El caballero de cabellos rojos incrementó la fuerza, aplicando aún más presión sobre los hombros de Gabriel. Era una cuestión de su dignidad.
Los otros seis caballeros de la Academia de Caballeros tampoco intervinieron. Solo observaban la escena con diversión, encontrando al joven bastante interesante.
La fuerza de Gabriel había aumentado recientemente, mejorando también su defensa, pero aun así no era suficiente para resistir tal presión sin la ayuda de sus hechizos. Después de todo, el hombre de cabellos rojos estaba usando toda su fuerza. Si hubiera sido un hombre ordinario en lugar de él, su hombro ya habría sido aplastado en polvo ante esta fuerza.
—¿Ya has tenido suficiente? —Después de un tiempo, Gabriel finalmente rompió el silencio—. Si es así, por favor, vuelve y espera a que termine de comer.
—¡Tú! —El hombre de cabellos rojos estaba furioso. No solo era que Gabriel todavía no reaccionaba, sino que hablaba como si estuviera tratando con un niño.
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