Capítulo 77: Castigo Divino

Habían pasado 30 minutos desde que Kurama había salido de su casa y ahora estaba caminando por la zona de relajación, lugar donde estaban las aguas termales y otros sitios de interés.

Él estaba caminando tranquilamente cuando escuchó una risa pervertida a lo lejos.

". . ." - Kurama rápidamente expandió sus sentidos, solo para notar como el aura de un hombre lleno de pensamientos pervertidos, estaba escondido en uno de los árboles, espiando en dirección de los baños femeninos.

Kurama lentamente caminó hacia el lugar, solo para ver a un hombre de mediana edad de cabello blanco. Él vestía un atuendo verde y sobre el una manta de color rojo con 2 círculos amarillos y sandalias del mismo color rojo.

"Jejeje~ nuca pensé que la calidad de las mujeres de Konoha, hubiera aumentado tanto desde mi última visita..." - dijo el hombre, sin saber que lo habían descubierto - "Solo mira esos pechos... no son grandes pero son perfectos para que uno los pueda tomar con la mano... mira esa chica... tiene un culo que me haría sacrificar cualquier cosa por sentirlo... ¡Wow!¡Mira esa chica!¡Ese rostro, esas tetas, ese cuelo!¡Mi musa, mi inspiración!¡Tú serás la próxima protagonista de mi libro!"

". . ." - Kurama guardó silencio cuando escuchó todo lo que había dicho el hombre. Él había pensado en un principio que tan solo le advertiría pero luego de escuchar al hombre, decidió hacer que sufriera un poco.

"Ah... ah..." - Kurama rápidamente puso su mano en su garganta y empezó a vocalizar. Su voz poco a poco se hizo cada vez más femenina - "Ahem... ¡PERVERTIDO!¡HAY UN PERVERTIDO ESPIÁNDONOS!"

"¡¿Pero qué mierda?!" - exclamó el hombre cuando escuchó la voz de una mujer tan cerca. Él nunca pensó que lo descubrirían, mucho menos que alguien se acercaría tanto sin que él lo detectara - "¡Tengo que salir de aquí!"

"¡Ahí está!" - gritó la misma 'mujer'.

"¡Mierda!" - gritó el hombre de cabello blanco.

"¡Atrapen al pervertido!" - gritó otra mujer mientras ella y las demás corrían en dirección donde había gritado su 'compañera'.

"¡Es imposible que una de ellas me haya encontrado cuando había ocultado mi presencia tan bien!" - exclamó el hombre con furia - "¡Es obvio que una persona lo suficientemente hábil tiene que haberme encontrado... y estoy seguro que es un hombre... porque si fuera una mujer, ella se habría mostrado y me habría entregado a las demás mujeres que estuve espiando"

"¡Ahí está!" - gritó una mujer con furia mientras apuntaba al hombre. Él vio como las mujeres se acercaban y dijo con una sonrisa - "¡Señoritas! ¡Siempre recordaran este día como el día donde casi consiguen capturar a Jiraiya el Galante!"

"¡Hasta luego! ¡Jajaja!" - reía Jiraiya pero antes de que pudiera decir algo más, sintió como una rama se enrolaba en su pierna - "¡¿Qué mierda?!"

Jiraiya se sorprendió cuando notó tal extraña situación, aunque rápidamente comprendió el motivo - "¡Espera un segundo!¡¿Mokuton?!"

"Je~" - Kurama solo vio todo esto con diversión, en especial cuando notó como las mujeres ya habían llegado al lugar donde estaba el hombre de cabello blanco. Con un movimiento rápido de mano, él hizo que la rama donde estaba sentado el hombre, cayera al suelo mientras este era rodeado por un grupo de enfurecidas mujeres.

"H-Hola..." - dijo Jiraiya con una sonrisa llena de terror.

"¿No eres el mismo pervertido que atrapamos ayer?" - preguntó una mujer mientras su ira crecía con cada segundo que pasaba al recocer al hombre que tenía frente a ella.

"Creo que me confundes con otro guapo hombre de cabello blanco..." - dijo Jiraiya con miedo. Él tenía que admitir que ayer no había sido su día más afortunado ya que a penas había llegado a su escondite, él fue rodeado por un gran grupo de mujeres, todo porque entre ellas estaba Kushina, la exesposa de uno de sus estudiantes.

"Estoy segura de que eres tú de nuevo..." - dijo la mujer mientras algunas de las mujeres asentían. Ellas habían venido ayer también así que reconocieron al hombre de inmediato - "Y por lo que veo, no aprendiste tu lección de ayer..."

Jiraiya intentó decir algo pero las palabras quedaron atrapadas en su garganta.

"¿Alguna última cosa que decir antes de que iniciemos una nueva sesión de tortura, digo, castigo?" - sonrió la mujer mientras las demás sacaban todo tipo de objetos filosos de algún lugar desconocido.

"Sí..." - murmuró el hombre de cabello blanco - "Y es que me arrepiento de una cosa..."

Las mujeres levantaron una ceja cuando escucharon esto.

"¡Que solo miré y no pude tocar nada" - gritó Jiraiya mientras lloraba lágrimas de sangre mientras miraba a la chica de hermosos rostro y cuerpo destructor que incluso podría darle competencia a Tsunade - "¡En especial tú, mi musa!"

