Ella es mi esposa, la mujer que amo

—No tenía intención de defenderla —Mo Yesi la miró con calma—. Ella ya es suficientemente buena en mi corazón. No está bajo mi control si los demás la aprueban o no.

—Mamá, solo estoy aquí para decirte que realmente la has entendido mal —Mo Yesi no solía venir especialmente a explicarle las cosas.

Pero después de lo que Mo Shixiu le dijo hace un momento, decidió que era mejor que lo hiciera.

Personalmente, no le importaba lo que otros pensaran de ella.

Pero, ¿qué pasa con Qiao Mianmian?

No quería que ella fuera acusada injustamente.

Ella era tan buena, quería que todos la vieran así y que la quisieran por eso.

Especialmente su familia.

—Las noticias en línea no son reales —Mo Yesi continuó—. Alguien está haciendo todo esto a propósito. Ya he enviado a alguien a investigar. Ella se encontró con Su Ze solo por coincidencia, y fue Su Ze quien la acosó. Ella lo rechazó todo el tiempo.