webnovel

Despertando como un personaje secundario en una novela BL

Evan se convirtió en un personaje insignificante en el mundo de una extraña novela de romance entre hombres. Fue considerado el villano, siendo humillado y rechazado. Evan solo quería vivir en paz para criar a su pequeño, esperando no toparse con ninguno de los personajes importantes de la historia. __________________________________________ Historia original y cliché. Omegaverse. Novela registrada en safecreative, no se permiten adaptaciones o plagios de ningún tipo.

Mari_Solez · LGBT+
Not enough ratings
35 Chs

Capítulo 8: Ira

Frente a la anticuada computadora de una biblioteca pública, Evan continuó imprimiendo todos los documentos que podría necesitar y que podía obtener por internet, hizo lo mismo con los documentos de Chris.

Antes de guardar su tarjeta de identificación, pasó su pulgar sobre el dato el cual había descartado la primera vez que lo había visto, sobre la palabra y símbolo omega. Luego, sintiéndose aún intranquilo por lo ocurrido la noche anterior, Evan escribió en el buscador las palabras alfa y omega.

Obtuvo una serie de resultados que solo lo hicieron sentir avergonzado y abochornado, sin querer hacer una investigación más especifica por el momento, apagó la computadora esperando nadie hubiera visto esas páginas, quizás solo debería tomar un diccionario o algún otro libro para responder sus dudas, después mejoraría su búsqueda en internet.

Miró al pasillo detrás de él, Chris no debería tardar en regresar de la zona de cuentos infantiles.

Dejó la silla y se dirigió a la impresora para recoger los papeles, correspondió el asentimiento de uno de los guardias de seguridad al pasar pretendiendo no sentía como sus ojos lo seguían.

Mientras revisaba las impresiones, se detuvo una vez más a leer el acta de nacimiento de Chris. El nombre de Evan Clare solo aparecía como padre omega, el apartado de padre alfa estaba vacío, «¿por qué dos padres?», suspiró y metió los documentos en una carpeta. Una cosa era clara, esos términos no tenían nada que ver con las manadas de lobos en su mundo.

Evan no era tonto, había entrado a una novela, ese hecho ya era de fantasía, pero no sabía si estaba preparado para una sorpresa más, quizás estaba en una ligera negación. Cerró la carpeta colocándola sobre una de las mesas.

Vio a Chris regresar sosteniendo un libro contra su pecho.

Relajó su expresión.

—¿Qué traes ahí?

Con una clara expectativa, Chris le presentó el libro rosa con dibujos de flores y abejas en la portada. Evan lo abrió, lo hojeo leyendo una explicación sencilla sobre castas sexuales.

Minutos después, cerró el librito con lentitud, manteniendo una expresión tranquila en su rostro mientras por dentro toda su cosmovisión era sacudida, pisoteada y desechada.

«Así que, esta… esta es la diferencia.»

—¿Papá termino? ¿Nos vamos?

Solo pudo abrir y cerrar sus labios ante la atenta mirada del niño.

—Si… si. ¿Qué tal si tomas otro libro para leer? Papá hará lo mismo. Necesito... Necesito investigar algunas cosas.

Chris solo asintió en confiada aceptación para luego salir corriendo.

_________________________________________

Aburrido, Chris dejó el libro de administración de empresas a un lado, se levantó de su lugar en el suelo y caminó entre los estantes, ocultó tras uno observó a Evan, el hombre seguía sumido en una pila de libros que iban desde anatomía, fisiología, biología y por supuesto, sociología. Todavía mantenía el librito rosa cerca.

Entre más pronto ese hombre averiguara en que situación se encontraba menos molestias le ocasionaría. No deseaba volver a tratar con un omega incompetente.

Apunto de volver, notó la mirada de uno de los guardias sobre Evan. Era de constitución grande, probablemente un alfa, frunció el ceño, sintiéndose repentinamente molesto, volteó a ver a Evan, al darse cuenta este ni siquiera se había percatado de la atención de ese hombre, Chris se relajó.

Un momento después abandono ese escondite, tomando uno de los libros para niños se dirigió a la mesa para sentarse junto a Evan. Quien solo tocó su cabeza en reconocimiento antes de volverse a perder en la lectura.

Tenía que recordarse que el hombre a su lado no era su padre, no era el tonto que metería cualquier alfa o beta a su cama, no era el omega con el olor nauseabundo, no era el omega obsesionado con un alfa ya emparejado.

Chris apretó sus dientes y escondió su rostro tras el libro sin querer pensar en ese par.

Chris vio de reojo como el guardia parecía dar un paso más cerca del lugar en dónde estaban, olfateando. Sintió la necesidad de gruñir, pero se controló, no queriendo analizar de donde venía ese instinto de proteger, iba a atribuirlo a la relación de padre e hijo que estaba fuera de su control, por ahora; sus instintos deberían estar dormidos, lo estaban, ni siquiera se había presentado, no lo comenzaría a hacer hasta dentro de unos cinco años. Y sabía lo que diría su prueba, alfa.

Miró a Evan leer con atención y casi fascinación el libro de fisiología que sostenía, había tenido razón al suponer era ignorante de su condición de omega. Había sido divertido ponerlo en una encrucijada el día anterior.