". . ." - la joven mujer sintió asco cuando escuchó al hombre referirse a ella como su 'musa', en especial porque sabía que tipo de inspiración buscaba este sujeto.

"Ok... eso fue asqueroso..." - murmuró otra mujer con asco - "Estoy segura de que Hikari-chan quiere ser la que dé el primer golpe"

"Por favor no en la cara..." - dijo Jiraiya con miedo cuando vio como las mujeres que lo rodeaban, empezaban a sonreír.

"Tranquilo... prometemos que no será en la cara~" - sonrió otra de las mujeres - "Aunque desearás pronto que en verdad sea en la cara~"

"¡ARGH!" - nuevamente un gritó se escuchó en toda la aldea. Los hombres que lo escucharon, solo temblaron por el miedo porque ellos sintieron que al pobre bastardo que estaban torturando, estaba recibiendo un castigo divino.

Luego de unos 30 minutos de material no apto para menores de edad por el gran contenido gráfico de violencia, podemos ver como las mujeres se retiraban, dejando al pobre hombre de cabello blanco, más muerto que vivo.

"¡Oye, Ero Osan (Viejo Pervertido)!¿Estás bien?" - preguntó el joven Uzumaki mientras caminaba hacia el hombre y lo empezaba a picar con una varilla - "¡Dame una señal que aún respiras!"

"¡Pueden atacar mi bello rostro pero por favor no destruyan mi...!" - exclamó Jiraiya con miedo cuando vino en si pero rápidamente se calmó cuando notó que todo había terminado - "¿Are?¿Quién eres tú?"

"¿Yo?" - dijo Kurama mientras se apuntaba a si mismo con una mirada inocente en su rostro - "Soy un alma dadivosa que encontró a un hombre pervertido inconsciente cerca de los baños femeninos, y como soy alguien amable que no puede dejar a alguien en este estado, decidí acercarme bajo mi propio riesgo para ayudarte"

". . ." - Jiraiya quedó en silencio unos segundos porque sentía que había algo extraño en todo esto. Era demasiada coincidencia que primero, alguien lo descubriera, segundo, que quedara atrapado, y tercero, que alguien apareciera justo cuando todo había terminado.

"¿Y quien eres tu Ero Osan?" - preguntó Kurama con una sonrisa zorruna - "Puedo imaginar lo que un pervertido está haciendo en este lugar. así que no necesito información adicional referente a ese tema"

"¡No me digas Ero Osan!" - exclamó Jiraiya con furia - "¡Y para tu información no soy un pervertido!¡Soy un SUPER pervertido!"

". . ." - un silencio incómodo invadió el lugar mientras los dos hombres se miraron directamente a los ojos hasta que Kurama abrió la boca - "Creo que mejor me retiro..."

"¡¿No dijiste que eras un alma dadivosa que me ayudaría?!" - exclamó el hombre de cabello blanco con sorpresa. Él tenía que admitir que las mujeres hicieron un buen trabajo ya que él a penas podía moverse por el dolor.

"Hasta Buda puede perder la paciencia" - respondió Kurama mientras continuaba retrocediendo.

"¡No me dejes en este estado!" - gritó Jiraiya mientras veía como el chico desaparecía completamente.

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"¡Podrías haberme ayudado de inmediato en vez de esperar todo ese tiempo!" - exclamó Jiraiya con furia.

"Podrías agradecer al menos, perra malagradecida" - bufó el pelirrojo mientras le giraba los ojos.

"Lo siento... ¡Qué no es eso!" - gritó Jiraiya con furia.

"¿No es momento de que te presentes?" - preguntó Kurama mientras levantaba una ceja - "Es lo menos que puedes hacer luego de que te ayudé"

"Cierto... nuevamente, lo siento" - si disculpó el hombre de cabello blanco - "¡¿Puedes dejar de hacerme sentir culpable?!"

"Lo siento pero esto está divertido" - respondió el pelirrojo con una sonrisa zorruna.

"Mejor termino con esto rápido..." - murmuró Jiraiya mientras suspiraba con pesar pero rápidamente su expresión cambió a una llena de orgullo - "¡Ahem!¡Soy el Sabio Ermitaño que viene del Monte Myoboku!¡El ninja número 1, el mejor en ilusionar a las chicas! ¡Yo soy Jiraiya el Galante!"

". . ." - Kurama lo quedó mirando sin ninguna expresión - "Ok.."

"No es la expresión que esperaba..." - Murmuró Jiraiya.

"Como sea, nos vemos Ero Sennin..." - dijo Kurama mientras volvía a retirarse.

"¡Espera un maldito segundo!" - gritó Jiraiya mientras corría detrás del chico - "¡Te dije que esperes, Naruto!"

". . ." - Kurama detuvo sus pasos cuando escuchó el nombre que no había escuchado en años - "¿Quién eres?"

"¡Como dije, mi nombre es Jiraiya, el Sabio Ermitaño de...!" - exclamó el hombre de cabello blanco pero esta vez, fue interrumpido por la voz fría de Kurama - "Estoy hablando enserio... dime quien eres o te juro que voy a meterte una Bijuudama por el culo..."

". . ." - Jiraiya guardó silencio cuando escuchó esto mientras sentía como su ano se contraía por la amenaza del joven de cabello rojo.

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Lamento la incongruencia con capítulos próximos.