo reprimido, oponiéndose por primera vez a la pelirroja, desafiándola y devolviendo cada golpe. Por supuesto, había algo más, pero no iba a ventilar eso con ella, porque eran cosas que ni el mismo tenía claras aún. Finalmente Misato pareció comprender su argumento, pero no aprobó lo ocurrido, ni menos el momento elegido para dejar salir todo lo que había estado conteniendo.

Cuando ella había dado por concluida la conversación y estaba por retirarse, Shinji volvió a traer a colación una de sus preocupaciones y solicitó tomar el lugar de Rei, esgrimiendo que con una mejor sincronización con el EVA, era el más indicado para esta operación. Una sola mirada de Misato fue sufriente para saber que si no cerraba la boca, le haría compañía a Asuka en su celda. Suspiró pesadamente. Misato le dijo que faltaban horas para partir, así que lo mandó a descansar en una habitación que le habían asignado en el sector residencial. Cómo no le apetecía estar encerrado en un cuarto minúsculo por varias horas, había decidido acudir a este lugar para pensar; tenía mucho que pensar.

La mente de Shinji voló inmediatamente hasta su tormento personal: Asuka Langley Soryu. La enérgica pelirroja había transformado su vida en una mierda, desde el mismo día en que la vio en la cubierta de vuelo de esa tina flotante, que una vez fue uno de los más poderosos portaviones del mundo y que actualmente apenas se mantenía a flote. Si, ese fue el día que su historia con la pelirroja había comenzado, el día que de paso le vio las bragas gracias a una traviesa brisa marina. No podía negar que fue una linda vista. Estrechó los ojos. ¿Qué rayos estaba pensando?

Shinji suspiró pesadamente ante ese pensamiento. No sacaba nada con negar lo obvio, Asuka es una chica condenadamente linda, hermosa como pocas; pero lo que tiene de hermosa también lo tiene de mal genio, y parecía haber hecho su misión personal el hacerle la vida miserable. 

Si bien pensó que la actitud de desprecio de la pelirroja hacia él iría pasando con el tiempo, eso nunca ocurrió, ni siquiera luego de la convivencia forzada a los que los sometió Misato. Por el contrario, las cosas fueron empeorando con el tiempo, con una Asuka que lo insultaba y lo trataba como basura, solo por el gusto de hacerlo. Lo peor de todo, es que pese a todo esto, él no pudo evitar tener un enamoramiento por la chica. Sí, increíble como parece; pese a toda la mierda que Asuka le lanzaba diariamente, terminó enamorado de ella. O eso creyó al menos.

Suspiró pesadamente. No estaba realmente seguro de si amó o no a Asuka. Ella lo atraía como la luz de una vela a una polilla y le era difícil quitarle los ojos de encima, pero no pasó de eso. Todo lo lindo que pudo sentir por ella, la misma Asuka se encargó de matarlo con sus malos tratos y actitud despectiva hacia él; entonces, ¿por qué se sintió herido cuando ella habló en su contra con Misato y demandó que fuera en su lugar en esa misión suicida?

Shinji estrechó los ojos ante ese pensamiento. No le gustó sentir eso. Sobre todo porque estaba seguro de que ya no tenía sentimientos románticos por la pelirroja; entonces: ¿Por qué sentirse herido por sus palabras? ¿Tal vez un remanente de lo que una vez sintió por ella? No estaba seguro, y la verdad no tenía interés en ahondar en eso. Para él, su gusto por la pelirroja ya era historia pasada. Aun así, el sentirse herido por esas palabras, fue el detonante para que esa presa que se había formado luego de meses aguantando la mierda de Asuka, finalmente se viniera abajo. Una molestia que se había estado cocinando a fuego lento dentro de él y que terminó por estallar; y demonios, seguía molesto con ella. Eso lo llevó a pensar en el otro punto que había logrado sacar esa molestia en él… Rei Ayanami.

Conoció a la chica el mismo día en que había llegado a Tokio-3. La habían trasladado en una camilla hasta la pasarela frente al EVA-01. Estaba cubierta de vendas, conectada a un goteo intravenoso y apenas pudo sentarse por sí sola en la camilla, pero así y todo, ella estaba dispuesta a tomar su lugar. Un nuevo ataque del Ángel puso fin a su intento, cuando cayó de la camilla al suelo y no se levantó más.

Aun podía recordar cuando corrió a ver cómo estaba, tomando a la chica en sus brazos. Temblaba como una hoja, jadeaba y apretaba los dientes para contener un grito de dolor. Luego sintió algo húmedo en sus manos y al comprobar, estaban cubiertas de sangre, la sangre de Rei. Todo lo que había estado sintiendo hasta ese momento por el bastardo de su padre quedó en el olvido. Lo único que importaba era la chica que tenía entre sus brazos. Por primera vez en su vida, decidió no huir como un cobarde. Se subió al EVA; no por su padre, no por Misato, ni por salvar al mundo, lo hizo por Rei… y se sintió bien.

Muchas cosas pasaron luego de ese día. Todo pasaba tan rápido que apenas tenía tiempo de asimilarlo. De pronto estaba viviendo con Misato en un basurero que ella llamaba hogar. Al minuto siguiente era la criada de esa mujer; haciendo aseo, cocinando, echando a la lavadora la ropa que ella iba dejando tirada al pasar y encargándose de su mascota Pen Pen. Al minuto siguiente estaba en NERV para las interminables pruebas de sincronización, luego el entrenamiento básico de combate y aprendiente a pilotar el EVA. Finalmente estaba la escuela, donde terminó recibiendo un derechazo de Touji, por haber lastimando indirectamente a su hermana en una batalla. Pero entre toda esa maraña de cosas que lo iban absorbiendo día a día, siempre hubo algo constante: Rei Ayanami.

Rei siempre había estado ahí. En la escuela, en NERV, en las pruebas de sincronización o caminando juntos por la calle rumbo a NERV o a la escuela. Ella ciertamente no es la persona más expresiva o sociable del mundo, pero no podía negar que le gustaba su compañía. Su silencio le resultaba agradable y su proximidad le traía alegría. Espera… ¿alegría?

