Dante con enojo salió de la cabaña para evitar que lo siguieran empujando.
Cuando el viejo salió, Kacper cerró la puerta con violencia y miró al visitante no deseado con cierto enojo.
—¿Por qué tanto odio hacia los observadores?—preguntó Dante tratando de disimular su enojo hacia la criatura; todavía necesitaba su ayuda para encontrar la salida.
—Porque son una plaga...—Comentos Kacper con molestia—Aunque no abundan, todos los observadores creen que pueden hacer lo que se les cante, total no hay consecuencias para un inmortal.
—Pero yo solo soy un sujeto agradable que está algo perdido—Comentó Dante tratando de que la otra parte dejara de mirarlo con desprecio—¿Sabes como puedo transformarme en mi verdadera apariencia?
—No, yo no soy un observador: soy un guardabosques—Comentó Kacper—Nadie va a poder responder tus preguntas acerca de tu raza, en general esas cosas las descubres mientras exploras por los pisos.
—¿Podrías darme un ejemplo?—preguntó Dante sin entender a qué se refería con descubrir.
El viejo no sentía nada extraño en su cuerpo que debiera descubrir cómo funciona y su idea actual era recordar su pasado; pero recordar y descubrir son palabras distintas.
Kacper respondió con rapidez, tratando de no alargar demasiado la charla:
—Te encontrarás algo que exclusivamente tú puedas encontrar o alguna entidad que solamente tú puedas ver. También podrías encontrar algún objeto inusual o un libro raro. Incluso si buscas evitar descubrir estas cosas las terminarás encontrando; porque el infierno te va a dar lo que te pertenece.
—¿Sabes cómo llegar al piso 0 o al piso donde habitan los observadores?—preguntó Dantes.
—No, nunca fui al piso 0, solo escuché rumores de ese piso—Comento Kacper—Los observadores son vagabundos por naturaleza: no hay pisos donde puedas hallarlos; no obstante, te garantizó que hay observadores en el piso 0. El piso 0 está repleto de humanos, por lo que los observadores suelen peregrinar hacia ese piso.
—Así que el piso 0 era la superficie...—Murmuro Dante
—¿Superficie? No el piso 0 no es la superficie: no hay humanos en la superficie—Comentó Kacper
—¿Qué?—preguntó Dante de forma aturdida. Pero luego, el viejo miró al bosque rodeando la cabaña y la hermosa luna en el cielo; tranquilamente Dante podría pensar que esto era la superficie si no fuera porque estaba hablando con Kacper en estos momentos
—¿Cada piso es tan grande como el piso 0?—Preguntó Dante
Kacper observó el gran bosque que rodeaba la cabaña con orgullo y comentó:
—La verdad es que no soy un gran explorador de pisos como para contarte muchos acerca de los misterios de los pisos, pero cuando era joven viajé bastante hasta encontrar un hermoso bosque que cuidar. Según mi experiencia viajando puedo decirte que algunos pisos deberían ser más grandes que el piso 0 y algunos pisos son más chicos que mi cabaña.
—¿Sabes como puedo llegar a la escalera de este piso para ir al piso 0?—preguntó Dante, con dudas.
—Si, lógicamente, conozco la salida de este bosque; ya que soy el guardabosques—Comentó Kacper con una sonrisa mostrando sus dientes afilados—Pero si quieres la respuesta, necesito que me ayudes con una tarea; no todos los días se ve un inmortal buscando información, así que ayúdame resolviendo un par de cuestiones y luego te diré cómo salir del bosque.
—Me parece justo—Dijo Dante—Pero solo soy un viejo, por más que sea inmortal podría no poder completar tu tarea.
—Son dos tareas, la primera puedes completarla tranquilamente—Comentó Kacper con una sonrisa aún más amplia—En la segunda tarea voy a necesitar que te metas por unos arbustos a recolectar sus frutos, lógicamente los arbustos son mortales por eso te necesito.
—Sí, supongo que sería fácil hacer eso—Comentó Dante un poco más aliviado—¿De qué trata la primera tarea?.
—Necesito que te cortes los brazos y piernas unas 10 veces—Respondió Kacper con una sonrisa bastante amplia—La carne humana es bastante valiosa en este piso con pocos humanos: así que me vendría bien almacenar un poco; supongo que no te costará nada entregar un poco y esperar a que se regenere.
—Cuesta bastante…—Comentó Dante al pensar que tendría que ponerse a gatear por el túnel 10 veces para completar la tarea—Además no funciona de esa manera, simplemente córtame la cabeza y te quedas con todo mi cuerpo, pero solo 5 veces; tú obtendrás bastante más carne y yo menos trabajo.
El guardabosques nunca había atacado a un observador por temor a ganarse un parásito que lo siguiera toda su vida, por lo que Kacper no estaba seguro de cómo funcionaba la inmortalidad de estas extrañas criaturas.
—Bueno...—dijo Kacper con dudas.
*Slap* Kacper juntó los dedos de su palma y atino una cachetada a Dante con violencia, provocando que la cabeza del viejo saliera rodando por el suelo.
Inmediatamente, los arbustos cercanos a la cabaña se movieron y Dante salió para ver que su cabeza todavía no había dejado de rodar por el suelo.
—¿No debería des-transformarse la cabeza cuando muero?—preguntó Dante.
—Es impresionante, no paso un mísero segundo y reviviste—Comentó Kacper bastante emocionado por ver una criatura extraña en su bosque —En cuanto a tu pregunta: tu transformación no es una cuestión muscular: es una transformación mágica, por lo que realmente tu carne y cuerpo es el de un humano.
Al terminar de decir eso, Kacper se adelantó con lentitud hasta Dante y de otra bofetada mandó a rodar su cabeza por el suelo.