Estábamos cada vez más cerca del muro, solo quedaban unos cuantos metros pero algo o más bien alguien nos hizo detenernos.
Eran Aang y Momo que venían hacia nosotros.
—Aang ¿Qué haces aquí? Pensé que buscarías a Appa. —dije.
—Eso hacia pero algo me detuvo y es grande. —dijo.
Fuimos hasta estar cerca del muro, entonces Aang y Toph nos subieron con una gran roca por el muro de Ba Sing Se.
—¿Qué es tan grande como para que Appa tenga que esperar? —pregunto Sokka mientras subíamos.
—Eso. —dijo Aang.
A lo lejos pudimos ver algo sumamente grande, hecho de metal y que se acercaba al muro. Era un taladro.
Al llegar arriba pudimos verlo mejor.
—Llegamos a Ba Sing Se y aun no estamos a salvo, nadie lo está. —dijo Ying preocupada.
—¿Qué se supone que hacen aquí? —dijo un soldado del Reino Tierra. —No se permiten civiles en el muro. —
—Somo el Avatar y la Ānníng. Llévenos con quien este a cargo. —dijo Aang.
Terminaron llevándonos ante el comandante del muro exterior, el General Sung.
Él estaba sentado detrás de un escritorio y nos sonreía calmado como si no estuviera pasando nada grave.
—Es un honor poder recibirlos en el muro jóvenes Avatar y Ānníng. —dijo con voz pomposa el General. —Pero su ayuda no es necesaria. —
—¿Qué no es necesaria? —pregunte incrédula.
—Eso dije, tengo esta situación bajo control. —se puso de pie y nos guio hacia afuera de su oficina. —Les aseguro que la Nación del Fuego no puede traspasar este muro. Muchos han tratado de hacerlo pero nadie lo ha logrado. —
—¿Y qué hay del Dragón del Oeste? —pregunto Toph. —El entro. —
—Eh…bueno…técnicamente si pero fue repelido rápidamente y de todas las formas. —dijo rápidamente y un poco nervioso. —Por eso la ciudad se llama Ba Sing Se, esta es la ciudad impenetrable, si no se llamaría Na Sing Se. —comenzó a reír de su chiste pero al ver que nadie reía cambio a una cara seria y dijo: —Eso significa penetrable. —
—Si, gracias por la lección pero ¿Qué haremos con el taladro? —pregunte.
—No hay problema por eso mande a un grupo de los mejores maestros tierra llamado el equipo Terra. —dijo el general mientras miraba por un monocular.
—Excelente nombre, muy atractivo. —alago Sokka.
—¡Perdimos! ¡No! —grito con histeria el general después de mirar por el monocular.
—¡Cálmese! —le grito Sokka mientras le daba una bofetada. —¡¿Qué clase de general eres?! —
—Es verdad, lo siento. —
—Tal vez ahora considere la ayuda del Avatar y la Ānníng. —dijo Toph.
El general se nos acercó con la cabeza baja y con voz estrangulada dijo:
—Si, por favor. —
—La pregunta es: ¿Cómo vamos a detener esa cosa? —pregunto Aang.
Todos volteamos a ver a Sokka.
—¿Y porque me miran a mí? —pregunto.
—Tu eres el que da ideas. —dije encogiéndome de hombros.
—Acaso soy el único que debe de tener un plan es mucha presión para mí. —dijo fingiendo indignación.
—Y también eres el de las quejas. —dijo Katara.
—Eso es más fácil. —
Después de unos minutos le informaron al general que los soldados lastimados habían vuelto, así que fuimos a ver en que podíamos ayudar.
—¿De que esta herido? No parece lastimado. —pregunto el general viendo como Katara intentaba curar a uno de los soldados.
—Su chi está bloqueado. —contesto. —Lin, ¿Podrías curarlo? —
Asentí y me acerqué a él.