Shinji estrechó los ojos ante ese pensamiento. ¿Se sentía feliz junto a Rei? Nunca se había planteado eso hasta ahora. Lo cierto es que pasaba la mayor parte del día ocupado en la escuela o en NERV, que cada día absorbía más de su tiempo. Luego estaba Asuka, que lo encandiló con su belleza, acaparando su atención y experimentando un enamoramiento por ella. Nuevamente Shinji estrechó los ojos y se sentró en la hierba, pensando, analizando sus recuerdos, sus sentimientos.

— ¿Tan ciego he sido? — se preguntó de pronto.

El Tercer Elegido se puso de pie y dio unos pasos hasta quedar junto a un árbol a los pies del lago, impactado por lo que acaba de descubrir. Asuka no solo había llegado para convertir su vida en una mierda, a la vez que lo encandiló con su belleza. Se había enceguecido por ese enamoramiento sin sentido por la pelirroja, haciéndole perder de vista lo que era realmente importante, lo que lo llevó a molestarse con Rei, por saltar al peligro gratuitamente una vez más y sin poner ninguna objeción. 

Rei Ayanami era importante para él. Siempre lo fue, desde el primer día que subió al EVA por ella. Eso quedó patente en el ataque contra el Quinto Angel, cuando ella se despidió de esa forma tan triste, como si su vida no valiera nada, para luego saltar frente a él y protegerlo para darle la oportunidad de acabar con el Ángel, casi muriendo en el proceso. Aun podía recordar el sentimiento de puro terror al creerla muerta y el alivio al verla con vida. Recordó además la hermosa sonrisa que ella le obsequió. Luego de eso se habían acercado un poco más y estuvo mucho más pendiente de ella, hasta que llegó Asuka para acaparar toda su atención y nublar su juicio.

Shinji bajó la cabeza y miro la hierba fijamente sin ver realmente, perdido en aquello que acababa de aprender, de lo estúpido que había sido; de cómo dejó que su propia timidez, los cambios en su vida, el tiempo que le quitaba NERV, los Ángeles y Asuka, no lo dejaran ver algo que debió ser obvio desde un inicio. Finalmente, una situación donde ella tendría que volver poner su vida en peligro gratuitamente, lo hizo darse cuenta de que él…

— Aaaahhh, para. Alguien podría vernos.

— Tranquila, nunca viene nadie por aquí.

Los ojos de Shinji casi salen de sus órbitas ante esas palabras y la serie de jadeos y gemidos que le siguieron. Curioso, se asomó cuidadosamente entre unos arbustos hacia dónde venían las voces y vio a una pareja de operarios, quitándose desesperadamente la ropa para…

El Tercer Elegido dio medio vuelta y se alejó lo más silenciosamente posible para dejar a la pareja disfrutar de su tiempo de calidad. Estaban tan metidos en eso que nunca lo vieron y él se llevaría lo que vio a la tumba. Se sonrojó ante el recuerdo, pero lo apartó de su mente. Era hora de volver. No sabía cuánto tiempo estuvo aquí pero se sintió como una eternidad. Suspiró. Si, era hora de volver.

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Rei Ayanami estaba recostada boca abajo en la cama del pequeño cuarto que le había sido asignado en el sector residencial de NERV. Tenía las manos cruzadas bajo la barbilla y miraba al frente sin ver realmente, ya que su mente estaba totalmente perdida en sus pensamientos; perdida en Shinji. Dio un pequeño suspiro y se giró hasta quedar de espaldas en la cama mirando el techo.

Estaba confundida. Muchas cosas rondaban su mente y no podía darles sentido a todas ellas. Había pasado las últimas horas analizando sus interacciones con Shinji, lo que habían vivido y compartido juntos desde que él había llegado a Tokio-3. Habían sido muchos más de los que ella recordaba.

Ellos habían comenzado a interactuar cuando él decidió tomar su lugar en el EVA-01, el mismo día en que había llegado a Tokio-3, al verla a ella retorciéndose del dolor y sangrando en sus brazos, luego de caer de una camilla producto del ataque de un Ángel. Realmente ella no recordaba eso, ya que en ese momento no era plenamente consciente producto del dolor. Pero ese día, pese a su negativa inicial, Shinji se subió al EVA y peleó en su lugar.

Luego de eso habían compartido en la escuela y NERV. Lo había hecho por una orden del Comandante Ikari, pero pensándolo ahora con calma, ella lo hubiera hecho aún sin que él se lo hubiera ordenado. Shinji había despertado cosas en ella que le eran desconocidas. Recordó cómo se sintió molesta con él cuando había hablado mal del Comandante Ikari y su trabajo. Había estado tan molesta que incluso lo abofeteó. Momentos antes de eso, en su pequeño apartamento, ella salía de la ducha y encontró a Shinji en su cuarto. Luego de un accidente ridículamente estúpido, él terminó cayendo sobre ella agarrando accidentalmente su seno derecho. En ese momento había actuado fría como siempre, pidiéndole que se levantara, pero no podía negar que su toque, apretando su carne, de alguna forma se había sentido bien, agradable y cálido.

Se habían seguido encontrando luego eso, en NERV y la escuela. Habían caminado juntos muchas veces y su compañía le resultaba agradable. Pudo verlo observándola en varias ocasiones. Eso la desconcertó en un inicio, pero luego de un tiempo se sintió bien. Era agradable saber que ella era el centro de atención de él. Luego vino en ataque del Quinto Angel. Ese día donde ella se iba a sacrificar por él para darle la oportunidad de destruir al Ángel, porque era lo que debía hacer, porque no tenía nada más en la vida… porque lo quería proteger.

Los ojos de Rei se abrieron grandes ante esa revelación y se sentó de golpe en la cama. ¿Ella lo quería proteger? Sí, quería hacerlo, también quería pasar tiempo con él, quería ser el centro de su atención, quería que él la volviera a tocar como aquella vez en su departamento. ¿Cómo no se había dado cuenta de esto antes? ¿Qué significaba esto? ¿Por eso se sentía tan mal al ver como Shinji la observaba con molestia? ¿Tenía miedo de perder eso que recién se había dado cuenta que él le hacía sentir?

