Capitulo 28 - Renacer de las llamas

Al acabar la reunión, salgo del restaurante y vuelvo a la posada a descansar un rato para hacer turismo por la noche y es así, haciendo turismo que me paso los próximos 5 días en Ventormenta.

Durante estos 5 días no hay demasiado que destacar aparte de despedirme de Cringris el 5 día y de Jaina que creo un portal hacia Dalaran, me dedique a visitar los distritos que me quedaban por visitar.

Lo que más podría destacar de mis visitas turísticas es que tienen un distrito de la luz, donde se encuentra la gran catedral de Ventormenta y la residencia de los paladines y sacerdotes, por ese distrito te puedes encontrar por cualquier calle a decenas de personas rezando a todas las horas del día.

Demon: Supongo que en este mundo si que tiene sentido rezar ya que la luz te otorga poderes, no como en mi otro mundo que había gente que le podría rezar hasta a una piedra durante toda su vida y te aseguro que lo único que te aportara es un dolor de vista. - Esta fue mi primera impresión al ver a tanta gente rezando.

Aparte del distrito de la luz también me sorprendió el distrito militar, allí se pudo encontrar la mayoría de soldados y unos campos espectaculares de entrenamiento, incluso antes de entrar al distrito ya se podría escuchar a los soldados luchar entre ellos para practicar.

[5 días más tarde]

Demon: Ya he visitado toda Ventormenta y he tenido tiempo de disfrutarla completamente, ayer se fue Cringris y anteayer Jaina, supongo que yo también me debería poner en marcha, pero no tengo muy claro lo que quiero hacer primero. - Pienso y es en ese momento en el que escucho una voz en mi cabeza.

Alamuerte: El maestro debería hacer lo que desee. - Me sugiere Alamuerte.

Demon: Lo que yo realmente deseo hacer ... - Pienso mientras miro el mar encima de la muralla donde conocí a Jaina.

Demon: Gracias, Alamuerte, creo que ya me e decidido, antes estaba ansioso por ir a Feralas y convertir al árbol de el mundo en mi nuevo hogar, pero creo que esto puede esperar, que te parece Alamuerte si me llevas a dar una vuelta ? - Digo haciendo que Alamuerte se emocione.

Alamuerte: Donde el maestro desee, no sabe cuanto tiempo llevo esperando esto. - Dice y se forman unas llamas oscuras delante mío, de las cuales se materializa la forma humana de Alamuerte.

Demon: Entonces vayamos a las Islas Abruptas, no quería intervenir en la historia pero realmente quiero que se salve, además cuando lleguemos quiero que protejas a cierta persona. - Le digo a lo que el asiente.

Alamuerte: Como el maestre desee. - Dice mientras las llamas comienzan a envolver su cuerpo y empieza a flotar en el cielo.

[POV de la ciudad]

En el cielo encima de la muralla, una llama tan grande como el castillo de Ventormenta se podía observar en ese momento atrayendo la atención de todos en la ciudad. Todos en la ciudad no tenían miedo ya que estaban acostumbrados a experimentos de grandes magos pero al desaparecer la llama sucedió.

El horror y el pánico se extendió como la pólvora por toda la ciudad, la gente empezaba a temblar, los soldados que quedaban custodiando la ciudad no podía hacer otra cosa que tragar saliva y ver la horrible escena mientras sudor caía como chorros por sus caras.

Ya que en ese momento, según descrito en los cuentos y en la memoria de la gente, el dragón malvado que arraso una vez Azeroth, Alamuerte, al que se daba por muerto, apareció ante sus mismísimos ojos, alzándose de entre las llamas.

Y es en ese momento que el Destructor, el que hace millas de años fue conocido por el mundo como el Guardián de la Tierra, resurgió de las llamas.

Alamuerte: Rooooaaar. (No se como es un rugido de dragón) Y es con este rugido que de la bienvenido al mundo de nuevo.

[Fin POV]

Demonio: Vamos. - Digo una vez subido a la espalda de Alamuerte.

Alamuerte: Como desee. - Dice mientras nos embarcamos en nuestro viaje hacia las Islas Abruptas.

[1 hora volando]

Demon: Solo puedo observar el mar tranquilo, tiene que ser muy agradable viajar en barco por estas aguas, en el futuro definitivamente hare que me construyan un gran barco solo para venir al mar a relajarme. - Digo sobre la espalda de Alamuerte y me quedo unos minutos en silencio observando el mar.

Demon: Alamuerte, cuanto falta para que lleguemos a las Islas Abruptas con la velocidad a la que vamos? - Pregunto un poco intrigado.

Alamuerte: Probablemente entere 5 y 6 horas, están bastante lejos después de todo. - Yo dados.

Demon: Entonces será mejor que vaya preparando el hechizo, necesitare unas cuantas horas para hacerlo, voy a congelarlo todo. - Pienso para mi mismo y me pongo en una posición de meditación mientras empiezo a concentrar el mana y darle forma a mi hechizo.

Demon: Bien, cuando veas las Islas reduce la velocidad y avísame, voy a estar preparando un hechizo durante estas horas así que no me molestes. - Digo.

Alamuerte: Como quieras. - Yo respondí a través de nuestra conexión.

Y así transcurren las siguientes horas para Demon, liberando cantidades absurdas de mana y comprimiéndolas para maximizar su próximo hechizo.

Después de varias horas, la cantidad de mana era tal que la atmosfera alrededor de Demon se comenzó a congelar, el aire que pasaba a su alrededor se convertía al instante en hielo y el aliento que exhalaba era suficientemente gélido para incluso competir con el aliento de Sindragosa.

[5 horas y algo más tarde]

Alamuerte: Maestro ya puedo ver las Islas. - Me dice interrumpe Alamuerte, en un tono un poco asustado por la ridícula cantidad de mana que tengo concentrada.

Demon: Bien, vamos cuanto antes, no hay tiempo que perder, espero no haber llegado demasiado tarde. - Digo mientras por fin abro los ojos, si alguien observara la apariencia de Demon por primera vez se sorprendería, ya que ahora sus ojos desprendían un aura azul gélido, que daba la sensación que podía congelarlo todo con una mirada y su cuerpo estaba rodeado por una fina capa de niebla gélida.

En este punto, el hechizo ya había llegado a unos niveles alarmantes, toda forma de vida a la cual dirigiera este hechizo seria reducida a un montón de hielo, este es el resultado de liberar una cantidad de mana equivalente a la total de un dragón aspecto por segundo durante las horas y reunir todo ese mana en un solo punto.

Alamuerte: Entendido.

La Isla no tardo en percatarse de la presencia del antiguo aspecto ya que según Alamuerte volaba por encima de las Islas Abruptas, terremotos empezaban a crearse en el suelo, la Isla se sacudía a su paso, por primera vez el mundo vería el regreso del aspecto de la Tierra.

[Al mismo tiempo en otro lugar de la Isla a la cual los terremotos aún no la llegada alcanzada]