Por la mañana, Kain se despertó con un sentimiento cálido en su entrepierna y algunos sonidos obscenos. Frunció el ceño y abrió el parpado izquierdo. A simple vista, no había nada en especial.
La luz del sol entraba por las ventanas, se escuchaba el graznido de las gaviotas y el suave oleaje.
Kain llevó su mano derecha por debajo de la sábana y toco una cabeza sobre su entrepierna. Era pequeña, cabello liso, suelto, peinado hacia un lado para que no estorbara.
Rei-chan aparto su rostro de la entrepierna de Kain, soltó un jadeo y le dijo —Kain-sama ¿Se despertó—
—Sí, es un poco difícil seguir durmiendo de esta manera— respondió Kain con una sonrisa en los labios
—Anoche Rei-chan se quedó dormida, pero ahora recuperaremos todo el tiempo perdido— dijo Rei-chan y continúo moviendo su cabeza de arriba abajo sobre la entrepierna de Kain.
—Ven aquí, Rei-chan— dijo Kain
Rei-chan apartó su rostro de la entrepierna de Kain, sonrió y se limpió la boca con el dorso de la mano. Ella subió por el cuerpo de Kain hasta la cara, lo comenzó a lamer por el pómulo izquierdo y lo beso.
Kain la beso medio dormido, sus manos se fueron a la cintura —hoy te despertaste juguetona— dijo
—Rei-chan se siente bien, ahora le va a demostrar a Kain-sama cuán bien— dijo Rei-chan, apartó su rostro y se sentó a horcajadas sobre la entrepierna de Kain—usted solo debe disfrutar de Rei-chan—
Rei-chan levantó sus caderas y dejo a Kain entrar. Ella soltó un gemido, cerró los ojos y dijo —por alguna razón, Rei-chan esta más sensible ¿Será el alcohol?—
—Mmm, puede ser— respondió Kain sintiendo como Rei-chan lo apretaba. Él apoyo sus manos sobre la cama y se sentó. Rei-chan siguió encima de él mientras movía sus caderas, pero Kain la beso y le agarraba el trasero, grande y gordo.
Kain y Rei-chan se miraban el uno al otro mientras esta última agitaba sus caderas de atrás hacia adelante. De arriba hacia abajo. Sin embargo, por la falta de ejercicio, Rei-chan se cansó pronto y Kain aprovecho de cambiar la postura. Él la tomo por la cintura y la recostó en la cama. Rei-chan se colgó del cuello de Kain y busco su boca. Kain la beso mientras entraba en ella.
Los gemidos llenaban la habitación. Ni Mari Hatake o Megumi se atrevieron a salir de sus habitaciones. Rei-chan fue especialmente ruidosa esa mañana.
—Aquí voy, Rei-chan— dijo Kain después de cinco minutos y lo soltó todo en el interior de Rei-chan.
Rei-chan jadeaba mientras su rostro estaba cubierto de sudor —a este paso— susurro —Rei-chan volverá a ser mamá—
—No es necesario, pero se siente muy bien. Hoy tu cuerpo tiene un sabor diferente, no tengo suficiente—
Rei-chan sonrió y lo beso con toda la pasión. Kain fue reciproco, su cuerpo estaba lánguido, pero poco a poco estaba recobrando la sensación y se estaba poniendo duro. Así que continúo besando a Rei-chan y esta vez llevó su mano derecha a la entrepierna. El cabello del pubis estaba húmedo por el sudor y los fluidos. Los labios abiertos e hinchados como pétalos de flor.
—Kain-sama sabe dónde le gusta a Rei-chan— dijo Rei-chan, se relamió los labios mientras lo miraba a los ojos.
Kain sonrió, acercó su rostro, la beso y con su mano la estimulo.
Rei-chan apenas si podía respirar entre los besos y las sensaciones provenientes de su cuerpo. Todo estaba caliente y la luz del sol le daba una sensación especial. El sonido de la brisa marina y el suave oleaje.