Rei se quedó sentada en la cama por largos minutos, analizando todas las cosas que acababa de descubrir, gracias al extraño comportamiento de Shinji. Aun así, si no fuera por eso, ella no se habría dado cuenta de todas las cosas que él la hacía sentir y que de alguna manera se había estado perdiendo, por estar más pendiente en su labor como Piloto EVA. Por alguna razón ese pensamiento la hizo sentir mal. ¿Tan ensimismada estaba en ese círculo vicioso de sin sentido por la vida que era su monótona existencia, para no ver que no tenía por qué seguir viviendo de esa forma? Más importante: ¿Qué había hecho para molestar a Shinji? Entonces, las palabras de la Teniente Ibuki volvieron a su mente:

"Mi sugerencia es que le preguntes directamente. Solo así sabrás qué es lo que lo hace estar molesto contigo"

Al encontrar la completa lógica en esa declaración, Rei se levantó de la cama, salió de su cuarto y caminó al cuarto contiguo que había sido asignado a Shinji. Presionó el intercomunicador varias veces, pero no hubo respuesta. Golpeó la puerta y nuevamente no obtuvo respuesta. Finalmente se animó a abrir la puerta.

— ¿Shinji? — preguntó tentativa, asomándose dentro del cuarto, que estaba completamente oscuro. Al encender la luz lo encontró vacío y la cama intacta.

Shinji salió de las pruebas de sincronización mucho antes que ella, por lo que ya debería estar aquí. ¿Dónde estaba él? Consideró buscarlo por un momento, pero desistió. El cuartel general de NERV era tan grande, que podía pasar días buscándolo. Decidió quedarse ahí y esperar su llegada. Con eso en mente, Rei se sentó en la cama y esperó, mientras seguía reflexionando sobre todas las cosas que acababa de descubrir.

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Shinji había llegado a las instalaciones con tiempo de sobra, por lo que pudo darse un largo baño y acudir a la gigantesca bodega antes de que lo mandaran a buscar. Su mente aún era un hervidero de ideas. Todo ese tiempo extra no había ayudado mucho para lograr asentar todo eso que dejó pasar y que ahora era tan evidente a la luz de los hechos. No pudo evitar sentirse enojado con Asuka por encandilarlo y hacerlo perder la perspectiva. Tampoco podía dejar de sentirse un poco enojado consigo mismo por dejarse caer por una cara y un cuerpo bonito. ¿Tan básico era? Bien, con 14 años y un cuerpo cargado de testosterona, no podían culparlo por eso, pero… ¡¡Demonios!! 

"Fui un idiota" pensó el Tercer Elegido nuevamente, antes de suspirar pesadamente.

Bien, ya no podía hacer nada por el pasado, pero se abría un mundo de posibilidades para el futuro, claro, si sobrevivían a toda esta mierda de los Ángeles primero y si él podía dejar de lado su timidez para hacer algo. Sin olvidar lo que cierta chica peliazul pudiera decir. Volvió a suspirar. No sacaba nada con seguir pensando en eso por ahora. Había cosas más importantes, como velar porque Rei salga con vida de esto. Levantó la vista y miró al EVA-02 cruzando los brazos sobre el pecho, considerando lo que veía.

El gigante rojo estaba sentado en el suelo de la bodega, en lo que parecía ser un traje rígido de buceo de profundidad. Si bien, no dejaba de ser impresionante ver un armatoste de 40 metros de alto en un traje de buzo, esperaba algo más cuando explicaron que iría con un "Equipamiento Especial". Aun así, debía darles algo de crédito a la rubia científica y su equipo. Meter un EVA en eso no debió ser nada fácil. En todo caso esto no quitaba el hecho de que esperaba algo más.

— Entonces, metieron al EVA-02 en un traje de buceo de profundidad. ¿Eso es todo? — preguntó Shinji con la vista fija en el gigante rojo sentado en el suelo de la gigantesca bodega, dentro de un traje de buceo rígido de color blanco, siendo visible solo parte de su cabeza por la escafandra del gigantesco casco.

Misato no pudo evitar un bufido de resignación mientras rodaba los ojos por la actitud de Shinji. Si bien el chico ya había bajado sus niveles de enojo luego de tener una seria conversación con él, aun se le notaba algo reticente con la idea de meter a un EVA en una caldera de magma. No tanto porque desconfiara del trabajo de Ritsuko y los técnicos a su cargo, o el real riesgo que conllevaría la operación, sino más bien porque Asuka se había librado con una rabieta y ella había designado a Rei para ir en su lugar, por mucho que Shinji argumentara que él era la mejor opción.

La mujer le dedicó una seria mirada al chico de pie a unos metros de ella. Vestía su Plug-Suit y estaba erguido de forma recta, con los brazos cruzados sobre el pecho, mirando en forma crítica al gigante rojo en traje de buzo, en una actitud bastante varonil. Si bien, todo esto había surgido como consecuencia de los malos tratos de Asuka, también se podía dejar entrever su deseo por cuidar de cierta chica peliazul. Eso hablaba bien de él.

Por su parte, Ritsuko, le dio una mirada dura al Tercer Elegido, mientras tenía un tic en el ojo derecho y una leve vena palpitando en la frente.

— Para tu información Shinji, este es un traje especial resistente al calor, las altas presiones y la radiación. Es el Equipamiento Tipo D, para ambientes extremos — informó Ritsuko algo molesta con la mirada crítica del joven Piloto EVA, que no se veía muy convencido con todo eso.

— De acuerdo, se ve resistente, concedo eso, pero… ¿Qué hay del cable con el que lo bajaran? ¿Resistirá el calor y la presión? — preguntó Shinji.

La vena en la frente de Ritsuko se intensificó al punto de estar por estallar. Misato le dedicó una mirada dura a este nuevo Shinji menos retraído y más decidido, surgido como resultado de la opresión de Asuka. Por su parte, Maya sonrió. Era evidente que el chico estaba preocupado por Rei.

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Rei Ayanami caminaba por el corredor rumbo a la bodega donde se le había señalado que debía presentarse. Había pasado horas esperando la llegada de Shinji en su cuarto, pero este nunca se presentó. Se sintió un poco decepcionada, ya que quería conversar con él y tratar de comprender las cosas que sentía por él; las cosas que él le hacía sentir. 

