Omake 1: Nunca le des alcohol a Penny

[ Acontecimientos completamente Canon que sucedieron en un momento pasado o futuro de la vida de Whitley y sus allegados. Puro mame, así que no tomarse en serio. ]

- Todo sucedió un día viernes, Whitley había decidido que necesitaba obtener información así que arrastró ( le pidió amablemente a Penny que lo acompañara y está aceptó sin dudarlo ) hasta un bar en Mantle para hacer contactos y sobornar/ comprar amablemente la ayuda del bartender.

Fue tan solo unos minutos que Whitley estuvo hablando con el bartender buscando información sobre Raven Branwen, Cinder Fall, White Fang y Summer Rose. Pero cuando volvió al lugar exacto donde había estado con Penny se dió cuenta de un pequeño detalle, la chica no estaba.

Con algo de desesperación el chico se dispuso a buscarla por todo el bar, encontrandola no muy lejos, rodeada de hombres que le gritaban sin cesar "Fondo, Fondo, Fondo" golpeando sus brazos en sus mesas. La vista ers por demás extraña y bien se podría sacar de contexto rápidamente si alguien ajeno preguntara que pasaba.

Preocupado por la salud de la chica androide Whitley se acercó a ella, viéndola beber un barril de cerveza ella sola con la pasión de un vikingo y la constancia de un espartano. La vista le dejo estupefacto e incluso su boca se abrió ligeramente.

Con un gran y sonoro "Pop" la chica despegó su boca de la boquilla del barril, y un sonoro eructo escapó de su boca se forma poco femenina, haciendo reír a los hombres del lugar y dándoles ánimos para ellos mismos ordenar sus rondas de cerveza.

La borracha chica pronto pasó su mareada vista sobre el público que la rodeaba, encontrándose rápidamente con la figura de Whitley, quién preocupado vio como la sonrisa risueña de la chica se ensanchaba con brusquedad.

Lo único que lo preparó para lo que estaba por venir fue un instinto muy agudo nacido de tratar con mujeres ebrias. Penny, tan rápida como un misil balístico e impulsada por la proverbial fuerza de la borrachera hizo su camino hasta Whitley, impactando en el como si fuera alguna especie de colchón de goma espuma tamaño humano. Lo cual ciertamente el chico no era.

Sus huesos crujieron, sus pies se encontraron firmemente clavados en el suelo y sus órganos internos chillaban del agudo dolor aue lo atravesaba.

Los hombres a su alrededor vieron asombrados el desarrollo, levantando sus bebidas en señal de respeto hacia el chico que pudo soportar semejante embestida de la descomunalmente fuerte chica delgada.

Poco de ese llamado respeto le sirvió a Whitley para refrenar el dolor que le atormentaba.  

Más ningún instinto o técnica mística le prepararía para lo que sucedió.

Los labios de Penny, elásticos, algo fríos pero con sabor a naranjas frescas y algo parecido a la electricidad impactaron contra sus labios, dando paso a un algo tosco, sin experiencia pero jugoso beso.

Ese beso tan potente de parte de la enérgica chica sacudió todos los sistemas y defensas de Whitley. El agarre de los brazos del chico en la chica se apretaron inconscientemente, manteniéndola muy junto a su cuerpo, no es como si la chica quisiera alejarse de la fuente de calor que tenía enfrente.

El beso duró unos buenos minutos, Whitley trató múltiples veces en separarla, pero la chica era difícil de quitar, casi como una garrapata, así que simplemente se rindió y disfruto de la sensación que le ofrecía el beso de Penny.

Después de algún tiempo ambos separaron sus labios, Whitley respiro agitadamente ante la falta de aire, Penny imitó su accionar incluso si no era del todo necesario para ella.

Los dos se quedaron viendo fijamente durante algunos minutos más, pero los silvidos de la gente a su alrededor los sacaron de su mundo. Whitley, apenado, tomó a Penny de la mano y la sacó del bar, temiendo que algo más pudiera pasar si no escapaban de aquel hueco.

A la mañana siguiente y tras un examen de rutina, el doctor Polendina y por consiguiente Penny y Whitley descubrieron que Penny era débil ante el alcohol, debido a sus sistemas no lo procesaban correctamente y eso ralentisa el procedimiento de líquidos de su sistema interno.

Se cuenta en los cuarteles de Atlas que Penny Polendina nunca más pudo ver a Whitley a los ojos sin sonrojarse por la vergüenza, mientras que el Doctor Polendina solo sonríe con ironía cada vez que los ve a ambos juntos.

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[Nota de autor: Eso fue todo el Omake, espero les haya gustado. Es un poco fuera del estilo de la historia pero se entiende el punto.

Cabe aclarar que se beso no significa realmente nada en la relación de amistad de Penny y Whitley, tan solo fue un beso borracho, nada más y nada menos.]