Mundo Shinobi - Lo que importa es la fuerza - 100

Después de una larga practica en donde Hiruzen termino jadeando en el suelo del cansancio. Los niños salieron de campo de prácticas y caminaron de vuelta a Konoha. Las nubes seguían paseando por el cielo, proveyendo al equipo uno de sombras a ratos. El calor seguía siendo el mismo, pero la brisa se puso más fresca, lo que ayudo a aminorar el letargo.

Los tres caminaban uno al lado del otro, con Akane en medio, Kaoru a la izquierda y Sakumo a la derecha. Kaoru avanzaba con las manos apoyadas en su regazo, como solo lo haría una dama noble. Akane caminaba con los brazos cruzados mientras mirando al suelo mientras Sakumo caminaba con los brazos levantados y las manos detrás de su nuca. Iba alternando su mirada entre el cielo y el suelo, como solo lo haría un tipo sin preocupaciones.

Sakumo sin quitar las manos de su nuca, miró a Akane de soslayo y la noto preocupada. Ya llevaba así desde que salieron del campo de práctica.

-¿Qué sucede Akane?- pregunto Sakumo

-Mmm- dijo Akane estirando sus labios y frunciendo el ceño como si estuviera pensando en algo difícil

Sakumo soltó un suspiro y siguió mirando al cielo mientras avanzaba. Por dentro pensó que era mejor dejar a Akane sola, seguramente estaba pensando en alguno de esos diseños estrafalarios que solo a ella se le podían ocurrir.

-Akane-chan- dijo Kaoru -Sakumo-chan te está hablando-

Sin embargo, Akane siguió pensando en algo e ignoro a todos. Era como si caminara por las nubes, sin prestar atención a lo que la rodeaba.

Sakumo inclino la cabeza y su torso hacia atrás, para mirar a Kaoru por detrás de Akane -déjalo, Kaoru-chan- dijo -cuando Akane se pone en estado creativo, uno solo habla con el aire-

-Está bien, Sakumo-chan- dijo Kaoru -es solo que okaa-sama me enseño que es de mala educación dejar hablando solos a los demás -

-Sí, bueno- dijo Sakumo, sonrió y continuo -con el tiempo te acostumbraras-

-Sin embargo, es sorprendente como Akane-chan se puede abstraer de esa manera. En estos momentos es una diana móvil-

-Sí, sí, así que hay que tener un ojo y cuidarla-

Kaoru hizo una amplia sonrisa y dijo -es como si fuéramos los guardaespaldas de Akane-chan-

-Sí, sí-

Ambos niños se largaron a reír, pero Akane solo siguió caminando, pensando en sus cosas e ignorando que se estaban riendo a su costa. Kaoru y Sakumo le comenzaron a hacer morisquetas, a tocarle la cara o a decirle cosas burlescas. Se sorprendieron de como Akane en ningún momento se dio cuenta. Solo reacciono cuando Sakumo quiso sacar un lápiz y rallarle la cara. Akane miró a Sakumo a los ojos, ambos rostros solo estaban a treinta centímetros del otro. Akane detuvo su paso, se sonrojo y por alguna razón, tuvo la necesidad de cerrar los ojos. Sakumo vio sus delicados labios color cereza. Trago saliva y tuvo la necesidad de juntar sus labios, pero antes de que pudiera hacer su movimiento, alguien tosió.

Sakumo dio un paso atrás y miró al suelo, terriblemente tensó porque casi besa a Akane. Mientras tanto, la propia Akane abrió sus ojos y miró en todas las direcciones. Noto a Kaoru riendo mientras se cubría la boca con la mano en un gesto elegante. Después miró a Sakumo, rojo como un tomate. Entonces entendió que esto estaba lejos del sueño que creía haber tenido.

Akane se puso colorada y grito enojada -Sakumo Hatake ¿Qué me ibas a hacer?-

-Nada, nada- dijo Sakumo dando dos pasos hacia atrás -yo, bueno, tu cerraste tus ojos primero-

-¿Me estas echando la culpa?-

-No, yo quería-

-¿Querías que?-

Sakumo empezó a tartamudear buscando una respuesta plausible, pero lo único que atino a hacer, fue a correr. Akane lo quedó mirando como huía, algo cabizbaja por la cobardía de Sakumo.

