87: Talastofobia.

Cazar, alimentarme, tomar agua, cazar nuevamente, descansar, entrenar, cazar. Todo siempre terminaba en una repetición algo molesta, la parte buena es que mi emoción por pasar al siguiente nivel crecía mientras que mi miedo por el agua aumentaba. Mi primer interés es hacer una bola de aire en el interior del agua, lo suficientemente grande como para mantenerme allí y que no me aplaste la gran presión, como una cápsula. Cómo un intento mucho menos sofisticado de un submarino. Por ello intenté poco a poco hacer una burbuja dentro del agua que llegue a aguantar la presión, primero sin nada. Y había que admitir... Mirar directamente hacia ese abismo me dió mucha mala espina.

Pensar que algo podría e iba a venir desde allí me causaba tanta emoción y nervios que perfectamente podría intentar correr para buscar otra salida, pero ya estaba aquí. Luchar, luchar contra todo se volvió una parte importante de mi búsqueda. Mirar fijamente el agua hasta dormir e incluso iluminar un poco la superficie dejando que pueda ver... Nada de ese lugar totalmente negro.

Pasó el tiempo, mejoré, hice mi cuerpo... Más resistente. También dejé de mostrar luz hacia el abismo acuático, ya que sentía como cada vez llamaba más la atención de algo o alguien. Pasaron meses... Era un proceso bastante difícil de llevar a cabo. Hice también algunas sumergidas de prueba... Agradecí mucho mi capacidad de doble pensar, el poder descansar mi cerebro y no estar inactivo fue muy útil.

Tomé aire y di un paso... Uno, solo uno. Mi cuerpo era rodeado por una burbuja de aire la cual logré que mantenga una especie de "respiración" con el ambiente, así no moriría por el dióxido de carbono ni por mucho oxígeno, si no que se mantendrían más o menos iguales los niveles de los distintos gases en el aire. Y di un solo paso... Al avanzar más y más... Quedé en la oscuridad, no había ni podía ver nada, pero era totalmente distinto al vacío... Todo mi cuerpo me decía que estaba rodeado, criaturas enormes, pequeñas, sentí un peligro inmenso y cuando intenté volver... Nada. Fue hasta cómico... Absolutamente nada. No iba a lograr volver, así que solo empecé a avanzar sin preocuparme por cosas como volver. Intenté usar luz para darme una idea del camino, pero no podía ver nada, estaba perdido... Y aún peor que perdido, totalmente rodeado, los sonidos se podían escuchar, eran grandes llamados a la naturaleza, pequeños gritos, también el sonido de peces siendo cazados... Usar luz era una muy muy mala idea. Eran dos llamados, uno a ser cazado y otro a cazar. Gracias a no tener hambre no iba a permitir ninguno de los dos. Esperaba encontrar algo... Pero solo una luz se podía ver, una que se acercaba, una de la cual me intentaba alejar...

Lo siguiente que pude ver fue una mano enorme entrando en mi burbuja de aire, o la parte de una mano. No era como un animal, era totalmente cómo una persona, y al emitir luz... Un par de criaturas me miraban. Una era como un humano, o un torso, brazos largos, anchos, con manos que parecían poder mover montañas, y con un rostro que no dejaba de verme. Su parte baja era como un pez.

La otra criatura se veía como un leviathan. Una serpiente larga, con varias aletas y con la cabeza de un dragón. Unos bigotes que parecían tentáculos y una mirada que mostraba como sus ojos blancos y negros, rallados casi faltos de vida... Un grito vino de esa criatura, de esa y aquella semi humana... Empezaron a luchar, una fuerza increíble se veía por parte de ambos, ya que se embistieron y el leviathan empezó a envolver a su enemigo. Si pudiera alguien más ver esto haría que las ballenas azules parecieran peces dorados... Eran como montañas, el agua a sus lados empezaba a tornarse de otro color. Era una lucha encarnizada que ninguno quería tener. Y aproveché para escapar. Reduje el tamaño de la burbuja para ser más pequeño, y fui hacia abajo. Lo que miraba ahora era mucho mucho más claro... Toda clase de criaturas, de tamaños inmensos que se estaban devorando, peleando entre ellas. Y como si nada, una luz empezó a mostrarse encima... Una luz que logró mostrar quién era la verdadera criatura alfa. Similar a una boca enorme, empezaba a tragar nos a todos, dientes que serían de tamaño de edificios y unas múltiples lenguas que atravesaban a su alimento y los llevaban en su boca, hasta rem estaría orgulloso de lo que era el pináculo de la cadena alimenticia... O quizá... Solo quizá... Era solo el primer piso... Un tentáculo entró como lanza en la burbuja, casi perforando mi cuerpo pero logré tomarla, lo siguiente que sentí era un grito enorme, capaz de crear maremotos causados por el dolor de una mínima herida, y con ese grito un cardumen de lo que parecía niebla en medio del océano apareció, todo aquí era capaz de devorar todo aquí... Especialmente devorarme a mí.