ABRAZO

A la mañana siguiente Arcturus se disponía a hacer sus deberes regulares.

La vida en aquel lugar parecía monótona, pero no para Arcturus, había logrado hacer un huerto hermoso lleno de vegetales y muchos frutos, estos eran su responsabilidad más importante ya que requerían de un cuidado constante.

Después de llegar al mundo mágico quiso entender la gran variedad de plantas que existían, por ahora solo tenía algunos frutos como ciruela, durazno y tomates, el entendía que el cultivo de hierbas mágicas requiere de un gran cuidado y estudio y que no solo era un pasatiempo, así que decidió practicar mucho con especies normales.

Tenía un día lleno de tareas y eso era bueno, la sabiduría y el poder no llegaban de la nada.

-Si quiero tener una buena vida debo ser trabajador, y la forma en la que pueda mantenerme libre es ser fuerte e inteligente.

Eh leído mucho estos últimos meses, tanto teoría mágica, aunque no muestro un avance muy grande al menos puedo hace volar un y que otro cubierto, como herbololgia.

Aunque lo que más quiero aprender en estos momentos es pociones, la idea de preparar elixires es muy útil tanto para combatir venenos como fabricarlos, sabes lo útil que es eso, si en mi aldea hubiese existido eso muchos se hubiesen salvado, por lo tanto, lo considero útil e indispensable.

también le he pedido a kreacher que me traiga los títulos de propiedad para guardarlos en la casa y estudiarlos más a fondo, así como un resumen financiero del banco para saber cuánta riqueza poseo.

Lo que veo me sorprende de sobremanera, tengo mucha riqueza, no mucha se queda corto, puedo ser uno de los niños más ricos alrededor del mundo, según kreacher esta es la fortuna de una de las familias más adineradas y ricas de todo el mundo mágico, al principio me alegre mucho, pero poco a poco las preocupaciones empiezan a aumentar.

Siempre he vivido una vida cómoda, sin mucho, pero con lo necesario, la idea de tener mucho dinero es problemática, muy problemática.

No soy muy consiente de cómo es que se maneja esto ni de cómo se genera tantos ingresos, pero aun así creo que debería ser lo más mesurado posible.

Así como mi padre me dijo alguna vez, la riqueza trae muchos amigos, pero la pobreza los aleja.

Como se quién es mi amigo.

Debo andar con cuidado, soy literalmente una montaña de oro andante.

Mientras pensaba en eso me dispongo a arar la tierra y hacer ejercicios, de manera rutinaria como siempre, hasta que llegue el medio día y pueda ir al rio a jugar con Ginny.

Me encuentro de camino por los bosques.

El sol se encuentra en lo más alto del cielo y voy hacia el encuentro con Ginny, me parece muy agradable esta época del año, cielos despejados, ya que tengo mucho material financiero debería comprar algunas cosas extra, pensé que como era el hijo único de la familia sin más familiares tendría que ahorrar todo lo que pudiera para que no se acabara el dinero, pero después de ver toda la riqueza que tengo no parece que me vaya a hacer falta.

La hora del encuentro se acerca y me quito los zapatos para poder meter mis pies en el agua.

De pronto los arbustos del otro lado del rio empiezan a moverse, y del sale Ginny.

-Hola Gin.., digo de manera muy alegre, pero mis palabras se entrecortan por una escena que no esperaba ver hoy.

A su lado hay dos personas que no reconozco, un hombre y una mujer ambos adultos y con el pelo de color naranja.

Ambos deben ser lo padre de Ginny, me supongo que debo presentarme de manera adecuada.

-Hola, me supongo que ustedes son los padres de Ginny, les digo de manera cortes mientras ellos se acercan a la orilla del rio.

Entonces el hombre al su lado me responde, cabe resaltar que es alto y delgado con un cabello naranja bien cortado, con algunas cicatrices producto de alguna pelea en su Juventud.

-Si Joven, me dice el hombre mayor, me llamo Arthur Weasley y esta es mi esposa Molly somos los padres de Ginny, y vivo a las afueras del bosque, no muy lejos de aquí.

-Buenas tardes señor Arthur mi nombre es Arcturus black Lestrange, aunque me puede decir Arcturus.

De un momento a otro me doy cuenta de algo y me pongo muy nervioso, no será que Ginny les conto lo que paso ayer, si ellos saben que su hija me vio desnudo y ahora quieren venir a causarme problemas, o no.