Por su parte, Kaoru dejo de reír y dijo en tono amable -si Akane-chan intimida tanto a Sakumo-chan cuando él va a hacer su movimiento, nunca llegaran a ninguna parte-

Akane miró a la pequeña Kaoru, de rostro risueño y hoyuelos en las mejillas. Era una pequeña hada, linda y dulce como ella sola. Akane hizo una pequeña sonrisa y respondió -si Sakumo me quiere, al menos tiene que ser capaz de decirlo-

-Sakumo lo tiene difícil- dijo Kaoru y se largó a reír de nuevo, con tono de voz melodioso y agradable.

Después de eso, Kaoru y Akane siguieron avanzando por un largo camino de tierra, con una espesa arboleda a los costados. Una nube paso haciendo sombra y una brisa fresca les genero un leve tiritón. Kaoru avanzaba con las manos apoyadas en su regazo, mirando como las murallas de Konoha se elevaban a lo lejos. Dirigió su mirada a lo lejos, como si tuviera su byakugan activado y pudiera ver a través de las cosas. Enfocando sus ojos pálidos en la presencia que buscaba su joven corazón. Al mismo tiempo, Akane caminaba pensando en Sakumo, pero ahora más pendiente de lo que la rodeaba.

-Akane-chan parece preocupada- dijo Kaoru solo por decir, para combatir el silencio que las rodeaba

-Sí, bueno, papá no se tomó muy bien mis ideas- dijo Akane agachando la mirada -ya estaba lo suficiente furioso cuando le dije que no aceptaría el ojo de Naori-sama. Ahora casi me echa de la casa cuando le dije que quería diseñar todo tipo de vestimentas-

-Debe ser todo un problema- menciono Kaoru

-Sí, sí. EL problema es mi papá, sigue con sus ideas de clan y no se habré a nuevas cosas. Kain tuvo que hablar con él para tratar de convencerlo-

Kaoru hizo una pequeña sonrisa y pregunto -¿Qué dijo?-

-Kain le recordó los anteriores problemas de dinero del clan y de alguna manera logro apaciguarlo-

-Es verdad, nii-sama también se está enfrentando a un problema similar. La mayoría de la gente del clan solo sabe combatir, así que la mayoría de los recursos vienen de hacer misiones. Sin embargo, hay una diferencia en las tendencias de nuestros clanes-

-No me lo digas- dijo Akane con la cabeza gacha, como si llevara un gran peso sobre su cabeza -creo que está bien ser orgulloso, pero llegar al punto de ser incapaz de trabajar en equipo, ya es mucho ¿Acaso mi clan está lleno de tontos? Por suerte ahora tenemos la policía militar, si no, nos hubiéramos muerto del hambre-

-Akane-chan lo tiene difícil-

-Sí, sí, pero mi problema tiene solución. Bueno, casi, me falta lo más importante, dinero-

-Kaoru no tiene dinero, de lo contrario, te lo prestaría- dijo Kaoru, deteniéndose y mirando a Akane a la cara. Akane también se detuvo e hizo una sonrisa amable.

-Gracias, saber que cuento con tu apoyo es más que suficiente. Eres una buena imouto, Kaoru-chan-

-¿Eh? Pero si Akane-chan y yo somos de clanes diferentes- dijo Kaoru un tanto confundida

Akane hizo una picara sonrisa y dijo -pero a través de Kain nos volveremos cuñadas-

Kaoru hizo una pequeña sonrisa y agacho la mirada, para después asentir en un gesto dulce.

Después de eso, siguieron avanzado hasta llegar al gran portón de la villa. Cruzaron las grandes puertas, avanzaron por el distrito civil y se detuvieron frente a la casa de Hashirama. La puerta torii seguía estando firme en la entrada mientras el jardín de flores de Mito Uzumaki seguía saludando a todos los visitantes y los que pasaran frente a la casa. Kaoru y Akane caminaron por el camino empedrado mientras miraba las flores a los costados. Llegaron hasta la puerta corredera en la entrada y llamarón un par de veces.

Para su sorpresa, quien les abrió la puerta, fue Itachi Uchiha, padre de Akane. Esta última al ver a su padre se sorprendió, pero después puso un rostro serio. Lo mismo hizo Itachi y la miró a los ojos. Kaoru los vio desde el lado y podría haber jurado que salían chispas del choque de miradas.