La chica peliazul detuvo su andar llevando una mano al pecho, donde experimentó una sensación de opresión y calor al pensar el Tercer Elegido. No pudo dejar de sorprenderse por esto. No había estado ahí unas horas atrás. Comenzó a sentir esto luego de reflexionar sobre el significado de Shinji para ella. Luego de descubrir que quería pasar tiempo con él, quería ser el centro de su atención, quería sentir su toque una vez más y por sobre todo, quería protegerlo. 

Rei no supo qué pensar sobre todo eso. Eran cosas nuevas para ella y no sabía cómo abordarlas. Por eso quería hablar con Shinji, pero el tiempo para eso había pasado. Ahora debía concentrarse en la operación que tenía por delante. Luego de eso, habría tiempo para charlar y tratar de dar sentido a lo que sentía. Con eso en mente reanudó su paso e ingresó a la bodega.

Lo primero que captó la atención de la Primera Elegida fue Shinji. Vestía su Plug-Suit y estaba de pie ante el que parecía ser el EVA-02, que estaba sentado en el suelo en un voluminoso traje blanco de metal. Frente al chico estaba una molesta doctora Ritsuko, a su lado la Teniente Ibuki con una pequeña sonrisa y un poco más allá, una ceñuda Capitán Katsuragi. 

— Estoy lista — dijo Rei con su característica voz monocorde, para hacerle sabe a los presentes que estaba ahí, los que voltearon de inmediato para ver a la chica acercándose a ellos en su característico Plug-Suit blanco.

Shinji contempló con detenimiento a la chica peliazul acercándose hasta detenerse a unos pasos de él. Muchas cosas pasaron por la mente del Tercer Elegido en ese momento, todas ellas enfocadas en la linda chica que estaba de pie a unos pasos de él. Tragó sonoramente.

Lo intentó, definitivamente lo intentó, pero a Shinji le fue imposible no darle una buena mirada de pies a cabeza a la chica peliazul. El Plug-Suit que llevaba abrazaba su perfecto cuerpo marcando todas sus curvas. Volvió a tragar. Rei Ayanami era una chica realmente hermosa. No tenía nada que envidiarle a esa pelirroja malas pulgas, entonces, ¿Por qué se fijó en Asuka? El pensar en la alemana hizo que su enojo volviera. Enojo por la pelirroja, por dejarse encandilar por ella, enojo porque por su rabieta le habían asignado esta operación suicida a Rei. No pudo evitar que una vez más su rostro se tensara al recordar la actitud de Rei ante esta nueva operación. Apartó la vista de la chica y volvió a contemplar al gigante rojo en traje de buzo.

La Primera Elegida sintió todo el peso de la mirada de Shinji sobre ella cuando estuvo de pie a unos pasos de él. Vio como él la miró intensamente por unos segundos, para luego recorrer su cuerpo con los ojos. Eso fue extraño. Shinji nunca había hecho algo así antes, pero no podía dejar de sentir un calor subiendo por su cuerpo ante eso. Le gustó que él la mirara de esa forma. Se sintió bien. Pero antes de que terminada de asimilarlo, antes de que pudiera decir una palabra, su mirada se tornó dura una vez más, para luego desviar la vista. Fue la misma mirada que le dio momentos antes de iniciar la prueba de sincronización, la misma mirada que le dio cuando aceptó la orden de la Capitán Katsuragi.

Rei Ayanami nunca había sido buena para lidiar con este tipo de cosas. No sabía interactuar con las personas, mucho menos lidiar con sentimientos y ciertamente esta actitud de Shinji la estaba descolocando por completo. No lo comprendía y eso por alguna razón, no le sentó bien. Apartó la mirada de Shinji y miró hacia el frente, con los ojos fijos en el suelo, con todas esas dudas dando vueltas en su cabeza. Entonces recordó una vez más su conversación con Maya Ibuki y su consejo: 

"Pregúntale directamente. Solo así sabrás que es lo que lo hace estar molesto contigo"

Mientras Rei se perdía en sus pensamientos y Shinji seguía enfurruñado, para las tres mujeres presentes no pasó desapercibida la reacción del Tercer Elegido ante la llegada de Rei. Por increíble que pareciera, el tímido y retraído Shinji Ikari le había dado una buena mirada a Rei. Literalmente la recorrió con los ojos de arriba abajo, apreciando su figura. Pero eso no duró más de unos segundos. Cuando Shinji fue consciente de su desliz, volvió al rostro huraño que había tenido desde que partió toda esta operación. Lo extraño es que pudieron juzgar que parte de esa molestia se dirigió a Rei. Eso las descolocó a las tres, sobre todo porque hace unas horas Shinji había intercedido por ella y se ofreció a tomar su lugar. Evidentemente Rei había notado todo eso y ahora estaba con la cabeza baja mirando el suelo, tan confundida como ellas.

Las tres mujeres se miraron entre ellas. Ritsuko solo levantó los hombros haciéndoles saber que no tenía idea de lo que pasaba ahí. Maya negó con la cabeza, tan perdida como Ritsuko. Misato dio otro suspiro. Un nuevo dolor de cabeza de estaba en camino. Dirigió la vista al frente, mirando seriamente a su protegido.

— ¿Hay algún problema Shinji? — preguntó, analizando al chico, tratando de descubrir si tenía un nuevo problema entre manos, considerando de paso si debía reprender al chico y darle un castigo cuanto todo esto terminara.

— Ninguno — respondió Shinji luego de unos segundos, apartando la vista del EVA-02, para mirar el piso en aparente resignación, como si estuviera finalmente aceptando lo que estaba pasando ahí.

— ¿Hay algún problema por tu parte, Rei? — preguntó a su vez Ritsuko, también curiosa con todo esto, pero sobre todo, al ver la reacción de la chica ante la mirada que le acababa de dedicar Shinji.

Si Rei tenía algún problema con todo eso, nunca lo demostró, simplemente levantó la cabeza y miro a la rubia doctora con la misma cara seria y carente de expresiones de siempre.

