¿La salvarías aún si fuera fea?

—¿Qué le hiciste a mis niñas?

Reclamo molesta Emma al entrar a la cocina, en donde Megan y Scott estaban sirviendo los refrescos.

—Yo llevare las bebidas señor con permiso. —Dijo Megan sintiendo que no era el lugar adecuado para ella

—Debo recuperar a las Cuckoos, las estas echando a perder, yo nunca les hubiera permitido que se pelearan viendo una película para definir que actor es más atractivo, se están comportando como, como...

—Adolescentes. —Le respondió Scott, quien se encontraba comiendo palomitas de maíz—No son robots Emma, y honestamente me estaba preocupando esa tendencia suya de hablar las tres al mismo tiempo, deja que se expresen cada una a su manera.

—Supongo que podrías tener razón. —Emma tomo un puñado de palomitas y se dirigió a la sala— Vamos Scott, acabemos con este martirio que llaman película.

El tono sarcástico de Emma no recibió respuesta alguna de Scott, quien se quedo en la cocina.

—«¿Scott? ¿Ocurre algo?» —Pregunto Emma usando su telepatía

—«¿Cuándo me dirás quien es nuestro misterioso benefactor Emma?, Hank piensa que es Warren, pero no tardara en descubrir que le estoy mintiendo.»

—«No le estás mintiendo querido, puesto que tampoco lo sabes, pero créeme, llegado el momento lo sabrás... ¿confías en mi, cierto? Tu sabes que te amo como no he amado a nadie en esta vida, y que nunca haré algo para dañarte.»

—Emma, yo...

El sonido del celular de Scott los interrumpió.

—¿Eso es el tono de Doop cantando hip-hop?

—Le gusta a Celeste.

—Ahora me asusta pensar que ellas son las que te están echando a perder.

—Bueno... Laurie, tranquilízate, ¿están bien?... quédense donde están, iremos por ustedes.

—¿Qué paso? —Pregunto Emma ansiosa por saber, pero antes de que Scott pudiera responder, de forma involuntaria leyó su mente— Pondré en alerta a los demás.

En las afueras de la ciudad, en una vieja fábrica, Sam es interrogado por Marrow.

—¿Dónde están los Morlocks?

—No sé que hablas. —Sam se encuentra sentado en el piso, recargado contra la pared, ante la mirada atenta de Hemingway, Vessel y el resto de Gene Nation

—Tú y tu amigo el grandote estaban en los túneles, y los Morlocks no, dime donde están o la bella Doctora Reyes morirá. —Frente a Sam estaba de pie Cecilia, pero una extraña forma acuosa la rodeaba— Creo que no conoces a Sack, el controlara el cuerpo de la Doctora hasta que decidas hablar, o hasta que ella deje de respirar, será divertido ver que pasa primero.

En el rostro de Cecilia se reflejaba la desesperación de no poder respirar, de repente, la capa que rodeaba la cabeza de Cecilia se hizo a un lado y ella pudo tomar una fuerte bocanada de aire, al tiempo que soltaba un grito —¡Sam! ¡Ayuda...!— Sin darle más tiempo, esa capa casi transparente la volvió a cubrir.

—¡Déjala ir Marrow! ¡Yo que me quedare con ustedes, pero déjenla ir.

—¡No me engañaras! ¡Marrow no es tonta! ¡Escaparas en cuanto soltemos a esta mujer! Ya abandonaste a Marrow una vez, no lo volverás a hacer.

—Marrow... — De repente el rostro de Kitty apareció en la pared detrás de Marrow, y con su mano le indico a Sam que guardara silencio— Mi prioridad es salvar la vida de Cecilia. —Menciono, esperando que Kitty entendiera sus intenciones de primero salvar a su compañera, quien enseguida desapareció entre la pared

—¿La salvarías aún si fuera fea? —Marrow se dirigió hacia Cecilia, Sack nuevamente dejo de cubrir su cabeza y en ese momento, Marrow intento enterrar una daga de hueso en la frente de la Doctora, causándole gran dolor

—Ah, ah, mal-maldita. —Alcanzo a murmurar antes de que volviera a ser cubierta por Sack

—La apariencia no importa, no permitiré que nadie inocente sea herido, no tenemos porque ser enemigos, Sarah...

El escuchar su nombre, provoco la ira de Marrow, quien arranco un hueso de su espalda y lo estrello contra el hombro de Sam, pero su campo de energía lo protegió y a diferencia del campo de fuerza de la Dra. Reyes, también lo protege de sentir dolor.

—Largo de aquí, fuera todos.

—Sarah-amiga... — Dijo Caliban, pero solo recibió una mirada asesina de Marrow

—¡¡Largo!! ¡¡Déjennos solos!! —Les grito a sus subordinados mientras les lanzaba dagas de hueso

Varios kilómetros al este de la Academia Massachussets, Cessily, Julian, Victor y Santo encuentran un viejo edificio en medio del bosque.

—Les dije que vi algo cuando llegamos de Nueva York. —Comento Santo mientras exploraban los alrededores de lo que parece ser una vieja mansión

—Pareciera como que este lugar fue abandonado. —Dijo Cessily mientras intentaba ver a través de las ventanas— Creo que hay muebles ahí dentro. —En ese momento Julian intento abrir, pero las enormes puertas permanecieron inmóviles— No creo que sea buena idea entrar, este lugar da miedo.

—Este lugar es genial, Santo, ¿Podrías hacernos el favor?

—Cessily tiene razón. —Dijo Victor mientras detenía a Santo, quien se alistaba para tirar la puerta de un golpe— ¿Qué tal si los dueños se enteran? ¿Qué pasara si los profesores se enteran de que entramos sin permiso a una mansión?

—La cual está abandonada y obviamente no le importa a nadie. —Usando sus poderes telekineticos, abrió aquellas puertas con un poco mas de esfuerzo— Aparte, somos mutantes, es nuestro derecho heredar lo que los humanos dejan.

Julian y Santo se adelantaron, pero justo antes de poder entrar en aquella mansión, la voz de Emma Frost los tomo por sorpresa. Se trataba de una orden para regresar inmediatamente a la Academia, mientras que Julian y Santo se miran decepcionados, Cessily y Victor se sienten aliviados.

—¡Diablos! Estábamos tan cerca. —Reclamo Santo al alejarse

—No te preocupes mi amigo, ya regresaremos otro día, esto será genial. —Le respondió Julian

—Ya vienen de regreso. —Le comenta Emma a Scott mientras se dirigen al hangar junto a Hank y James

—Bien, Hank quiero que te quedes y cuides a los chicos, estaremos en constante comunicación...

Scott se quedo callado al ver al padre de Mercury frente a ellos.

—Sr. Kincaid, ¿Qué hace usted aquí?

—«Scott, el no es el padre de Cessily» —Le comentaba telepáticamente Emma a Scott

—«Es verdad, no lo soy» —Interrumpió su conversación telepática

Sorprendiendo a todos, el cuerpo del que pensaban era Mark Kincaid comenzó a levitar, mostrando su verdadera identidad.

—Exodus. —Murmuraron al verlo