Kaoru tosió y dijo -Itachi-san, buenas tardes-

Itachi escucho la dulce voz, aparto la vista de su hija para mirar a la tierna niña e hizo una pequeña sonrisa -buenas tardes, Kaoru-chan-

-¿Paso algo qué Itachi-san está en la casa de Hashirama-sama?-

-No, para nada- respondió Itachi -es solo que estaba haciendo mis rondas y pase a ver a Naoko-

Kaoru hizo una pequeña sonrisa y dijo -me alegro de que se lleven tan bien-

Itachi ladeo su rostro y la miró un tanto confundido.

Akane chasqueo la lengua y dijo -eres bastante descarado si llamas a una mujer por su nombre y sin honorifico. Que bien por ti, ahora has espacio, papá, quiero ir a ver a Kain-

Itachi abrió la boca como queriendo buscar una excusa, pero al final cerró la boca y le dirigió una mirada seria a Akane -Kain-sama esta atrás- dijo en tono serio -conversando con Hashirama-sama. Da la vuelta por fuera- y le cerró la puerta en la cara.

-Akane-chan- dijo Kaoru algo preocupada -deberías dejar de ser tan dura con las personas que te gustan. Se supone que somos amables con las personas que queremos-

-No sé a qué te refieres- dijo Akane con el ceño fruncido, señalo con su mano derecha hacia el corredor que se formaba entre las flores y la casa -vamos por acá. Ese tipo no nos quiere dejar atravesar por la casa-

Akane avanzo primero y Kaoru la siguió de cerca.

-La culpa la tiene Akane-chan- dijo Kaoru -si hubieras sido más amable con tu padre, no nos hubiera cerrado la puerta en la cara-

-Se lo merece por sin vergüenza-

-Akane-chan siempre es así. Si sigues así ¿Cuándo Sakumo-chan va a tener el valor de acercarse? -

Akane se detuvo, hizo un puchero y preguntó -¿Crees que debería ser más suave?-

-Por lo menos, no presionarlo tanto cuando trata de hacer su movimiento. Me da la impresión de que Akane siempre corretea a Sakumo-chan-

Akane hizo un extraño -ugh- como si se atorara con algo y agacho la mirada -no es mi culpa, Kaoru-chan- dijo – es solo que espero que Sakumo sea más valiente. ¿Por qué es valiente cuando tiene que pelear contra alguien más fuerte, pero cuando me quiere dar un beso se acobarda? ¿Te pasa lo mismo?-

Kaoru se detuvo al lado de Akane y le dio una pequeña sonrisa -Kain-sama jamás ha intentado hacer tal movimiento. A veces me da pena, pienso que le desagrado a Kain-sama. Sin embargo, la abuela Naori dijo que era solo porque Kain-sama es más maduro que el resto de los niños. Por eso me respeta. Pero bueno ¿Quién sabe? Le pregunte a Okaa-sama hace un tiempo y dijo que esas son cosas de adultos, los niños no deberían pensar en besarse ¿Acaso es extraño?-

-Son anticuados- dijo Akane con el ceño fruncido, levantó su cara y miró a Kaoru. Esta última asintió con una tierna sonrisa y dijo -sí, son anticuados-

Entonces ambas se largaron a reír y caminaron por el pasillo, bordeando la casa hasta llegar al patio trasero. En ese lugar estaba Hashirama y Kain. Ambos vestían similar, todo por arreglos de Mito. Con un haori blanco sobre un kimono verde pasto y hakama negro. Los dos conversaban sentados uno al lado de otro, sentados al borde del pasillo que pasaba por fuera de las habitaciones. Akane y Kaoru se detuvieron a diez metros de ellos para evitar interrumpir su conversación. Hashirama, cuya apariencia parecía haber alcanzado los setenta años, le decía algo a Kain y él asentía con un rostro un tanto triste. Hashirama levantó su mano, le desordeno el cabello en un gesto torpe y le dio un pequeño abrazo. Kain solo lo abrazo y después de separarse, se pasó la manga de su haori blanco por los ojos y asintió.

Hashirama capto a las niñas mirándolos y levantó su mano izquierda en señal de saludo. Akane y Kaoru hicieron una reverencia. Entonces vieron a Hashirama señalándolas y diciéndole algo a Kain. Entonces se puso de pie y Kain, por alguna razón, lo tomo de la mano, como si tuviera miedo de que desapareciera. Hashirama le dio una mirada paternal y le tomo la mano. Después la separo su mano y le dijo algo, entonces le dio un último abrazo y lo dejo sentado al borde del pasillo. Kain solo lo vio irse.