Kain apartó su boca y la quedó mirando a los ojos. Le dio otro beso y le dijo —lo voy a meter—
Rei-chan sonrió y asintió. Entonces lo sintió entrar, expandir su interior y tocar el fondo. Ella cerró los ojos y se relamió los labios. Por alguna razón su cuerpo se sentía más sensible de lo usual y soltó un fuerte gemido. Abrió los ojos y lo miró a los ojos. Sus cuerpos cálidos y sudorosos se frotaban entre sí. El palmoteo de sus caderas, el sentimiento de mirarse, el corazón palpitando con todas sus fuerzas. Ella le tomo la cara y lo beso.
Kain siguió entrando en Rei-chan, estaba cálido, húmedo y resbaladizo. Sentía que quería mantener esta sensación para siempre. Su cuerpo estaba en éxtasis, pero se acercaba el final. Él se concentró en su respiración para demorar la eyaculación. Después de eso se concentró en el tacto de los labios y la lengua. En su desesperación por poseer a Rei-chan, acariciar cada parte de su cuerpo y hacerla suya.
—Rei-chan, Rei-chan— susurro Kain mientras agitaba sus caderas y respiraba con dificultad. Miraba a Rei-chan a los ojos, preciosos ojos azules con una mirada lánguida y lujuriosa. Kain soltó un gemido, la envistió una vez más y lo volvió a dejar dentro de Rei-chan. Kain continúo moviendo sus caderas, pero cerró los ojos sintiendo el intoxicante sentimiento del sexo. Jadeando con fuerza y sintiendo como si toda su fuerza fuera drenada. Él sonrió, abrió los ojos y miró a Rei-chan. Esta última también sonreía, hermosa, esos ojos azules enfocados en él. El tierno lunar bajo el ojo. Los labios gruesos separados mostrando dos hileras de dientes blancos. Kain la beso una y otra vez con toda la pasión que le quedaba mientras frotaba su entrepierna con la de Rei-chan.
Kain quedó mirando a Rei-chan recostada en la cama, el rostro sudoroso, el cabello castaño oscuro desordenado alrededor de su cabeza. El hermoso brillo en sus ojos, la sonrisa inolvidable. Rei-chan de forma coqueta junto sus brazos e hizo resaltar sus senos que ya de por sí eran grandes.
Kain no se pudo resistir a la tentación, ya los había tocado cientos de veces, los había ocupado para satisfacerse, pero esta visión de Rei-chan tan coqueta y sus senos grandes como dos montañas de carne blanda y suave, se sentía irresistible. Kain llevó sus manos a los senos y junto los dos pezones. Tenían un color rosa suave, la aureola amplia. Se veían grandes. Kain llevó su boca a los pezones, los lamio con cuidado pensando que a Rei-chan le podrían doler porque todavía le daba pecho a Hashirama.
—Kain-sama se volvió un bebé. No entiendo tu fijación, pero puedes disfrutarlos— dijo Rei-chan con una sonrisa suave, llevó su mano a la cabeza de Kain y paso sus dedos por entremedio de los largos cabello blancos. Rei-chan no se sentía caliente al ver a Kain lamer sus senos, pero era un sentimiento agradable, dulce y tierno.
Kain continuo la lamiendo los pezones de Rei-chan, pero llevó sus manos a las caderas y masajeo los nervios de las caderas. Rei-chan movió sus caderas sintiendo un ligero cosquilleo en su cuerpo. Ella soltó una exhalación caliente. Kain bajo al monte de venus, lo acaricio y bajo a los muslos. Poco a poco Rei-chan comenzó a respirar más rápido y a soltar gemidos. Kain estaba disfrutando de los senos de Rei-chan, pero le dio un último beso y subió por el pecho hasta la clavícula. Rei-chan lo abrazo como si quisiera que él se quedara en ese lugar. Kain subió hasta el cuello y Rei-chan respondió poniéndose tensa y jadeando. Ella pasaba sus dedos por los cabellos, llegó a la nuca y lo comenzó a acariciar. Después acercó su boca al oído y lo comenzó a lamer.
Kain apartó su rostro, miró a Rei-chan a los ojos, sonrió y acercó su boca al oído de Rei-chan. Le susurro algunas cosas por lo bajo. Rei-chan puso una expresión asombrada, por lo usual diría que no, pero hoy se sentía tan bien que asintió. Kain se apartó de Rei-chan, ella lo quedó mirando y sostuvo sus muslos mientras mostraba su vagina y ano.
