Para ser caballero, hay que ser noble

"¡¿Que?!"

"¡Quiero ser un caballero, señor!" Dijo Eliot con decisión y sin una pizca de duda en sus ojos. Esto dejo sorprendido a todos los presente, pues todos sabían que para ser un caballero se necesita haber nacido noble, y Eliot es solo un plebeyo haciendo lo imposible de lograr tal cosa.

"Eliot, tu... ¿acaso no sabes?"

"¿Saber que?"

"Bueno...pues". Ector no sabía si decirle o no sobre que para un plebeyo es casi imposible convertirse en un caballero.

¡Jajajajaja!

Todos en la habitación se quedaron mirando confundidos al caballero cual se estaba riendo, sin saber porque.

"¿Señor?"

"Jajaja, increíble. Me agradas muchacho nunca pensé que pedirías tal cosa".

"¿Acaso lo que pedí es mucho?"

"No exactamente, pero si un problema".

"¿Problema?"

"si, porque los plebeyos no pueden ser caballeros en el imperio".

"En serio, entonces eso significa ¿Qué no podre ser un caballero?". Dijo Eliot con desánimo en su voz. Cuando el creía que por fin estaría dando el primer paso para lograr su sueño, todo se viene abajo por ha ver nacido plebeyo.

"Eliot, no te desanimes. Si no puedes ser un caballero puedes ser un soldado o que darte como un aldeano". Frank trato de animar al pobre niño, aunque no pudiera seguir su sueño, puede ser un soldado siendo otra alternativa.

"Sabes Frank, no ayudas".

"Eh, solo trataba de ayudar".

"Lo sé, y te lo agradezco". Eliot solo pudo suspirar de decepción al saber que no podría cumplir su sueño

"Chico, aunque dije que solo un noble puede ser un caballero". Nunca dije que era imposible que un plebeyo pueda ser uno.

Al escuchar esas palabras venir de la boca de Artur, Eliot, se emociono y sintió que la esperanza volvía de nuevo a el.

"¡En serio! No me estas mintiendo, ¿verdad?"

"No, todo es verdad".

Eliot comenzó saltar de la emoción, mientras los demás solo sonreían al verlo. Después de haber saltado de felicidad, Eliot, fijo su mirada en Artur.

"¿Cuándo, podre convertirme en un caballero?"

"Calma muchacho. Ni siquiera tienes las cualidades, y ya quieres ser uno".

"Chico, solo tienes que saber que no será fácil".

Tendrás que ser reconocido en el imperio, para que algún noble te eche el ojo, y para eso necesitarías, Talento, méritos y proezas militares, ¿entiendes? Dijo Artur con seriedad, haciéndole saber lo que se tiene que hacer para ser un caballero.

"Entiendo, me esforzare".

"Es bueno que entiendas. Sin mas preámbulos ¿no creen que ya es tarde?"

"Si es tarde, parece que ya oscureció". Dijo Frank mirado a través de una ventana, y percatarse que el sol ya no estaba, y en su lugar una hermoso anochecer.

"¿Hay algún lugar para quedarme?" Necesito descansar.

"Ah, tenemos un lugar para que se quede". Eliot puedes llevarlo a tu casa. Dijo Ector tras pensarlo un poco.

"!Ok!"

"¡Vamos! Señor Artur. Dijo enérgicamente el niño mientras salía corriendo de la iglesia".

"El... es, sorprendentemente enérgico".

"Ni que lo digas, siempre a sido así".

"Bueno, me voy. Gracias por las molestias".

"No hay de que".

Artur se fue ha seguir a Eliot, dejando así a los demás en la iglesia.

***

"Y esta es mi casa, bonita ¿no?"

La casa de Eliot era simple; estaba hecha de madera y piedra, tenia un par de ventanas y una robusta puerta de madera como entrada. La casa era pequeña, no era la mas bonita, pero era agradable a la vista.

"¿Aquí es donde vives?"

"Si, solía vivir con mamá, pero ahora solo soy yo".

"¿Qué le paso a tu madre?"

"Murió, fue hace un año, por una enfermedad cual no se podía curar.

"Lo siento".

"No te disculpes, ya lo supere. Vamos entra". Dijo Eliot con calma. la muerte de su mamá le había afectado mucho, ver morir a tu mamá siendo solo un niño era algo duro para cualquiera, pero Eliot es un chico fuerte, y pudo superar el dolor con el tiempo.

"Bueno, hay esta la cocina, al lado esta la mesa para comer, y a lo ultimo las habitaciones".

La pequeña casa no tenia mucho que mostrar; una cocina pequeña con unos pocos utensilios, una mesita con dos sillas, unas cuantas lamparas para iluminar y dos habitaciones. A pesar que la casa desprendía un frío sentimiento de soledad, estaba bien cuidada.

"Es acogedor"

¡Lo crees!, Yo también. Es aquí donde he vivido los momentos mas felices de mi vida. Dijo Eliot con una mirada melancólica al recordar los momentos que pasaba con su madre, solo para suspirar y alejar los sentimientos de tristeza.

Artur solo pudo mirar al niño con admiración, ya que cualquier niño de su edad hubiera quedado con traumas y entrado en depresión, pero no es el caso de Eliot que ha sabido manejar y sobreponerse a la precaria situación de su vida, dándole a entender que es muy maduro de su parte.

