Capítulo 75

El retorno a la mansión fue suave.

Aparte de algunos zombies en el camino no hubo mayor obstaculo.

Luego de que Komuro y Hikigaya abrieran las puertas de la mansión, las dos ambulancias entraron y estacionaron juntas.

Shiryu bajó con Yuko en brazos y caminó hacia dentro de la casa.

"Hay nuevos miembros, por favor, llevense bien"

Shiryu había sido bastante vago, sin embargo, no tenía mucho más para decir.

La prioridad ahora mismo era curar a Yuko. Si bien ya había dicho que no estaba herida de gravedad, no iba a dejar que uno de los pocos miembros del grupo que era efectivo en combate se quedara fuera durante mucho tiempo.

Simplemente la llevó a su taller y la dejó suavemente recostada en una larga mesa mientras tomaba algunas cosas de una estantería.

Habiendo tomado una pequeña botella, Shiryu la abrió y dejó que una pildora de color verde limón cayera en una servilleta en su mano.

"Abre la boca" Dijo Shiryu mientras levantaba la cabeza de Yuko con cuidado.

"Que sorpresa... Eres más atento de lo que imaginaba"

Shiryu puso los ojos en blanco ante las palabras de esta mujer despreocupada y acercó más la pildora al rostro de Yuko.

"Tomala. Probablemente sabrá algo amarga, pero se deshacerá rápidamente"

Sin decir nada más, Yuko abrió la boca y dejó que Shiryu dejara caer la pildora allí.

Yuko arrugó su rostro unos segundos ante el sabor de la pildora antes de abrir los ojos con sorpresa.

"Se deshizo tan rápido..."

Shiryu no dijo nada y lavó sus manos en un grifo que había allí antes de tomar una botella con un liquido aceitoso que derramó en sus manos.

"Quitate la chaqueta y la blusa"

Yuko no pudo evitar fruncir el ceño. Sabía que este chico tenía metodos extraordinarios, sin embargo, esto era bastante para ella.

"¿Qué quieres hacer?" Preguntó confundida.

Shiryu simplemente se acercó hasta estar a su lado y respondió: "La pildora que te di funciona como una especie de potenciador para la recuperación natural del cuerpo. Normalmente, el efecto se dispersaría por todo el cuerpo y causaría que el efecto fuera minimo, sin embargo, tengo un metodo para que el efecto se concentre en un solo punto"

Aunque aun con dudas, Yuko se quitó la chaqueta y la blusa, quedando así casi completamente desnuda, dejando solamente su sostén.

El rostro de Yuko se sonrojo de vergüenza y no pudo evitar mirar la reacción de Shiryu.

Ella misma sabía el poder de combate que tenían sus pechos y estaba orgullosa de ellos, sin embargo, el chico frente a ella no mostró ninguna reacción ante ellos y simplemente comenzó a masajear suavemente el costado de Yuko.

Shiryu esparció el aceite sobre las costillas rotas de Yuko y masajeó la zona infundiendo Ki durante varios minutos.

Este proceso guiaba la medicina a la zona afectada y lo potenciaba levemente.

Cuando el aceite se secó, Shiryu tomó una pequeña caja y la abrió.

Habían almenos varias decenas de agujas finas de las cuales puso unas 6 en las costillas rotas de Yuko.

"Dentro de un rato estarás mucho mejor" Dijo Shiryu mientras tomaba una toalla que había en uno de los armarios de la habitación y secaba sus manos.

Volviendo hacia el lado de Yuko con una sonrisa, Shiryu tomó una silla y se sentó.

La sonrisa de Shiryu se desvaneció y miró fijamente a Yuko: "Yuko. Quiero que me digas algo con honestidad"

Viendo la seriedad con la que Shiryu actuaba, Yuko tambien se puso seria y asintió: "Depende de lo que sea"

"Yuko... ¿Tienes alguna hermana?, Además, ¿Qué relación tienes con el clan Tobishiro?"

"..."

Yuko suspiró con cansancio y miró directamente hacia el techo antes de comenzar a hablar: "No es que yo tenga relación con el clan Tobishiro... Mi familia la tiene"

"Mi familia fue una de las familias guardianas de la familia Tobishiro durante varias generaciones. Cada jefe de la familia Sagiri trabaja para los Tobishiro, dedicando su vida haciendo todo lo que esté en sus manos para ahuyentar a los enemigos"

"Todos los sucesores aceptan el mismo destino... Incluida mi hermana."

