En su búsqueda por alcanzar la vida eterna, Echidna había diseñado un mecanismo para crear réplicas de cuerpos.
Muchas de sus palabras no eran particularmente confiables; pero si todo lo que dijo era verdad, entonces era razonable concluir que Echidna pudiera haberse convertido a sí misma en un espíritu artificial.
Ciertamente, aquella Bruja de la Codicia que anhelaba la omnisciencia sería capaz de hacer algo como convertirse en un espíritu —separándose de la carne, liberándose del concepto de "esperanza de vida"— con tal de poder alargar su propia existencia.
Por lo tanto… no había ninguna duda de que este zorro blanco fuera un espíritu artificial que se llamaba a sí misma Echidna. Sin embargo, ella afirmaba no tener recuerdos; ¿era esto cierto o falso?
Anastasia dijo que habían estado juntas por más de una década; pero eso no era razón suficiente para creerle. No sería de extrañar que ella tuviera todo planeado por más de una década.
Subaru incluso pensaba que ella podría haber planeado todo lo ocurrido únicamente para tenderle una trampa en este momento—
_Anastasia: Oye, esto no va bien. Parece que nos 'tá mirando con musha agresivida'.
_Echidna: Un odio tan intenso hace que despierte mi curiosidad por esta otra Echidna… pero dejemos ese asunto por ahora. Me da igual que no me creas; no me importa que ignores lo que digo. Ana, ¿podrías decirle lo que está pasando?
Ante el silencio y la firme desconfianza de Subaru, el zorro blanco habló como si se hubiera rendido. Y Anastasia, teniendo prisa, se encogió de hombros y dio una pequeña palmada con sus manos, recuperando el hilo de la conversación.
_Anastasia: Bueno, ahora que ya se resorvieron tus du'as, er asunto de má' importancia es er Culto de la Bruja. Hicieron otras tres demandas.
_Subaru: Otras tres… entonces, ¿son cuatro en total?
_Anastasia: Sí; er cuár es er número de arzobispos que se han presenta'o. Da'o que er conteni'o de la mayoría de sus demandas sonaba má' que na'a a una burla… trata de no sentirte ofendi'o.
Demandas burlonas… una vez más, habían ido demasiado lejos.
El Culto de la Bruja había desafiado la creencia de Subaru de que su impresión de ellos no podía empeorar más.
Anastasia acarició la cola del zorro blanco que tenía en sus manos.
Y entonces, remojándose los labios…
_Anastasia: La primera demanda es "entregar nuestros espíritus artificiales", de parte de Glotonería.
_Subaru: Glotonería…
_Anastasia: Aunque tengo musho que decir al respecto, me guardaré mis comentarios pa' después. La siguiente, vino de Ira… Ella quiere er Libro de la Sabiduría que fue traí'o a esta ciuda'.
_Subaru: ¡¿—hk?!
Y así llegó otra sorpresa inesperada, ante la cual Subaru involuntariamente abrió sus ojos por completo.
Al ver esa reacción, Anastasia entrecerró sus ojos color turquesa.
_Anastasia: A juzgar por tu expresión, parece que sabes argo sobre eso, ¿verda', Natsuki-kun?
_Subaru: …
_Anastasia: Menos mal. Me quitas un peso de encima. Ni Echidna ni yo sabíamo' na'a ar respecto, y tampoco Julius y los demá'.
_Subaru: ¿…Ese zorro blanco de verdad dijo que desconoce el Libro de la Sabiduría? No me lo creo.
Anastasia, que antes de hablar con Subaru estaba preocupada por algo que no tenía ni idea de cómo averiguar, sonrió al encontrar ahora un pequeño rayo de esperanza. Pero, como era de esperar, esa sonrisa no contenía ni una pizca de lindura.
_Echidna: No, me temo que no poseo información al respecto… Entonces, si me permites especular… la Echidna que tú conoces guarda relación con este Libro de la Sabiduría, ¿es esa una aseveración correcta?
_Subaru: Sí, es exactamente eso.
_Echidna: Siendo ese el caso, voy a tener que preguntarlo incluso aunque no quiera. ¿Qué clase de persona era la Echidna que conoces? ¿Posee ella alguna clase de conexión con el Culto de la Bruja?
Aunque Subaru creía que ella no estaba fingiendo ignorancia, sintió que Anastasia y su zorro blanco estaban hablando de Echidna como alguien que tenía una relación poco común con uno de sus clientes.
Pero, dada la forma de pensar de ambas, era algo inevitable.
Si él creyera lo que ese zorro blanco decía, entonces para ella el nombre Echidna se refería únicamente a su propia existencia. Únicamente Subaru conocía a la creadora de ese espíritu artificial, Echidna. Y, aún más importante, esto demostraba que, a excepción de la Bruja de la Envidia, los nombres de las brujas habían sido prácticamente olvidados por todo el mundo.
El motivo por el que ese nombre le daba muy malas vibras era porque únicamente los miembros de la facción de Emilia conocían detalles de la existencia de Echidna.
_Subaru: —Echidna… es el nombre de una bruja de mucho tiempo atrás. Además de la Bruja de la Envidia, existieron otras brujas; Echidna era una de ellas. A pesar de que ella murió hace mucho tiempo, su alma perduró y por eso pude tener un encuentro espiritual con ella. Desde entonces, soy muy cauteloso con todo lo que tenga que ver con ella.
_Anastasia: Oye, Natsuki-kun, ¿tienes fiebre o argo? 'Tás diciendo cosas rearmente extrañas.
