Capítulo 3

El líder de la aldea se llamaba Wu Wen, era un hombre mayor de unos sesenta años con cabello y barba con más canas que cabello negro, su carácter era tranquilo y servicial, era un hombre muy respetado en la aldea por ser uno de los hombres de más edad, también porque su hijo menor estudiaba en la ciudad, el viejo Wu sabía leer y escribir un poco, también era considerado un erudito entre los aldeanos.

Wu Wen y su esposa habían estado afuera arreglando su pequeño huerto cuando vieron venir a Chan Jie con un joven desconocido, detrás un grupo de aldeanos nada discretos los seguía, el viejo Wu intuyo habría problemas, su esposa lo miró de reojo, luego con calma ingreso a la casa cerrando la puerta, una declaración tácita de que no iba a involucrarse. Wu Wen suspiró y dejó las herramientas para ponerse de pie y limpiar sus manos.

Zhou Zan hizo una pequeña reverencia al líder de la aldea y antes de que pudiera hablar, abrió la boca para decir sus intenciones en voz alta.

—Este humilde saluda al líder de la aldea y le pide lo ayude a hacer justicia.

—Este joven…

—Mi nombre es Zhou Zan, soy la persona que iba a casarse con Wong Heng.

El sonido de una puerta abriéndose lo hizo mirar sobre su hombro, divertido frunció levemente el ceño al ver a su esposa regresar con una apariencia un poco altiva. Se debía decir que la esposa del viejo Wu, Fen Shí de cincuenta años, era un poco demasiado curiosa.

Regresó su mirada a Zhou Zan y lo estudió discretamente, como todos en el pueblo, el viejo Wu Wen había escuchado los rumores sobre Zhou Zan, así que tenía cierto prejuicio acumulado hacia el ger, sin embargo, al conocerlo y ver su porte educado no pudo evitar reconsiderar lo que había escuchado sobre el joven, no parecía alguien irrazonable y alborotador. Ni siquiera había notado a primera vista lo sucia que estaba su ropa.

—Dime, pequeño Zhou, ¿a que te refieres con hacer justicia? Y ¿esta bien lo discutamos aquí afuera? —Lanzó una mirada alrededor, algunos de los aldeanos que se mantenían a cierta distancia pero exponían las orejas bajaron la cabeza avergonzados.

—Si.

Tras escucharlo todos asintieron con decisión y sin pena se acercaron a la zona frente a la puerta de su casa. Wu Wen miró preocupado al ger frente a él, esperaba no se arrepintiera de su decisión más tarde, sabía que los aldeanos no tenían una buena opinión de él, por lo que su acción podría llegar a ser contraproducente.

—Dime entonces, ¿qué es lo que pasa?

—El líder sabrá que fui enviado aquí para casarme con la familia Wong…

Muchos alrededor mostraron expresiones de burla, otros de vergüenza ajena. Pensaban que Zhou Zan no tenía cara para comentar su situación tan abiertamente. Una vez más a Zhou Zan no le importaba, además no planeaba revelar la verdad, no era probable pudiera volver a la casa del antiguo Zhou Zan, tampoco deseaba hacerlo.

—También sabrá que Wong Heng, con quien iba a casarme huyó el día de la boda… Yo entiendo esto, no estoy molesto, pero quisiera el líder Wu hablará con la familia Wong y les pidiera me regresen mi dote, sino tendré que ir con el Yamen.

Jadeos de miedo y asombro sonaron alrededor, Zhou Zan fingió no escucharlo, por la memoria del Zhou Zan anterior sabía que los aldeanos temían al Yamen, y sobre todo no buscaban relacionarse en problemas que los incluyera. El Yamen era un organismo gubernamental que manejaba la burocracia local bajo las órdenes del emperador. El Yamen podía encargarse del juicio en casos civiles y penales. Era un tipo de departamento de policía y administración en la antigüedad.

Que Zhou Zan quisiera ir con el Yamen significaba había ocurrido un delito grave y a los ojos de los aldeanos quedarse con su dote no lo era, también pensaban que seguramente la dote de Zhou Zan no era gran cosa, quizás unos cuantos cosas de su tiempo como sirviente, ¿por qué, qué no había pretendido volverse concubina de su señor lastimando a su señora? ¿Entonces que gran dote podría haberle dado su maestra? Pensaban que la maestra de Zhou Zan había sido bastante benevolente al liberarlo de su estatus de sirviente y buscarle un matrimonio. Cualquier otra familia rica lo habría vendido como esclavo.