Eres muy maduro para ser un niño.

La gente en la aldea me lo dice mucho.

Bueno, ¿tienes hambre? hare la cena. Pregunto

Eliot se propuso a hacer la cena, agarrando una olla, unas cuantas verduras, un poco de agua, carne y leña para cocinar un caldo. Artur se sentó en una silla, y se quedo viendo como Eliot preparaba la cena. "Entonces, ¿Por que quieres ser un caballero?"

Es por una promesa.

¿Promesa?

Si, le prometí a mi madre que me convertiría en un caballero, como el caballero y el dragón.

¿El caballero y el dragón?

"Es un cuento que me solía contar mi mamá. Trata sobre un caballero que lucha contra un malvado dragón para salvar a su reino". Le dijo Eliot, recordando así los momentos felices que pasaba cuando su madre le contaba esta historia para niños.

¡Mira!, la cena ya esta lista

Eliot sirvió dos raciones en unos cuencos de arcilla en la mesa uno para el, y el otro para Artur. Antes de comer, primero le rezaron a las tres "Grandes Diosas", al finalizar prosiguieron a comer en silencio.

Estuvo rica la comida. Si que sabes cocinar.

Gracias, fue mi mamá que me enseño.

Después de terminar de comer, Eliot, llevo a Artur a la habitación donde pasaría la noche.

Aquí es don de dormirás, es pequeño pero cumple su función.

como decía Eliot, la habitación era pequeña; teniendo una cama, al lado una mesita donde estaba una lampara, y una ventana que reflejaba la luz de la luna.

"¡Buenas noches!"

"hasta mañana".

Después de despedirse, cada uno se fue a su respectiva habitación para dormir. La noche transcurrió tranquilamente, mostrando su encantadora belleza bajo la cálida luz de luna, el millar infinito de estrellas decorando el basto cielo como si de una obra de arte casi mágica se tratase.

Había algo extraño en esta deslumbrante noche, específicamente en el cielo en su mar de infinitas estrellas. Había 34 estrellas brillando intensamente en el cielo formando dos constelaciones, una tenia la forma de un guerrero y la otra la de un gran dragón.

¿Qué significara esto? por desgracia nadie lo sabe, pero todo aquel que lo haya visto solo pudieron haberse quedado sorprendidos con la impresionante escena en el cielo. Para muchos un mensaje, para otros una profecía, tal vez una calamidad, pero si algo estaban seguros es que el mundo estaba por cambiar, que algo muy grande sucedería y esto no lo podían evitar.

"Ha comenzado, la profecía de hace mil años".

"El guerrero de armadura dorada".

"Sin vista en sus ojos, pero con el corazón en su espada"

"Con un escudo de justicia y la mente templada con los horrores de la guerra".

"El sol que mas brilla en las noches oscuras".

"Un alma pura, montado en un hermoso caballo alado".

Oh, aquel destinado a la grandeza.

"Tu lucha solo empieza".

"Después de toda una vida de gloriosas hazañas".

Tu fin encontraras ante una calamidad en forma de.... dragón.

Dijo una misteriosa voz recitando este hermoso poema mientras miraba las estrellas.

***

A la mañana siguiente, fue Artur el primero en levantarse mientras Eliot seguía durmiendo en su habitación, a primera instancia se sintió confundido por haber despertado en un lugar desconocido, pero no tardo mucho en recordar todo lo sucedido anoche para tranquilizarse.

"Vaya mierda". Suspirando Artur solo pudo decir tales palabras recordando lo sucedido antes de llegar a esta remota aldea, el había sido traicionado por aquellos que de decían ser sus amigos y camaradas, ser emboscado, perseguido como un animal y envenenado no es algo que desearía alguien.

"Bueno, que se le puede hacer".

"Lo hecho, hecho esta y no se puede cambiar".

Artur sin mas demora se levanto de la cama y salió de la habitación. Al salir se topo con Eliot quien se había despertado, los dos se saludaron y fueron a desayunar. mientras desayunaban Artur pregunto, "Oye chico, ¡tienes espadas de entrenamiento?"

"No, ¿Por que?

"Y yo pensaba que tenias".

"¿Son importantes?"

"Si, porque son necesario para que una persona aprenda a usar la espada".

"Y además las necesitamos si queremos saber si tienes talento. Hoy mismo empieza tu entrenamiento". Le dijo Artur a Eliot mientras se metía una cucharada de carne en la boca.

"¡En serio! ¡Increíble!"

"Chico, ¿sabes donde se pueda conseguir espadas de madera?"

"Mmmm, Ya se quien puede tener. El viejo Max, el mejor carpintero de la aldea".

"Bueno, que estas esperando vamos donde Max".

"¿Ya?, Ni siquiera he terminado de comer".

"Entonces, come rápido".

Después de esperar que termine, Artur y Eliot salieron de la casa a camino a la carpintería de Max.

____________________________________

Si quieren apoyarme(no es obligatorio) Aquí:

PayPal: https://paypal.me/consciousness33393?

Mi Patreon, aquí subiré todos los capítulos avanzados: patreon.com/consciousness333