"¿Segura que no quiere venir, Tsunade-sama?" - preguntó una hermosa mujer de cabello negro corto que estaba vistiendo un yukata negro. Ella estaba hablando con una hermosa mujer rubia de grandes pechos.
"Lo deseo más que lo que piensas" - suspiró Tsunade mientras negaba con la cabeza - "Pero en estos momentos estoy en la fase crítica de mi experimento... solo un poco más y podré cumplir mi sueño, Shizune"
"Comprendo..." - asintió Shizune mientras observaba a su maestra. Ella había visto como la rubia había concentrado toda su atención en la investigación sobre como revitalizar las células muertas sin repercusiones y así poder volver a un estado de pseudo-juventud.
"Me falta solo una pieza para hacer que esta apariencia falsa se vuelva la verdadera" - dijo Tsunade con seriedad - "Pero no importa como lo piense, no puedo llegar a una solución..."
"Tal vez debería tomar un respiro para despejar la mente, Tsunade-sama" - dijo una mujer de cabello verde y mechones delanteros naranja. Ella tenía unos hermosos ojos marrones y estaba usando una chaqueta sin mangas que no podía retener sus enormes pechos, aunque estaban lejos de llegar al tamaño titánico de Tsunade.
"Tal vez tengas razón, Pakura..." - suspiró Tsunade mientras observaba a la mujer que parecía haber vuelto a los inicios de sus 30 a pesar de que al igual que Kushina y Mikoto, ella también estaba por llegar a los 40.
Tsunade estaba sorprendida de los cambios en la apariencia de la mujer, porque antes del tratamiento parecía tener muchos más años de lo que debería, incluso tenía arrugas, pero ahora que el tratamiento estaba completo y que por fin podía utilizar todo su chakra, ella parecía haber vuelto a como era antes, todo gracias a la masiva circulación que rellenaba sus antes vacías redes de chakra.
"Estoy segura que en poco tiempo conseguirá lo que busca, Tsunade-sama, solo necesita relajarse un poco" - dijo Shizune con una gran sonrisa al ver que su maestra por fin había decidido salir de este laboratorio.
"Ok... vamos donde Kurama... estoy segura de que verlo una vez más hará que me calme" - sonrió Tsunade mientras las tres mujeres se dirigían hacia la entrada de Konoha.
* * * * *
"Me pregunto cuanto habrá crecido ese chico" - dijo un hombre de edad avanzada que estaba usando una túnica blanca.
"¿Quiere hacer una apuesta, Hiruzen-sama?" - preguntó un hombre de cabello plateado.
"Depende del contenido y que estamos apostando" - dijo el viejo Sandaime - "Aunque no creo que sea muy bien visto que dos Hokage hagan algo como apostar, Kakashi"
"¡Ma~Ma~! Nadie nos esta viendo, Hiruzen-sama" - respondió Kakashi mientras le daba una sonrisa - "¿Y bien?"
"Aún no respondes mi pregunta, Mocoso" - bufó Hiruzen.
"Ok... apostamos que si yo gano, usted tendrá que hacer mi papeleo por dos semanas" - sonrió el Godaime Hokage - "Y si pierdo... le daré mi Icha Icha Paradise premium primera edición"
". . ." - la mirada de Hiruzen se afiló cuando escuchó esto porque ese libro era el último que necesitaba para completar su colección. Él había logrado conseguir todas las demás versiones, incluso la que venía con una errata, haciendo que la historia de amor entre un hombre y una mujer, pareciera una escena salida de uno de los libros de Shizune.
"Veo que tengo su atención..." - sonrió Kakashi con seriedad.
"Dime como será la apuesta" - dijo Hiruzen con calma.
"Simple... diremos que tipo de situación ridícula hará Kurama cuando aparezca en Konoha... quien esté más cerca de la verdad, ganará" - respondió Kakashi con calma - "Ahora... voy a concederle la oportunidad de elegir primero que tipo de situación será"
"Ok..." - asintió el Sandaime mientras se ponía a pensar, aunque luego de unos segundos llegó a una conclusión que le daba una gran cantidad de oportunidades - "Yo digo que hará una estupidez y Kushina le dará una paliza que esquivará con tranquilidad"
"Interesantes palabras, Hiruzen-sama..." - dijo Kakashi mientras una sonrisa aparecía en su rostro - "Yo digo que cuando aparezca en Konoha, él estará siendo perseguido por alguien"
"Jejeje" - los dos Hokage empezaron a reír mientras se miraban el uno al otro, sin notar que alguien los estaba observando con neutralidad - ". . ."
"Oh... hola, Tina-san..." - dijo Hiruzen mientras tosía falsamente para desviar el tema.
"Ha pasado tiempo, Hiruzen-sama" - dijo la antigua enfermera, quien ahora estaba saliendo con Kakashi y había decidido dejar su trabajo como médico para volverse la secretaria del nuevo Hokage - "Veo que está bien..."
"¡Como un roble!¡Jajaja!" - exclamó el viejo Sandaime - "Por favor no le digas a mi esposa... ella no debe enterarse que en vez de deshacerme de mis libros, los guardé en un lugar diferente..."
"No prometo nada... no prometo nada..." - sonrió Tina mientras miraba con diversión al Hokage.
"Te daré un aumento de sueldo del 25%" - dijo Hiruzen con seriedad.
"35 y tenemos un trato" - dijo Tina con frialdad.