_Subaru: No lo he soñado y tampoco estoy loco. Esas brujas son existencias retorcidas e incomprensibles. Podían incluso crear espíritus artificiales, por lo menos acepten eso.
_Echidna: Si ese es el caso… entonces podría decirse que esa Echidna me creó.
La respuesta de Subaru estaba infestada de implicaciones, y el zorro blanco logró darle significado a palabras que sin duda sonaban atrevidas. Aunque él no estaba tratando de esconder nada, Subaru sintió una pizca de remordimiento por no haber dicho las cosas sin rodeos.
Como si los pensamientos de Subaru se hubieran manifestado en su rostro, el zorro blanco emitió una risa a través de su pequeña garganta.
_Echidna: Descubrir el secreto detrás de mi nacimiento en un momento tan inesperado es indudablemente uno de los muchos placeres de la vida. Si tienes oportunidad, cuéntame todos los detalles.
_Subaru: …Aunque tú misma seas un espíritu, es evidente que no sabes absolutamente nada sobre la existencia de los espíritus artificiales. Nuestra Beatrice parece saber mucho más que… espera, ahora que lo pienso, ella jamás me ha mencionado nada sobre ti. ¿De dónde viniste? ¿Y qué se supone que debías hacer?
_Echidna: Lamentablemente, desconozco tanto las circunstancias de mi nacimiento como el propósito por el que fui creada. Ahora mismo, lo único que hago es seguir el camino de esta relativamente interesante niña.
Ante los cuestionamientos de Subaru, el zorro blanco le lanzó una significativa mirada a Anastasia, quien lentamente dirigió su mirada hacia Subaru.
_Anastasia: La conexión entre Echidna y esa bruja también despierta mi interés. Y seguramente… también haya una conexión con er Culto de la Bruja. En fin, vorvamo' ar tema der Libro de la Sabiduría…
_Subaru: El Libro de la Sabiduría es el artefacto en el que está basado el evangelio del Culto de la Bruja… en otras palabras, es la versión original y completa. Las capacidades proféticas con las que escribe el futuro operan bajo los mismos principios que la "Piedra de la Historia" del Dragón.
_Anastasia: Iguar que la "Piedra de la Historia del Dragón"… siendo así, su credibilida' sería increíblemente arta. ¿Sería posible que la bruja haya crea'o er libro ella misma?
_Subaru: Eso es lo que insinuó, pero las dos copias existentes debieron haberse quemado. Desconozco si fueron creadas más copias.
Echidna le había dado copias de su Libro de la Sabiduría a Beatrice y Roswaal. Y ambas copias, sin duda alguna, habían sido destruidas un año atrás.
El Libro de la Sabiduría de Beatrice había quedado hecho cenizas junto con la Biblioteca Prohibida. Y Ram había quemado el Libro de la Sabiduría de Roswaal, rechazando el futuro escrito en él.
_Anastasia: Pero eso es sólo lo que escushaste de la bruja Echidna. ¿Sus palabras rearmente reflejan la verda' de la situación?
_Subaru: …Exacto.
Aunque no le hacía mucha gracia que Anastasia simplemente negara sus afirmaciones, Subaru también entendía que la credibilidad de tales declaraciones no era muy alta. Sin embargo, él no pensaba que Echidna hubiera mentido sobre eso.
Podría decirse que sólo Subaru, que había hablado con la bruja frente a frente, podía sentir algo así.
_Subaru: …
_Anastasia: No confiar en la persona, sino en sus palabras. Debe ser una persona rearmente problemática pa' ti, Natsuki-kun.
_Subaru: Yo también lo creo. Sí; a pesar de no tener ninguna intención de confiar en ella, confié en sus palabras; qué contradictorio.
Toda acción de Echidna había sido un medio muy astutamente pensado para engañar a Subaru y convertirlo en su marioneta.
No obstante, eso no significaba que todo hubiera sido una mentira. ¿Subaru creía eso porque quería? ¿O se encontraba todavía bajo la influencia de esa bruja?
_Anastasia: Dejando de la'o tus sentimientos personales, por er momento sólo podemo' concluir tres posibilida'es respecto a este Libro de la Sabiduría. La primera es que la bruja mintió, y se hicieron más copias.
_Subaru: La segunda es que el Culto no sabe que el Libro de la Sabiduría ya no existe, y únicamente hacen ruido… supongo. Pero, ¿cuál es la tercera?
_Anastasia: A menos que haya menti'o, sólo hay una manera en la que er Libro de la Sabiduría aún podría existir. Y esa es, que una de las copias no se haya quema'o por completo, y quedaran restos de ella.
_Subaru: —¿Qué…?
Subaru no había considerado en absoluto que hubieran quedado restos del Libro de la Sabiduría.
Anastasia apuntó con un dedo hacia Subaru, que estaba anonadado.
_Anastasia: Aunque no es una certeza totar, er libro fue hesho por una bruja, ¿no? ¿No crees que tar vez… sea difícir de quemar o que incluso sea capaz de regenerarse?
_Subaru: C-ciertamente, no puedo decir que sea imposible… pero entonces, la pregunta sería ¿quién pudo haber encontrado y resguardado una versión restaurada?
_Anastasia: Arguien capaz de verlo arder y resguardarlo… Tar vez le 'toy dando demasia'as vuertas, y tar vez la segunda hipótesis es musho má' probable. En cuarquier caso, no vamo' a aceptar su demanda.
Ante las posibilidades que inferían las palabras de Anastasia, Subaru comenzó a reflexionar llevándose una mano a la boca.