—Renuncié a mis estudios y solía estar todo el tiempo con ella. Cambiamos nuestra casa a otro lado de la ciudad porque queríamos alejarla de esos recuerdos de aquel lugar, ya que el lugar de aquel campamento estaba cerca de nuestra anterior vivienda. Intenté diferentes formas de hacerla sonreír pero solo dos cosas captaron su atención: las películas de Jackie Chan y el Kung Fu presente en ellas.
—Diariamente veíamos una película y solo durante ese tiempo, conseguía verla sonreír, pero había algo detrás de esa sonrisa que no lograba entender. En los siguientes seis meses empezó a hablar al menos algo. Por ejemplo, si le preguntaba o le decía algo, en lugar de asentir o negar con la cabeza, comenzó a responderme con 'Sí' o 'No' y a llamarme de nuevo 'Hermano Yang', y fue agradable para mí oírlo de nuevo después de tanto tiempo.
Una vez, mientras estábamos sentados en un jardín, le pregunté:
—¿Qué querías que me convirtiera? Y ella dijo:
在webnovel.com支援您喜歡的作者與譯者