Habiendo pasado poco más de un año llegamos al reino de Sirim donde nos encontramos con los jóvenes Sir y Basir, quienes nos contaron que habían vendido la ballesta sin problema alguno enorgulleciendo al amo de esa manera .
Pasado algunos días el amo empezó a vender la ballesta utilizando la vieja estrategia de ofrecerla como arma de cacería lo que resulto de forma efectiva pues las ballestas volvieron a venderse en gran cantidad.
El reino de Sirim era mayormente conocido por ser la única nación cuyas fronteras eran las mismas desde que se independizó del imperio marcel
Esto era por varios motivos, para empezar gran parte del reino estaba ubicado en zonas montañosas que eran un escudo natural contra caballerias y grandes ejercitos, también tenían una población experta en el tiro con arco,
Ademas su economía estaba basaba en la minería y artesanía siendo esto razones insuficientes para que alguien decida gastar recurso en intentara invadir este reino,
Por otro lado lo reyes que ha tenido este reino son conocidos como los reyes pacíficos quiénes rara vez inventaron invadir otro reino por lo que nunca perdieron territorio pero tampoco ganaron ninguno.
Nuestra estadía en este reino fue de 3 meses debido a que el amo quería volver a Cicim lo más rápido posible al ya haber hecho una fortuna .
En ese entonces yo no sabia cual era nuestra ubicación como tal debido a que durante el viaje no vi ni un solo mapa, me preguntaba cuánto tardaríamos en volver pues pensaba que tendríamos que pasar por todos los reino anteriores nuevamente pero el amo me aclaro que ya estábamos de regreso mostrándome un mapa en el cual señaló la ruta que habíamos seguido llendo primero hacia el este por el centro del continente y al llegar a Shirio nos dirigimos hacia el sur llegando a Hyum para luego marchar hacia el oeste de regreso al reino de Cicím.
Haci pues continuamos nuestra marcha para llegar a Cicím pero antes debíamos pasar por el reino de Lum donde estuvimos tan solo un mes pues el amo solo tenía que administrar las posadas y tabernas que tenia en algunas ciudades de este reino de las cuales el amo cobraba una comisión de sus ganancias además de ver si seguían siendo rentables o no,
al final de nuestra estadía el amo decidió marchar de inmediato hacia su mansión en Cicím sin detenerse en ninguna otra ciudad lo que nos hizo llegar justo un año y y medio después de nuestra partida.
Al llegar a la mansión noté algunos cambios, para empezar el jefe de esclavos no se encontraba entre los esclavos para recibir al amo como de costumbre en su lugar quien nos recibió fue la anciana encargada de la cocina
- ¿ Qué ocurre, dónde está el jefe de esclavos ? - pregunto el amo
- El jefe de esclavos falleció hace un tiempo, amo - respondió la anciana
Esta noticia entristeció a casi todos los esclavos que fueron en el viaje quienes apenas se enteraban de esa noticia, y con toda razón pues el ancio jefe de los esclavos era como el padre de todos en la mansión, por lo que muchos no pudieron ocultar su tristeza poniéndose a llorar en silencio y bajando la cabeza
- El jefe de esclavos murio de vejez, amo - dijo la anciana
- Entiendo..., a partir de ahora tú serás jefe de esclavos - dijo el amo de una manera muy fria casi como si no le importara
Luego cambio de tema rápidamente y dijo
- Ahora díganme, ¿dónde está mi nieto ? -
Ese fue el segundo cambio que noté al llegar,
'Nieto ' palabra que no esperaba escuchar del amo ese día y mucho menos esperaba ver lo siguiente que pasó,
Sora con un niño pequeño en brazos acercándose,
aun sorprendido deduje rápidamente de lo que se trataba, al parecer Sora debió estar embarazada cuando nos marchamos hace 18 meses y obviamente el padre era del joven Sir quién al ver al niño lo tomó en brazos de inmediato mientras el amo solo miraba al niño con una ligera sonrisa en su rostro
luego de eso el amo llamó a su hija
- Esther hija ven a recibirme - dijo haciéndo a la señorita esther acercarse mostrando a todos lo hermosa que se puso con el poco tiempo qué pasó
Para mí al verla pude volver a sentir aquella sensación de atracción que no sentía desde mi otra vida, notando cada uno de sus atributos como mujer, desde su silueta como reloj de arena, su busto perfecto, sus caderas anchas y su cintura delgada hasta su rostro perfilado, sus labios delgados, sus ojos pequeños de marrón claro, su pelo oscuro como la noche y piel como de bronceado
Todas eso no lo pude notar durante mi niñez en este mundo y confirme asi que no sentía nada de esto por ser un niño.
