Capitulo 2 - Primera Vez y Un breve Momento de Paz

Hablemos un momento de un tema importante, [Dragones].

Son considerados la raza más Poderosa existente, solamente por debajo de los Dioses, pero incluso algunos dragones han llegado a tener la fuerza para enfrentar o matar a los mismos dioses.

Sin embargo, como todos, también tienen sus debilidades, una de ellas es que por su larga vida tienen una tasa de natalidad baja.

Un dragón no muere por edad, simplemente se unen al mundo, por eso su objetivo es dejar al menos un descendiente antes de desaparecer.

Pero, ¿Qué haría un dragón si no tiene pareja? A pesar de tener una vida prolongada, tienden a vivir en aislamiento, solo buscando a otros de su especie para reproducirse.

El problema es que no siempre tienen suerte, no obstante, [La vida se abre paso], al final, por necesidad lograron obtener la capacidad de Impregnar a hembras de otra especie o viceversa.

Por eso los Dragones son considerados una especie lujuriosa, después de todo es raro que nazca un dragón puro.

Esto dio como resultado las sub-especies o sub-razas... En otras palabras, Lizardman, Lizardkin, subdragones, wyverns, etc.

Estas nuevas razas, tienen la posibilidad de convertirse en dragones si alcanzan ciertas condiciones, pero no sólo eso heredaron, sino también su capacidad reproductiva.

Dicho de otra manera, todas las variantes de Dragon, pueden reproducirse con otras razas sin importar el género, pero estas cruzas tienen pocas posibilidades de tener éxito, no por eso se han detenido, y es común que en territorio de tribus con sangre de dragón, las mujeres sean tomadas como prisioneras.

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"Ngh." Cuando Liza entró en mí, sentí como algo se rompía....

"¿Eres virgen?" - preguntó un poco incrédula ante la situación, sin embargo, rápidamente cambio su enfoque y ralentizo su movimiento

Mi mente estaba en caos, Liza me estaba penetrando, no entendía como era posible, pero su miembro dentro de mí, contaba la cruda verdad.

Use mis manos para abrazarla y así evitar que se moviera.

Una parte de mi negaba la realidad, pero lo que más me asustaba es que había una pequeña voz en mi interior diciéndome que si era Liza todo estaría bien.

"Está bien, esperare hasta que te adaptes." - sus palabras no me trajeron mucho consuelo, pero ella comenzó a besarme sin considerar eso.

Su lengua invadiendo mi boca nublaba mi mente, sentía que todo se ponía en blanco, y antes de darme cuenta comenzaba a olvidar todo.

Olvidaba la situación en la que estaba, olvidaba el dolor que me invadía, el miedo que sentía, olvidaba quien era, olvidaba.... que hace solo dos días era un hombre...

Cuando mi lengua respondió a la suya, pareció estimularla así que me ataco con más fuerza, a la vez que uso sus manos para tocar mis pechos, ella jugaba con ellos lentamente, apretando ligeramente, acariciándolos, amasándolos, centrándose en la pequeña protuberancia en la cima.

"Ngh." otro gemido salió de mi boca, pero, aunque no quería admitirlo, este no fue de dolor, Liza sintió que mi agarre se aflojaba y empujo suavemente su cadera.

Cuando llegó al fondo de mi cuerpo, una corriente eléctrica me atravesó y doble la espalda, no entendía estos sentimientos, eran algo extraño y abrumaban mis sentidos.

"Ahhhhh" Sin embargo, Liza no me dio tiempo para pensar en ello, como si fuera instintivo, comenzó a retirarse, antes de volver a empujar.... una y otra vez, embestía lentamente mi cuerpo.

Ya no tenía la fuerza para detenerla, tampoco podía negar la realidad, con cada embestida me sentía indefenso, mientras el placer invadía mi cuerpo.

"Ngh" mis gemidos comenzaron a escapar de mis labios, cada uno parecía estimularla más, ella aumentaba sus empujes, más rápido y más profundo.

"Liza.... Liza... Ngh.... Ahhh..." en algún momento comencé a gritar su nombre mientras le suplicaba, no entendía nada.... Ni siquiera sabía que era lo que pedía.

La habitación estaba llena solo por el sonido de nuestros cuerpos chocando, y los gemidos que ambas lanzábamos.

