Capítulo 3 - ¡Sangre e Ira!

En la oscuridad de la noche estaba cayendo lluvia fría y el viendo soplando, todo el pueblo de Si Qiao sacudiéndose. Con Huashan Fei gobernando tiránicamente sobre la ciudad, nadie se atrevió a abordar este asunto, que concierne a más de 10 vidas humanas, lo que indica cuán brutalmente poderoso es Huashan Fei.

Sheyan avanzo silenciosamente en la sofocante oscuridad de la noche, mientras las gotas de agua helada empapaban su abrigo. Aun así, siguió adelante con una furia ardiente atrapada en su corazón.

20 metros más adelante se encuentra el puerto donde estaba estacionado Fu Yuan, el muelle de descarga estaba cubierto con un enorme toldo que bloqueaba la lluvia y el sol, en el que los marineros acumularían mercancías. Los guardias que vigilan sirven para no dejar que personas intenten entrar o causar travesuras. Debajo del toldo se encuentran 2 focos enormes, iluminando toda el área. Un grupo de subalternos de Huashan Fei rodeó a los 3 hombres acurrucados y tendidos en el suelo, mientras los golpeaban con entusiasmo y procedían a echarles aceite. De vez en cuando uno de ellos soltaba un grito:

—¡Hijo de Puta[J1] ! ¡Te atreviste a levantar tu cuchillo contra mí, ahora defiéndete!

—¡Voy a matar a toda tu familia!

—¡Robaré tu propiedad y destruiré tus negocios!

—...

—...

Sheyan se acercó con previsión, en este momento Huashan Fei estaba haciendo señas a sus subordinados para que se apartaran, habló en voz baja:

—Xide, ¿quién te dio ese corte en la cara?

Los cuatro muchachos en el piso comenzaron a forcejear y a gemir, pero ninguno de ellos dijo nada. Con un simple gesto con la mano, dos hombres fuertes y agresivos recogieron a uno de los hombres heridos como Huashan Fei lo ordenó:

—¿Nadie quiere hablar? ¡Bien! No podré explicarle al lado del hermano Ming, ¡entonces simplemente los ofreceré a ustedes cuatro como una disculpa!

—¡Soy yo! ¡yo lo corté! —El que habló con voz cansada fue Dasi. Al escuchar esto, Sheyan sintió que la adrenalina subía, provocando que repetidamente se cargara por impulso.

—¡Pui[J2] ! —Huashan Fei escupió en la cara de Dasi.

—¡En verdad este viejo fastidioso tiene esos cojones, me gusta! Dime, ¿qué mano usaste para lastimar a Xide?

Dasi miró en silencio. Huashan Fei tampoco esperaba una respuesta, ya que fumó su cigarrillo y luego usó el extremo en llamas para presionar la cara de Dasi. Un hedor ardiente llenó el aire pesado, de repente Huashan Fei estallo en ataque, mientras pisoteaba a Dasi:

—¡Presiónelo por mí! ¡Quítenle los dedos uno a la vez y ofrézcanlo al Joven Maestro Xide como una muestra de perdón! ¡El resto de ustedes, traigan el bote y préndanlo en llamas!

Después de escuchar las enloquecidas instrucciones de Huashan Fei, Sheyan de repente sintió, surgiendo dentro de su pecho, una sensación incomprensible seguida de un sabor salado que inundaba su garganta. Su cuerpo entero se estaba calentando mientras su sangre hervía de ira. Lamiendo sus labios secos y ásperos, apretando su cuchillo con fuerza, los músculos de sus piernas ya habían comenzado a tensarse. Huashan Fei pisoteo con fuerza frustrado, cuando se dio la vuelta y dijo:

—¿Te has asegurado de que el Joven Maestro Xide esté bien? ¿Por qué está demorando tanto cubrir esa herida?