— El Plug-Suit de protección especial se siente igual al que uso normalmente — respondió la chica.

Ritsuko no pudo evitar dar un par de pestañadas ante la respuesta de Rei. No era eso lo que estaba esperando escuchar. Quería ver si la chica tenía algo que decir sobre la mirada que le dio Shinji y su curiosa reacción posterior, pero Rei había respondido algo distinto. Ciertamente no era lo que esperaba, pero había respondido su pregunta. Suspiró.

— Presiona el botón en tu brazo derecho — dijo la rubia, con algo de cansancio.

Rei hizo lo que la mujer le indicó y no pudo evitar un par de pestañadas en sorpresa, cuando su traje comenzó a inflarse hasta hacerla parecer un pez globo. Un lindo pez globo blando y de cabello peliazul. Rei solo se quedó de pie ahí, aun sorprendida, mientras Shinji, pese a todo su esfuerzo, no pudo evitar que sus labios se curvaran levemente hacia arriba en una pequeña sonrisa. Por su parte, Rei sintió el repentino deseo de que la tierra se la tragara para que Shinji lo la viera así. ¿Qué estaba pasando con ella? ¿Por qué pensaba estas cosas en un momento como este?

— Puede verse algo incómodo, pero esa configuración hará que soportes mejor el calor — comentó Ritsuko, retomando la palabra y señalando al EVA-02 sentado en piso atrás de ella — Como le había explicado a Shinji hace unos minutos, este es el Equipamiento Tipo D para ambientes extremos. Un traje especial resistente al calor, las altas presiones y la radiación. Estarás perfectamente segura dentro. 

— Entendido — respondió Rei, seriamente.

— ¿Alguna otra duda antes de prepararnos para partir? — cuestionó la rubia, mirando seriamente a los Pilotos, pero ambos chicos guardaron silencio. Shinji mirando nuevamente al suelo con resignación y Rei a unos pasos de él, dándole una mirada reservada. 

Maya, que había estado pendiente de todo el intercambio y fue testigo de la mirada que le dio Shinji a Rei, estaba aún más confundida con la actitud del chico. Él había mirado a Rei como solo un hombre puede mirar a una mujer, para luego darle una mirada dura y apartar la vista. Evidentemente había una historia detrás, pero no podía imaginar de qué se trataba. Aun así, tal vez pudiera darle un empujón al chico y poner a Rei en posición de descubrir qué es lo que pasaba por su cabeza. Con eso en mente, caminó hasta quedar de pie detrás de la chica peliazul, poniéndole las manos en los hombros, girándola para que quedara de frente a él.

— No tienes que preocuparte tanto Shinji. Te devolveremos a tu Rei sana y salva — dijo Maya con toda la intención, dándole una sonrisa traviesa al Tercer Elegido.

Shinji levantó la cabeza y miró a Maya con un evidente sonrojo en las mejillas ante la directa insinuación en las palabras de la mujer, luego miró a Rei y su sonrojo aumento un escalón. Por su parte Rei no pudo evitar un leve sonrojo en las mejillas por las palabras de Maya, insinuando que ella pertenecía a Shinji. Igualmente su sonrojo aumentó cuando la mirada de Shinji se posó en ella.

— Me adelantaré al avión — dijo Shinji finalmente, dando media vuelta aun con las mejillas sonrojadas, para comenzar a caminar a la salida de la bodega.

Maya esbozó una pequeña sonrisa ante esa reacción del Tercer Elegido. Había logrado lo que quería. Shinji había reaccionado bajando la guardia y dejando de lado su actitud molesta. Era el momento indicado. Estiró una mano hasta presionar el botón derecho en el Plug-Suit de Rei, para devolverlo a la normalidad y miró fijamente a la chica.

— Ve a hablar con él — dijo con una decisión poco común ella, mientras Rei la miraba con ojos sorprendidos. Maya dio un pequeño bufido de resignación, para luego empujar a la chica por los hombros — ¿Quieres saber qué le pasa a Shinji contigo? Entonces esta es tu oportunidad. Anda. ¡Ver por él!

Rei dudó por unos segundos, pero ante la mirada decidida de Maya y a que esta la estaba empujando hacia adelante, decidió hacerle caso a la mujer e ir por el Tercer Elegido. Tenía muchas dudas en su mente, quería respuestas y el único que podía ofrecerlas era el mismo Shinji Ikari. Atrás, Maya miró a Rei con aprobación, deseándole suerte mentalmente.

— ¿Qué fue todo eso, Maya? — preguntó Ritsuko, con una mirada acusadora.

— Un pequeño empujón para que arreglen las cosas entre ellos — respondió la mujer. 

— Explícate — demandó Misato, mirando seriamente a Maya con ojos afilados y los brazos cruzados bajo el pecho, logrando que la joven mujer volviera a su actitud tímida de siempre. 

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Shinji caminaba por los corredores de NERV, dando un gran rodeo rumbo al monorriel que lo llevaría a la base militar, donde estaban aparcados los dos gigantescos aviones de transporte que llevarían a los EVA a su destino. Sabía que el EVA-01 ya había sido transportado a la base y deberían estar sujetándolo al avión en este momento, pero tardarían un poco en preparar al EVA-02 para el transporte. Le iba bien. Necesitaba tiempo para despejarse, calmarse y pensar, pero las palabras de Maya aun resonaban en su cabeza.

"No tienes que preocuparte tanto Shinji. Te devolveremos a tu Rei sana y salva"

No pudo evitar un nuevo sonrojo ante la directa insinuación en esas palabras. Eso le trajo a su mente el desliz que había tenido momentos antes, al darle una mirada apreciativa a Rei de arriba a abajo, casi devorándola con los ojos. ¿En qué rayos estaba pensando? ¿Cómo pudo cometer semejante estupidez? Lo peor de todo es que Rei se dio cuenta; Misato, la doctora Ritsuko y Maya también. ¿Qué iba a hacer ahora? ¿Creerían que Asuka tuvo razón todo el tiempo al decir que era un pervertido? Pensar en la pelirroja lo hizo enojarse otra vez y dio un puñetazo contra pared que tenía al lado.

