Capítulo 13 - X-Men

[POV TERCERA PERSONA]

Rogue estuvo pensando unos segundos que le diría y por donde comenzar, pero antes de que pudiera comenzar a hablar escuchó como la puerta del Café se abría y un grupo de personas se acercó a ellos. Eran un hombre algo bajo de apariencia musculosa, con barba y cabello distintivo que parecía estar en los 40, una rubia que era pura sensualidad con unos bellos ojos azules, su cuerpo decía devórame por todas partes, la mujer no parecía tener más de 30 años.

Detrás de ambos adultos venían un chico y 2 chicas. Los 3 parecían de la misma edad que Aegon, el chico llevaba unas gafas de cristales rojos algo llamativas. La primera de las chicas tenía el cabello rojo y ojos verdes, y la segunda chica era de piel morena, cabello blanco y ojos azules. Ambas chicas tenían una belleza algo superior a la de Rogue si Aegon era honesto, además la morena tenía un cuerpo descomunal.

Con solo echarle un ojo al grupo era fácil de distinguir de quienes se trataban, Wolverine, Milf por la que casi babeo, Cíclope, Jean y Tormenta. Si, la mujer era la única que Aegon no había identificado. Aegon que solo salió a dar un paseo y terminó encontrándose a Rogue pensó que el día no podía ser más interesante, solo para encontrarse con gran parte del elenco principal de los X-Men.

"Niña tienes idea de cuantas cervezas tendré que tomarme para poder relajarme cuando regrese. Todo por lo preocupado que me tenías." Fue lo primero que dijo Logan cuando llegó a la mesa.

"¿Rogue por qué te marchaste? Nos tuviste preocupados a todos." Esta vez fue Jean quien habló. Seguida por Scott. "No tienes conciencia."

Al escuchar las palabras de Scott Jean estaba a punto de regañarlo, pero alguien habló antes que ella.

"Sigues siendo el mismo antipático de siempre." Mencionó el chico que estaba sentado en la mesa que Rogue. Fue claro para todos que se estaba refiriendo a Scott, el chico escaneó con la mirada sin ninguna vergüenza a las 3 mujeres del grupo y continuó. "Aunque debo de admitir que has mejorado con respecto a la compañía, y mucho en verdad."

"Pero ¿quién carajos te crees que eres?" Exclamó Scott enojado, pero luego se quedó mirando al chico detenidamente. "Un momento tú eres ese chico del hogar de acogida, Aegon no es cierto."

"Tienes buena memoria."

"Si la tengo, también recuerdo que eras un idiota presumido y arrogante que se creía mejor que todos." Le dijo Scott con desdén.

"Tengo 4 novias, haz tú las cuentas." Respondió de manera presuntuosa.

Logan viendo lo que ocurría no pudo evitar sonreír. Scott era uno de sus estudiantes, pero el chico en verdad era insufrible. "No sé quién eres, pero ya me agradas chico. Ok, denme un lado, si continuamos de pie llamaremos la atención."

Rogue y Aegon hicieron algo de espacio y Logan se sentó al lado de Rogue y la rubia que aún no había mencionado una palabra se sentó al lado de Aegon quien no pudo evitar observarla y sonreír. "Este será un día que siempre recordaré. Ya lo habéis escuchado del señorito alegría, pero permíteme presentarme, Aegon Targaryen."

La mujer quien había permanecido hasta ahora mirando todo lo que ocurría con indiferencia le devolvió la sonrisa. "Emma, Emma Frost."

"Un placer conocerla señorita Frost, espero que no sea la última vez."

"Estoy segura de que no."

El resto miraba lo que ocurría con sorpresa visible en sus rostros.

Rogue quien tampoco había dicho nada le preguntó a Logan. "No sabía que ahora tenían buenas relaciones con esta mujer."

Logan le contestó. "Es solo una coincidencia, nada más." Luego miró a Aegon y continuó. "Así que eres conocido de Scott y ahora de Rogue, espero que no te haya dado muchos problemas, es una chica rebelde."

"Lo cierto es que nos acabamos de conocer, estaba a punto de invitarla a ver una película cuando ustedes llegaron."

"Oi, no que tienes 4 novias." Logan ya no parecía tan amistoso.

"Tengo suficiente para todas."

Emma decidió embromarlo un poco, solo para ver algo más de su carácter. "Tal vez en unos años me puedas mostrar."

"No veo porque tenemos que esperar. La pregunta es ¿estarás a la altura?" Le devolvió la provocación.

"Ok será mejor que paren. Verte tener este tipo de conversación con un menor de edad hará que pierda el poco respeto que tengo por ti Emma."

El resto de los chicos que se habían sentado en la mesa en la que inicialmente se había sentado Aegon no podían creer que la famosa Emma Frost estuviera coqueteando con un chico de la misma edad que ellos, ni podían creer lo atrevido que este era.

