Capítulo 5. ¿Manteniendo A Un Dios Escolar Masculino?

―Joven amo, ¿se encuentra bien? ¿Joven amo?

Justo cuando Fu Jiu bajó las escaleras, vio a su pequeño mayordomo jadeando mientras le buscaba. La ansiedad en sus ojos era obvia y sincera.

―¿Está herido? ¿Lo hizo Huo Siyu? ¿Sucedió de nuevo…?

Fu Jiu no lo dejó terminar y dijo―: Me defendí.

―¿Qué? ―Chen Xiaodong pensó que estaba sordo despues de correr todo el camino, así que preguntó con dificultad―: Joven amo, ¿no le golpearon?

Fu Jiu alzó sus cejas―. ¿Realmente luzco como alguien que haya sido golpeado?

«¡Pero lo cierto es que realemente le golpearon!»

Chen Xiaodong murmuró para sus adentros. Había notado que su Joven amo lucía diferente desde que despertó.

Primero estaba su temperamento (superatractivo). Por supuesto, no para Huo Siyu y su pandilla…

―¿Ha visto usted al joven amo Qin justo ahora? ―preguntó cautelosamente Chen Xiaodong.

Fu Jiu estiró su cintura perezosamente―: No.

―¡Gracias a Dios!― Chen Xiaodong respiró profundo.

Fu Jiu estaba confundido. ¿Por qué toda esta gente actuaba como si ella pudiese hacerle algo al joven amo Qin en cuanto lo viese?―. ¿Y qué si me lo encontrase?

―Me temo que usted lo agarraría de las piernas y no lo soltaría―. Chen Xiaodong miró malhumoradamente a Fu Jiu después de hablarle―. Joven amo, ¿olvidó usted qué hizo antes?

Habría estado bien que Chen Xiaodong no lo mencionase. Con ese recordatorio, todos los recuerdos vergonzosos se precipitaron en su mente.

Aparentemente, sucedió en esta misma cantina.

Ella se enamoró a primera vista del Todopoderoso Qin.

Luego... ¡dijo que haría que él fuese su gigoló!

Fu Jiu no era de esas que se avergonzaban fácilmente, pero ahora deseaba ocultar su cara.

Era una reina hacker, necesitaba probar su inocencia―. No fui yo quien habló de hacerle gigoló.

Chen Xiaodong tenía una expresión que decía―: ¿Usted piensa que todos los estudiantes y maestros en la escuela están ciegos o algo así?―puntualizó para advertir a Fu Jiu―: Joven amo, escúcheme, aunque a usted le gusten los chicos, no puede ser el joven amo Qin. Su origen es algo que nuestra familia Fu no puede pasar por alto. ¡Nosotros estamos varios niveles por detrás!

―De acuerdo ―a Fu Jiu no le importó.

Chen Xiaodong paró y la miró con seriedad. Quería conmoverla con emociones genuinas―- Joven amo, ¿no podrían a usted gustarle las chicas, por favor? El jefe ya no está satisfecho en lo que a esto respecta. No solo recortó dinero de su bolsillo, sino que también lo abandonó con sus propios recursos en la escuela. Puede que no consiga la empresa en el futuro y que esta se entregue a ese par de hermanos, criados lejos de la familia. ¿No está preocupado? Por el bien de su señora madre, ¿no podrían dejar de gustarle los hombres?

Al escuchar eso, Fu Jiu se detuvo. Un frío brillo destelló en sus ojos.

Todas las cosas malas que había hecho antes fueron reportadas a su padre por ese dúo de hermano-hermana.

Al principio, Fu Zhongyi era realmente simpático con Fu Jiu. Después de todo, Fu Jiu era su primer «hijo» legítimo.

Pero más adelante, se dejó influenciar por cotilleos y rumores.

Fu Zhongyi comenzó a aborrecer a Fu Jiu más y más. Cuando escuchó que Fu Jiu podía ser gay, ¡le cortó casi todo su soporte financiero!

Ya no regresó a casa y apartó fríamente a la Sra. Fu, quien vivió a su lado todas las subidas y bajadas de la vida.

Fu Jiu le importaba una mierda todo lo relacionado con ese indecente.

Tiempos atrás, Fu Zhongyi abrió su compañía utilizando el dinero de su madre.

Ahora que lo tenía todo, ¿iba a echar a la persona que le ayudó?

¿Cómo podría aceptarse una acción así?

Ya que había tomado el control de su cuerpo, ¡conseguiría hacerse con lo que les pertenecía!