-Oh, digo en un tono bastante nervioso, lamento, lamento lo de ayer señores no fue mi intención enserio.

Los dos se miraron y parece que hubiesen malentendido mis palabras, y me dieron una mirada de aprecio.

-No es problema joven, no es problema, a su lado Ginny que pareció darse cuenta del sentido de mis palabras se puso roja, pero como sus padres no la estaban mirando no se dieron cuenta de que algo andaba mal entre estos dos jóvenes.

-Mi hija me comento que la ayudaste ayer cuando seguía este rio, quería agradecerte por la ayuda que le diste, también me gustaría agradecerles a tus padres ya que vivimos por aquí y nos gustaría conocer a nuestros nuevos vecinos, me dijo con una sonrisa.

Arthur sabía que los padres de Arcturus estaban en Azkaban, pero no quería hacerle saber al niño que sabían de su situación.

Si fuera posible le gustaría que el mismo niño les contara su historia, y si no que poco a poco se la hicieran saber.

Después de un tiempo bastante corto Arcturus respondió.

-Yo vivo solo señor Arthur, mis padres en este momento no están conmigo, se podría decir que están en un lugar del que nunca saldrán, dije con una voz muy directa aludiendo que sus padres estaban en la cárcel de Azkaban el único lugar del que nunca podrías salir.

Al principio pensé en decirles una mentira, fabricar una excusa, pero me parece que de esa forma estaría escapando de mi pasado

Inventando otro, y me decidí a que haría todo lo que pudiera para cambiar la opinión que la gente tiene de mi familia, y decir la verdad de frente es la manera correcta de empezar.

Arthur se sorprendió un poco, cuando Molly le comento que el niño había sido visto en el bosque pensó que habría uno de esos locos de la familia Lestrange cuidándolo, pero al parecer no es así.

- ¿No hay nadie cuidándote? Como es que consigues la comida y la vestimenta entonces, pregunto Arthur en un tono muy directo

-No tiene de que preocuparse señor Arthur la comida la cosecho yo mismo, y la vestimenta, así como otras cosas que no se puedan conseguir de la tierra, las compro con la ayuda de mi elfo domestico kreacher.

-Oh entiendo Arcturus, debe ser difícil crecer solo en estas tierras.

-Está bien señor, admito que al principio fue un poco duro acostumbrarme al lugar, pero estoy acostumbrado a estar solo, desde mi nacimiento la única persona con la que converse aparte de retratos es Ginny, eso fue bastante refrescante.

Digo con una sonrisa en mi rostro.

En ese momento Molly, que estaba a su lado sin hacer un ruido, no pudo contenerse más y se apresuró al niño tomándolo desprevenido, había estado preocupada encerrada en sus pensamientos mientras miraba al niño, hasta que escucho sus circunstancias.

POV Molly

Si efectivamente se parecía mucho, demasiado a sirius, esa cara, ese cabello, esos ojos.

Pensó en aquel niño que se convirtió en hombre y los traiciono, pensó tanto en eso que se olvidó que el niño no era sirius, no era él ni jamás lo seria.

Este niño no solo ha estado solo desde que era muy niño, sino que también tendría el destino marcado, por el desprecio que todo el mundo le tendría por el apellido que cargaba al hombro, pero él sabía.

El parecía saber el destino cruel de toda su familia y aun así dijo su nombre con el pecho en alto, un niño así no merecía crecer en el desprecio ni en la soledad, un niño así no sería influenciado por cosas tan idiotas como la creencia de sangre.

No me pude contener y lo abracé.

Me sentía muy culpable y no pude contenerme y llorar, en una guerra los ganadores siempre tienen razón y no me di cuenta de que no solo no acabamos con el odio de aquella guerra, sino que nos separó más y más.

Los tratábamos como ellos nos trataban a nosotros, desprecio y ostracismo, algo que juramos nunca cometer.

Si es así como el destino quiere tratar a este niño, yo no lo acepto.

-¿Y no te sientes solo?, le digo mientras lo mantengo en mi abrazo.

El niño me mira asombrado, y yo recién me doy cuenta que no es apropiado abrazarlo así.

Lo suelto de manera apresurada y lo miro.

-Lo siento, en verdad lo siento no sé qué me paso, espero que me disculpes.

El niño me mira asombrado, y un poco desencajado, y poco después dice.

-No se preocupe, es la primera vez que me abrasan, me dice con una sonrisa cautivadora.

Oh no, lo vuelvo a abrazar con fuerza y esta vez no lo dejo.