Las palabras de Huashan Fei fueron dirigidas a un subordinado a su lado. Este subordinado era de confianza de Huashan Fei, mientras hablaba bruscamente:

—¡Hermano hermano, estás pensando demasiado! Un corte tan pequeño en la cara no afectará nada. La única preocupación es este clima frío y estremecedor de huesos. Ese gigoló, Xide, simplemente necesita volver y curar su firo, eso es todo…

Inicialmente, Sheyan no pudo aguantarlo más, ya que se preparó para cagar hacia adelante. Al escuchar estas pocas palabras, sus gruesas cejas negras fruncían el ceño con tanta fuerza que habían formado una sola ceja como una nueva idea formulada en su mente. Sin tener en cuenta lo que lo rodeaba, aceleró sus pasos y cargó hacia donde vivía Huashan Fei.

Basándose en su intelecto natural, Sheyan sabía que incluso si cargaba agresivamente, no podría rescatar al tío Dasi y, en cambio, estaría sacrificando su vida en vano. Sin embargo, los subordinados de Huashan Fei en esta ciudad de Si Qiao son solo unas 20 personas. Los que podían luchar se estaban preparando para quemar el barco Fu Yuan. La gente que atendía la herida de Xide eran solo 3. Si lograba capturar a Xide como rehén, entonces tendría una pequeña posibilidad de rescatar al tío Dasi. Lo que sucediera después, a Sheyan ya no se le podía perturbar, ya que habría demasiadas variables que considerar. Las únicas palabras que mantuvo en su corazón ahora eran: —Enfréntate a sus enemigos con valentía uno por uno para lograr la victoria.

Dado el estatus de Huashan Fei en la ciudad, debido a que la ciudad enfrentaba constantemente la presión de las autoridades superiores, en realidad vivía en una cabaña de aspecto ordinario. Sin embargo, todavía parecía considerablemente más nuevo y más grande que las cabañas circundantes. Queriendo flexionar su posición, había construido una barrera de cerca alrededor de su cabaña. Sheyan era como un ninja en las sombras, ya que su cuerpo había sido empapado por la lluvia y el barro cubría sus zapatos, solo sus ojos permanecían con una mirada fija y venenosa. Parecía un lobo hambriento que no había comido durante días.

—Finalmente he llegado —Sheyan mantuvo su mirada fija en la cabaña vallada, mientras su corazón estaba lleno de nerviosismo y palpitaciones. Metió la mano en el bolsillo del pantalón con su mano blanca y arrugada, sacó un gélido e impasible cuchillo afilado. Sujetando firmemente la base del cuchillo que había sido envuelto con un paño. La respiración de Sheyan se hizo más profunda cuando se envolvió una tela hecha jirones en la frente, untando barro en su rostro impasible, mientras se dirigía con cautela hacia la cabaña de Huashan Fei.

La cerca estaba reforzada con acero duro, no tenía timbre y estaba un poco floja en la parte superior. Sheyan sacudió la cerca ferozmente y golpeó contra el concreto a un lado. A medida que resonaban los ruidos de repiqueteo y golpes, una débil luz emergió dentro de la oscuridad de la cabaña seguida por un grito frustrado:

—¿Qué demonios, ¿quién está causando ese alboroto?

Sheyan sintió que su corazón latía más rápido, pero en este punto se calmó gritando desde su diafragma:

—¡Una tragedia! ¡una tragedia! ¡El hermano Fei me ha enviado a informarles!

Esta frase fue extremadamente efectiva, ya que alguien se apresuró a salir corriendo hacia la cerca frente a Sheyan, pero por sospecha no abrió la puerta de la cerca. Sheyan lo reconoció como el primo de Huashan Fei apodado 'Polvo Blanco Ming' porque seguía la crueldad de Huashan Fei, destruyendo familias, pero principalmente vendía drogas en polvo blancas para él. El mismo Sheyan tuvo que pagar a este cabrón una suma considerable para que le permitieran construir su cabaña. Es por eso que, al encontrarlo, sintió un odio vengativo formándose en su mente. Inclinando su cabeza hacia abajo mientras usaba la tela para cubrir la mitad de su cara, Sheyan agarró con fuerza la cerca y exclamó:

—¡Hermano Ming! ¡Han llegado muchos agentes! ¡Uno de los malditos bastardos informó al gobernador!