Yo me sentía como si fuera un pequeño bote en medio de una tormenta, no sabía cuánto tiempo había pasado, mi voz en algún punto perdió toda coherencia, pero parecía que el cuerpo sobre mi rebosaba de energía, como si nada estuviera pasando.

"Ahhhhh" sentí que otra vez paso, un orgasmo atravesó mi cuerpo, no sabía cuántas veces había pasado, pero entendía que era más intenso que cualquier cosa que hubiera sentido antes.

Quería aferrarme a ella, no entendía porque, pero era como si instintivamente aceptara su dominio.

Mi mente había perdido el foco, solo sabía que quería a Liza, mis brazos y piernas alrededor de ella lo explicaban claramente.

" Samantha.... Ngh.... Me estoy viniendo..." pronunció liza mientras tomaba mis caderas y empujaba las suyas lo más profundo que podía.

Sentí como algo caliente llenaba mi interior y doble la espalda con un fuerte gemido antes de colapsar, pero eso no detuvo a Liza, su semilla seguía llenando mi cuerpo, como si tratara de reclamarlo como suyo.

Como si tratara de decirle a todos, que era su mujer.

Después de eso, todo se oscureció....

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Sentí el calor de la luz del sol en mi cara, entendiendo que era tarde abrí con fuerza mis pesados parpados, y lo que saludo mi vista fue una habitación poco familiar.

Mi mente en caos, comenzó poco a poco a aclararse, y los eventos de los últimos días inundaron mi mente.

Otro mundo, Gea, Reencarnar, Una mujer, Liza... Primera vez...

Cuando lo que sucedió la noche anterior llego a mí, mi cara palideció, trate de negar la realidad... Pero el ligero dolor en mi pelvis me lo impidió.

Así es, había dormido con Liza, pero no lo había hecho como un hombre...

Sentí como las lágrimas corrían por mi cara, antes de darme cuenta estaba sollozando contra la cama mientras me cubría con la sabana, podía entenderlo, la realidad me había golpeado duramente.

No era más un hombre, esto era real y no un sueño, negar la realidad no cambiaría nada.

No recuerdo cuanto tiempo paso, cuando mis lagrimas se secaron, el sol estaba poniéndose, en la pequeña mesa de la habitación había un plato con lo que probablemente eran gachas, y a su lado había una nota escrita en un pequeño pergamino, desafortunadamente no era capaz de entender lo que estaba escrito en ella.

Después de comer, camine hacia fuera de la habitación lentamente, el dolor se había convertido en incomodidad, pero trataba de evitar pensar en ello.

Para mi sorpresa la casa estaba vacía, busqué en las habitaciones, pero no encontré ninguna pista de ella, el almacén también estaba cerrado.

Cuando volví a casa, por algún motivo que no entendia sentí pánico, me senté en el comedor esperando que Liza volviera, pero conforme más tiempo pasaba, más nerviosa me ponía, más se apoderaba de mí el miedo.

Lo entendí, si Liza desaparecía significaba que me quedaría sola en este mundo, no quería eso, quería estar más tiempo con Liza, algo dentro de mí me lo decía.

En algún momento me quede dormida, no sé cuánto tiempo espere, pero el cielo había oscurecido totalmente para entonces.

Un movimiento repentino me despertó, cuando abrí los ojos pude ver el perfil de Liza frente a mí, ella me estaba cargando en sus brazos mientras me llevaba hacia la habitación.

Verla cerca de mí, mostrando una mirada de preocupación rompió lo último que me quedaba de voluntad y mi llanto volvió a sonar.

"Samantha, tranquila, todo estará bien, estoy a tu lado..." - Trato de tranquilizarme, pero solo logro que llorará a más.

No entendía porque me sentía tan sensible, no entendía porque lloraba tanto, pero es como si todos los sentimientos que guarde en mi vida, hubieran sido liberados.

Ese día término de la manera más extraña posible, llore sin soltar a Liza hasta quedarme dormida, Liza me acompaño, me consoló y se disculpó.

Pero me sentí en paz...

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"Sam... Saman..... Samantha.... " - Escuche una voz llamar mi nombre, cada vez podía oírla más claramente.

