Collar metálico

Solo después de que Astheria terminara de contar su historia, Shin pudo entender porque la mujer odiaba tanto a Riessus.

Astheria se levantó de la cama y se acercó a la ventana antes de voltear a mirar a Shin.

"¿Y cuál es tu historia?, lo menos que puede hacer para disculparme es saber sobre ti"

Shin miro con una mirada muerta a Astheria, solo después de causarle tantos problemas venía a preguntar sobre él.

Shin tampoco tenía muchas ganas de revelar su propósito para estar en el lugar que estaba y que iba a hacer allí.

"¿Yo?, solo alguien con mala suerte" Shin se encogió de hombros y se sentó al borde de la cama.

"Que aburrido" Astheria se quejó del obvio intento de Shin por evadir la pregunta.

"Tenemos mejores cosas que hacer que estar hablando de nuestras vidas" Shin cambio de tema y en cambio se enfocó en saber en donde se encontraban.

Astheria también estaba intrigada por este extraño lugar pero no tenía miedo ni nada parecido, para ella después de haber muerto físicamente hace 40 años habían significado que cualquier cosa era insignificante por lo que no había motivos para asustarse por estar en una situación precaria.

Shin tampoco tenían miedo pero por otro motivo diferente, estaba de alguna manera acostumbrándose a que todo a su alrededor era peligroso y que cualquier cosa podía pasar.

Shin se apoyó sobre el marco de la ventana y observo las islas flotantes más allá de la ventana.

"¿Acaso es una película?" murmuro Shin.

"¿Qué es una película?" pregunta Astheria ale escuchar los murmullos de Shin.

"Nada…"

En ese momento Astheria comenzó a mirarlo algo sorprendida por lo que Shin no pudo evitar sentir que algo estaba mal.

"¿Que ocurre?"

Astheria se demoró unos segundos en responder y solo señalo su cuello antes de hablar.

"¿Es normal esa cadena?"

Shin no entendió a lo que se refería la mujer pero por reflejo se tocó el cuello y sintió algo frio que cubría su piel.

'¿Eh?'

Shin comenzó a tocar su cuello y se dio cuenta de que tenía un collar de metal por el cual salía una cadena de pocos centímetros de largo.

"¿!Que es esto!?"

Shin trato de quitarse el collar pero por mucha fuerza que hiciera el collar de metal permanecía pegado a su cuello.

"Quizás deberías---" Astheria estaba a punto de darle una idea a Shin pero de repente se escuchó la voz apagada en la habitación.

"Yo no haría eso si fuera tu"

Shin inmediatamente dejo de forzar el collar y por reflejo intento empuñar su espada pero se dio cuenta de que la espada no estaba por ningún lugar.

A su lado Astheria sostenía su espada blanca apuntando al hombre que acababa de aparecer. Se podía ver su clara precaución en contra del hombre ya que ella no pudo sentirlo en absoluto.

Era necesario recordar que Astheria estaba en la etapa experta pero ni siquiera de esa manera pudo sentir la presencia del hombre. Por eso estaba teniendo mucha precaución en contra de él.

Shin observo al hombre frente a él y se dio cuenta de que en verdad era un anciano de pelo y barba blanca la cual le llegaba hasta el pecho.

El anciano parecía un vagabundo ya que su ropa estaba vieja y ni su pelo ni su barba estaban bien cuidadas.

Pero Shin no se atrevió a juzgar al anciano por su físico, no sabía nada de este lugar y no quería que por un descuido de su parte el paisaje de islas flotantes y un cielo rojo fuera lo ultima que viera antes de morir.

"¿Quién er—" intento preguntar calmadamente Shin pero el anciano lo interrumpió en medio de su pregunta y le impidió continuar hablando

"Detente, no me interesan sus preguntas capciosas. No vine a este lugar porque sentí una presencia diferente, no para charlar"

Shin y Astheria se quedaron algo sorprendidos por la actitud del hombre pero no hicieron nada más que quedarse en silencio.