"Ella, al ser la mayor, fue entrenada desde pequeña para volverse la proxima lider de la familia Sagiri. Ella debía de tomar la misma posición que mi padre tuvo durante años. Y lo hizo luego de que mi padre muriera en un accidente"

"Se vio obligada a tomar esa posición incluso cuando su deseo era volverse actriz. Si no lo hubiera hecho... Lo más probable es que el mismo patriarca de los Tobishiro ordenara asesinarnos"

"Sin embargo, incluso cuando mi hermana tomó esa decisión, uno de los sirvientes de confianza de Tobishiro, uno de los 4 protectores demoniacos, traicionó a Tobishiro y emboscó a mi hermana cuando yo intentaba obtener respuestas de ella"

"Antes de eso mi hermana me había apuñalado sin querer, por lo que perdí el conocimiento bastante rápido, sin embargo, Miki dijo que solo fue gracias a mi hermana que pudimos escapar"

"Según lo que dijo Mochizuki-sensei, no se encontró rastro de mi hermana en el lugar de los hechos, sin embargo, por la cantidad de sangre que había, lo más probable es que hubiera muerto"

Dijo eso ultimo con pesar.

Shiryu asintió en comprensión y no dijo nada más.

"¿Por qué esas preguntas tan repentinas?" Preguntó Yuko.

Shiryu sacudió levemente la cabeza y se acercó a tocar el abdomen de Yuko.

Sacó todas las agujas que había puesto antes allí y ayudó a Yuko a levantarse.

"Tu medicina es bastante buena" Dijo Yuko en admiración.

"Todavía es mala" Dijo Shiryu vagamente.

"Sigueme. Quiero mostrarte algo"

Sin esperar ninguna palabra de Yuko, Shiryu caminó alrededor de la mansión hasta detenerse al frente de su habitación.

Abrió la puerta lentamente y entró para encontrar a Rin sentada en una silla mientras miraba a la mujer que era subordinada de Tobishiro.

Incluso cuando no se dijo ninguna palabra, Shiryu sabía cual era el estado de Yuko ahora mismo.

"Yoko..." Murmuró Yuko luego de unos segundos.

La mujer, Yoko, ya había despertado de su inconsciencia e incluso había sido desatada por Rin.

"Yo ya no soy Yoko. Le prometí mi vida al maestro para atacar a todos los enemigos, para proteger a la ciudad y al Señor Tobishiro... Y para transmitir los misterios de la familia... Volví del infierno."

"Yoko Sagiri ha muerto. Mi nombre es ahora Protectora Demoniaca Tsurugi"

Tras las palabras de Yoko, la habitación se quedó en silencio.

Yuko no sabía que decir. Por fin había vuelto a ver a su hermana y ella había dejado su pasado así.

Su mente se estaba volviendo un caos, hasta que, de repente, una mano se posó en su hombro brevemente antes de que un chico caminara hasta donde estaba Yoko.

Shiryu la miró desde arriba, no tenía ninguna clase de expresión.

"Tu maestro ha muerto. Junto con eso tus camaradas y el decendiente de Tobishiro. No tienes nada ni nadie a quien servir"

"Eres como un perro callejero ahora mismo. No tienes nadie quien te use ni ningun objetivo propio"

"Eso es lo que es el orgulloso Demonio Protector Tsurugi"

"Sin embargo, a nadie le importa esa mierda. Junto con los Tobishiro, toda la herencia que tu familia Tsurugi llevaba como guardianes de Tobishiro se fue a la basura"

"Tu familia que antes tenía su nombre e importancia ahora no es más que una simple familia común"

"No, ya no es ni una familia común. Cortaste tus lazos con Yuko y eso te hace solo una nomada. Alguien cuyo apellido solo es un fantasma de lo que alguna vez pudo ser"

"Más que apellido, ese Sagiri es más como un titulo sin importancia. Aparte de Yuko, probablemente nadie te reconocerá"

"Enorgullecete. Si no fuera porque conozco a Yuko, lo más probable es que tambien te hubiera matado cuando me encargué de Tobishiro. Aparte de tu belleza, no hay nada por lo que reconocerte"

"En fin... Ahora que sabes que tu maestro ha muerto, ¿Seguirás siendo terca y te aferrarás a una obligación sin sentido que abrazaste o por fin podrás tomar una decisión en tu vida y hacer lo que quieres?"