— Rayos — dijo, sintiéndose ya cansado de tanto estar enojado, aunque fuera con Asuka.

— ¿Shinji?

El aludido dio un respingo al escuchar su nombre. En parte por la sorpresa de ser llamado y en parte por la voz que pronunciaba su nombre. Sabía muy bien a quien pertenecía esa voz, era inconfundible para él. Apretó los labios pero no volteó a mirar a la chica. Nuevamente fueron muchas cosas las que pasaron por su mente, pero en este momento, por sobre todo, sentía vergüenza. ¿Qué pensaría Rei de él por haberla visto de esa forma? ¿Lo odiaría?

— ¿Qué hice para molestarte?

Esa pregunta detuvo todo proceso cognitivo que estuviera haciendo Shinji en ese momento. Una pregunta directa, muy en el estilo de Rei, pero con una gran diferencia. No fue dicha con la voz monocorde de siempre. Su voz esta vez se sintió mucho más personal, como si lo estuviera preguntado con expectación y sentimiento.

Shinji se giró para contemplar a la chica parada detrás de él y se llevó una gran sorpresa. Sin dudas era Rei Ayanami, la chica era inconfundible, pero lejos de tener ese rostro inexpresivo y su mirada fría de siempre, ahora podía ver algo de expectación en su rostro. Pequeño, pero estaba ahí. Sus ojos antes fríos, ahora lo miraban interrogantes. Su postura recta, ahora estaba algo inclinada, con un brazo flexionado y una mano apuñada contra su pecho. Todo el conjunto era el de una chica expectante y algo temerosa de su respuesta. ¿Esta era Rei? ¿Él le había hecho esto? 

— Me diste una mirada molesta cuando confirmé la orden de la Capitán Katsuragi — dijo Rei, tomando la palabra — Luego me diste la misma mirada antes de iniciar las pruebas de sincronización y hace unos minutos atrás — añadió, luego estrechó los ojos antes de mirarlo seriamente — Luego, me diste una mirada tan intensa, como si te agradara lo que veías. Me gustó sentir esa mirada.

Shinji abrió grande los ojos. ¿Ella no estaba molesta por esa mirada sucia que le dio?

— Me gustó que me vieras de esa forma — dijo Rei, atrayendo la atención de un totalmente sorprendido Shinji — Me gusta que estés pendiente de mí y pasar tiempo contigo. También me gustó tu toque esa vez en mi departamento — añadió con un leve sonrojo en las mejillas — Pero esa mirada molesta, me hace sentir mal. No me gusta sentir eso. No comprendo que hice para causarla y no comprendo tu actitud.

Shinji tragó sonoramente. Esas habían sido muchas palabras juntas para Rei y aunque ella no se hubiera percatado, las dijo con sentimiento. Eso lo hizo estremecer. Esa había sido una declaración muy potente. Tal parece que la misma Rei no se había percatado de lo profundas que eran sus propias palabras y lo que encerraban de fondo. Y ahora ella estaba ahí, expectante, esperando su respuesta. No podía callar. No ahora. Miró a la chica con determinación. No iba a huir de esto. Tal como el día en que llegó a Tokio-3 y fue a pelear en el lugar de Rei… ¡¡No iba a huir!! 

— También me gusta estar contigo Rei. Me agrada tu compañía. No puedo evitar estar pendiente de ti, observarte en la escuela, o acá en NERV y yo… bien. Fue un accidente, pero… también me gustó tocarte esa vez — dijo el chico, visiblemente apenado, pero cumpliendo con su determinación. No le iba a hacer el quite al bulto. Nunca más.

Rei sintió un calor subir por su pecho por esas últimas palabras del Tercer Elegido. Saber que él se sentía de la misma forma, la hacía sentir bien, feliz, pero…

— Si te sientes de la misma forma, ¿por qué estás molesto conmigo? — preguntó Rei, expectante.

Esa pregunta de Rei trajo a la mente de Shinji aquello que lo molestaba desde que inició toda esta locura. No pudo evitar que un ceño arrugado se formara en su cara. Desvió la vista de la chica y dio un fuerte suspiro. Por su puesto que ella no sabría qué lo molestaba. Ni siquiera parecía consiente de lo profundas que eran las palabras que estaban intercambiando.

— No quiero que se repita lo del Quinto Ángel — dijo finalmente, mirando a la chica seriamente.

Rei dio una genuina mirada de sorpresa ante esa declaración. El Quinto Ángel que intentó taladrar su paso al Geo-Frente. Ella había usado su EVA para detener el disparo del Ángel y darle tiempo a Shinji de disparar. Luego un desesperado Shinji se quemó las manos abriendo la compuerta del Entry-Plug, para ver si ella estaba bien. Había llorado de alegría al verla con vida y le pidió que sonriera. Estrechó los ojos y luego sintió un escalofrió recorrerle la espalda. ¿Acaso él? 

— Sé que estamos en guerra contra esas cosas llamadas Ángeles y nos jugamos la vida cada vez que salimos a combatir. Y es tan injusto— dijo Shinji mirando molesto a la chica — Es una completa mierda que nos digan que nadie más puede hacerlo, que es nuestro deber y luego nos carguen el destino del mundo sobre los hombros. Es injusto y aun así lo comprendo. Pero no por eso vamos a saltar así sin más de cabeza al peligro. No puedes simplemente decir que sí a todo lo que digan sin siquiera analizar las cosas antes de aceptar.

Rei abrió con sorpresa los ojos por esa fuerte declaración, por la dura mirada que le estaba dando Shinji en ese momento. Una mirada que la traspasaba y la desarmaba por partes iguales.

— Sé que es una orden de Misato, pero no por eso debes aceptar lo que ella dice sin pensar las cosas primero. Es lo mismo que hiciste cuando atacó el Quinto Ángel. Exactamente lo mismo — dijo Shinji acercándose y tomando a Rei por los hombros — Ese día te despediste como si tu vida no valiera nada. Saltaste frente a ese rayo así sin más y luego… ¿Tienes idea del miedo que sentí esos segundos en que te creí muerta? Nunca había sentido tanto miedo en toda mi vida y ahora vas y pretendes hacer lo mismo, saltando al peligro sin pensar. No quiero que vuelvas a hacer lo mismo. Tu vida es importante para mí. Tú me importas. No quiero perderte.

