Ayer me quedé en el hospital junto a Kin Liu pero no fue un ambiente tranquilo.
Aún no atrapaban al hombre que quiso matarme, por lo que Kin no durmió mucho.
Estábamos tranquilos en la habitación, los enfermeros venían y me ponían las inyecciones.
-Esta es la última inyección-dijo- Nadie más debe entrar aqui-.
-Muchas gracias- dijo Kin y el enfermero se fue-
A la mañana siguiente cuando desperté Kin no estaba conmigo, le pregunté a las enfermeras que había sucedido y me dijeron que había ido al baño.
Cuando volvió de allí vi su rostro.
-¡¿Que te paso?!- grite asustada. Tenia su cara con un corte en el labio, un ojo morado y algodón en la nariz.
-No te exaltes- dijo y me sento en la camilla-
-Anoche vino otro enfermero a inyectarte- dijo Kin Liu-.
-¿Que tiene que ver con tu cara? Mira como estas- dije tocando su cara con delicadeza-.
-Tranquila ya trataron mis heridas- dijo el-
-¿Que sucedio?- pregunte más tranquila-
-Anoche, vino otro enfermero a inyectarte. Yo estaba medio dormido pero al verlo recordé lo que había dicho el último enfermero que te atendió. Entonces no deje que te pusiera nada en el suero, obviamente insistió y le dije que me habían dicho que no te pondrían más inyecciones- dijo mientras se sentaba- Entonces el se dio cuenta de que sabía quién era e intentó huir del hospital, pero yo lo sostuve y comenzamos a pelear en el pasillo. Gracias a Dios no escuchaste nada-.
-¿Qué pasó con el?-pregunte-
-El presidente está con el. Van averiguar pats quién trabaja... ¿Sabes qué? Mejor vamos a casa, quiero descansar- dijo frotando su pelo-
-Ok- conteste-.
Esperamos al médico para que nos diera permiso de irnos y fuimos al departamento, allí desayunamos juntos nos preparamos y fuimos a la iglesia.
Hoy obviamente, al estar la gira cerca trabajamos igual, no almorzamos y bajamos al estudio.
Cuando vieron a Kin de esa manera comenzaron a bromearlo.
-¿Ya te están pegando?- dijo Xion-
-Te tienen controlado ja ja ja - dijo Yang-
Varios reían menos Lian, el no me dirigía la mirada.
Comenzamos a ensayar como siempre, faltan un par de días para comenzar la gira.
Los ensayos esta vez son más extensos, nos vestimos, salimos cantar y bailar con el vestuario y luego nos cambiamos y así.
Son más rudos con nosotras, pero hemos podido sobrellevar todo.
Practicamos el concierto completo 2 veces u terminamos exhaustas.
Nos llevaron a otro estudio fuera del edificio y allí tuvimos una sesión fotográfica para la revista de la gira.
Yo me dormía sentada, más allá que había descansado mis energías no eran las mismas y no podía mantenerme atenta fácilmente.
Nos maquillaron y desmaquillaron tantas veces que no lo recuerdo, aunque mi piel si.
Tomamos el té con algunos de los trabajadores, al ver el presidente que nuestro desempeño era bueno comenzo a contratar a varios trabajadores latinos que se encontraban desempleados en Corea.
En su mayoría era mexicanos y peruanos, había dos argentinos y nadie más.
Uno de ellos preparó mate, lo que agradecí y el resto tomaba un té o un refresco.
-Aun no entiendo el sentido que tomen de una misma bombilla- dijo Regina- es antihigiénico-.
-Ja ja ja es para pasarnos los pensamientos- dijo el chico que me cebaba mates-.
-¿Te acuerdas cuando en internet escribían que tomar mate era un ritual para tener poderes? ja jaja ja - comente-.
-¿A caray? ¿No era verdad?- dijo un mexicano-
-Es solo pasto mojado- dijo Luna- Es como tomar te-.
Así seguimos hablando parte de la merienda, varios tiraron chistes como:
-Cuenta que dos amigos se cruzaron en la calle- dijo un mexicano- Y uno le dice al otro: ¿Oiga compadre, así que fue al dentista? A lo que el otro le contesta: ¡Si compadre!, y el otro le pregunta ¿Y qué le dijo?, entonces responde el hombre diciendo, Que usara hilo dental. ¿Y cómo se siente compadre?, pregunta el hombre, entonces responde: Pues me rozan los huevos compadre... aaah pero que frescas tengo las nalgas-.
Nos reímos tanto que Marcia se trapico con su té y comenzo a toser sin parar ja ja ja fue muy gracioso.
Linda por su parte estaba allí porque si, no dijo palabra alguna. En los ensayos, las sesiones y el vestuario solo se limitaba a hacer lo que le decían y nada más. Aún no entiendo porque sigue actuando así.
Yo ahora estoy viviendo con Kin por lo que volví al departamento y nos fuimos al hospital.
Fue hermoso poder estar con gente nueva y que sea de tu raza, por así decirlo.
Llegamos y como siempre esperamos a que me inyecten.
Ya está haciendo efecto la anestesia por lo que voy a dejar de escribir.
Mañana