La curiosidad por saber de donde venía y porque no conocía esos términos, pero si cierta información lo intrigaba. Pero para averiguar eso quizás tendría que hacerle saber sobre su renacimiento y no estaba dispuesto a hacer eso.

Recordó los ojos verdes tranquilos que siempre lo miraban con amabilidad, sin un rastro de lastima o repulsión, recordó los suaves y tiernos toques.

Se inclino hacia el cálido y dulce aroma...

Apartó la mirada del hombre, «es tan tonto».

Apostaba que si descubría su secreto ese hombre no lo trataría igual, no era que a Chris le gustará fingir y ser tratado como un niño de cinco años, tampoco le importaba estuviera bien o mal estar haciendo eso, solo era útil, algo necesario. Estaba lejos de ser lo más humillante que había hecho para sobrevivir.

Luego de algunas horas, vio a Evan cerrar un libro que ya lo había visto leer por lo menos tres veces, parecía distraído, como si aún procesara la información que había obtenido de dichos libros. Dejó la silla cuando Evan lo hizo, por eso intento apoyarlo cuando se mareo repentinamente.

El guardia se acercó, queriendo tocar a Evan, sin importarle fuera un comportamiento anormal para su edad, Chris le gruñó desde lo profundo de su garganta.

No obtuvo más que una mirada divertida que lo irritó.

Permitió que el alfa ayudará a sentar a Evan y mantuvo la mirada sobre él en todo momento, no se sintió en calma hasta que lo vio retroceder algunos pasos.

—Comienzas a oler demasiado, es mejor que tomes tu supresor —comentó, en la típica actitud del buen ciudadano y alfa decente, Chris quiso gruñirle otra vez—. ¿Puedo llamar a alguien por ti? ¿Tú alfa?

Chris le lanzó una mirada mordaz, y tuvo que morderse los labios para evitar decir "ya estoy aquí", nunca había sentido una necesidad tan grande de cuidar hacia su padre, que ahora lo estuviera sintiendo hacia alguien que no lo era lo desconcertaba. Lo molestaba.

—Yo…, no, no, gracias… no tengo alfa —susurró, con un poco de sudor en la frente y mejillas sonrojadas.

«Mierda», obviamente ese hombre no sabría de supresores ni del celo, apenas comenzaría a comprender lo que era.

La actitud del guardia cambió tras escucharlo, ahora había claro desdén e interés malicioso en sus ojos.

—Ah, eres de esos.

Le lanzó una mirada a Chris llena de desprecio, después pareció querer acercarse para revisar la parte posterior del cuello del hombre cubierto por cabello rosa.

Chris gruñó y se interpuso en su camino sin pensar.

—Apártate.

—Obviamente él es quien esta buscando algo más si decide salir tan cerca de su celo —se puso en cuclillas frente a Chris, mostrando una mueca de burla—. ¿Quizás este buscándote un nuevo padre?

Furioso, a su memoria vinieron las burlas y frases muy parecidas dichas con la intención de herirlo y humillarlo mientras crecía, Chris se lanzó hacia el hombre, pero un par de delgados brazos lo detuvieron, abrazándolo desde atrás.

—Para, Christian.

Como la primera vez que sus brazos lo habían rodeado, Chris se quedo inmóvil, esta vez sintiendo un calor corporal que parecía ir en aumento.

—¿Qué esta sucediendo aquí? —cuestionó una mujer de mediana edad, mirando de Evan y Chris al guardia. Era una alfa y probablemente la encargada del lugar.

El hombre se puso de pie.

—Solo aconsejando a un omega descarriado, señora.

La mujer volvió a mirarlos, un prejuicio en sus ojos.

—Esto es una biblioteca pública, si bien no discrimínanos y tenemos una entrada libre, no significa que cualquiera pueda venir a causar desorden y exponerse de formas tan vulgares —dijo, frunciendo la nariz— Deberías considerar el uso de un collar o no salir de casa para tu propia protección.

Chris apretó los dientes.

—Usted…

Evan lo liberó, viéndose mucho más compuesto.

—Entiendo.

Tras decir eso tomó la carpeta y una pequeña mochila negra antes de agacharse para abrazarlo y alzarlo. Entonces salieron por la puerta sin mirar atrás.

Chris quería fingir como otras veces, quería recostar su cabeza en su hombro o echar sus brazos alrededor de su cuello obteniendo su apacible y seguro aroma, tan diferente al de su padre, pero no podía, recordar el desprecio en los ojos de esas personas lo hacía enfurecer, era exactamente como antes de que se presentará como alfa. Y aún así, esas personas lo menospreciaron, lo repudiaron.

Esa pareja se burló de él, esos niños mimados lo miraron con asco mientras se escondían detrás de sus padres, lo trataron como un loco, ordenaron lo sacarán de su lujoso hogar, pero no conforme con eso, ocasionaron su muerte.

—¿Chris? ¿Christian?

Sintió una cálida palma en su mejilla.

—¿Qué? —Parpadeo y respiró hondo, sintiendo su ira retroceder, entonces miró el rostro cansado interrogante.

—Dije. ¿Cuándo fue qué aprendiste a leer?

Bajó los suspicaces ojos verdes, por primera vez desde que había renacido, Chris se sintió nervioso.

Intentaré seguir con mi racha de actualización semanal, porque he estado un poco enferma y me he sentido desanimada.

También pueden seguirme en loviu.

Mari_Solezcreators' thoughts