Se preguntaban como era que a Zhou Zan no le dolía el rostro.

—Esto…

Zhou Zan vio al viejo Wu parecer incómodo, también escuchó los murmullos y sintió las malas miradas a su alrededor, sus emociones permanecieron estables.

—La dote es el resultado de mis años de trabajo, mi dote equivale a tres acres de tierra, tres costales de harina de trigo, tres costales de arroz, dos costales de azúcar, dos costales de sal, un barril y medio de aceite, tres rollos de tela, algunas prendas de ropa y diez taels de plata. Incluyendo la suma de mis propios ahorros por trabajo, suman quince taels de plata.

Como Wu Wen, los que escucharon se sorprendieron, algunos mirando a Zhou Zan con la boca abierta. Esa dote era demasiado, generalmente dos taels de plata con algunas cosas más era lo que se consideraba una dote generosa, todo lo que había enlistado Zhou Zan les hizo pensar en cuan rica debía ser la familia donde Zhou Zan trabajo.

No era sorpresa la familia Wong aceptará a Zhou Zan, no era una sorpresa este quisiera ir a denunciarlos al Yamen, ¡la familia Wong le había robado!

¿Realmente Zhou Zan había intentado subirse a la cama del esposo de su maestra? Si era así, ¿por qué había preparado una dote tan grandiosa para él? Los aldeanos no creían lo mencionado fuera producto solo del trabajo de Zhou Zan. Era un pequeño sirviente, su sueldo mensual no podía ser tanto, pensaron con escepticismo.

—No me digas que… su maestro le preparó esa dote.

Ojos despectivos se dirigieron a Zhou Zan.

—Qué habilidad, ah.

—¡No pudo volverse su concubina pero mira todo lo que le saco!

—Zorra astuta —escupió alguien.

Wu Wen por el contrario pensó diferente, pensó que quizás esos rumores podían tener algo de falsedad, porque el sabía el maestro de la casa donde había trabajado Zhou Zan había muerto un mes antes de que este fuera enviado. Llegó a la conclusión que esa dote solo era el producto del trabajo de años de Zhou Zan o que había algo más en la historia. Pero, aunque expusiera sus sospechas, estas no ayudarían a Zhou Zan, los aldeanos eran gente simple que una vez que creían algo, no dejaban de pensar en eso hasta que una prueba de inocencia más grande sucedía frente a sus narices, algunos seguían llamando a Zhou Zan zorra a pesar de que podían ver claramente como el símbolo en su frente era rosa pálido. Además, no conocía la situación y como líder de la aldea debía ser imparcial.

Zhou Zan sabía muchos llegarían a esa conclusión, pero también sabía otros más inteligentes como el señor Wu comenzarían a pensar. Por lo menos una pizca de duda para limpiar su imagen sería sembrada ese día. Quería vivir una vida tranquila en la aldea, para eso necesitaba el apoyo del líder junto una sana convivencia con los que serían sus vecinos.

—¡Basta, todos! Si no conocen de verdad la situación no pueden opinar.

—Señor, entiende ahora porque estoy tentado a ir al Yamen? No quiero traer problemas y pensé ir con el Yamen sería un movimiento demasiado agresivo, no busco enemistarme con nadie, pero de verdad necesito mi dote para sobrevivir de ahora en adelante, no tengo familia u otro lugar al cual regresar. La verdad, es que tengo la intención de establecerme aquí, es un bello lugar y parece muy tranquilo.

Zhou Zan no quería arriesgarse e ir a aventurarse al mundo, estaba cansado de vivir corriendo de un lado a otro.

Wu Wen pensó que eso era correcto, también entendía Zhou Zan buscaba su permiso para quedarse, si decidía ayudarlo sería como si le diera su aprobación, eso ayudaría a que los aldeanos no fueran tan despectivos con él en el futuro.

—Entiendo. Tienes razón en buscar solucionar tu problema de esta manera. Vamos a la casa de la familia Wong.

Los aldeanos reunidos alrededor los siguieron para continuar viendo la emoción.