'Polvo Blanco Ming' de repente pareció asustado, aunque hubo notables aspectos sospechosos en el discurso de Sheyan, pero sin pensarlo más, habló con asombro:

—¡¿Qué carajos?! El hermano Fei normalmente ya compró al magistrado. ¡¿Por qué vendrían[J3] aquí?!

En su estado mental de pánico, inconscientemente su mano se movió por sí misma y abrió la puerta de la cerca, pero al abrirla a mitad de camino se dio cuenta de que había algo que no encajaba. Inmediatamente le preguntó:

—¿Por qué el Hermano Fei no nos llamó por teléfono sino que te envió aquí para informarnos?

Esta pregunta realmente expuso la falla más grande en el plan de Sheyan, ¡pero Sheyan ya lo había considerado! Sheyan fue naturalmente ingenioso, respondiendo de inmediato sin tartamudear:

—Los pocos agentes de policía que llegaron con urgencia eran irreconocibles, por lo que el hermano Fei, en su leve shock, golpeó accidentalmente este teléfono en el barro. ¿Cómo podría funcionar el teléfono en ese estado? Temía que me malinterpretara y me pasó el teléfono como evidencia. No me crees, míralo por ti mismo.

Después de lo cual, levantó su mano izquierda, con un teléfono negro embarrado que parecía un elemento similar a su Palm[1].

En realidad, hubo varios puntos cuestionables sobre la afirmación de Sheyan y si uno fuera más profundo, lo expondría fácilmente. Sin embargo, Polvo Blanco Ming solo se enfocó en el teléfono y se conformó con ver la única evidencia, así como la fuerza inquebrantable en la voz de Sheyan. Abrió la puerta y asomó la cabeza para mirar más de cerca el objeto de la mano izquierda de Sheyan.

La mano de Sheyan inmediatamente se convirtió en un puño, aplastando fuertemente la cara de Ming.

Un repentino dolor estalló dentro de la nariz Polvo Blanco Ming, mientras sangre, moco y lágrimas brotaban de sus ojos y nariz. Cuando estaba a punto de gritar pidiendo ayuda, sintió que una helada sensación penetraba en su pecho. Esa frialdad comenzó a surgir hacia arriba y, finalmente, alcanzó sus cuerdas vocales eliminando todo rastro de sonidos. Bajo el insoportable dolor y la conmoción, levantó la cabeza y se encontró directamente con la mirada de un par de ojos ardientes. El dolor comenzó a infiltrarse en su conciencia, y pronto se apoderó de todo su ser.

Sheyan aflojó suavemente su agarre del cuchillo cuando su víctima se dejó caer lentamente sobre las fangosas aguas frías, coloreando el barro con un rojo marron brillante. A medida que la fuerte lluvia continuaba cayendo y los sonidos del viento y los truenos llenaban el aire, el aire circundante emitía una habitual sensación de tranquilidad, como si nada hubiera ocurrido. Naturalmente, la gente dentro de la cabaña era ajena.

Sheyan respiró hondo varias veces, mientras en él, su intención asesina se retiraba. Sin embargo, una sensación extraña aumentó dentro de él, como si los últimos 20 años hubieran sido vividos en vano, pero los últimos minutos pasados entre la vida y la muerte le habían dado una extraña emoción sádica.

La lluvia helada golpeó con fuerza, pero Sheyan, en cambio, estaba encendido. Respiró hondo varias veces, abrió la puerta y entró de puntillas. Se detuvo en la entrada y presionó su cuerpo contra la pared. Mientras sigilosamente escuchaba a escondidas las conversaciones:

—¿Se atrevió a cortarme? ¡Hijo de[J4] Puta, él realmente se atrevió a cortarme! ¡Quiero que su familia entera muera! ¿Dónde está el doctor? ¡¿Dónde está?

—La ciudad más cercana está a 20 kilómetros, con este aguacero incluso el médico más rápido solo puede llegar mañana por la mañana.

[1] marca de smartphones.

 [J1]Hardword.

 [J2]onomatopeya

 [J3]revisar si unir dos signos (exclamación y question mark ) es valido

 [J4]hard Word… en México chinga tu madre que en general todos en latinoamerica entendemos el contexto, pero el internacional es 'hijo que puta"