-¡Venga chicos! Sacad todos vuestros cuadernos que vamos a hacer algunos ejercicios para practicar el examen del Viernes. -dice la profesora Melody de francés.
Sinceramente no sé porque me apunté a francés. Siempre me ha encantado París y pensé que el francés me gustaría. Pero no, ni me gusta el francés ni he ido nunca a París. Otro de los tantos sueños que todavía no he cumplido. Junto con mi sueño de llegar a ser en un futuro una persona reconocida por hacer el bien a los demás. Desde pequeña he querido ser trabajadora en alguna ONG o fundación que realice voluntariados para ayudar a los más necesitados. Para mí es la mejor labor que puede hacer una persona. Dejar de pensar en uno mismo y pensar en los demás.
Pero en temas más profesionales me gustaría estudiar la carrera de abogacía para luego especializarme y ser jueza.
De esta manera también podría ayudar a los demás impartiendo justicia. De todos modos todavía me quedan dos años para decidir que quiero estudiar al final.
La profesora le ha pedido a Juan que haga en la pizarra un ejercicio de conjugar verbos.
Mientras tanto me pongo a hablar con mi compañera sobre el grafiti que alguien ha dibujado en la pared.
-Sonia, ¿Has visto el grafiti? -le pregunto susurrando para que la profesora no nos llame la atención.
-Sí, ¿Quién crees que ha podido ser?
-No tengo ninguna idea de quién ha podido ser. ¿Y tú? ¿Tienes alguna sospecha de alguien?
-Creo que ha sido el grupo de Pablo, Raúl Jorge y todos esos.
Al oir eso se me queda la cara a cuadros. ¿Habrán sido capaces de dibujar ellos esa cosa tan siniestra? ¿Y con que finalidad lo habrán hecho?
*No, no ha podido ser él*-pienso.
BUUM! - suena un sonido extremadamente fuerte que hace vibrar todas las paredes, como si de un terremoto se tratase.
-¿Qué ha sido eso?- decimos todo al unísono.
Empezamos a escuchar gritos, gritos de desesperación, de pánico como si todos los alumnos presentes en este instituto huyesen de algo o de alguien.
Entonces nos empezamos a preocupar.
Nos miramos entre todos, no articulamos ninguna palabra más. Tengo el corazón a mil, mi instinto me dice que eso no era un simple cohete o una explosión sucedida por accidente.
- ¡No salgais de clase hasta que yo os diga, voy a ver que pasa!- dice la señorita Marga intentando disimular su miedo para que no nos preocupemos antes de salir de clase.
Sucesivamente vemos como tres hombres vestidos de negro, todo tapados que solo se le veían los ojos y con armas ,hacen a la señorita volver a clase y arodillarse.
¡Todos al suelo ya!-grita uno de ellos.
Nos tiramos al suelo, muy asustados y la mayoría llorando,incluyéndome a mí.
Los tres tíos llevan un uniforme específico como una especie de uniforme militar o así.
*¿Qué demonios está pasando?*- pienso. Por un momento me vuelvo a acordar del repetitivo sueño de ayer. La gente corriendo y gritando huyendo de alguien o de algo.
-No puede ser. No puede ser. -me repito una y otra vez. Estás volviendo a soñar, despiertate Olivia-me digo a mi misma mientras me pellizco el brazo.
Pero nada, no funciona. No me puedo creer que esté sucediendo esto de verdad.
No sé como actuar, como pensar, como debo responder a esta situación,no sé nada, estoy completamente paralizada del miedo.
En varias ocasiones había tenido sueños premonitorios. Pero los que se cumplían eran siempre sueños normales, sin nada especial. Como por ejemplo si soñaba que estaba en un día lluvioso al día siguiente llovía o si veía a un amigo que hace tiempo que no veía, al día o dos de haberlo soñado por casualidad me lo encontraba.
El peor sueño premonitorio que había tenido hasta el día de hoy fue en el cuál había un terremoto. Al día siguiente efectivamente hubo un terremoto pero no fue nada grave. Pero esta situación ya sobre pasa mi racionalidad.
-¡Las manos en la cabeza todo el mundo, si quereis seguir vivos!-gritan varios de los hombres que acaban de interrumpir la clase.
Los tres hombres empiezan a hablar en otro idioma. No reconocí cual era, hasta que dijeron unas palabras cuyo acento me era familiar.
-No puede ser-pensé aterrorizada.¿ Y si esto es un atentado terrorista? Ellos pueden ser los que causaron la masacre del otro día. ¿Porqué? ¿Porqué narices han venido concretamente a mi insituto?
¿Es que acaso la vida se está vengando de mí de alguna manera o que?
Primero hablo con Pablo para que rechace a Sandra, mi mejor amiga la cual está enamorada de él, después tuve que mentirle a la madre de Pablo para que él se saliera otra vez con la suya,cuyo plan me podría meter a mí en problemas con su madre y la mía,y por último dibujan un grafiti muy aterrador en la pared del instituto.
Un momento. ¿Y si han sido ellos los que han hecho ese dibujo?¿Y si realmente era un amenaza?¿Nos estaban advirtiendo lo que iba a pasar y nadie ha sido capaz de sospecharlo?No me lo puedo creer. ¿Cómo vamos a salir ahora de aquí? ¿¡Vamos a morir!?
Un gesto hizo desinbadirme de mis pensamientos.
Los tres amenazantes están montando una especie de máquina que parecía como una cámara y también están colocando un fondo blanco pegado a la pizara.
BUUM! -vuelve a sonar ese exagerado ruido pero esta vez todavía más fuerte .
Muchas personas chillando de terror se escuchaban tras esa explosión y ha hecho temblar tanto la sala que ha tirado parte de techo. Afortunadamente nadie ha salido herido.
Comenzamos a chillar todos los que estábamos presentes en esta clase cojiéndonos a las patas de nuestras mesas para mantenernos firmes debido a las explosiones.
-*¡Son bombas!*- pensé en mi mente.
-¡Callaros! ¡A quién escuche hablar o comunicarse con quien sea le pego un tiro!-dijo uno de los hombres uniformados exageradamente enfadado.
Me pongo a rezar en mi cabeza, siempre habia creído en Dios,pero nunca había sido practicante.No sé si esto va solucionar algo, pero es lo único que puedo hacer en estos momentos. A lo mejor así con suerte sale todo bien.
Me giro para ver a Pablo por un instante.
Él también está llorando, nunca lo había visto llorar así, desde que falleció su tío.
Me pongo a analizar la escena, tres tíos con pistolas y explosivos nos tienen amenazados con pegarnos un tiro, bombas explotando simultáneamente, parte de techo caído y todos llorando y aterrorizados. Ver esta escena me parte el corazón. Nunca he vivido nada así,ni quería vivirlo. La tensión y el pánico que había en clase no se puede describir con palabras ,eso sí, es escalofriante.Pensar que no puedes hacer nada para poner fin a esto, no saber cuanto va a durar,cuando se van a ir, que quieren, es lo peor.
Un terrorista está pasando por nuestro lado a la vez que coge nuestras mochilas y nos quita los móviles. Ahora no podemos ni llamar a la policía ni comunicarnos con nadie para pedir ayuda.
Uno de los hombres pronuncia una palabra que no pudimos entender al decirlo en ese idioma que ninguno de nosotros habíamos escuchado antes.
Continuadamente entra un joven vestido igual,pero éste tenia la cara destapada.