webnovel

LA ESPOSA PROMISCUA DEL CEO FRÍO

—Oooooooo... no... no lo hagas. —Bebé, tú lo deseas. Nancy quiere llorar sin lágrimas tumbada en la mesa, mirando al gran jefe detrás de ella seguir follándola sin descanso, la primera vez que se arrepiente de trabajar aquí. Día tras día era follada y le dolían la espalda y las piernas. ¡Solo era una pequeña secretaria que quería hacer bien su trabajo! ¿Cómo podía ser tan difícil? —Jefe tienes que trabajar en serio, no puedes entregarte al sexo femenino todo el día, tú... ah... —Nancy intentó razonar con el gran lobo gris detrás de ella, pero él no escuchaba en absoluto e incluso intensificaba su comportamiento. —No me entrego al sexo femenino, solo me entrego a ti. El hombre yacía detrás de su oreja, respirando pesadamente, extremadamente seductor. El aliento ardiente que exhalaba hacía que Nancy resistiera tensando su cuerpo. —Sssss... relájate... no... —No había vergüenza en la oficina, mientras que en un lugar distante, otra asistente miserable miraba al cielo sin palabras. ¡CEO y señora por favor déjenme ir, cambien a alguien para exprimirlo! ¿Por qué todos son subordinados del CEO, pero el asistente y la secretaria reciben un trato diferente?

Xiao_Yan_0938 · Urban
Not enough ratings
49 Chs

Capítulo 41 Encaje blanco de zorra

Translator: 549690339

```

—La coño de Nancy estaba caliente y húmeda, muy hidratada, y Miguel entraba sin resistencia.

—Nancy no pudo evitar gruñir de comodidad.

—Mmmmmm ah... Miguel... esposo... qué rico... Gran palo de carne entrando mmmm...

—Miguel no empujaba directo al fondo, dejaba caer una mano al interior del muslo de Nancy y presionaba su pulgar justo arriba del clítoris rosado.

—El dedo se movía rápido y seguía girando en círculos sobre él.

—Mientras su mano se movía, él empujaba hacia arriba y metía su vara más y más profundo.

—Nancy tensionaba sus dedos del pie y arqueaba su espalda, tratando involuntariamente de retroceder, pero no podía moverse con el agarre fuerte de Miguel.

—Ahh... Jefe... No... No... ¡Qué excitante! ... mmmmmm ... voy a lleg... ah...

—Nancy se sentía abrumada por semejante estimulación y soltó un grito fuerte.

—Pero aún estaba consciente lo suficiente para saber que estaba ahora en el aparcamiento subterráneo, rodeada de colegas que iban y venían.

Locked Chapter

Support your favorite authors and translators in webnovel.com