"Hecho" - asintió Hiruzen mientras Kakashi solo negaba con la cabeza mientras le daba una mirada compasiva a su predecesor.
"Tú no me mires así porque eres igual o más azotado que yo" - bufó el Sandaime con desdén.
". . ." - Kakashi se quedó en silencio cuando escuchó esto.
"Creo que es tiempo de que vayamos a vera Kurama-sama" - dijo Tina mientras los dos Hokage asentían. Tal parece que el puesto de Hokage solo podía ser tomado por un hombre azotado, Hashirama y Minato eran prueba más que suficiente para corroborar esta hipótesis.
* * * * *
"¿Puedes ver algo, Hinata-chan?" - preguntó Ino al ver que habían sido las primeras en llegar.
"Nada..." - respondió la chica, quien tenía su Byakugan activado - "Por cierto, deberías ponerte ropa interior..."
"¡E-Estoy tratando de tener algo de suerte, ¿Okey?!" - exclamó Ino con el rostro rojo mientras maldecía los ojos de pervertido del clan Hyuga.
"¡Onee-chan!" - exclamó Hanabi con furia al ver a su hermana mayor - "¡Dijiste que me esperarías!"
"Lo siento Hanabi-chan..." - se disculpó la hermana mayor de las Hyuga - "Ino-chan apareció y mientras conversábamos, caminamos inconscientemente hacia la entrada..."
Ino estaba a punto de refutar esas palabras pero se quedó en silencio cuando vio como todos aparecían, incluso los demás chicos de los 12 novatos (menos Sasuke por obvios motivos), aparecían junto a sus Sensei.
"¡Ino Onee-chan!¡Hinata Onee-chan!" - exclamó Izumi con una sonrisa al ver a las chicas - "¡Hanabi Onee-chan!"
"¡Izumi-chan!" - exclamaron las mencionadas mientras iban donde la pequeña princesa Uzumaki.
"Hola chicas, ¿como ha sido su entrenamiento?" - preguntó Kushina mientras tomaba en sus brazos a un molesto Naruto porque no lo dejaban investigar los alrededores.
"Bien... gracias por el aumento en nuestros sellos de gravedad" - sonrió Hinata mientras tomaba a la pequeña Izumi en sus brazos.
"Por cierto... no veo a Tsume-san por ningún lado" - dijo Ino mientras miraba alrededor.
"Ella está en una misión fuera de Konoha" - respondió Kakashi mientras Kiba asentía. Kiba no había cambiado casi nada durante estos tres años, solo que era más grande y que Akamaru ahora tenía un tamaño mayor al de Kuromaru.
"Solo espero que ese pelirrojo problemático no haga nada estúpido" - suspiró Shikamaru mientras negaba con la cabeza. Shikamaru tampoco había cambiado mucho durante todo este tiempo.
"No creo que eso sea posible" - respondió Choji mientras negaba con la cabeza. Choji era el que más había cambiado estos años porque ahora usaba el cabello suelto y usaba una pequeña armadura sobre una chaqueta roja - "Sabes muy bien que con Kurama en medio, las cosas se vuelven locas"
"¡Concuerdo con Choji-kun!¡Las llamas de Kurama arden con fuerza!" - exclamó Lee, quien al igual que los demás, tampoco cambió mucho.
"No sé que fue lo que dijo, pero la tuya por si acaso" - respondió Kiba mientras todo lo miraban - "¿Qué? Nunca sabes si ese tipo te insulta con ese lenguaje alíen"
"Dejando el comentario Random del aliento de perro, concuerdo con Choji, las cosas son raras cuando está Kurama en la ecuación" - respondió Neji. quien estaba tomado de la mano con su ahora novia Tenten.
"Por mucho que quiera negarlo, no puedo hacerlo" - suspiró Ino mientras Hinata y las demás chicas del clan Uzumaki, asentían en silencio.
Sakura por su parte, solo guardó silencio mientras miraba a los niños con una sonrisa en su rostro.
"Creo que lo veo..." - dijo Neji al ver como alguien se acercaba a gran velocidad.
"¡Otousan!" - exclamó Izumi con emoción.
"Ok, eso lo confirma" - dijo Kushina mientras las demás miembros de la mansión Uzumaki, asentían.
"?" - los demás que no sabían de que estaban hablando, les dieron una mirada llena de confusión.
"Verán, Izumi tiene un talento único..." - dijo Mikoto con calma - "Ella... puede sentir cuando Kurama-kun está cerca..."
"Se podría decir que la princesa es un sensor de Se..." - dijo Tayuya pero fue noqueada antes de que pudiera terminar sus palabras.
"Por cierto, Kushina desarrolló un reflejo involuntario para cuando Tayuya-chan esté a punto de decir alguna mala palabra frente a los niños" - agrego Mikoto mientras los demás veían con una gota de sudor corriendo por sus nucas. Ellos sabían que Tayuya tenía una boca de marinero, pero nunca pensaron que las cosas terminaran de esta forma, aunque tampoco podían culpar a la Matriarca Uzumaki por noquear al chica de cabello rosado porque ella lo estaba haciendo para poder proteger las mentes de los niños.
"¡Tousan!¡Tousan!" - exclamó Izumi al ver como la silueta de un hombre de cabello rojo, se acercaba al lugar.
"Wow..." - murmuraron Hinata y Hanabi con un ligero sonrojo en sus mejillas.