—¿Tú también?
—... Ya no.
Venerable la Espada curvó sus labios; como Su Ping estaba ahí, él creía que podía despedirse del campeonato.
Aún sin Su Ping, Venerable la Espada no se sentía tan confiado porque la competencia de ese año era intensa.
—Venerable Espada, ¿quién es este? —preguntó un hombre.
Parados junto a Venerable la Espada había dos personas. Uno era un anciano encorvado con cabello gris, y el otro era fuerte como un oso.
—Este es el señor Su. Su título es… Bueno, señor Su, ¿tienes un título?
Venerable la Espada comenzó a hacer las presentaciones. Cuando guerreros de mascotas de batalla titulados se encuentran por primera vez, lo respetuoso es decirse sus respectivos títulos. Pero Venerable la Espada de repente se dió cuenta de que no conocía el título de Su Ping.
—Aún no tengo un rango titulado. Una vez que alcance ese rango, preferiría tener Jefe como mi título, —respondió Su Ping.
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