Froté mis manos entre sí, puse las manos sobre su pecho para sentir los puntos de presión bloqueados, era la columna. Chica lista, sin las piernas no hay suficiente fuerza para hacer tierra control.
—Necesito que lo pongan boca abajo con cuidado. —dije.
—¿Por qué? —pregunto el general.
—Bloquearon el punto que está en la columna, con el dejan débiles las piernas y sin la fuerza de esta, no hay tierra control. —
Una vez el soldado acomodado, le pegué en el punto exacto con dos dedos, el soldado se quejó, después seguí la línea de su columna para poder unir el flujo del chi.
El soldado suspiro aliviado cuando termine.
—Ya pueden acomodarlo. —dije. —¿Quién te hiso esto? —
—Dos chicas me emboscaron, una de ellas me dio unos golpes y de repente perdí mis poderes y no podía moverme se fue haciendo piruetas. —
—Ty Lee. —dijo Katara. —No se ve peligrosa pero conoce el cuerpo humano y sus puntos débiles, es como si te venciera desde adentro. —
Sokka comenzó a llamar nuestra atención con raros ruidos.
—¿Sí? —pregunte.
—Eso que dijo Katara así venceremos al taladro. De la misma forma en la que Ty Lee venció a esos maestros tierra. —
—Atacaremos sus puntos de presión. —dijo Toph.
—Los venceremos desde adentro. —dijo Aang serio.
Bajamos de la muralla y nos pusimos en posición a unos metros del taladro.
—Cuando use la tierra para cubrirnos no podrán ver nada así que no se alejen de mí. —dijo Toph.
Dio un salto y con mucho esfuerzo levanto una enorme nube de polvo cerca del taladro.
—¡Vamos! —
Corrimos detrás de Toph. No se podía ver casi nada así que procure estar cerca de ella en todo momento.
Al llegar cerca del taladro, Toph hizo un agujero en la tierra, saltamos adentro de él, cerro el techo del agujero y todo quedo a oscuras.
—Está muy oscuro aquí abajo, no veo nada de nada. —dijo Sokka.
—No, que pesadilla. —dijo Toph con sarcasmo.
Le di un golpe a Sokka, pero…
—¡Auch! ¿Quién me golpeo? —pregunto Aang.
…No le di a él.
—Lo siento, cariño. —dije apenada. —Le quería dar a Sokka. —
—¿Por qué? —pregunto indignado. —Si me iba a disculpar. —
Toph nos guio por el oscuro túnel hasta estar por debajo del taladro, salimos de él e identificamos una entrada para poder entrar.
Di un salto, entre y con ayuda de Aang subimos a Sokka y a Katara. Toph decidió quedarse y disminuir su velocidad desde afuera.
—Necesito un plano de esta máquina, algún dibujo que nos muestre su interior para encontrar sus puntos débiles. —dijo Sokka.
—¿De dónde sacaremos eso? —pregunte.
Entonces Sokka saco su machete y golpeo la válvula de una de las tuberías haciendo que comenzara a soltar mucho vapor.
—¡¿Qué estás haciendo?! —pregunto Aang alarmado. —Se darán cuenta. —
—Eso quiero. —sonrió de lado. —Estoy seguro de que una maquina tan grande como esta debe de tener abordo ingenieros y cuando sucede algo…—
—Vienen a repararlo. —termino por el Katara.
Sonreímos y nos fuimos a esconder.
Al los pocos minutos escuchamos como alguien se acercaba.
—Tu turno Katara. —le susurre.
Katara salió de su escondite y utilizo el vapor para congelar al ingeniero. Sokka corrió hacia él y le quito uno de los planos que tenía.
Salimos de ahí lo más rápido que pudimos.
Sokka analizo el plano.
—Veo que el taladro consta de dos estructuras principales, el mecanismo interno donde estamos ahora y la coraza exterior. —explico. —Las corazas exterior e interior están conectadas por estos pilares si las cortamos esto colapsara. —
Asentimos y fuimos a donde estaban los pilares.