Kain se fue al vientre de Rei-chan, la fue besando y acariciando, llegó a la vagina y siguió hasta el perineo. Él lamió vigorosamente mientras su dedo anular y medio estimulaban el clítoris. Kain siguió bajando, llegó a el ano y estimulo durante un par de minutos mientras sus manos se ocupaban de la vagina.
Rei-chan solo sentía la estimulación en su vagina y ano, un poco preocupada por lo que iba a pasar. De repente Kain apartó su boca, Rei-chan sintió la falta de la calidez en su cuerpo. Él se posiciono sobre sus rodillas, miró a Rei-chan con una sonrisa astuta. Rei-chan se puso un poco nerviosa, pero Kain llevó su mano a la vagina y la continúo estimulando. Rei-chan soltó un gemido. Kain llevó la mano a su boca, deposito toda la saliva que pudo y llevó su mano a el ano de Rei-chan. Lo mojo todo lo que pudo, después repitió la operación, pero esta vez con su pene. Él lo acercó y lo presiono un poco.
Rei-chan soltó un gemido y frunció el ceño en señal de disgusto, pero no se quejó abiertamente. Kain presiono poco a poco, fue abriéndose paso hasta que pudo meter el glande. Lo dejo adentro. Él acercó su rostro al de Rei-chan, ella estaba en dolor, pero él tampoco lo saco. Kain la beso, presiono un poco más, la hizo gemir de dolor, pero la siguió besando. Rei-chan también lo besó como tratando de enfocarse en eso que en lo otro. Kain lo sacó y lo metió varias veces. No lo pudo meter mucho, pero lo disfruto de principio a fin. Al final de unos pocos minutos, lo soltó todo en el trasero de Rei-chan.
Ambos estaban sudorosos y cansados. Rei-chan un poco adolorida y Kain más caliente que nunca.
Kain beso a Rei-chan y ella respondió a sus besos tratando de ignorar el dolor. Kain apartó su rostro, se acostó al lado de Rei-chan y quedó mirando en techo. Rei-chan se acurruco a su lado.
Kain miraba el techo, después miraba a Rei-chan evaluando su estado y después miraba al techo —vamos a ducharnos— dijo
—Sí— dijo Rei-chan
Kain se puso de pie y quedó mirando a Rei-chan. Ella puso una sonrisa incomoda y adolorida. Kain hizo una sonrisa inocente, camino hasta Rei-chan y la tomo en brazos.
—Vamos, yo te llevó— dijo Kain y le dio un beso en los labios. Rei-chan le devolvió el beso.
Dentro del baño, Kain ayudo a Rei-chan a entrar en la ducha y dejo que cayera el agua tibia.
—¿Así está bien?— preguntó Kain
Rei-chan miró a Kain y asintió. Kain tomo el jabón y lo acercó al abdomen de Rei-chan. Ella lo iba a tomar, pero Kain lo retiro y negó con la cabeza. Kain acercó su rostro y besó a Rei-chan mientras caía el agua en forma de lluvia. Al mismo tiempo, Kain le pasaba el jabón por el cuerpo a Rei-chan hasta que ella estuvo más relajada. Kain se posiciono por detrás de ella, le paso por la espalda y Rei-chan sostuvo su cabello húmedo. Ella se relajó, pero cuando Kain llegó a las nalgas y dejo de aplicar el jabón, se sintió estimulada. Aun le dolía el trasero, pero no podía evitar sentir la emoción de la anticipación.
—Rei-chan— susurro Kain. Ella miró hacia atrás y al ver la boca de Kain solo pudo pensar en besarlo. Kain la abrazó por la cintura y la besó mientras sus manos acariciaban el vientre. Kain se puso duro, froto su pene contra las nalgas de Rei-chan. Él pudo ver la preocupación en los ojos de Rei-chan. Kain sonrió de forma juguetona, llevó su glande entre las nalgas, lo frotó, pero al final, lo llevo entre las piernas y entró en Rei-chan. Kain y Rei-chan soltaron un profundo gemido y lo siguieron haciendo bajo el agua en forma de lluvia.