Yo la conocía, me daba paz escucharla, sabía quién era, pero no quería despertar, me daba vergüenza enfrentarla por lo que paso los últimos días.

"Samantha... sé que estas despierta, estás haciendo caras..." - que grosera, como podría hacer caras si estoy durmiendo.

Sin otra opción tuve que despertar, abrí mis ojos para encontrarme dormida sobre el pecho de Liza, quizás por eso me llamaba, parece que no podía levantarse sin despertarme.

No entendía como termine en esta posición, pero sabía que no quería levantarme, eso lo tenía claro, desafortunadamente no podía mantenernos así.

"L-lo siento, me levantare." - respondí en voz baja, mientras me arrastraba a su lado en silencio.

"Mmm, está bien... lamento lo que paso, no pensé que fueras virgen." - Después de un breve silencio, Liza comenzó a hablar conmigo.

"E-está bien, me alegra que hayas sido tú y no alguien más." - Mis palabras salieron involuntariamente, aunque sabía que no mentía, no pude evitar cuestionar porque seguía hablando.

Liza me abrazo fuertemente cuando termine mis palabras, como si tratara de decirme que todo estaría bien.

"Iré a preparar el desayuno, espérame aquí." - Después de sostenerme un momento, se levantó con esas palabras, y comenzó a vestirse rápidamente.

Sin embargo, antes de que pudiera salir mi mano había sujetado su ropa por reflejo, no quería admitirlo, pero aún me daba miedo que ella se fuera de nuevo.

"Sigh. No iré a ningún lado, pero ambas tenemos que comer." - Liza me dijo con un pequeño suspiro, aun así no trato de apartarse de mí.

"Ven, te llevare conmigo." - Me tomo en sus brazos de nuevo, y en lo que era una posición aún más vergonzosa, me cargo hasta el comedor.

Una vez me dejo en una silla, comenzó a preparar la comida frente a mí, el silencio inundo la habitación, lo que me llevo a pensar nuevamente en lo que había pasado, por tanto, comencé a hablar para evitar esos recuerdos.

"Liza, ¿Dónde estabas ayer?, no pude encontrarte." - pregunté tratando de sonar lo más casual posible.

"E-eh, ¿Por eso llorabas en la mesa?, te deje una nota, ayer me toco guardia en la muralla." - sin importarle mi vergüenza, ella declaro simplemente la situación.

"Liza... N-no se leer." - cuando mis palabras salieron, solo sirvió para que mi cara se calentara aún más.

"....." - Sin responder mis palabras, ella siguió preparando la comida, pero pude notar que también se había sorprendido, sus orejas se habían enrojecido visiblemente.

"Lo lamento, olvide que perdiste tu memoria.... c-creí....." - pasados unos minutos comenzó a disculparse por lo ocurrido, parece que intuyo que olvide como leer.

"Mmm, está bien.... Liza, ¿Cómo tienes...?" - nuevamente contra mi razonamiento, volví a preguntar algo que no quería saber... no en este momento.

Mi pregunta solo logro aumentar el tono de Liza, ella permaneció en silencio durante el resto del tiempo, sin embargo, cuando comenzamos a comer me conto una historia sobre los dragones, sobre la raza en general y su tribu.

"E-entonces, ¿Cuándo hay una... mujer cerca de ti, simplemente crece?" - pregunte, aun sintiendo incredulidad por el proceso.

"A-así es, hay otras condiciones, pero es lo esencial." - Con una mirada avergonzada termino la conversación.

Al terminar la comida, Liza estuvo todo el día junto a mí, por sus palabras no teníamos que salir hoy, y era un buen momento para que descansara, así que me acompaño de inicio a fin, al atardecer preparo nuevamente la comida, aunque sabía que era mi deber, ella simplemente hizo todo, sin decir nada.

"Es hora de dormir." - Cuando volvió a oscurecer, camine hasta la cama y sin palabras, ambas nos acostamos en silencio.

Ella no me hizo nada, solo me abrazo contra su cuerpo y me permitió sentir su calor.

Así termino mi día, en sus brazos de nuevo.

Sin embargo, sabía que cada vez que pasaba, me sentía más segura que el día anterior.

Y durante un pequeño momento, desee que no terminaran estos días.

Desafortunadamente no podría ser así.