Al terminar el reencuentro el amo ordeno descargar las cosas de la carreta y en el momento de descargar mi carreta me di cuenta que ya no tenía la misma carreta de cuando comencé el viaje esta era más grande y traía encima más cosas, al notar eso mire bien a las otras personas junto a mi dándome cuenta de que había crecido bastante en solo un año medio
era definitivo que ya había dejado de ser un niño.
Tras nuestra llegada el amo decidió que yo debía trabajar en el taller de herrería por lo que no tenía tanto tiempo como antes por lo que solo me dedicaba a dormir, trabajar y comer prácticamente estaba empezando a vivir como se supone debería vivir un esclavo e incluso olvidé mi promesa hacia la señorita Esther,
Pero un día en esos momentos de arduo trabajo un esclavo llegó diciendo que el amo me estaba llamando a los jardines, algo muy extraño pero aún así fui de inmediato pensando en el porqué de este llamado repentino
pero lo entendí al instante de llegar pues quien me espera no era el amo si no qué era la señorita Esther con quien no hable ni una vez desde mi llegada
- ¿ Qué se le ofrece señorita ? - pregunte
- Dime, ¿ nuestro plan sigue en pie ? - dijo mientras acariciaba lentamente las flores dándome la espalda
- Mientras yo viva mi promesa de ayuda hacia usted siempre estará en pie - dije mirándola fijamente
- ¿ Entonces debemos iniciar con el plan ? - pregunto aun de espaldas hacia mi
- Nuestro plan inicio hace tiempo, la primera fase era estudiar todo lo posible - respondí
- No tengo más libros que nos sean útiles ahora, hay que seguir el resto del plan..... , debo conseguir la fortuna de mi padre - dijo suspirando como si no estuviera del todo convencida
- La siguiente fase del plan depende solo de usted - le dije
Ella volteo a verme por un momento sin decir nada
- Aún es pronto para obtener la fortuna de su padre - dije, haciendo que ella volteé a verme extrañada
- La siguiente fase es que usted se case con un príncipe - afirmé mientras ella desviaba la mirada,
Luego de un silencio extrañamente largo continue hablando
- Usted necesita encontrar una forma de acercarse a la familia real -
- Conoce a alguien que la pueda ayudar en eso - pregunté esperando una respuesta negativa pues era imposible que la señorita Esther conociera a alguien de la familia real tomando en cuenta que ella no salía a ningún lugar fuera de la mansión y aunque lo hiciera el único miembro de la realeza en nuestra provincia era el príncipe Musm
- ¡Sí!, conozco a alguien dentro de la familia real - respondió interrumpiendo mis pensamientos
- Antes de vivir aquí vivía en la provincia de Egia dónde fui una buena amiga de la princesa Viriap la sobrina del rey - dijo esto con una sonrisa alegre en su rostro que nunca antes había visto,
- Entonces vuelva a ponerse en contacto con ella y tal vez eso le ayude a conocer algún príncipe - dije para luego terminar la conversación y no volver a hablar del asunto en mucho tiempo,
solo en ocasiones me contaba algunos detalles de las cartas que se enviaba con la princesa quién parecía feliz de hablar con su antigua amiga
Eso me hacía pensar que por ese lado el plan de convertir a la señorita Esther en reina reinante estaba marchando bien mientras por mi parte estaba perdido no tenía claro cuál sería mi papel en ese objetivo .