Resultaron ser pilares enormes.
—Se miran mucho más grandes de lo que se mira en el plano, tendremos que trabajar muy duro para derribarlos. —dijo Sokka.
—¿Cómo que "Tendremos"? —pregunto Katara con el ceño fruncido. —Aang, Lin y yo haremos todo el trabajo. —
—Yo soy el de los planes y ustedes los de los poderes de maestro agua y juntos somos ¡El equipo Ānnítar! —grito Sokka emocionado. —Ven, convine Ānníng con Avatar. —
—Buen nombre. —dije impresionada.
Aang y Katara me miraron extrañados.
—¿Qué? —pregunte. —Es un buen nombre. —
—Hay que empezar de una vez. —dijo Katara.
—Ustedes trabajen en ese pilar en lo que yo trabajo en este. —dije apuntando los pilares.
Saque el agua de mi cantimplora y comencé a manipularla de un lado a otro del pilar para poder generar un corte que lo debilitara.
No paso mucho para que me cansara… para que los tres nos cansáramos.
Lo bueno era que habíamos avanzado algo en los cortes, lo malo era que apenas llevábamos dos pilares.
—¡Vamos equipo Ānnítar no se den por vencidos! —animo Sokka cuando paramos para descansar.
Katara gruño y yo lo mire mal.
Rápidamente guardo silencio.
Después de eso seguimos con lo nuestro.
Sonreí cuando por fin pude atravesar el pilar, este solo se deslizo al igual que el de Aang y Katara, y no paso nada más.
—A este paso no lograremos impedir que el taladro llegue al muro. —dije cansada.
—No sé si tenga energía para derribar otro. —dijo Aang desde el piso igual de cansado que Katara y yo.
—Shh… guarden silencio. —dijo Sokka.
Al quedarnos en silencio se comenzó a escuchar un gran estruendo.
—¿Escuchan eso? Lo logramos. —sonrió Sokka. —Es mejor que salgamos de aquí. —
Comenzamos a correr hacia la salida.
—Los felicito equipo. —se comenzó a escuchar por los altavoces que había ahí. —El taladro acaba de hacer contacto con el muro de Ba Sing Se, ahora se está acercando la victoria. —
—No puede ser. —susurre desanimada.
Sokka corrió hacia el pilar de Aang y Katara, y comenzó a empujarlo.
—¡Vamos, pilar, colapsa! —grito.
—Esto es muy grave. —se lamentó Katara.
—Demasiado grave. —dije de igual forma yo.
—Ponemos todo nuestro esfuerzo en romper estos pilares pero esto toma tiempo. —suspiro Sokka cansado.
—Tal vez no tenemos que atravesarlos por completo. —dijo Aang. —Toph me ha enseñado que no debo de usar el cien por ciento de mi energía en un solo golpe. Sokka posición de pelea. —Sokka le hizo caso. —Debes de ser rápido y certero. —movió los pies de Sokka. —Golpear en diferentes puntos y desequilibra a tu oponente. —golpeo el pecho de Sokka haciendo que casi se caiga. —Y cuando esta débil debes dar el golpe final. —golpeo la cabeza de Sokka y este cayó al suelo. —Su propio peso hará que caiga ¿Entendieron? —
—Solo debemos debilitar los pilares en vez de cortarlos por completo. —dije.
—Después subiré por esta cosa para darle el golpe final. —termino de explicar el plan.
—Y ¡Bum! el taladro caerá por completo. —dijo Sokka emocionado.
—Todos detrás de ese muro, todo el mundo cuentan con nosotros. —dijo Aang.
—El mundo entero menos la Nación del Fuego. —corrigió Sokka.
Rápido nos pusimos manos a la obra y comenzamos a cortar todos los pilares disponibles.
—¡Bien hecho equipo Ānnítar! Ahora Aang solo tiene que… ¡Abajo! —advirtió Sokka.
Una bola de fuego azul por poco le da a Sokka.
