Palabras no dichas (Parte 1)

—Sin embargo, en el mundo exterior, sabía que era una carga para la relación entre ustedes dos primero y con Kamila después. Por eso hace un año, una vez que recuperé mi cuerpo, aunque solo sea una construcción energética sin rasgos distintivos, lo mantuve oculto a Lith.

El espíritu saltó de sus brazos y flotó frente a Phloria para que sus ojos se encontraran.

—Incluso antes de eso, dejé la mano de Lith cada vez que pasaba tiempo de calidad con Kamila. No le conté sobre mi nuevo cuerpo hasta que me vi obligado a hacerlo porque fuera de esta torre, todavía no soy más que una voz. Incluso ahora, solo puedo soñar con tener una vida normal.

—Después de escuchar mi parte de la historia, ¿sigues sintiendo ganas de culpar a Lith por mantener mi existencia en secreto? Antes de responder, piensa en cómo, a pesar de todo lo que ustedes dos pasaron juntos, te enfureciste en el momento en que descubriste la verdad y cómo tu yo mucho más inmaduro en la academia hubiera reaccionado.