Los primeros Arcanos

La aldea estaba a tres kilómetros del lugar donde estaban los supervivientes, para Adriel, está distancia podía cruzarse en unos minutos.

Pero claro, no estaba solo, está vez lo acompañaba un grupo de 60 personas, que tenían entre ellas gente débil y niños, estas personas no podían moverse muy rápido y se cansaban bastante, por lo que tuvieron que ir a una velocidad muy lenta, protegiendo a los débiles y frágiles en el centro, a salvo de las emboscadas de los animales evolucionados.

Actualmente Adriel estaba en el frente de la formación, estaba muy atento a sus alrededores, usando el escáner en un radio de 50 metros, a su máxima capacidad.

Temía no reaccionar a tiempo si se enfrentaban a un ataque sorpresa por la parte de atrás, en cuyo caso, podrían perder a algún miembro, algo que a todos le gustaría evitar.

Después de todo, no era dios, pudo matar a todos los seres con los que se encontró con bastante facilidad, pero nunca esta de más ser precavido, de hecho, suele ser la clave para que no te maten.

Como dice el dicho, mejor prevenir que curar.

Mientras escaneaba los alrededores constantemente, hablo con Richard sobre algo que le estaba molestando bastante.

"¿Cómo acabaron enfrentándose literalmente a una horda, no me pareces alguien que dejaría que eso suceda?", comento Adriel, bastante intrigado, Richard era un tipo listo a pesar de su apariencia, era raro que acabarán en esa situación estando él al mando.

La expresión de Richard se puso sombría al recordar ese evento y al estúpido gordo que lo causó.

"Un idiota no estaba satisfecho con sus raciones, después de que rechazarán darle más raciones, ¡de repente sacó una pistola y empezó a disparar!, por suerte, lo inmovilizaron antes de que matará a nadie, pero el ruido atrajo a los zombis"

Adriel asintió, no era culpa de Richard, nadie podría haber sabido que el timo estuviera ocultando una pistola.

"¿Y el hombre?", preguntó Adriel.

"Murió en el asedio, junto con algunos más, honestamente, ese hombre se lo merecía" comento Richard, para empezar, el asedio fue culpa de ese tipo, por su culpa murieron 7 personas, por lo que era reconfortante saber que el culpable estaba muerto.

El grupo siguió, caminando por las carreteras y parando de vez en cuando para que los ancianos y los niños recuperasen el aliento, esto también servía como un descanso para el resto, ya que llevaban grandes bolsas llenas de comida y de todo lo que pudiera resultar útil, desde ropa hasta la poca medicina que lograron encontrar, al final, tardaron unas 2 horas en recorrer esa corta distancia de 3 millas.

Cuando el grupo llegó a la aldea, se sorprendió por lo que vio.

Una capa de débil luz dorada transparente rodeaba un área grande de casi 10 kilómetros cuadrados, en el medio de la cúpula de luz, 3 edificios se paraban tranquilamente en el medio, en los laterales dos templos que parecían sacados directamente de la antigua Grecia, con forma cuadrada y columnas a ambos lados de las entradas, dándoles un aire solemne.

En el medio de estos dos templos había un edificio rústico, hecho de madera y piedra, parecía bastante más feo que los dos templos, no obstante, parecía muy sólido, como si pudiera resistir todo lo que le arrojaran.

Mientras todos miraban conmocionado la vista frente a ellos, Richard le habló repentinamente a Adriel.

"¿Qué es esa luz?", preguntó, la luz dorada era suave, como la luz de primavera, daba un sentimiento relajante, sin embargo, Richard podía sentir su corazón más rápido al mirar esa luz, le daba la sensación de que si intentaba pasar a través de ella, pasaría algo malo, algo muy malo.

"Nuestra protección", reveló Adriel, "Durante la siguiente semana, ningún ser que no sea parte de la aldea podrá pasar a través de ella, después de una semana, desaparecerá".

"¡¡¡Guaaaa!!!", la gente no pudo evitar soltar un gemido de sorpresa, por no hablar de como podrían prepararse en una semana, solo la idea de poder dormir sin el miedo de que te devoren vivo mientras duermes emocionó a los supervivientes, llevaban 4 días viviendo un verdadero infierno, ahora que al fin podrían tomar un respiró, aunque fuera trabajando, naturalmente se emocionaron.

"¿Cómo nos unimos a la aldea?", preguntó Richard, ya que esto fue hecho por el sistema, pensó que podrían unirse a la aldea a través de él.

Y estaba en lo cierto.

Adriel sonrió, podía enviar invitaciones para que se unan, pero de momento, solo es posible hacerlo cerca de la aldea, en el momento en que se aleje un poco, perderá la capacidad de hacerlo.

Por eso no les mando las invitaciones antes.

De repente, una pantalla azul apareció frente a todos.

[Has sido invitado a unirte a Arcadia]

[Confirmar invitación: Si/No]

Todos rápidamente seleccionaron si, la mayoría había matado zombis, por lo que no les sorprendió la notificación del sistema.

[Felicidades, te has convertido en un Arcano]

Adriel sonrió feliz, su poder finalmente estaba tomando forma, lenta y constantemente, estaba seguro de lentamente podría reunir una gran fuerza.

Aquel día, nacieron los primeros Arcanos.

Los primeros de muchos.

En este momento, nadie, ni siquiera Adriel, podía siquiera empezar a imaginar que este día sería recordado en los anales de la historia como un evento que cambió todo lo conocido.

Como el día en que nació Arcadia.