Capítulo 10: Santuario a la Montaña

Llego el amanecer, mientras dos jovenes caminaban por el camino, Balios y Barnabi, mantenian el ritmo lento pero constante, sin ningun descanso desde que salieron de la emboscada.

- Hermano mayor, deberiamos descansar un poco, vuelves a temblar - Barnabi se preocupo, pero Balios nego con la cabeza.

- Aun no, tenemos que alejarnos mas, solo entonces podremos descansar - Barnabi asintio, mientras miraba de vez en cuando para atras, nadie parecia seguirlos, pero no se atrevio a mantenerse complaciente, Balios ya le habia dicho de su conversacion con el anciano, igual que Barnabi le dijo la suya.

Sabiendo esto, decidieron hacer caso al consejo del anciano, dando como destino el puesto militar.

En la bolsa, varias raciones de pastillas de un color marron sucio, se mantenian en botellas de ceramica, su olor no era para nada agradable, pero tenian una nota.

[Pastillas nutricionales: Consumir 1 al dia]

Barnabi tambien tenia, pero en su caso, tenia que consumir de 2 a 3, dependiendo del nivel de cultivo.

Por ahora con una fue suficiente para cada uno.

La pastilla se tragaba directamente y muy lentamente se disolvia en el estomago, por lo que ninguno tuvo hambre en absoluto, algo nuevo para los dos.

Con un poco de agua que habia en botas de piel, continuaron sin parar, llegando al cruce horas antes del primer anochecer.

Cuando comenzo a oscurecer, ya habian comenzado a ver su destino por asi decirlo, un largo camino que subia hacia las montañas cercanas, con dos dias de camino, podrian llegar sin mucho problema.

En la noche, se decidio no hacer ningun fuego, Balios quien tiritaba constantemente lo impidio, una orden rotunda, pero Barnabi lo obligo a dormir mientras el hacia guardia.

Tambien fue el momento en el que el, comenzaria su viaje al mundo del cultivo.

Ambos se pararon al costado del camino, usando un arbol para apoyarse, mientras que unas mantas de un material resistente cubrió al joven Balios. Se utilizo la de Barnabi para que su hermano mayor, no tocase directamente el helado suelo mientras dormia.

Balios miro por un rato a su hermano, mientras este sacaba un jade de color terroso y una botella de ceramica, los ojos de este estaban fijos y tenian un aura de firmeza, como una montaña inexpugnable.

Aunque no lo mostro, Balios estaba dolido por el abandono de su familia, pero agradecido por como Barnabi se levanto para acompañarle, aun cuando el solo era un desvalido.

Cuando el casancio de mover tanto su cuerpo, algo que no estaba nada acostumbrado, cayo sobre el, mientras sus ojos se cerraban, solto un suave. - Gracias - Mientras se dormia.

Barnabi actuo como si no lo escuchase, pero sus puños se cerraron con brutalidad, tomo la pildora de limpieza y no dudo en llevarsela a la boca.

Una vez hecho, noto como si un fuego desenfrenado creciese en su vientre, mientras que se extendia por sus meridianos, los cuales, hasta este momento, jamas noto.

Seguido, se concentro en el jade, tal y como ponia en la nota.

En su mente las palabras se formaron.

[Manual de cultivo de grado Caballero: Santuario a la Montaña]

Barnabi no sabia cual nivel o grado, era Caballero, pero no le importo en lo mas minimo, solo sabia que lo volveria mas fuerte y que con esta fuerza podria proteger a su hermano.

[El Santuario a la Montaña, fomenta el poder defensivo sobre cualquier otra fuerza, siendo el guardián que protege y siempre se mantiene en pie]

[Se distribulle en varios niveles de maestria y nivel de cultivo:

Seguidor, para el Refinamiento de Qi

Creyente, para la Reunion de Qi

Misionero, para la Condensacion de Qi

Sacerdote, para la Integracion de Qi

Portador, para la Liberacion de Qi

Templario, para el Gran Refinamiento

Guardian, para el Primer Renacer]

[Los rangos, Soldado, van del 1º al 3º nivel, siendo: Seguidor, Creyente y Misionero.

El rango Capitán, van del 4º al 6º nivel, siendo: Sacerdote, Portador y Templario

Por ultimo, el rango Caballero de bajo nivel, siendo: Guardian]

Barnabi estaba sorprendido, ahora conocia algo mejor el mundo del cultivo, excitandolo, como solo la sangre de los jovenes podia excitarse, con ganas de enseñarle a Balios, mostrando sus nuevos conocimientos, pero el ya estaba dormido, mientras tiritaba y se formaban pequeños fragmento de hielo en su piel.

Al verlo, su resolución siguio en auge y comenzo a guiar las llamas que se extendian por todos sus meridianos, de la forma que el manual mostraba, poco a poco, noto como su fuerza crecia inexorablemente, mientras que grumos negros comenzaron a salir de su piel, dejando un olor nauseabundo, pero no le importo, no habia donde limpiarse y hacia mucho frio, ademas, no recordaba la ultima vez que se limpio a conciencia, su olor ya era horrible de por si.