Shinji miró al Rei fijamente, respirando pesadamente. Rei miraba a Shinji sorprendida, impactada y sonrojada por partes iguales, asimilando sus palabras. Comprendiendo que estaba molesto por aceptar sin pensar, por no tomar en cuenta su propia seguridad, porque para él, ella era importante, porque él no quería perderla. Su sonrojo aumentó un escalón más cuando esas palabras penetraron en su mente y la golpearon con fuerza.

Ambos jóvenes se quedaron ahí, uno frente al otro, Shinji sujetando a Rei por los hombros, mirándose a los ojos, ambos sonrojados. Shinji no sabía qué hacer a continuación. Había derramado todo lo que sentía, le había dicho a Rei en su cara que era importante para él, que su peor temor era perderla, pero ahora, ¿Qué decir? Tragó sonoramente. Sus palabras habían sido claras, dejando en evidencia sus sentimientos por ella, pero sabía que faltaba algo. Tenía que decírselo directamente y hacer audible aquellas palabras que englobaban todas las cosas que ella le hacía sentir.

Shinji trató de hablar, pero las palabras no pudieron salir de su boca. El que Rei estuviera tan cerca de él, mirándolo expectante con un sonrojo en las mejillas, no ayudó. Nunca había visto a Rei expresar algo tan abiertamente. Se veía avergonzada, pero a la vez tan linda. No podía quitar los ojos de su rostro, de sus labios, unos labios que se veían tan suaves, tan besables. En ese momento que fue consciente de que aún tenía a Rei sujeta por los hombros, que estaba muy cerca de ella, que sus labios estaban tan próximos a los suyos. Solo tenía que acercarse un poco y… 

— ¡¡Bésala de una vez!!

Ambos jóvenes se congelaron ante esas palabras dichas por un hombre, en un tono de cierta desesperación y diversión. En ese momento comenzaron a ser audibles algunos comentarios susurrados y algunas risitas. Los dos Pilotos EVA giraron sus cabezas mecánicamente a un lado y, para el completo horror de Shinji, pudo ver a unas 20 personas ahí de pie entre técnicos y operarios a la entrada de uno de los talleres de refacciones para los EVA. Habían algunas mujeres ahí, las cuales cuchicheaban entre ellas divertidas y los hombres que miraban a Shinji con grandes sonrisas, levantándole el pulgar o haciendo gestos de aprobación, siendo uno de ellos el que había hablado, un tanto desesperado porque se estaba demorando demasiado en lo que estaba a punto de hacer… besar a Rei. Se sonrojo un poco más, si fuera posible. 

— Muy bien, se acabó el espectáculo. Vuelvan todos al trabajo. Ahora — dijo Misato apareciendo por el otro lado del corredor, haciendo gestos con las manos para que el grupo de impertinentes volviera a lo que debían hacer. Se escucharon algunas quejas pero ante la seria mirada de la mujer, circularon todos de regreso al trabajo, no sin que antes algunos le dieran nuevos gestos de aprobación a un Shinji, que a estas alturas estaba más rojo que el EVA-02.

Misato dio un suspiro de resignación antes de girarse y mirar al par de chicos. Shinji liberó a Rei de su agarre y ambos se quedaron de pie frente a la Directora de Operaciones. Misato los miró seriamente por unos instantes antes de que su mirada se suavizara, esbozando una pequeña sonrisa. Podía verse algo de emoción en sus ojos.

— Es hora de partir — dijo Misato, dando unos pasos hacia adelante, hasta descansar una mano en el hombro de Shinji — Maya, acompaña a Rei por favor. 

Shinji parpadeó y solo en ese momento fue consciente de una emocionada y sonriente Maya Ibuki, que había pasado desapercibida para él y que ahora se acercaba a Rei, rodeándola en un fuerte abrazo. Luego de unos segundos pasó un brazo por sus hombros, instándola a caminar con ella. Rei aun sorprendida por todo eso, observó un momento a Shinji como pidiendo su consejo y este simplemente asintió con la cabeza. Aun habían cosas por decir, pero ya no era el momento. Maya lo miró y le obsequió una sonrisa emocionada y un asentimiento de cabeza, antes de tomar a Rei y caminar alejándose por el corredor.

Shinji pudo ver como una entusiasmada Maya estrechaba el abrazó en que tenía a Rei mientras le comenzaba a hablar con una gran sonrisa en los labios, a lo que Rei solo escuchaba asintiendo de tanto en tanto. ¿De qué estaría hablando tan entusiasmada Maya? De pronto los ojos de Shinji casi salen de sus orbitas, cuando cayó en cuenta de algo muy importante, lo habían escuchado. Todos ellos, los operarios, técnicos, Misato y Maya. Escucharon cada palabra de lo que le había dicho a Rei. Sintió un vacío en el estómago y un deseo de que la tierra se lo tragara.

— Esas fueron palabras muy lindas, Shinji — dijo Misato atrayendo su atención. La mujer lo miraba con una sonrisa gentil — Siento envidia de Rei, ¿sabes? Ojalá algún día un hombre me diga algo parecido.

Era oficial. Shinji ikari acababa de crear una nueva tonalidad de rojo. Misato pasó un brazo por los hombros de su protegido y lo instó a caminar. Emprendieron rumbo hacia el monorriel en silencio, un silencio que fue cómodo y a la vez necesario para Shinji. Habían muchas cosas en su cabeza y necesitaba ordenarlas.

— No sabía que te sentías de esa forma, Shinji — dijo Misato con seriedad luego de largos segundos, atrayendo la atención del chico y sacándolo de sus reflexiones — Sé que es injusta la carga que ponemos sobre sus hombros. No es algo que jóvenes de 14 años deban enfrentar, pero no tenemos otra opción. Si pudiera, yo misma me subiría al EVA para pelear contra esas cosas, pero desgraciadamente es imposible. 

— Lo sé Misato. Lo entiendo — dijo Shinji, dándole una mirada tranquilizadora a la mujer.