Volteamos a ver quién era.
Eran Azula, Mei y Ty Lee.
—Vean Azula tenía razón eran el Avatar, la Ānníng, la chica...y su amigo. —Ty Lee miro coqueta a Sokka.
—Hola. —saludo algo bobo Sokka.
Katara tuvo que jalarlo para que comenzara a correr.
Corrimos por un pasillo, Sokka, Katara y yo corrimos por la izquierda y Aang junto con Momo a la derecha.
—¡Salgan de aquí, yo sé lo que tengo que hacer! —grito Aang.
—¡Espera! —lo detuve y le lancé mi cantimplora. —Tu necesitas el agua más que yo. —
La tomo y siguió corriendo al igual que nosotros.
Llegamos a un corredor sin salida que al fondo tenía una compuerta y en este decía: "Cañería de tierra".
Sokka la abrió y nos dimos cuenta de que era una mezcla de tierra y agua.
—Tiene que ser la salida. —dijo Sokka.
Vimos como Ty Lee y Mei se nos acercaban y saltamos al lodo rápidamente.
Y efectivamente el rio de lodo nos llevó a la salida.
Vimos como Ty Lee venia hacia nosotros, así que junto con Katara regresamos el lodo.
—Intenta bloquear mi chi ahora, fenómeno de circo. —dijo Katara enojada.
—¡Oye! Yo también bloqueo el chi. —dije indignada.
—Sabes que no me refiero a ti, Lin. —dijo Katara con una sonrisa de disculpa.
—Sigan con eso, chicas, la presión se acumulará en el taladro y cuando Aang dé el golpe final explotara. —explico Sokka.
Le hicimos caso y seguimos reteniendo el lodo y a Ty Lee.
—Buena técnica chicas. —alago Sokka. —Sigan así, no dejen de respirar. —
—¿Sabes? Estoy cansada de que me digas que hacer todo el día y estoy segura de que Lin esta igual. —hice una mueca y asentí. —Eres como un mono parlanchín. —
—¡Solo usen sus poderes, mujeres! —grito Sokka.
Moví la mano y lo tiré al piso.
—¿Necesitan ayuda? —pregunto Toph llegando de repente.
—Ayúdanos a tapar este drenaje. —dije.
Toph tomo posición y de un empujón nos ayudó a llevar todo el lodo hasta el fondo de la máquina.
Escuchamos como una parte de la estructura del taladro exploto.
—¡Si! —grito Sokka de alegría.
—Prepárense. —dijo Toph y nos subió en una plataforma de piedra antes de que todo el lodo del taladro nos llevara.
El taladro cayó.
—¡Lo hicimos! —salte feliz y corrimos para reencontrarnos con Aang.
Nos limpiamos el lodo y volvimos a subir el muro.
—Solo quiero decir que hicimos una buen trabajo equipo Ānnítar. —dijo Sokka.
—Ya deja de llamarnos equipo Ānnítar. —regaño Katara. —No importa cuantas veces lo digas no se pondrá de moda. —
—¿Y qué tal… "El escuadrón Bumerang? Me gusta porque incluye tu nombre Aang, Bumer-Aang. —sonrió.
—Ese me gusta. —dijo Aang.
Hice una mueca y moví la mano diciendo: "Mas o menos"
—Hablemos de eso mientras entramos a la ciudad. —dije tomando la mano de Aang y comenzando a caminar.
—¿La tropa de Liang? —
—Camina, Sokka. —dijo Katara cansada.
—¿Los cinco temerarios? —siguió dando nombres.
—Estás loco. —dijo Toph.
—¿Por qué? Somos temerarios. —dijo Sokka.
—A mí me gusto "El equipo Ānnítar" —dije.
—Ven, Lin si me entiende. —dijo Sokka engreídamente.
—Ya me arrepentí. —murmure.
—No, no puedes retractarte. —sonrió y nos pasó caminando feliz.
Suspire y seguimos caminando.