El anciano estudio a Shin y suspiro.

"Solo es otra alma atrapada"

Luego miro a Astheria y prácticamente la ignoro después de un vistazo.

"Tch, solo perdí el viaje"

El anciano suspiro y desapareció del lugar como si se hubiera teletransportado.

Ambos se quedaron en silencio un segundo hasta que se miraron y Astheria hablo:

"¿Qué fue eso?"

Shin no respondió y solo toco el collar de metal sobre su cuello antes de comenzar a caminar hacia la puerta destruida de la habitación.

"¡Oye!, ¿Qué haces?" pregunto Astheria viendo como Shin salió de la habitación como si nada hubiera sucedido.

Shin no dejo de caminar y se asomó por la puerta para ver que había fuera de la habitación.

"Saliendo de este lugar"

Al ver que solo había un pasillo con varias mesas y otras cosas destruidas Shin salió de la habitación y comenzó a buscar la salida.

"!Oye!, ¡Espérame!"

Viendo que Shin no tenía la intención de esperarla, Astheria salió corriendo de la habitación para seguirlo.

Después de unos minutos ambos salieron del edificio y notaron de inmediato que el aire era más pesado y se hacía algo difícil de respirar.

Sin embargo Astheria sintió como no podía respirar y que todo su cuerpo comenzaba a calentarse y a doler.

Shin vio como Astheria comenzaba a retorcerse antes de caer de rodillas y no entendió que le estaba pasando a la mujer que a él no.

Astheria tuvo que apoyar sus manos sobre la tierra para no caerse pero sus brazos comenzaron a fallar por lo que cayó al piso de lado mientras jadeaba de dolor.

Por mucho que la mujer le hubiera causado muchos problemas, Shin no pudo evitar sentirse preocuparse por ella al verla sufrir de esa manera.

Pero de repente Astheria comenzó a brillar levemente y segundos después su cuerpo exploto en partículas de luz que entraron en la espada blanca.

Shin miro sorprendido lo que acababa de pasar y luego de unos segundos se acercó y tomo la espada blanca y la volvió a mirar con detalle, tal cual la había mirado la primera vez que la había encontrado en el laberinto de espejos.

Ya no tenía miedo de que volviera a ser poseído por Astheria ya que desde que llego a este lugar se dio cuenta de que no estaba en su cuerpo físico por lo que no podía poseerlo.

Apenas el mundo se transformó de la habitación blanca de sus recuerdos a la habitación destruido, lo primero que hizo fue revisar su información.

Después de verla se dio cuenta de que dos cosas habían cambiado.

Nombre: [Shin]

Títulos: [Heredero de la oscuridad]

Etapa: [Mortal]

Alma: [Mortal]

Núcleo: [15/100]

Habilidades: [Palabra oscura] [Hilo controlador] [Toque oscuro] [Resonancia] [Telepatía sensorial]

Objetos: [Aguijón blanco]

Contratos: [Caronte]

El nombre de Caronte estaba tachado.

La primera vez que vio esto, Shin se asustó al pensar que Caronte había muerto pero no podía estar seguro de eso por lo que simplemente le toco guardarse sus preocupaciones.

Además de eso aparecía la espada blanca de Astheria en sus objetos.

"Aguijón blanco…"

Shin observo la espada blanca de Astheria durante un rato antes de suspirar y mirar a su alrededor.

"¿Ahora que hago?"

Atrás de el estaba el edificio destruido del que acababa de salir y frente a el una carretera rodeada de bosque.

"¿Como hay una carretera?"

Desde que llego a Grigarm se dio cuenta de que la infraestructura de las ciudades era medieval pero también existía tecnología moderna, durante el tiempo que había estado viajando se acostumbró a ello pero ver una carretera en este lugar cuando no existía ninguna en Grigarm era demasiado extraño.

Todo era demasiado raro pero de todas maneras Shin comenzó a caminar por la carretera para alejarse de ese lugar y explorar estas tierras extrañas.