Derrota y Curación.

Juan Carlos extendió su dominio sobre el acero en los alrededores al máximo logrando deformar una mayor cantidad de edificios pequeños que antes. Si anteriormente había podido controlar el acero de cuatro edificios pequeños, esta vez lo había hecho con siete de ellos.

Mientras tanto Silver formó un tornado inmenso de al menos unos cincuenta metros de altura con una fuerza de vientos generados tan grande que podía hacer volar autos de diferentes tamaños.

A pesar del aumento de sus capacidades ninguno de los dos estaba satisfecho con el resultado, después de ver lo que podía hacer Kara que también se encontraba en el nivel cinco sus habilidades parecían un juego de niños.

Silver envio el tornado y varias aspas de viento hacia Kara mientras Juan Carlos creaba más pilares gigantescos y se los lanzaba.

Kara por otro lado corrió hacia ellos sin la intención de esquivar sus ataques, en sus puños el Fuego Carmesí se estaba juntando listo para salir disparado en cualquier momento.

Cuando estuvo frente a los ataques de ambos extendió su puño izquierdo hacia el tornado y del salio disparado una inmensa rafaga de fuego que rivalizaba en tamaño con el tornado, extendió el puño derecho y otra rafaga de fuego se dirigió hacia los pilares de Juan Carlos.

El tornado de Silver por un momento se vio potenciado gracias al calor emitido por el fuego, pero momentos después, el aire mismo comenzó a ser quemado disminuyendo la fuerza del tornado. Del otro lado los pilares de Juan Carlos fueron engullidos por completo bajo el su poder sin poder hacer nada.

Ambos habían quedado totalmente entumecidos por la muestra de poder de Kara, por lo que ninguno de los se sorprendió mucho por el despliegue de ataques y siguieron avanzando hacia Kara, mientras esquivaban las rafagas de fuego anteriores.

Aun sabiendo el peligro que correría al acercarse a Kara, Silver aumentó su velocidad para entrar en combate cercano. Juan Carlos vio sus intenciones y decidió apoyarlo distrayendo a Kara, o al menos intentandolo.

Silver se acerco a ella y lanzó un ataque imbuido del poder de viento hacia un costado de su cuerpo mientras que Kara lanzó un puñetazo imbuido en Fuego Carmesí hacia la mandíbula de Silver.

Antes de que ambos lograran conectar su golpes un pilar con punta de acero aparecio detras de Kara lista para perforar su cuerpo, ella lo detecto y lo esquivo moviendose rapidamente a un lado.

Debido a su esquive, Silver no pudo conectar el golpe pero a cambio logró entrar en su punto ciego y envió un segundo ataque imbuido con su superpotencia del viento. Cuando estaba a punto de hacer contacto Kara se dio la vuelta y lanzo una rafaga de fuego hacia el.

Sin embargo en ese momento un placa de metal extremadamente gruesa se interpuso en el camino, dándole la oportunidad de retirarse a Silver.

Cuando se alejó lo suficiente agradeció a Juan Carlos y preparo su próximo ataque. La respiración de Silver era bastante pesada e irregular, el breve enfrentamiento había agotado casi toda su estamina.

Kara era anormalmente rápida, pero después de ponerse seria su velocidad estaba a otro nivel completamente diferente. Silver apenas y podía seguirle el ritmo con todas sus fuerzas.

Silver apretó los dientes y condensó más y más aire alrededor de su cuerpo para aumentar su velocidad. Juan Carlos que estaba lanzando ataques desde todos los lados llegó rápidamente junto a él y los señaló a ambos para finalizar señalando hacia Kara.

Kara que estaba esquivando o eliminando todos los ataques de Juan Carlos noto sus acciones, pero decidió no interferir. Su misión era probarlos y llevarlos hasta el límite, por lo que necesitaba pelear contra ellos más tiempo.

Unos momentos después Silver volvió a enfrentarse a ella, pero a diferencia de la última vez su garra estaba imbuida en una mayor cantidad de su superpotencia creando una garra de viento gigante.

Kara esquivo el zarpazo y se estaba preparando para atacar cuando detrás de Silver salió disparado un Juan Carlos con su cuerpo totalmente cubierto de metal y su cabeza equipada con una gran hoja de metal acercándose a un aterradora velocidad.

Kara salto levemente del suelo, luego subió su mano para protegerse y recibió de lleno la punta de la hoja y cuerpo de Juan Carlos enviándola a volar. La hoja de metal logró atravesar el brazo de Kara haciéndole fruncir el ceño, sin embargo el metal que rodeaba la piel de Juan Carlos comenzó a calentarse y mostrar signos de derretimiento causando una gran incomodidad a su cuerpo.

Mientras ambos se movían a una gran velocidad, Silver se acerco rápidamente a ellos formando una garra de viento y corto hacia el cuello de Kara. Ella rápidamente creó una pequeña explosión en el lado contrario al ataque de Juan Carlos haciéndole girar en el aire, como si fuese un taladro.

Al girar vio a Silver muy cerca de ella y con su mano atravesada por la hoja metálica de Juan Carlos lo lanzó hacia el. Silver no pudo detener el ataque y dio de lleno al cuerpo de Juan Carlos haciéndole sisear de dolor, pero para suerte de ellos había resistido el ataque.

Antes de que ambos pudieran recuperarse Kara se acercó a ellos y los tomó a ambos con sus brazos, luego los hizo impactar en el suelo para después lanzarlos unos cuantos metros más adelante. Ambos escupieron un bocanada de sangre y luchaban por levantarse.

Kara negó con la cabeza y encogió sus hombros.

"Al parecer aquí se termina la prueba."

Silver y Juan Carlos no entendieron sus palabras pero al momento siguiente Kara le dió un puñetazo a cada uno de ellos dejándolos inconscientes.

Kara suspiró de alivio y se acercó a ellos.

Mientras lo hacía un escalofrío recorrió su cuerpo por un breve momento y se congeló.

Sintió como si unos seres de insondable fuerza la estuvieran observando, con cualquier mínimo movimiento que hiciera sería borrada por completo de ese mundo.

Miró hacia todos lados pero no pudo detectar la fuente de esa sensación.

Suspiró y se dió unas palmadas en el pecho para calmarse.

"Espero que solo haya sido mi imaginación."

Extendió la mano y de ella dos hilos de energía azul se extendieron hasta llegar a los cuerpos de Silver y Juan Carlos. Una vez los hilos de energía azul entraron en contacto con sus cuerpos, todas las heridas que habían obtenido gracias a la batalla fueron completamente curados.