— Gracias — respondió Misato con algo de emoción en su voz, para luego de unos segundos recobrar la compostura — Ahora, volviendo a la operación. Sé que aun estás molesto porque designé a Rei en reemplazo de Asuka y no acepté tu solitud de tomar su lugar, pero debes comprender que teniendo la mejor sincronización y la mayor tasa de éxito por misión, no podemos exponerte a ti o al EVA-01 a riesgos innecesarios. Son nuestra mejor carta y debemos cuidarlos.

Misato pudo ver como el ceño de Shinji se arrugaba ante esas palabras. Era evidente lo que el chico estaba pensando, que Rei era prescindible y él no. Tenía que dejarle las cosas claras ahora para evitar problemas futuros. La mujer detuvo su andar y tomó al chico por los hombros, girándolo para verlo directo a los ojos.

— Shinji, escúchame. Te diré esto claramente. No disfruto poniéndolos en riesgo, de hecho, lo detesto. Detesto tener que elegir entre ustedes para mandarlos a una misión que eventualmente podría costales la vida, pero no tenemos otra opción en este momento. Debemos hacerlo, me guste o no. ¿Lo comprendes? — preguntó.

Shinji bajó la mirada y asintió con la cabeza, sin poder encontrar las palabras para responder. Misato estrechó su agarre el sus hombros para hacer que volviera a verla a los ojos. 

— Ahora, sobre esta operación y Rei — dijo Misato, concitando la atención de Shinji, que la miró expectante — Te aseguro que hemos tomado todos los resguardos necesarios para preservar la integridad de Rei. Tú mismo viste el equipamiento y le planteaste todas tus dudas a Ritsuko. Rei estará segura ahí abajo, créeme — afirmó Misato con seriedad, dándole una fija mirada a su protegido — Ahora, tu única preocupación en este momento es permanecer a la espera como apoyo, aguardando a que Rei regrese de ese lugar. ¿De acuerdo?

Shinji dudó por unos segundos, hasta que finalmente asintió con la cabeza.

— Bien, ahora que dejamos todo eso de lado, una vez que hayamos términos con toda esta locura, podrás seguir lo que dejaste inconcluso ahí atrás y decirle a Rei claramente lo que sientes por ella — dijo Misato con una leve sonrisa traviesa.

El joven Piloto EVA dio un respingo ante esas palabras de su tutora y la miró en sorpresa con las mejillas sonrojadas, logrando que la sonrisa de Misato aumentara un poco más.

— ¡Oh, vamos! No me mires de esa forma. Hablo muy en serio Shinji. Tanto tú como yo conocemos lo suficiente a Rei, como para saber que es bastante densa en este tipo de cosas. Estoy segura que pese a todo lo que le dijiste, aun no lo comprende por completo. Espero que Maya logre ayudar un poco en eso hablando con ella, pero es definitivo: debes decírselo directamente. ¿De acuerdo?

Shinji miró sorprendido a la mujer por su directa declaración, con la que había analizado bastante bien todo lo que había pasado y no pudo encontrar errores en su lógica. Rei era una chica muy densa y no tenía dudas en que ella no había captado toda la profundidad de las palabras que intercambiaron. Lo que ella le había dicho a él y lo que él le había dicho a ella lo hacía evidente, pero Misato tenía razón, faltaba algo y él también lo sabía. Tenía que decírselo claramente, hacerlo audible, para que ella no tuviera dudas. Tenía que decirle a Rei que la amaba. 

— Sí. Se lo diré — respondió finalmente, apenas audible y con un sonrojo en las mejillas.

— Bien. Porque estaré muy enojada contigo si no lo haces — dijo con una radiante sonrisa una orgullosa Misato, pasando un brazo por los hombros de su protegido para instarlo a caminar una vez más — Ahora vamos, se nos hace tarde.

Con esas palabras Misato arrastró a un avergonzado Tercer Elegido rumbo al monorriel, mientras que este aun trataba de asimilar todo lo que había pasado en tan pocas horas, hasta qué punto habían cambiado las cosas y como seguirían cambiando, luego de que tuviera esa conversación que tenía pendiente con la chica peliazul; cuando llegara el momento en que finalmente podría decirle lo que siente por ella.

— Por cierto Shinji… ¿Qué es eso de que tocaste a Rei?

FIN

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Notas del Autor: Acá estamos entregando una nueva historia de Evangelión, donde podemos ver una reinterpretación de los hechos ocurridos antes de la batalla en el magma. Aquí Asuka se niega a sumergirse en un volcán activo y eso desencadena las cosas para que Shinji y Rei puedan aclarar sus sentimientos y llegar a encontrarse.

Para estas alturas creo que ya es sabido por todos mi preferencia por Rei, por lo que es siempre un placer escribir sobre la chica peliazul, buscando nuevas formas de emparejarla con Shinji. Eso no quita que no haya proyectos con otras chicas en mente por ahí.

¿De dónde salió esta idea? Todo partió cuando mi amigo Fantastic_Man me comentó sobre un nuevo argumento para una nueva historia de Evangelion. Me mandó el capítulo 1 para que le diera mi opinión y la idea me encantó. Aun así, en la parte donde Asuka se niega a bajar al volcán, se me ocurrió que la trama podía cambiarse para dar un giro distinto, siendo el punto de partida para un ShinjixRei. Hice mis comentarios y algunas correcciones al texto, pero Fantastic_Man no lo aprobó. Me aclaró que su historia no iba en esa dirección, por lo que era imposible hacer ese cambio. 

Ciertamente me dio algo de pena, porque sentía que la idea que se me ocurrió era buena y merecía ser contada. Fue así como me animé a consultar y luego de hablar un rato, Fantastic-Man me autorizó a usar ese fragmento de su historia, para dar inicio a este One-Shot, que es un "What if..? basado en su historia "La Desconocida", que dejo cordialmente invitados a leer en su perfil de WebNovel: https://www.webnovel.com/es/profile/4326156092

También les aviso que este no es el fin, quedan 2 epílogos que nos mostrarán lo que ocurrió con Shinji y Rei luego de la batalla en el manga.

Saludos y nos leemos.