"Podrían dejar esa charla tonta ya, vinimos aquí a buscar a Rogue." Jean quien había decidido que ya habían perdido suficiente tiempo los interrumpió. "Rogue, antes no contestaste, ¿qué pasó para que te marcharas tan repentinamente?"

"No pasó nada, solo quise salir a da una vuelta."

Al escuchar la respuesta de Rogue Emma intervino. "No, lo que pasó es que cuando descubrieron tus poderes algunos te temieron. ¿No es cierto?"

Ver a Emma hablar tan abiertamente de poderes delante de Aegon quien era un desconocido no le gustó para nada a Logan. "¡Emma! Cuida tus palabras."

"Vamos no hay que alarmarse, el chico no es nada común después de todo. ¿Qué crees tú, Jean?" Todos miraron a Jean quien entendió de que estaba hablando Emma y luego mencionó. "No puedo escuchar tus pensamientos."

Aegon la miró como si estuviera devorándola con la mirada. "Jean eso es bastante maleducado. Creo que primero deberíamos conocernos mejor." Scott parecía a punto de explotar.

"Entonces todos ustedes son mutantes al igual Rogue. Lo entiendo en el caso de Scott, pero no entiendo porque utilizarían una palabra tan fea como mutantes para nombrarse. En especial ustedes chicas."

Todos estaban un poco impresionados con la actitud de Aegon, pero hubo alguien que notó algo que el resto no. Tormenta sintió curiosidad por las palabras de Aegon y decidió hablar.

"Lamento interrumpir, hay algo que quiero preguntar, pero antes creo que nos deberíamos presentar. Aegon ya conoces a Rogue y a Scott, y Emma ya se presentó, eso solo deja al resto. Él es James Logan, profesor de nuestro colegio, mi amiga aquí a mi lado es Jean Grey y yo soy Ororo Munroe. Ambas junto con Scott, Rogue y el profesor Logan somos parte del Instituto Xavier, una escuela para jóvenes que poseen algunos talentos especiales."

"Ororo, creo que tienes un hermoso nombre, eso y muchas cosas más. En fin, es un placer conocerte a ti, a Jean, Emma y Logan. Por cierto, Logan no parece para nada un profesor." Las chicas y Logan se rieron del comentario y Scott solo mostraba una cara amargada.

Continuando donde lo había dejado, Ororo prosiguió. "Antes dije que había algo que quería preguntar."

"Adelante."

"Lo que dijiste anteriormente sonaba como si tu no fueras un mutante, pero es obvio que no eres alguien normal. ¿Qué eres?" A esto todos parecían intrigados.

"Nadie en especial, solo una persona que nació con poderes, nada más."

"Ay por favor solo está tratando de darse importancia, tiene resistencia contra la telepatía, no es tan impresionante comparado con otros."

"Eso no es todo." Esta vez todos parecían más interesados en el chico que acababan de conocer al escuchar las palabras de Emma. "También puedes generar electricidad. Dime hay algo más que puedas hacer, admito que estoy intrigada."

"Supongo que tú también eres una telépata y ya que no puedes leer mi mente has tenido que leer la de Rogue para tener esa información. Asumo que los telépatas simplemente no respetan la privacidad ni siquiera de sus compañeros." Al escuchar las palabras de Aegon, Rogue le dio una mirada a Emma que demostraba lo incomoda que estaba. "No que me moleste pues es inútil en mí, además yo haría lo mismo en tu lugar."

"Me alegra que alguien entienda." Emma se sentía complacida. "Sabes el motivo por el que estoy aquí fue para proponerle a Rogue que viniera conmigo algo así como una protegida." Luego miró a Rogue. "Tengo confianza en que puedo ayudarte mejor de lo que haría Xavier, pero puedo ver que volverás con ellos y no necesito leer tu mente para saberlo su rostro lo dice todo."

Volviendo su atención a Aegon, Emma continuó con lo que iba a decir. "Dices que no eres un mutante, eso aún me cuesta un poco creerlo, pero incluso si ese fuera el caso aun así me gustaría tener una amistad contigo. Digamos que me produces curiosidad y si resulta que si eres un mutante después de todo hay mucho en lo que puedo ayudarte."

"Emma puedo asegurarte que no soy un mutante, aparte de tu amor no hay nada que me puedas brindar, pero no estoy seguro todavía si eres capaz de tales sentimientos. Si te sirve de algo no tengo problemas en ser tu amigo y estaría más que dispuesto en darte una mano si alguna vez necesitas de mi ayuda. Solo te advertiré que no me gusta que intenten manipularme."

Por un momento Emma no supo que contestar hasta que finalmente decidió que por ahora una amistad era suficiente. "Amigos entonces." Le dijo mientras buscaba un apretón de manos, cosa que Aegon aceptó.