Evento 37: Fin del entrenamiento

Cuando Haruta volvió al comedor fue abordado por todos, no había nadie que no quisiera probar nuevamente la comida de Haruta.

Haruta solo pudo elevar sus hombros mientras negaba con su cabeza "Imposible, no me queda nada en la cocina.... entregue todo lo que sobró en las aguas termales, le debía un favor al dueño" dijo Haruta haciendo que todos se pusieran tristes.

Lejos de los estudiantes el viejo entrenador miraba a Haruta fijamente sin despegar su mirada, otros entrenadores notaron la mirada del entrenador de Nekoma pero lo dejaron pasar pensando que también quería probar nuevamente la comida de haruta.

Ya en la cocina Asuna aun estaba mirando su plato fijamente, Haruta noto como Asuna estaba perdida en sus pensamientos e intento adivinar lo que sucedía "¿Molesta?" pregunto Haruta llamando la atención de Asuna

"¡No-no, nada de eso!, es solo que..." Asuna respondió primero con sorpresa pero luego su tono descendió rápidamente y sus manos estaban completamente apretadas "Es solo que tenemos la misma edad y nuestra diferencia es abismal"

"Ah, entonces se trataba de eso" dijo Haruta sentándose en una silla frente a Asuna "Bueno, tiene sentido ya que mi padre también era chef y me enseñó todo lo que el sabia, antes de que me graduara en la secundaria ya le había derrotado y ya se me consideraba un prodigio en la cocina, pero cuando entre en la secundaria no termine mi primer año y fui transferido o expulsado, me derrotó otro estudiante que solo era un año mayor que yo, realmente increíble ¿no crees?" dijo Haruta recordando un poco de la vida del Haruta original para ayudar a Asuna.

Asuna tenía sus ojos abierto de par en par mientras escuchaba la pequeña historia de Haruta "¿la persona contra la que perdiste era realmente muy talentosa?"

"Realmente el tenia una habilidad muy increíble, pero la cocina no solo se trata de talento sino también de trabajo duro" dejando aquella frase Haruta se levantó de su asiento y llevo todos los platos del comedor hasta el lavado para terminar el trabajo.

Durante la tarde Haruta y Asuna apoyaron a las manager para realizar una fiesta de celebración como conmemoración a la finalización del entrenamiento especial.

Haruta se encargó de la barbacoa preparando varios tipos distintos de carnes para que todo saliera perfecto, Asuna y las manager trabajaron en las ensaladas, jugos y frutas para que todos pudieran comer.

Fue una puesta de sol bastante animada con todos celebrando y comiendo, Asuna y Kiyoko pasaron la tarde pegadas a Haruta, una a cada lado sin dejar que este actuara en paz.

"Sigh" suspiro Haruta mirando a ambos lados, donde podía ver dos brochetas apuntándole para que escogiera de cual comer primero.

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Cuando la noche finalmente llegó todos estaban fuera del área de entrenamiento con todas las maletas preparadas subiendo al autobús para volver a la escuela.

"Uhaaaa" bostezo Haruta tapando su boca "Finalmente volveré a mi casa, tendré que limpiar todo y quitar el polvo nuevamente" dijo Haruta entrando en el autobús.

"¿Haruta-san vives solo?" preguntó Daichi el capitán de Karasuno al escuchar el monólogo de Haruta.

"Ah, sí" asintió Haruta levemente a la pregunta

"¡¿Enserio?!" exclamó Tanaka el jugador calvo del equipo de Karasuno acercandose rapidamente

"Si, mi padre está de viaje por el extranjero hace varios años y ahora vivo solo" explico Haruta rascando la parte trasera de su cabeza mientras seguía caminando por el pasillo.

Nadie preguntó sobre la madre de Haruta ya que todos notaron que este evitó hablar de ella, algunos se dieron cuenta rápidamente que la madre de Haruta descansaba en paz y por ello no era un tema grato para hablar.

Haruta camino hasta uno de los últimos asientos donde estaba Asuna sentada "Este autobús parece un poco más pequeño que el del otro dia" dijo Haruta arreglando su maletín en el compartimiento superior.

"Si, solo tiene asientos triples" respondió Asuna dándole una mirada a los asientos de adelante y atrás.

"Con permiso" la voz baja y femenina llamó la atención de ambos mirando a Kiyoko con una maleta detrás de Haruta.

Con una sonrisa en la cara, Haruta tomó la una pequeña bolsa que Kiyoko cargaba en su brazo y la organizó en el compartimiento superior "Muy bien, todo en orden" dijo Haruta sentándose en su asiento justo entre Kiyoko y Asuna.

Haruta noto que su situación no era de lo más favorable, cada uno de sus lados tenía a una joven belleza, en la derecha se encontraba Asuna ella era reconocida por ser una de las más hermosas de la escuela y por el otro lado estaba Kiyoko una belleza silenciosa adorada por los miembros del club de volleyball.

"Sigh...." suspiro Haruta mirando hacia adelante donde podía ver una ilusión de Yamamoto riéndose de la situación en la que se encontraba.

El autobús comenzó su camino y Haruta cerró sus ojos lentamente rindiéndose hacia el cansancio....

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"¿Haruta?" la voz familiar resonó en el oído de Haruta intentando que este despertara

"Haruta" llamó una voz más calmada pero con un pequeño tono frío

"¿Haruta?" volvieron a llamar ambas voces a la misma vez

Los ojos del pelinegro se abrieron lentamente debido recurrente llamado de ambas voces femeninas, cuando finalmente abrió los ojos noto que las voces venían desde los lados.

"¿que sucede, ya llegamos?" pregunto Haruta sin comprender

Miro hacia ambos lados viendo como ambas chicas estaban descansando sobre el pecho de Haruta como si se tratase de una almohada.

Fue cuando noto que cada uno de sus brazos se posaba sobre cada una de las bellezas abrazándolas en el acto.

"Si, ya estamos en nuestro destino" dijo Asuna levemente mientras Kiyoko asintió con la cabeza.

"¡Coff coff!" tocio Haruta aclarando su garganta mientras quitaba sus brazos del cuerpo de las chicas a su lado y se colocaba de pie comenzando a sacar el equipaje del compartimiento superior.

La cara de Haruta estaba completamente roja por la vergüenza, Asuna no podía mirar a Haruta a los ojos luego de que ella misma comenzará a dormir en su pecho, por otro lado Kiyoko estaba tranquila como si nada sucediera.